Partida Rol por web

Hambre no humana

Escena 3: La fuga

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17/01/2012, 15:40
Attila
Sólo para el director

Aterrado, asisto a la carnicería que tiene lugar ante mí. No sé muy bien lo que está pasando, ni por qué está pasando. No se siquiera quién es el que está haciendo todo aquello. Puede que esté dentro de mi cuerpo, puede que maneje mi cuerpo, pero una cosa está clara, no soy yo.

La sensación de hambre desaparece. Un sabor como jamás había conocido, como no había siquiera imaginado en mi vida, baja por mi garganta llenando mi cuerpo de calor y fuerza. 

Entonces se levanta el telón. Sin saber como, me veo en el suelo cubierto de sangre, veo el cadaver de la mujer, siento los aullidos del perro y me doy cuenta de lo que ha pasado allí. He sido yo. Lo he hecho yo, con mis propias manos.

Sé que hay quien reacciona mal ante experiencias traumáticas. Hay quien la emprende a golpes con quien sea, quien deja de comer, quien no duerme, quien no para de llorar en meses... pero esto se sale de toda lógica...

Busco una explicación, un por qué, algo a lo que aferrarme para decirme que no he sido yo, algo que me diga que yo no he tenido la culpa. Me echo las manos a la cabeza y trato de limpiarme las manchas de sangre de la cara, pero no se van. Mi ropa también está manchada. No puedo ir así por la calle, y lo que está claro es que no puedo volver así con el grupo. Soy un peligro para cuantos me rodean...

Tanteando mi ropa encuentro la jeringuilla que cogí donde me retuvieron. Es posible que la droga tenga algo que ver... Sí, seguro que es eso. Pero no puedo ir a la policía y decirselo así sin más. No después de haber hecho esto.

-Tengo que salir de aquí.-Pienso desesperado. 

Sin saber por qué, agarro al perro y le tapo la boca con la mano. No quiero que me delate, pero, no sé por qué, tampoco quiero dejarlo allí. Miro a un lado, miro al otro y salgo corriendo hacia mi casa tratando de pasar desapercibido.

Estoy confuso y asustado, pero también pletórico y lleno de vida, y sin saber cómo, en cierto modo me gusta esta sensación.

- Tiradas (2)
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17/01/2012, 17:33
Robert Atkinson

Ella debió pensar que no me estaba dando cuenta o quizás era ella la que no se daba cuenta de que estaba huyendo de mi, pero en realidad fui consciente de todo. Desde que cogí su mano en aquel húmedo sótano noté que algo no iba bien entre nosotros, ella había notado algo distinto en mi, algo que yo también había notado pero que no era capaz de distinguir... No fui capaz de preguntarle, no me sentía con fuerzas y respetaba su decisión, quizás no fuera más que la impresión por lo ocurrido... esperaba que fuese eso, que fuera pasajero, porque creo que no soportaría alejarme de ella, no ahora que sé que no podría haber salido de aquel maldito sitio si ella no hubiera estado allí.

El sonido de la puerta de su casa retumbó con el eco de las escaleras vacías y entonces me sentí tremendamente solo. Por un momento pensé en llamar a su puerta, entrar, abrazarla como no la han abrazado nunca y besarla como si no hubiera un mañana... Pero no lo hice, sencillamente entré en mi casa y permanecí unos instantes apollado en la puerta, hasta que el hambre se hizo insoportable.

Me olvidé de todo, de todo lo que había pasado, de ella... corrí hacia la cocina sin fijarme si algo había cambiado en mi casa. La nevera estaba repleta y no parecía que nada estuviese en mal estado, pero... no pude, sencillamente no pude comer... fue una sensación horrible, la comida estaba ahí y tenía un hambre voraz, pero no podía... cerré la puerta con violencia y fui al cuarto de baño. Metí la cabeza bajo el agua del lavabo y el frío inundó mi cabeza. Me sentí bien durante un rato, pero cuando terminé de secarme la cabeza... entoces fue cuando me miré en el espejo... sé que suena extraño, pero tuve la certeza de que ese tipo que estaba en el espejo no era yo, como aquello que había sentido antes de los demás, como si alguien se hubiera metido en mi piel sin que yo lo supiera.

- ¿Quién eres tú? - pregunté al hombre del espejo.

Fueron unos instantes eternos. Allí estaba yo frente al espejo, con la toalla en la mano mientras el pelo me chorreaba por los hombros. Las gotas de agua resbalaban por mi cuerpo sin que yo lo notase, todo era silencio, no siquiera podía escuchar mi propia respiración... y aquello fue lo que me hizo darme cuenta de lo que estaba pasando... En un acto reflejo me llevé una mano al pecho, mi rostro en el espejo mostraba miedo... estaba muy alterado y mi pulso debía estar acelerado, pero en lugar de eso mi corazón no latía, y no sólo eso, no podía escuchar mi respiración porque lo cierto es que no respiraba... era como si estuviera muerto, pero a la vez vivo.

