Oki se reúne con los samuráis poco después de la despedida de la Dama Pálida.
Vamos, no nos queda mucho tiempo.
Durante el breve pero intenso viaje la chica se mantiene siempre en el límite de la vista de los samuráis, avisándoles cuando el terreno es traicionero e indicando las zonas por las que es más fácil moverse. El bosque permanece en silencio, como si contuviera el aliento a la expectativa del encuentro entre el Gran Ouyama y los humanos. La sensación es cuanto menos inquietante.
El lugar del encuentro es un claro del bosque que acoge un pequeño y apacible meandro del río. Junto a la orilla se encuentran los restos de la hoguera que Noboatsu encendiese para calentarse el día anterior.
Hemos llegado a tiempo - señala Oki, quien no ha perdido el aliento tras la carrera - El Gran Ouyama no debería tardar.
Una espectral figura blanca se materializa sentada en la rama de un árbol sobre Oki. Tiene el tamaño y las formas aproximadas de un niño pequeño, pero su cabeza es una masa deforme en cuyo rostro sólo hay tres orificios negros cuya posición hace pensar en ojos y una boca. La expresión del rostro del espíritu es una mueca de furia y asco contra los humanos. Su cabeza se ladea hasta casi darse la vuelta como si estuviera tensando un muelle. Al soltarse la cabeza se agita produciendo el repiqueteo sombrío de hueso contra hueso.
¿Qué te pasa, pequeño kodama? - pregunta Oki asustada.
El espíritu responde con otro soniquete lúgubre. Pronto empiezan a aparecer más y más kodamas, todos con expresión furiosa y haciendo los mismos sonidos que el primero. Cuando todas las ramas de todos los árboles están invadidas de kodamas furiosos empiezan a llegar lobos que entran en el claro rodeando a los humanos. Sólo por su tamaño, aproximadamente una vez y media el de un lobo normal, ya resultan amenazadores, pero mientras giran alrededor de los humanos mantienen las orejas pegadas al cráneo, los pelajes erizados y los belfos retraídos mostrando los afilados colmillos.
Finalmente hace su aparición el Gran Ouyama. Los aldeanos no exageraban al describir el poderío y la majestad del gran espíritu: un lobo de pelaje blanco brillante de casi un ri (1) de altura hasta la cruz. Extrañas marcas de color rojo sangre recorren su rostro y su cuerpo creando extraños patrones. Las mandíbulas son grandes y fuertes, capaces de abarcar holgadamente el tronco de un hombre. Los poderosos músculos ondean con gracia bajo el grueso pelaje cuando se acerca a olfatear a los humanos.
Es imposible no fijarse en la expresión de dolor y rabia en los ojos del majestuoso animal-espíritu. Es el dolor de no poder comprender cómo le ha podido ocurrir semejante tragedia y la rabia de no poder hacer nada para remediarla. Uno a uno va olfateando a todos los humanos excepto a Noboatsu y a Oki. Cuando termina con el último de ellos suelta un bufido de decepción. Tal vez esperaba que el asesino estuviera entre los visitantes.
Con un sonoro rugido hace callar a todos los kodamas. Cuando habla sus palabras retumban creando ominosos ecos (2).
HUMANOS, MIS EXIGENCIAS NO HAN CAMBIADO: DEVOLVEDME LA PIEL DE MI COMPAÑERA ANTES DE LA CAÍDA DE LA PRIMERA NEVADA Y ENTREGADME A SU ASESINO ¡NEGAOS Y TODOS MORIRÉIS!
(1) Entre los 3 y 4 metros
(2) Tirada de Voluntad contra una dificultad de 15 para resistir los efectos del Miedo
Para los tres shugenja las matracas de los kodamas no son ruidos sin sentido. Tal como vaticinó la Dama Pálida los pequeños kami ya están contagiados por la furia del Gran Ouyama. Lanzan insultos de ¡Asesinos! ¡Profanadores! ¡Sacrílegos! y amenazan con la destrucción que el espiíritu-lobo traerá sobre Higashidani Mura. Cuando el gran lobo aparece los kami piden venganza y sangre, excitados ante la posibilidad de una carnicería en la que los humanos no tendrían ninguna oportunidad...
En vuestro caso la dificultad de la tirada de Voluntad es de 20
El silencio que había imbuido al Tonbo, como si de un lúgubre manto se tratase, continuó en el trayecto a través del bosque mágico hasta encontrarse con el Gran Ouyama. No estaba habituado a invocar espíritus, y su presencia siempre aumentaba la culpa que revolvía sus entrañas por sus numerosos defectos. ¡Y allí estaba, el Lobo Blanco, el animal más poderoso que nunca hubieran visto sus ojos! Oh, qué maravillosa contemplación del poder y la creación de los dioses...
