Partida Rol por web

No vuelven a escuchar ni la voz de Llúcia ni sus golpes en el vidrio. Repentinamente parece haber retrocedido a las sombras y haberse quedado allí en observación. Quizás luego del ataque de ira inicial, lo que ha sucedido con ella es que se ha dado por vencida y se ha ido a acurrucar a un rincón de la celda triangular. Nada más lejos de la realidad: de pronto oyen un fuerte ruido como si le estuviera dando una patada a algo, seguido de una exclamación de profundo enojo en castellano, y una seguidilla de promesas de partir un par de caras cuando logre salir de allí. El tono de la mujer es cada vez más agresivo, como si estuviera escalando en su rabia por algún motivo que ninguno de ellos puede ver.

- ¡No lo lograrán! - exclama entre dientes.

Llúcia mira el colchón que acaba de patear, desde la mayor distancia que puede poner entre ella y la cosa. Lo único que se atreve a pensar es que le han dado a tomar sangre con alguna droga alucinógena, y la realidad que ve no es más que un producto de su cabeza. Algo en su interior se agita, casi como si estuviera latiendo, pero hace tiempo que dejó el miedo atrás. Ahora todo pánico es fuerza. Trata de concentrarse para dejar de ver lo que sus ojos le cuentan, y luego se acerca al crista, de espaldas, alejándosel. Al llegar al tacto firme contra su cuerpo, se da vuelta y clava la mirada en el centro, donde la luz continúa brillando.

La mira tan fijo que es casi, apenas, como si estuviera intentando hacerla mover con su sola voluntad.

Edgar no alcanza a pensar del terror que vive, y se queda ahí, estático, como si de repente se hubiese detenido el tiempo o se hubiera convertido en un maniquí. Mira como tarado sus manos encendidas. ¡Qué demonios le estaba pasando!

HAAAAAAAAA

¡Ah, madresita de Dios! ¿Qué demonios está pasando? ¡Seguro fue por golpear esas puertas! ¡Al coño e' su madre, este pajuo sí que sabe lo que hace!

Edgar mira a todos lados en busca de algo que pueda apagar el fuego de sus manos. ¿Qué podría servirle de lo que tenía ahí?

Ya me decía mi ama que pa' apagar algo se necesita golpear ese algo con una tela o ponerle agua... pero, verga, aquí no hay agua y si agarró una tela la quemaré con las manos... ¡Al demonio, ¿qué hago?!

Empiezo a sentirme raro, mi mano.. la siento rara....... el telefono... porque se enciende ?. Que hace ?.......

No ¡¡¡

Intento apartar el movil ....pero es muy raro, parece que controlo el movil o el a mi........... tiene algo que ver en todo esto el teléfono...

Me acerco a la puerta con el teléfono en la mano.

Parece que hace algo raro con la puerta...

 Escuchas mientras destruyes la planta lo siguiente. AUCH ... auch... y yo que te quería ayudar... Sin embargo por el otro lado de la celda y prácticamente por todas partes comienzas a ver como las plantas crecen en forma de enredadera, rápida, muy rápidamente... No nos lastimes... no nos lastimes.

Cuando estas paralizado y casi en shock, te das cuenta de una cosa: ese fuego no te quema

En un momento para... tienes 10 relojes, y todos son valiosos... todos. Te sientes confundido pero tu enfermedad mental te dice que debes conservarlos. De repente estas angustiado por la novedad. Son muchos relojes.

Te acercas a la puerta, el Iphone sigue moviéndose, sigue como descontrolado, puedes sentir los archivos, la baterías y hasta las imágenes... te sientes mariado... mariado... hay un olor que no te gusta..

Angustiada te concentras en la llave, y esta poco a poco flotando, como danza la va hacia ti... y al tocar la puerta...

Todos dentro de sus celdas con sus dilemas particulares ven como la llave del centro se mueve... esta flotando hacia alguna parte de manera juguetona como si danzara. Solo el Gangrel arrodillado en el piso y el Nosferatu se dan cuenta hacia donde se dirige la llave.. hacia la celda de la mujer. De repente todos escuchan esto.

La puerta de  cristal de la mujer se ha roto. En el piso se pueden observar distintos fragmentos del cristal,  y la llave... esa llave se ha hecho humo.

Y es ahí cuando la mujer con cara de pánico sale de la celda, y ve lo siguiente.

(*)

Están en un espacio cerrado donde no se ve salida. Solo  puede ver las celdas de sus compañeros y todo lo que a ellos les está pasando.

Cuando sales puedes ver: El sujeto de la celda 5 con las manos envueltas en llamas. Al Nosferatu al parecer jugando con un celular al lado de la puerta. Al hombre de la celda 3, lleno de relojes, y muy confundido, y al hombre negro de la celda 4, invadido de plantas o enredaderas en su celda mientras arrodillado parece desesperado.

Trozos de cristal, siguen flotando a tu alrededor.

