Partida Rol por web

No podía dejar que el guardia huyera de la habitación y diera la alarma. Eso sólo provocaría más desgaste en el grupo y exponerse a un peligro innecesario. Acercándose a él le golpea dos veces con su nunchaku sin intención de matar pues parecía ser el líder del grupo y era vital apresarlo vivo. Al ver que el primer ataque daba en el blanco (espero) Kyras se concentró en el objetivo.

Iori, golpea con tu puño a este ingrato. (puñetazo aturdidor)

A duras penas, el fornido guardia se mantiene en pie, y acaba cediendo, viendo vuestra determinación, y que no parecéis simples mercenarios.

- Depongo mis armas, comenta dolorido, mi nombre es Verik, que queréis de mi… estas últimas palabras las pronuncia, mientras deja caer su lanza y os mira con resignación.

"Acompañanos, Verik. No teniamos intención de arrebatar tu vida, ni de derramar tu sangre" aunque por precaución, Jacob aparta la lanza de un puntapie, y la guarda en las profundidades de su inventario.

Si alguien está dispuesto a maniatarlo, el paladín no se opondrá.
"Queremos que respondas a algunas preguntas. Eso es todo. El pueblo de Korvosa necesita mucho para seguir existiendo. En parte, has hecho un gran bien alimentando a la gente. Pero por otro lado, has causado un daño a la confianza de la gente... quizá sin saberlo"

Jacob le pone a Verik su propia capa, y le ajusta la capucha -no quiere que le reconozcan por la calle-

- Entiendo, comenta Verik, solo os pediría que no le llevarais atado, lo consideraría un deshonor. Aquí tenéis mis armas. Comenta mientras las deja su arco y carcaj sobre la mesa.

9- Las oficinas del matadero: En este gran despacho sólo hay un escritorio que ocupa el extremo oriental, y que ha sido transformado en una cama improvisada mediante un saco de dormir y varias mantas y almohadas. Debajo, un orinal. Hacia el oeste hay una mesa y tres sillas; sobre la superficie de la mesa se pueden ver esparcidos diversos papeles. Uno de los papeles está clavado a la mesa mediante una exquisita daga de plata.

Jacob no robará la daga de plata. Pertenece a Verik, sin duda.

Pero pecará de indiscreto y le echará un vistazo furtivo a la nota. En verdad quiere llevarse a este hombre, e interrogarlo de camino al cuartel. Viendo la obra que ha hecho, tiene previsto interceder por él.

Con Verik sometido, Glenn no le quitó ojo al exguardia cahiporra en mano.

Compañeros, quizás tendríamos que salí por detrás... para que no nos vea nadie por la puerta principal.

Y el guerrero hizo una indicación  a la barda para que recogiera la daga con los papeles... quizás habría alguna pista de donde aparecía tanta comida.

Cuando Glenn, le comenta que recoja la daga y la nota, a Aenifer, está, ya se la estaba guardando la daga en su cinto, mientras chafardera a carta.

La carta parece ser de una amante, que alaba el hecho de que este ayudando a la gente, tan altruistamente, y que seguro que sus buenas acciones tendrán una gran recompensa. Al final poner Tu amor, que tanto te admira.

"Jenniffer. Deja esa daga. Es de Verik" le dice el semiorco, con una cara con la que parece que está planteandose las mil y una recetas conocidas de Bardo. Hechas con auténtica carne de Bardo.

Dicho esto, sienta al capitán en una silla.

"Creo que nos gustaría que nos dijeses una cosa, Verik."
"¿Por qué? La guardia es lo que evita que la gente empiece a apuñalarse, a robarse, y a que haya crimenes, abusos, incendios y todo tipo de ajustes de cuentas. Podías haber pedido una excedencia, explicando esta operación, y sin duda te habrian ayudado"

Con el capitán de la guardia no se muestra violento, sino más bien intenta sonsacar

Aenifer agacha la cabeza avergonzada y triste...

- Pero como puedes pensar eso de mi Jacob, solo he hecho lo que Glenn me ha dicho, yo nunca robaría nada, solo lo recogi para ver la carta y guardarla, nunca pense en quedarmela...

Verik algo abatido, contesta a la pregunta de Jacob

- La paga no era buena, y creímos que podíamos ayudar de otra manera, y ganarnos un reputación. Pedir una exedencia en tiempos como los que corremos, seriamos tratados como cobardes, aparte que sería rechazada automáticamente.

"Y dime, simplemente"

"¿No te gustaría hacer esto y no dejar mal a la guardia? De esta forma, todos saliis ganando. Tu carnicería se vuelve un bastión: La gente no vendría sólo por comida, sino también por justicia"
"Lo que más me preocupa es que cada vecino pueda atacarse. Que pueda creer que tiene derecho a atacar impunemente al vecino"
 

"Sinceramente, más que la única persona que esté en el trono, me importa los millares que están en las calles. Quienes viven dia a dia, sin saber siquiera si conseguirán un techo para pasar la noche. No se si piensas de forma parecida"

Son ciertas las palabras de mi amigo el grandullón.... pero según lo que dice la carta de tu amada, tus intenciones son de lo más honestas. Seguramente sin darte cuenta de la discordia que estáis creando entre la población. A que es debido tal diferenciación al entregar comida, solamente, a los contrarios de la Reina? Quizás vuestro suministrador puso esa condición? Ya que hambre pasan igual, tanto seguidores o no de la nueva inquilina del Trono.

Y lo que también me preocupa ahora es, cual sería vuestro castigo al ser entregado de nuevo a la Guardia? 

Kyras asiente con la cabeza ante las preguntas de Glenn y Jacob. 

Es cierto que parece que ayudaba únicamente a los que estaban en contra de la reina. ¿Acaso su objetivo era no sólo beneficiarse de la crisis actual sino que también estaba confabulando contra la reina?...

No parece que sea alguien con demasiado poder, quizás es un mero títere.

En resumen Verik. ¿Quien te suministraba la carne?. 

Verik, suspira para sus adentros resignado.

- Yo solo quería hacerme un nombre y ganarme la gente, mi novia Meliya, siempre me ha animado, sacando lo mejor de mí, y viendo mi frustración, por lo sucedido, me dijo que si quería podría ayudarme. Su familia es adinerada, y tiene contactos entre los ganaderos locales, es donde conseguimos los animales.

"Confia en mi, Verik" le dice tendiendole el brazo. NO va a dejar que este buen hombre pase por calvario alguno

"REALMENTE puedes hacer cosas grandes por la ciudad. Pero no puedes seguir convenciendo a los guardias de que abandonen su puesto para unirse a ti. Estás creando una insurrección."

"El bien que haces venciendo al hambre y a la sed de nuestros vecinos -los tuyos y los mios- lo estás igualando en mal, alimentando sólo a los que tienen una idea política y no otra"

"¿A santo de que vino eso?" Jacob no ve a la reina como una maravilla, pero es la que tenemos, y mejor confiar en ella -y sobre todo en sus visires- que perder tiempo, sangre y vidas con rencillas políticas si puede evitarse.

Veo que tus intenciones eran de lo más nobles... pero las palabras del Paladín son de lo más acertadas. 

Aunque te veo muy bajo de ánimos, más de lo que debiera alguien en tu situación, te preocupa algo más? 

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