-¡Gran Ouyama-dono, perdonad nuestro atrevimiento por acudir a vos sin el culpable de esta tragedia y sin la piel de vuestra compañera! -comenzó, abriendo las manos en profunda reverencia. Sus canillas, que temblaban como palillos de dientes, se doblaron definitivamente para hincar las rodillas sobre el suelo. Las lágrimas surcaron su rostro como un bálsamo, extasiadas ante la visión del lobo y de sincera pena
-Buscamos vuestra sabiduría para ayudarnos a cumplir con nuestra tarea, que no es otra que libraros de tan angustiosa aflicción -acto seguido hundió la cabeza en el suelo. El miedo, el absoluto terror que inundaba su alma, estaba bajo control; pero sentía el filo del pánico rozando su piel, impulsándole a salir corriendo de allí sin mirar atrás. Tamaña afrenta no la consentiría, así que apretó los dientes y aguantó
Motivo: Voluntad (+1 Vacío)
Dificultad: 20
Tirada (3): 8, 9, 3
Guardados (3): 9, 8, 3 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 20, Éxito
Tenía toda mi confianza depositada en Oki-Chan; pero verdaderamente me sorprendió lo rápido que consiguió llegar hasta el lugar de reunión. En cuanto llegamos al claro, y tras comprobar que el Gran Ouyama aún no había llegado, no dude en hacerle una reverencia con la cabeza a modo de gratitud.
En seguida fueron apareciendo los pequeños espíritus, desplegando su actual estado de rabia ante nosotros. Los sonidos que emitían hablaban de un dolor y una furia nunca vista; pero la advertencia recibida, y la confianza y mi pacto con el gran espíritu me mantuvo en mi sitio.
La llegada de Ouyama fue verdaderamente magestuosa, como no podría ser de otra manera, tratándose de un ser capaz de gobernar las voluntades de cuantos espíritus se encontraban en estas tierras, y de controlar el paso espiritual por el que llegué hasta aquí. Por un momento busque a su hija; pero pronto entendí que estábamos solos en esto. Sólo esperaba que mi trato con su hija realmente hubiese sido en su nombre. El Gran Ouyama era grandioso. Ninguna palabra de nuestro idioma explicaría con exactitud su grandeza. No pude por menos que tirarme al suelo y arrodillarme al escuchar sus palabras. Sentí cómo olisqueaba a mis compañeros en busca del asesino, y respiré aliviado ante su decepción.
Su voz podría acobardar a cualquier humano o espíritu; una voz que más que oírse se sentía en el alma; y supuse que alguno de mis compañeros seguramente cayese presa del miedo. No era reprochable. Sin embargo yo era consciente de mi compromiso, adquirido desde la verdad y las circunstancias de mi propia vida, y que en este momento no podía fallar.
Me incorporé y, aún con la cabeza gacha a modo de respeto, dije: - Gran Ouyama-Dono. Mis compañeros y yo queremos trasmitirle nuestro respeto y dolor ante la pérdida de su compañera, y ante las terribles circunstancias que rodean esta pérdida. Mantengo el pacto que hice con su hija - continuo mostrando mi hombro marcado - He comprometido mi vida en encontrar al asesino de la Reina, y devolver su piel antes de que sea tarde. - abarco con un gesto de mi brazo a mis compañeros - Mis compañeros están comprometidos con resolver este crimen tanto como yo; pero somos meros humanos, y necesitamos de su ayuda para encontrar al asesino. - Me pongo de rodillas y agacho la cabeza - Me avergüenza tener que pedirle que nos permita ver el cuerpo de la reina, para poder encontrar una pista que nos lleve hasta le asesino. No dude que, en caso de no ser imprescindible, no nos atreveríamos a ofender el reposo de su cuerpo. - Espero con la cabeza baja la respuesta del gran espíritu...
