Partida Rol por web

tras ver a su sire huyendo, un sentimiento que hacia siglos que no tenia, satisfaccion, ver huyendo a su enemigo que le jodios hacia ya tanto tiempo le hizo sonreir, pero poco le duro, un sentimiento oscuro y sadico le empezó a recorrer la mente... aun sabiendo que ahora mismo no tendria poder para derrotarle..... por la cabeza pasa el pensamiento de destrozarle, sacarle a la fuerza la hubicacion de liara... si seguia viva... aun sabiendo que llevaba las de perder intento salir detras de el, pero, porque sus piernas no se movian? algo desde muy adentro se lo impedia....y una vos en su interior le decia... ya llegara nuestro momento......

Llegas a ver como el varego mira en tu dirección con la nariz destrozada, la figura nueva le toma del hombro y las sombras desaparecen.

Un hombre de mediana edad, mirada salvaje y cabello largo y castaño, habla con el varego. Llevando el atuendo de alguien importante de tu tiempo, una capa verde cuelga de sus hombros cerrada en su pecho, formando una especie de túnica.

Sin poder hace nada, ves como apunta al caballero y se acerca a este, junto al Varego. Según parece han dejado escapar a Dalaras, y te ignoran.
 

el valaco guardaba la distancia, en guardia, viendo que le ignoraban, algo que le irritaba, pero sabia que no podia hacer nada si ellos decidian atacarle, pero algo le decia que se quedara y que buscase informacion...

Esperando indeciso ante la escena frente a ti, tras de ti tu venganza y frente a ti lo que supnes tu perdición.
Mientras miras, sientes tus músculos forzados, escuchas un tintineo y ves a tu espada en el suelo, la vista borrosa y una mano que te señala desde una mancha oscura en tu cabeza.

Algo sin forma coherente te atrapa y tira al suelo. Las ultimas imágenes en tu visión son las de Chrstopher caminando hacia ti.
De nuevo a la realidad, despiertas en lo que parece un montón de telas. Incorporándote rápidamente y mirando tu entorno instintivamente buscas tu esapda. Con una sorpresa y felicidad le ves recargada junto a ti en una pared. El contacto con tu arma te tranquiliza y da mas tiempo para pensar.

Entre paredes formadas por un solo bloque de roca, un aroma a humedad llega hasta ti, y logras ver lo que arece una ventana abierta y la luz de la luna entrando por ese lugar.
 

el valaco se lebanta y coloca la espada en su espalda y empieza a camiran, ¿donde cojones estoy? caminando empieza a dar vueltas a la cabeza, la situacion era caotica, muertes, sangre, violecia.... no estaba seguro de estar a salvo, pero el sitio le transmitia una sensacion de paz, su instinto no desperto, por loque seguia caminando, fijandose en su entorno. supuso que era todavia de noche, por loq ue si salia no corria peligro, pero no sabia cuanto tiempo quedaba, habia estado dos veces inconsciente y no sabia cuanto tiempo habia estado en ese estado, en lo unico que pensaba era en buscar respuestas

¡¿ hay alguien ahi?! gritó

Sin una contestación logras ver lo que parece una puerta doble y otra sencilla. Una mesa pequeña y una silla de dudosa calidad en medio del cuarto sin laguna pista que te diga donde estas. Sigues esperando que el eco de tu grito se termine.

Sin contestación en lo que imaginas fue un tiempo suficiente, te decides ir a las puerts dobles frente a ti. Esprando encontrarte con algún corredor, das con el armario del cuarto. Con telas de extraña procedencia estas cuelgan frente a ti.
 

mirando las telas extrañas, ninguna parecia gustarle, pero mejor que lo que en ese momento llevaba seria.... unos pantalones negros con varios compartientos, en la cadera y a la altura de las rodillas, su color era negro, el color que mas le gustaba al valaco, luego lo que parecia una camiseta, el lo consideraba una rotura, era una camisa negra simple, de manga corta, con un bolsillo en el pectoral izquierdo y le quedaba orgada, no abrocho los botones, por lo que la llebaba abierta, enseñando el pecho y todas sus cicatrices de humano, despues de bestirse continuó su camino por la otra puerta, volviendo a colocar su espada y gritando de nuevo

¡¿hay alguien aqui?!

Atravesando por fin la puerta con la resolución de estar solo donde sea que estas, te encunetras frente a un pasillo. Cerrando la débil puerta tras de ti, ves un pasillo con las paredes como el cuarto, hechas de una sola piedra, y el piso de madera. Como pequeñas piezas encontrándose una a una es de valorar el estilo de construcción pegadas en orden exacto las pequeñas planchas de madera sostienen tu cuerpo y ni siquiera se arquean a tu paso.

A tu derecha otra ventana de cristal claro, mas claro de lo que hayas visto, frente a ti otra puerta y a tu izquierda la esquina y el camino siguiente. Con tan solo una puerta nada mas esta en el pasillo, y no se escuchan sonidos cercanos.
 

sin pensarlo dos veces, el valaco toma la puerta de frente, tendre que inspeccionar si quiero encontrar a alguien... le estaba gustando el sitio, la contruccion le parecia agradable, y el olor a humedad tambien le era familiar... estaba como es sus tiempos

Abriendose sin ninguna resistencia le puerta deja ver otr cuarto parecido al tuyo. De amplias porporciones una austera cama yace limpia e impoluta al fondo de lahabitacion. Dos ventanas en la pared dejan entrar la luz de la luna.

Y otra puerta doble a la izquierda parcido a tu cuarto. Sin mas decoración que un cuadro en la pared mostrando una construcción extraña los trazos son confusos pero armoniosos al tiempo.

como si de una accion automatica, y tras haber observado bien la habitacion, emprende el camino a la puerta doble, sin llamar siquiera procede a su apertura

Tras la puerta doble de nuevo ropa extraña te recibe, pero esta vez son diferentes. Lo que piensas que son túnicas oscuras cuelgan y un par de zapatos extraños e el fondo del guardarropa. Espiando un poco mas descubres mas ropa de diferentes colores, unas violetas, el color de la realeza, algunos carmesí y demás.

Siguiendo el instinto abres la puerta del lado contrario, encontrando lo que supones un baño. Para tener esto en su cuarto quien quiera que este aquí debe ser poderoso, Christopher tal vez.

Christopher penso el valaco porque me mantienen vivo? varias preguntas le asaltaron, la imagen de Dalaras corriendo y Christopher no podia quitarselas de la cabeza, miro mejor en la habitacion, mirando a ver si veia algo que pudiera ayudarle

Tomando libro a libro desistes en tu intento, ya que no puedes leer que dice.

Mientras la luna entra pro la ventana, imaginas que los vagos sonidos son los de la ciudad despertando.