Eira no tardó en volver a ponerse en pie y estar lista para continuar, tal y como cabía esperar de una persona tan testaruda.
-Bien. Pero luego no me vengas llorando-
Volvió a golpear con éxito. Esa vez, un golpe seco en la cabeza, a la altura del oído. El efecto sobre su contrincante fue inmediato. Perdió el equilibrio y volvió a caer al suelo...
Motivo: Ataque
Tirada: 1d20
Dificultad: 18+
Resultado: 19(+7)=26 (Exito) [19]
Motivo: Daño
Tirada: 2d4
Resultado: 4(+3)=7 [3, 1]
+5 al ataque por gastar un punto de fuerza de voluntad
Ventaja: Golpe crítico (doble de daño): 14
Todo le daba vueltas. El mundo giraba a su alrededor, borroso y a cámara lenta. Incluso durante un par se segundos estuvo todo en negro. Sin saber si realmente había perdido el conocimiento momentáneamente o no.
Según fue volviendo en si, pudo ver a Sammy tapándose la boca con la manos, espantada por el golpe que le había dado. Por su lado, Himmund sujetaba a Eira, de forma que estaba ligeramente incorporada.
Ese golpe puso fin al entrenamiento. Eira cayó, visiblemente aturdida. Himmund se apresuró a sujetarla de forma que frenó la caída.
Desde su posición, Sammy contempló la escena enmudeciendo un grito de espanto y tapándose la boca con las manos.
Un golpe. Un solo golpe certero y seco que había hecho que todo su mundo se apagara. No sabía si habían sido apenas segundos o incluso minutos, pero cuando consiguió enfocar la vista solo acertaba a ver a la pelirroja con las manos sobre la boca. ¿El bruto de Himmund le habría partido la cabeza en dos y se estaba desangrando?
Todavía aturdida y con un dolor agudo en la sien, Eira alzó una mano temblorosa hacia el lugar donde parecía palpitarle el cerebro con más intensidad. Los dedos se le mancharon con sangre, pero no demasiado por lo que descartó la idea de tener la cabeza partida. Como mucho se habría hecho una pequeña brecha. Eso sí, contaba con que le saldría un buen chichón y la zona se le inflamaría.
-No tendrás tanta suerte la próxima- advirtió al rubio, al hablar notó su propia voz zumbar en sus oídos, haciendo que una mueca de dolor cruzara por su cara mientras apretaba los dientes. Le hizo una señal cuando se encontraba algo más estable como para levantarse y volver a sentarse con la espalda apoyada sobre la pared. -No seas cazurro y trae algo frío- "pidió" al templario.
Le resultó un alivio que Eira no presentara mayores daños que un leve corte en la cabeza y una conmoción. Sentimiento que obviamente no expresó. Mantuvo su carácter distante y arrogante.
Ante la "petición", Himmund miró a Sammy.
-Ya has oído. Trae algo frío. Rápido- Ordenó a la barda, quien obedeció sin rechistar, abandonando la sala de inmediato. Acto seguido se quedó mirando a Trece, todavía bailando.
Abrió la boca para decir algo, aunque no llegó a pronunciar palabra. En su lugar, extendió el brazo hacía él, con la palma de la mano abierta. Esta brilló un instante. Poco a poco, el guerrero pudo notar como recuperaba el control sobre su cuerpo.
-Seguramente seas el más fuerte de por aquí. Y también el que está más verde. Mira que caer en una trampa tan simple-
Gracias a Himmund dejo de bailar sin control y consigo quedarme de pie.
- Gracias, ya pensaba que iba a acabar con agujetas.
Himmund afirma que soy probablemente el más fuerte, además de estar muy verde. Esbozo una sonrisa.
- Tienes razón, aún me queda mucho por aprender. Lo peor de todo es que ya vi a Sammy usar ese conjuro antes.
Me acerco a Eira para interesarme por ella, agachándome a su lado. La verdad es que ese golpe fue tremendo y llegó a preocuparme.
- Imagino que aparte del aturdimiento y el mareo debe doler lo suyo. ¿Necesitas algo más?
Himmund escurrió el bulto, mandando a la pelirroja a por algo frío. Solo esperaba que fuera eficiente y no tardase.
El único entretenimiento que tenía para no pensar en el punzante dolor de cabeza era ver a Trece bailar de forma cutre sin poderlo evitar. Pero hasta eso se lo quitó el templario. -Aguafiestas- le bufó con el ceño fruncido. Pero hasta ese simple gesto le dolía, por lo que se vio obligada a relajar la expresión.
