Bienvenidos a vuestro rincón secreto,un sentimiento especial ha surgido en vosotros.
Sois los amantes y vuestra forma de ganar es llegar juntos hasta el final del juego. Si uno de los dos mueres su amante morirá de pena con él
Tengo una duda, si me muero porque muriese ella y no seria muerte por linchamiento ¿que ocurriría con el tema Hypnos?
Bienvenida cariño al hasta que la muerte nos separe y ni eso jajaja.
Juntos no podrán con nosotros. ¡Demostremos que hay dioses que están un paso por encima de otros!
Seguro, además nadie mejor que tu para llegar hasta el final. Cariño espero que tengas un buen as en la manga, no espero menos de ti.
Algo tengo. Como tú, imagino. Nadie ha venido a esta reunión con las manos... vacías. Mi único problema es que, me temo, no caemos muy bien al resto de dioses.
Y ese es el mayor encanto que tienes, entre otros, que no caes en esos juegos. Ademas de lo evidente como que eres única e irrepetible.
Oh, eres todo un poeta. Ni Adonis era capaz de pronunciar palabras tan bellas en los oídos de Afrodita y de Perséfone. Alabo con cierto tono pícaro. Me preocupa, pues, que la muerte nos de caza antes de tiempo. ¿Qué podríamos hacer para evitarlo? Paseo mis ojos sobre Ares y esbozo una sonrisa: ¿Cómo nos enfrentamos a ellos? Y no me malinterpretes, no solo estoy hablando del... Chasqueo la lengua: "maligno". Sino que también hablo del resto. Esos que no dudarán en señalarnos como culpables simplemente por... Porque nosotros sabemos donde se oculta la verdadera diversión de la inmortalidad.
El mayor riesgo para los dos es la incapacidad de los demás por tomar decisiones acertadas. Por suerte tu si compartes la capacidad de divertirte, amar incluso de tomar decisiones importantes. Y una mirada espontanea y furtiva se escapa hasta sus ojos. Ademas afrodita no tiene punto de comparación contigo, prefiero una eternidad con la diosa mas espectacular que eres tu.
Si mueres por los amantes Hypnos ocupará tu lugar.
Sonrío con satisfacción al darme cuenta que ha entendido mi insinuación. Sin duda, Ares y yo jugamos en otra liga, en una muy lejana al resto de dioses.
¿Ya has hecho tu quiniela? ¿Quién crees que nos está cazando? ¿Quién crees que será más peligroso para nuestra supervivencia?
Solo pondría la mano en el fuego por dos dioses ahora mismo, por Hypnos y por ti, y por ti, solo por ti, llegaría hasta el final sin dudarlo y no pensar ni una sola vez en dejarte por el camino.
Si... Supongo que es demasiado pronto. Asiento levemente. Tendremos que ver como se comportan los demás. Yo también confío en ti. Esbozo una media sonrisa, mostrando mis dientes blancos. No permitiría que nada te pasase.
Hypnos... ¿por qué confías en él? Aunque... Aunque si tú dices que pondrías la mano en el fuego por él yo... yo te creo. Yo también la pondría.
¿Alguna opinión o sospecha? Me siento junto a ella pasando mi brazo sobre su hombro.
No has respondido a mi pregunta, ¿por qué confías en Hypnos? Repito, mirándolo fijamente, mientras me acomodo contra su torso.
Mis sospechas... Suspiro. No me gusta Yahweh ni Nyarlathotep, parecen saber demasiado. O tener mucho que decir. Yo los vigilaría de cerca.
Creo que confiaría en Anubis y en Kali, me gusta su estilo. Me encojo ligeramente de hombros. En cuanto de los nuestros, los griegos, no creo que haya sido ninguno de ellos. Todos... Todos son tan estúpidos como siempre. Desde Artemisa hasta Poseidón. Niego suavemente la cabeza. Quizá Chronos, no lo sé.
Es lo mas parecido a un amigo que voy a tener sin contarte a ti, por eso mismo el debe continuar siendo discreto. Tu y yo no somos oficialmente buena compañía para el resto. Una ligera risa se le escapa. ¿Te hubieras imaginado esta situación hace poco tiempo?, yo nunca. Instintivamente el abrazo se hace mas fuerte a la vez que tierno al encontrarme relajado y seguro.
Me aparto un poco para mirarlo a los ojos. ¿Estás de broma? Pensé que, hablando de amistades, señalarías antes alguien más... un dios que no prefiera dormitar en vez de... ¡Disculpa, Ares! Suspiro. Supongo que tus razones tendrás.
¿Qué si me hubiera...? No, realmente no. Jamás pensé que tantos dioses nos encontraríamos juntos para... Para encontrar al culpable de tales fechorías.
Sin dejar que termine de hablar le corto con un beso apasionado, me conoce demasiado bien para no desear darle un verdadero beso nacido de este sentimiento.
Respondo al beso con entusiasmo, demasiado entusiasmo. Muerdo su labio inferior, porque me gusta morder. O porque Ares sabe demasiado bien. O porque ser simplemente apasionados no es divertido.
Quizá, solo quizá, no sea una pérdida de tiempo total esta reunión de dioses.
Respondo a su pasión con mas pasión, besos, pequeños mordiscos en la oreja, labio inferior , colocando la encima mía. Pasado y acariciando cada centímetro del cuerpo de Eris.