Motivo: voluntad (+1 vacio)
Dificultad: 20
Tirada (4): 10, 9, 10, 5
Guardados (4): 10, 7, 10, 5, 9, 5 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 46, Éxito
Saiki logra mantener la calma sin demasiado esfuerzo. Al fin y al cabo eso es lo que le han enseñado durante muchos años, a que la firmeza de la Tierra logra resultados donde otros elementos más volatiles no lo consiguen. Mantiene la cabeza baja en señal de respeto al Gran Ouyama, y decide que de momento mejor sean otros los que se dediquen a la conversación, dado que cualquier cosa mal dicha puede desencadenar una catástrofe. Los espíritus están demasiado agitados en este lugar. Mejor dicho, el Gran Ouyama los esá agitando enormemente. En su mente recuerda a Hoshi, Murai y todos los de la aldea, y un pensamiento desalentador acude a ella. Ouyama y Kobo son iguales. Ambos son gobernantes que debido a su impulso y a que no pueden contener su ardor están llevando a todos sus súbditos al desastre. Y están tan cegados por el dolor y el orgullo que no pueden ver más allá. Esperemos que la sabiduría de la Tierra ilumine a alguno de los dos, piensa para sí misma, mientras sin abrir la boca reza una plegaria por los espíritus del bosque.
Motivo: Voluntad (miedo)
Dificultad: 20
Tirada (4): 9, 6, 8, 4
Guardados (4): 9, 8, 6, 4 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 27, Éxito
La actitud respeutosa mostrada por los shugenja consigue aplacar algo de su desconfianza aunque no su cólera - EL HUMANO KITSUNE NOBOATSU YA HIZO UN PACTO CON NOSOTROS: CONOCIMIENTOS Y UNA TREGUA TEMPORAL CON LOS HUMANOS A CAMBIO DEL ASESINO Y LA PIEL. ENTIENDO QUE OS HABÉIS UNIDO A ÉL PARA DARLE LA FUERZA DE LA MANADA ¿QUÉ QUERÉIS VOSOTROS A CAMBIO?...
Tomad nota de lo siguiente: Ouyama ha hablado de una "tregua temporal" con los aldeanos. No dice nada de después, por lo que para el espíritu sería perfectamente lógico dejaros marchar del bosque y después arrasar Higashidani Mura una vez que hayáis cumplido vuestra parte. Esta negociación es muy delicada porque lo que pase a partir de ahora en la aldea depende de vosotros y lo que pactéis.
El Libélula arrugó el ceño. '¿Conocimientos?' Desvió su vista fugazmente hacia Noboatsu. Supuso que se trataba de información sobre el caso, pero entonces no tendría sentido volver al espíritu...
De todas maneras no era momento para suposiciones, y si el Zorro había obtenido sabiduría de los espíritus había hecho bien. En su lugar el Tonbo hubiera hecho lo mismo, a fin de cuentas aquellas criaturas eran casi tan antiguas como el propio tiempo, y los dedos de los Kami los crearon
Alzó la cabeza hacia el Lobo
-Gran Ouyama-dono, vuestra generosidad no conoce límites, sin embargo no queremos nada a cambio. Simplemente anhelamos serviros. Con vuestra presencia honráis la vida de los humanos que viven en las aldeas próximas a vos. Y ellos sólo quieren paz. Una paz para siempre, con la que generación tras generación su descendencia pueda oír las historias del magnánimo Lobo Blanco -respondió, dorando la píldora al espíritu con una brizna de sinceridad. Hundió de nuevo la cabeza en el suelo y aguardó unos segundos antes de continuar
-Como Noboatsu ha dicho, os agradeceríamos investigar las huellas del asesino en vuestro territorio. Perdonad nuestras limitaciones -añadió, para aludir al requerimiento del Zorro al que lógicamente se sumaba
El Tonbo parecía otro. Casi siempre se mostraba distraído, y su mente divagaba en cientos de ideas que (para mal de muchos) nunca terminaban del todo bien. Sin embargo aquella situación de invocar espíritus y la presencia del poderoso animal había limado -temporalmente- la huella de su carácter para manifestar en su más pura esencia la razón por la que nació shugenja
NO ESTOY HABLANDO CON LOS ALDEANOS SINO CON VOSOTROS ¿ES ESA PAZ DE LA QUE HABLAS LO QUE TÚ DESEAS?¿QUE OLVIDE LAS DOS VECES QUE HAN INTENTADO ASESINARME? ¿INTENTAR AHOGAR EL BOSQUE? ¿INSULTARME TRATÁNDOME COMO A UN SIMPLE ANIMAL AL QUE SE PUEDE MATAR CUANDO OS ESTORBA? ¿ES ESO? ¡TIENES MUCHO VALOR, PEQUEÑO HUMANO!
La loba plateada, San, acaricia el cuello de su padre con el morro para aplacar su furia. Éste gruñe y gira el cuello para rechazarla, pero ella insiste hasta que él se deja hacer.