Trece se mostró preocupado, inclinándose hacia ella para ver si necesitaba alguna cosa. -Ahora que lo dices, no me vendría nada mal un buen masaje de pies. ¿Te ves capacitado para ello?- le preguntó con sorna.
Ladeo un poco la cabeza tras escuchar a Eira.
- La verdad es que sé dar masajes. Tuve que aprender a darlos por mi maestro debido a su enfermedad. Podría darte una sesión completa si quieres, pies incluidos. O solo los pies, pero creo que te vendría bien el masaje completo.
Mi respuesta fue sincera y muy inocente, y da a entender que no pillé el tono de sorna de la paladín. Tampoco pillo lo incómodo que implicaría que una mujer como Eira recibiera masajes por mi parte.
Himmund se quedo mirando a Trece con levantando las cejas en gesto de incredulidad. ¿De verdad de lo había tomado de forma literal? Negó con la cabeza. La empanda mental de ese muchacho era increíble.
-Ya has oído al caballero. Te vendría bien un masaje "completo"- Pronunció esa palabra con ese inequívoco rintintín. -Se una buena chica, quítate la ropa y déjale "trabajar"- Apenas lograba aguantarse la risa.
En ese momento, Sammy volvió a la escena, cargada con una palangana hasta arriba de cubitos de hielo. La muchacha exhalaba aire con dificultad, sin duda había ido y vuelto corriendo tan rápido como podía...
-Perdón por la tardanza- Jadeaba. -He traído hielo. Espero que sea suficiente-
Se acercó a donde estaban Eira y Himmund para ponerle hielo en la herida... Demasiado literalmente. A saber por qué, pensó que la mejor forma de aplicarlo era volcar todo el contenido directamente sobre su cabeza. No solo le empapó el pelo con la poca agua que había alcanzado a derretirse. Sino que se llevó varios golpes más en la cabeza, por suerte suaves. Aunque lo pero fueron esas esquirlas que se le metieron por dentro de la ropa....
También se quedó perpleja ante la honestidad e inocencia de Trece. Era tan tonto que si querían se lo podían comer con patatas... No pudo evitar fulminar a Himmund con la mirada por su "sutil" propuesta. Si las miradas matasen, seguramente no quedaría rastro alguno del templario.
-Déjalo- respondió a Trece, de forma seca y cortante.
Sammy llegó entonces, con un cubo repleto de cubos de hielo. -¿Y cómo se supone que me los voy a poner?- preguntó mientras alzaba una ceja. Esa chica tampoco parecía tener muchas luces... Por si fuera poco evidente su falta de neuronas, la bardo volcó todo el contenido del cubilete sobre su persona. No pudo reprimir un agudo chillido al notar el frío del hielo recorrerle entera, además de agudizar el dolor de la herida. -¡¿Pero qué haces, idiota?!-. La paladín lanzó un profundo gruñido, seguido de unos movimientos con los que intentaba sacar el hielo de su espalda y escote.
Me encojo al ver cómo le cae encima el cubo con hielo.
- Uff...
Sé bien lo que es que te caiga agua muy fría y con trozos de hielo en sitios incómodos, aunque en mi caso fue como parte de mi entrenamiento. Rápidamente voy a por una toalla limpia y se la ofrezco a Eira.
- Toma, sécate con esto.
Luego miro a Sammy como preguntándome por qué había hecho eso.
La que era una de sus mejores ideas resultó no ser tan buena. No ayudó ni con el dolor ni la inflamación. Todo lo contrario. El agua fría directa en la herida fue una punzada tremenda de dolor. Y las esquirlas por la espalda no ayudaban.
-Yo... Emmm. Esto.... ¿Te canto algo?- Preguntó, sin saber muy bien como actuar. -Mira el lado bueno. No he dejado caer también el cubo sobre tu cabeza-
Negó con la cabeza. La pelirroja no tenía remedio.
-Samantha... Déjalo- Alcanzó a hablar el templario.
Ayudó a la paladín a ponerse en pie. Luego le examinó la herida de la cabeza.
-Tranquila. No es grave. Dame un momento-
Colocó su mano sobre la herida, que brilló en un tenue color verde.
-Ya está. Como nueva- En efecto, la había curado por completo. -No puedo decir lo mismo de esto- Añadió mostrando la espada que había usado para entrenar. Se había partido... -Informaré al Rector de que hace falta reponer equipo de entrenamiento-
Con esas palabras, abandonó la sala, poniendo fin al entrenamiento.
Respondéis (si gustáis) Y cerramos.
Ambos ganáis un +1 al ataque base. Os lo actualizo yo