Ser consciente de aquello fue lo más traumático de la transformación, fue cuando me di cuenta de que me habían arrebatado mi vida. Con una mezcla de miedo y rabia, golpeé el espejo con el puño, rompiéndolo en mil pedazos. La mano me sangraba por los cortes, pero no sentía dolor, sólo rabia y hambre. Instintivamente me llevé la mano a la boca y comencé a lamerme los cortes. La sangre era deliciosa, un manjar capaz de acabar con el hambre que tenía... y entonces, mientras me deleitaba con mi popria sangre, en un momento de frenesí, miré a lo que quedaba del espejo. En uno de los trozos que aún quedaban pude ver la cara de un hombre que lamía su mano con ansía, pero más que lamer bebía, como si la mano fuese una copa de vino, y entonces lo vi... aquel hombre tenía unos afilados colmillos... y sonreía.

Aquel hombre era yo...

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17/01/2012, 20:38
Richard Knox
Sólo para el director

Me asusto y grito, tirando la cabeza de aquel individuo al suelo mientras me llevo una mano a la boca al sentir la tibia humedad alrededor de ella.

- Que coj... - intento decir, pero me cayo rapidamente. Nadie podía oírme, nadie podía verme... tenía que salir de allí corriendo... Así que agarré todo lo que pude de los bolsillos de aquel camello e intenté limpiarme algo los restos de sangre de la cara, darme la vuelta a la camisa, y correr lo más lejos que pude de allí.

Cuando me sentí algo más calmado y la tensión de la adrenalina descendió, no puedo más que desplomarme sobre el suelo y soltar alguna lágrima con el recuerdo de aquel cadaver destrozado. ¿Había cometido yo semejante barbarie? ¿Por qué tenía ese regusto metálico de sangre en la boca y estaba tan manchado? ¿Qué me había llevado a hacer eso?

Quizás aquel tipo con gafas tenía razón... y nos habían drogado con algo... No era posible que yo hubiera matado a aquel hombre. Podía ser violento, podía darle una paliza a alguien... pero no mataba a la gente.

Sabía que tenía uqe hacer. Ir a la comisaría era algo de extremada urgencia ahora. Tenía que ir a mi apartamento, ducharme, cambiarme e ir corriendo a denunciar el secuestro y pedir un examen medico que de cualquier otro modo no podría costearme...

- Tiradas (2)
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23/01/2012, 16:01
Ryan "Boston" Blake

Ryan permaneció largos instantes arrodillado sobre el rugoso pavimento de la calle. Su rostro estaba desfigurado en una mueca de dolor infinito, y se aferraba el estómago con ambos brazos, como si quisiera evitar que las tripas se le fueran a salir de un momento a otro.

Jadeaba profundamente, y miraba con ojos desorbitados los interminables rincones oscuros que se abrían a su alrededor. Parecía perdido. Sorprendido. Quizás asustado.

Finalmente, su respiración comenzó a serenarse, más por la fatiga que por verdadera paz interior, y la opaca película de desesperación que cubría sus ojos fue menguando poco a poco. Cuando un leve destello de razón volvió a abrirse camino entre las confusas nieblas de su mente, lo primero que notó fue su soledad.

La mayoría de sus camaradas de infortunio se habían alejado del lugar, o estaban por hacerlo. Ryan no terminaba de entender aquella conducta, aunque por la furia que había en algunos rostros, parecía que todo aquello era producto de algún tipo de discusión o pelea.

El perturbado sujeto apenas si había sido conciente de lo ocurrido en los últimos minutos. Inmerso en su desesperación, el mundo exterior había dejado de existir por unos breves momentos. Y ya era demasiado tarde para hacer algo al respecto.

En cualquier caso, de algo podía estar seguro. Solo uno de sus compañeros parecía dirigirse de nuevo hacia la casa en llamas. Y era aquel el único lugar donde podría encontrar respuestas…
 

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23/01/2012, 19:37
Director

FIN DEL CAPITULO 1

Notas de juego

EXPERIENCIA:

Ahney Tao: 0 (muere)

Attila: 1 participación + 1 interpretación + 1 regularidad 

Richard: 1 participación + 1 interpretación

Robert Atkinson: 1 participación + 2 interpretación + 1 regularidad

Ryan "Boston" Blake: 1 participación + 1 interpretación + 1 heroísmo

Podéis gastarlos cuando queráis (notificandome dicho gasto) o acumularlos en vuestras fichas; en el segundo caso deberéis actualizar estas.

Los puntos de experiencia son repartidos según los criterios del libro básico cambiando el de "curva de aprendizaje" por "regularidad". No se admiten discrepancias ni quejas al respecto.