Entrando en la desesperacion me detengo al escuchar las voces mirando hacia todos los lados sin comprender nada...Esas voces...estan en mi mente..si.... Doy algunos pasos hacia atras mientras que las plantas continuan creciendo y creciendo sin que yo pueda controlarlo o hacer algo al respecto.

Malditas!!!

Observo la llave dirigiendose hacia la celda de la mujer y no puedo evitar mi curiosidad Pero que sucede...

Me levanto y suelto un aullido tipico de lobo con todas las fuerzas de mi alma...

Pero como puede estar pasando esto, como puedo ser así con el telefono y la puerta… no hace nada ¡¡¡. Me encuentro mal…

Mareado, me apoyo en el cristal para sujetarme cuando veo que del centro sale algo y se dirige hacia la celda de al lado mía,  cuando veo que impacta y rompe el cristal.

Que está pasando ?¡¡

Paseo rápidamente por la celda, agachándome cada pocos pasos a recoger algo del suelo y guardarlo en un bolsillo. Poco a poco, y confundido por la proliferación de relojes en la celda, me encuentro con los bolsillos llenos de ellos. Con un vistazo me doy cuenta de que no he olvidado ninguno en ningún rincon, y me acerco al cristal de la celda, donde me agacho y comienzo a sacarlos de los bolsillos y alinearlos frente a mí.

Uno, dos, tres... diez. ¡Idénticos todos! Seguro que uno de ellos es el mío, y he de averiguarlo. Necesito más luz. ¡Necesito la tranquilidad de mi granja!

Un sonido repentino me devuelve a la realidad en la que me encuentro. Recojo rápidamente los relojes y los guardo en mis bolsillos a la vez que me levanto y dirijo la mirada hacia donde vino el sonido. La sorpresa de ver el cristal de una de las celdas roto da paso a una ansiedad por ver una forma de escapar de aquí.

-¡Eh! ¡Vamos! ¡Sal de ahí y busca una forma de sacarm! ¡de sacarnos!

Llúcia atraviesa la puerta rota y pisa sobre los fragmentos que han caído al suelo. Su rostro aparentemente demuestra pánico... pero no es así. Al encontrarse en el centro mismo del pentagrama, mira hacia arriba, luego hacia los costados, buscando una manera de salir de allí. Alrededor de la mujer, que en realidad es una joven, hay una serie de ilusiones ópticas, como de destellos danzando. No hay reflejos de ellos en sus ojos, que buscan de forma frenética. Todo parece tan cerrado como su propia celda. Camina buscando, cambiando de ángulo, pero nada. El aullido de una de las celdas se mezcla con los gritos de las otras. Llúcia baja la mirada. Sus ojos, profundamente oscuros, recorren las miserias de los que son sus acompañantes. Sus cejas se arquean, y luego se fruncen hasta el límite.

- Malditos cerdos... - gruñe entre dientes.

Ella tenía razón. Los estaban probando: querían ver quién se daba cuenta primero de cómo salir de allí. Y luego, ver cómo reaccionaba el elegido, qué hacía con los otros, y si conseguían la salida de esa habitación. No tenía siquiera que preguntarse qué eran lo que querían los que los habían metido en las celdas. No importaba. La realidad era que disfrutaban con ello, demostrando poder, ejerciéndolo sobre ellos. Aplastándolos. Seguramente, faltaba poco para que las celdas se abrieran todas, y comenzara una especie de coliseo romano entre ellos. Seguramente.

No podía dejar que eso sucediera, ni siquiera para poder sobrevivir. ¿De qué valía ella si hacía eso?

- Escuchen atentamente. Nos están manipulando - dice Llúcia, dirigiéndose primero a la celda del hombre negro, y luego girando en abanico hacia todas las demás - Quien quiera que nos haya encerrado, está experimentando con nosotros. Posiblemente probándonos. Alterando nuestras percepciones. ¡Han tocado nuestra mente! - de pronto, su voz se vuelve enérgica, potente y llena de ira - ¡Sé que están experimentando cosas que no deberían estar allí! ¡Concéntrense en romper el cristal, enfóquense, sólo piensen en ello! ¡Si quieren jugar con nosotros, no lo haremos con sus reglas!

Hipnotizado por lo que sucede afuera de mi celda observo a la chica que ha logrado salir de la suya y ahora empieza a hablarnos a todos mirandome en primer lugar a mi. No logro comprender del todo a que se refiere pero me da esperanzas de salir de este encierro del demonio.

Un poco mas tranquilo me levanto y me lanzo corriendo hacia el vidrio con mi puño de frente dispuesto a destruir este maldito

Si una chica pudo romperlo no veo porque yo no...

El Iphone y tu son uno. En tu mente comienzas a ver como pasan los archivos , la música, las imagenes, la electricidad... el mareo.. Dios ese mareo.. de  repente todo pasa en camara rápida.

Es ahi cuando ves que al aparato le sale humo. Un corto circuito maldición!!!!

En ese momento en la pantalla del Iphone solo se dibujan tres letras:  BYE

El vidrio al frente tuyo se hace pedazos justo despues de que el Iphone se daña.