El trío de técnicos, tras los últimos repasos al invento, lo dan por bueno, parece ser que funcionará.
El único que no está pendiente de lo que pasará con la antena es Kenneth, que vigila la jungla.
El resto están alrededor del puesto de radio, procurando no tocar ninguno de los cables del invento. Mike se sienta y suspira. Coloca las frecuencias correctas y comprueba hoy más que nunca que todo esté bien. El motor del jeep eléctrico está encendido, aunque ese tipo de motores hace tan poco ruido que no puede oírse desde dentro de la cabaña
Mike coge aire aire
Toquen madera....
Y enciende la radio. Durante un segundo larguísimo, nada pasa. Pero cuando las agujas empiezan a moverse, un suspiro al unísono y una risa feliz y desahogada de Cherry
Coge el papel con el código y en primer lugar lo envía de voz
Código de Emergencias en Isla Nublar, 7261JP32AW, repito, Código de Emergencias en Isla Nublar, 7261JP32AW, necesitamos evacuación INMEDIATA, supervivientes en el Aeródromo
Y empezó a picar en Morse, seguramente lo mismo. Se estaban haciendo larguísimos los minutos mientras radiaba el mensaje tanto de voz como en Morse, sin recibir respuesta...
Código de Emergencias en Isla Nublar, 7261JP32AW, necesitamos evacuación INMEDIATA, supervivientes en el Aeródromo, repito, Código de Emergencias en Isla Nublar, 7261JP32AW...
Ya iban cuatro minutos, y nada.... y qué largos pueden llegar a hacerse cuatro minutos....
Cherry comenzaba a ponerse nerviosa, esa risilla esperanzada desapareció y a medida que pasaban los minutos, comenzó a caminar de un lado a otro, mordiéndose las uñas.
Zack estaba un poco apartado del aparato, apoyado en una pared cerca de una ventana, dando pequeños golpecitos en el suelo con el pie y murmurando.
Vamos... responded... responded...
- Prueba a ampliar el espéctro de frecuencia. - Dijo, apoyando la mano sobre uno de los monitores apagados del Aeródromo, e inclinandose hacia los ingenios que habían estado enlazando entre todos.
John siempre se mostraba confiado, y no perdía la esperanza en ningún momento. Sólo daba consejos sobre que podía hacer. No necesitarían emitir más veces, asique tenían que consumir todas las posibilidades que pudieran, aún a riesgo de que aquello se fundiera.
- Normalmente se tarda bastante. No desanimeis. Las ondas tienen que recorrer una distancias muy larga, y en ocasiones se crean interferencias. Afortunadamente tenemos mucha suerte, hace un buen día, y podrán captarla sin mayores problemas.
Miró a todos con una sonrisa.
- Saldremos de aquí.
Podían no responder, eso...no lo negaba, pero confiaba plenamente en que sobrevivirían. Su mirada buscó los ojos, brillantes, sinceros y preciosos de Michelle para transmitirle confianza. Luego se centró en la antena, y los datos con los que contaban. Los minutos pasan, pero es lo normal. Tendrán que depurar los datos, comprobar el código y avisar a un equipo de salvamento, posiblemente lo hagan antes de conectar con nosotros...
O eso espero...
Mike asiente y toquetea unas cuantas cosas.
Si... ahora solo queda esperar a que respondan...
Hace que la antena deje de emitir, quedando a la espera de alguna señal...
El Walkie Talkie abre la comunicación con un zumbido y habla con la voz de Elmar
Aqui Elmar, vamos de camino a vuestra posicion, apenas nos quedan 10 kilometros para llegar.
La central eolica esta inoperativa, Tim os contara mas ahora sobre ese tema... ¿como os va por alli? ¿estais teniendo algun percance?
En principio no deberia hacer falta que os preparaseis para nuestra llegada pero... por si acaso tened las armas listas... no sea que algo nos persiga.
¡Narices, que susto!
Dice Cherry, que tan centrada como estaba esperando que dijesen algo desde la radio, no esperaba el walkie talkie
Michelle permanece cerca de la posición de Mike, dejándole espacio suficiente para poder maniobrar y no presionarle en exceso, aunque también se encuentra cerca de White, del cuál enseguida sujeta una mano apretándola ligeramente, entre tensa y expectante.
Mira al mecánico cuando razona el motivo de la tardanza y sonríe agradecida. La verdad es que no tiene demasiada idea de cómo funcionan esas cosas así que esa posibilidad le brinda algo más de esperanza.
-Seguro que sí- reafirma las últimas palabras de John, pero después continúa conteniendo el aliento hasta que la voz de Elmar irrumpe la situación. Por poco le da un ataque.
-¡Elmar! Aquí todos estamos bien y no hay peligro alguno, hemos transmitido la señal de emergencia y esperamos alguna respuesta... cruzad los dedos- informa por el walkie, quedándose con él en la mano por si recibe alguna respuesta más antes de empezar a preparar el rifle. Por si acaso.
Tras un rato que se hace interminablemente largo, el grupo de rescate llega en dos jeeps distintos, con Tim durmiendo en el asiento del copiloto de uno de ellos. El grupo ahora lleva otro AK, que tiene Annie, más las armas que lleva Tim, otro AK y una pistola. El muchacho tiene además una pierna vendada 'de aquella manera'
Kenneth está arriba de guardia, pero el resto del equipo está abajo con la radio y demás, esperando la bendita respuesta que parece no querer llegar. Tim se despierta, y utilizando el AK como muleta, entra con los demás. Es un chaval fuerte y grandote, que parece un poco tímido o quizá cansado.
El grupo de rescate viene con trocitos de hierba u hojas, e incluso con tierrecilla en la ropa y en el pelo y la ropa, pero parecen estar perfectamente. En cuanto a los del aeródromo... falta John Walter.
El invento que tienen montado, con el jeep haciendo de batería para la antena parece de lo más complicado, pero lleva hora y pico en marcha y aún tira... parece que se lo han montado bien...
Elmar llega y sonrie a todos. ¡Lo habiamos logrado! ¿todos?
¡Hola! dice a sus compañeros mientras revisa a su alrededor.
¿Y Jhon Walter?
post corto que me voy de Bodaaaaa
Randall se subió la gafas, parando el motor del jeep. Procuró aparcar en un sitio no susceptible de ser aplastado por la pezuña de un gran dinosaurio, pues no sabía si le iba a seguir haciendo falta el coche. Ya estaban allí, al fin.
Salió el jeep con tranquilidad, guardándose las llaves. Luego, miró el edificio de aquella pista de aterrizaje, y el apaño que había hecho. No era mala idea, pero la batería de un coche era algo finito. Ahora solo quería descansar un poco y comer algo. Apenas se había comido una chocolatina desde por la mañana.
Pero lo primero era lo primero. Fue a ver donde estaban los demás: White y Michelle sobretodo.
Tras la bonita y hermosa vuelta turística a la isla, Antoine baja del coche y observa al grupo, y al ingenio que han ideado con el jeep... "Curioso... Curioso sobre todo por qué les ha salido bien..." Busca un lugar en el que sentarse con cierta calma, aunque no muy apartado, para pensar, ordenar las ideas. Con algo de suerte, en breve ya saldrían de allí.
Michelle sonrió a todos los recién llegados cuando éstos empezaron a hacer acto de presencia en el interior de la sala de control y de la improvisada radio, aunque no llegó a sentir el entusiasmo necesario para abrazar a ninguno de ellos. Eso sólo lo hubiera conseguido White, pero había permanecido junto a ella todo el rato... aunque intuía que el reencuentro de él con Randall sería más afectivo. Eso sí, al estilo "tío".
-Por fin otra vez juntos... ya hemos transmitido, falta que alguien responda... Pero puede que hayan captado la señal y no seamos capaz de escucharles- añadió lo último intentando que no se desanimaran, haciendo caso omiso de la pregunta de Elmar ya que la respuesta era obvia incluso antes de que ellos se fueran.
Pude oir el jeep, era impresionante como el oido de una persona se agudiza cuando tienes que estar pendiente de los sonidos de la jungla, cuando tu vida está en juego, lo había oido de los ciegos, pero...en situaciones de supervivencia, cualquier sonido conocido es como una bendición, y aquello sólo podía significar una cosa, todos habían vuelto, sanos y salvos.
No pude disimular mi entusiasmo, había salido bien...había salido bien...porque mientras permaneciesen juntos, podrían sobrevivir y anteponerse a cualquier cosa. Tenían a los mejores expertos, tenían a Michelle y tenían, ahora, en suma, a Randall. Estreché la mano de Hudson dedicandole una sonrisa, como si le indicase que iba a separarme un momento de ella, no porque ella lo necesitase, probablemente fuese mucho más dura que white, sino porque uqería transmitirle que la apoyaba en sus decisiones. Pero...¿Hay que justificar una expresión de afecto? White pensaba que no...pero en su mirada se percibía aquella capacidad de...sentirla cerca, como un soplo de vida, o un trago de agua fresca en un desierto.
Como amenazaba, se separó del ingenio, quitandole importancia y uno a uno fue tendiendo una mano amiga para acceder a la sala y para darles la bienvenida, como si se tratase del anfitrión de aquel Aeródromo, no mentiría si dejese que se alegraba de ver a todos, y también tenía ganas de conocer a Tim.
Cuando llegó hasta Randall, también le hubo tendido la mano, sin embargo..
- Que demonios. - Y con los ojos un poco húmedos, pero sin llegar a mostrarse débil, le ofreció un abrazo mientras asentía.
Las palabras...no eran necesarias pero aún así...se interesaría.
- ¿Qué tal ha ido? ¿Estais todos bien?
Sólo la pregunta de Elmar haría que agachase la cabeza, y aunque sonreía, le dio a entender que era mejor no hablar de ello.