BIEN, QUE ASÍ SEA. ESTOY DISPUESTO A ACEPTAR VUESTRAS CONDICIONES, PERO NI UNA SOLA MÁS. SI NO CUMPLÍS VUESTRA PARTE DEL TRATO TODO CHIKUSHUDO SABRÁ QUE HABÉIS FALTADO A VUESTRA PALABRA Y NO HABRÁ ANIMAL EN NINGEN-DO QUE PERDONE VUESTRO FRACASO. SI ESTÁIS TODOS DE ACUERDO OS LLEVARÉ A DONDE YACE MI COMPAÑERA PARA QUE EMPECÉIS...
Motivo: Resistir Miedo de Ryu
Dificultad: 13
Tirada (2): 10, 7
Guardados (2): 10, 7, 7 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 24, Éxito
Os recuerdo que al tirar contra Miedo cada dado tiene un bonificador igual a vuestro Honor (Redondeando hacia abajo). Considerad el Honor de vuestros personajes igual al basal de vuestra escuela (Lo digo por la tirada que he hecho por Ryu)
El Shiba se mantuvo expectante en todo momento pero con la aparición del espíritu lobo se arrodilló mostrando respeto y serenidad en una postura que bien pudiera parecer que se encontraba en frente alguien muy superior a su rango, como pudiere ser su propio Daimio. (1)
El bushi sintió el miedo en su cuerpo, pero no se movió lo más mínimo. Los espíritus era verdaderamente impresionantes y Daiki no pudo más que apartar la mirada y bajarla mientras sus compañeros conversaban con la bestia.
Motivo: Miedo
Dificultad: 9
Tirada (3): 2, 4, 1
Guardados (3): 4, 2, 1 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 7, Fracaso
(1) Tiro miedo dif 9 (tierra 3g3 + 6 por 2 de honor).
Vaya tirada, que desastre :_(
Sin soltar palabra, considerando que el Lobo Blanco había aceptado sus condiciones gracias a la intervención de su propia hija, se alzó unos instantes para juntar las palmas de las manos y agacharse otra vez, en muda señal de agradecimiento. Nada más por su parte iba a añadir, pues bastantes condiciones hacía quién no pertenecía sólo a su mundo. Observó de reojo a Saiki y Noboatsu...
La primera parecía exhausta por la invocación en la aldea, pero sabía que sacaría fuerzas de flaqueza si quería añadir algo. El segundo, al parecer, ya había dialogado con la criatura, pero podía aún tener alguna ocurrencia que no se paseara por la mente del Tonbo
Al menos podían investigar, como el Zorro quería, la escena del crimen. Si eso les ayudaba ya sería más que suficiente, pues no ignoraba que el Lobo Blanco cumpliría su amenaza sin remisión alguna en caso de que fallaran. Una pesada losa se hundía ahora sobre los hombros de todo el grupo, y esperaba de todo corazón que no fuera suya la culpa
Mientras Daiki permanezca en la presencia del Gran Ouyama sufrirá un penalizador de -3 a todas sus tiradas de Habilidad y no podrá gastar Vacío.
Y sí, la tirada era un desastre. Lo bueno es que no era una tirada muy importante, así que ya has gastado esa mala suerte ;)
El viaje hasta el punto de encuentro con el Gran Espíritu fue extenuante debido al ritmo imprimido por la señorita Oki, a pesar de estar acostumbrado a andar por terrenos montañosos. Por eso llegó con la respiración algo agitada y, lejos de ponerse alerta ante la aparición de los Kodamas, se limito a recuperar el aliento.
Sin embargo la cosa cambió cuando empezaron a aparecer lobos furiosos por todos lados, rodeándolos. El miedo comenzó a atenazar el corazón del samurai que no esperaba ese recibimiento… hasta que apareció Ouyama. El enorme lobo-espíritu inspiraba tal grandeza y poder que hizo desaparecer el miedo del corazón de Daijiro.
- ¡Magnífico!…- se escuchó susurrar a sí mismo al contemplar de cerca a la criatura mientras ésta le olía.
Con un acto reflejo, el dragón se arrodilló cuando lo hicieron sus compañeros y escuchó sus palabras, estremeciéndose cada vez que escuchaba al Guardián del Bosque. Pronto se dió cuenta de que la conversación estaba apunto de acabar y comprendió que deseaba seguir en presencia del gran espíritu: podría aprender mucho de él y del bosque con su ayuda. Se mordió los labios inseguro de si debía manifestar sus pensamientos, pero su boca le traicionó antes de terminar de decidirse.
- Mi señor Ouyama-dono - dijo inesperadamente e, inmediatamente después, hizo una profunda inclinación.- Sería para mi un honor si, tras encontrar al asesino de su esposa, me permitiera convivir con usted un tiempo en el Bosque Sagrado. Me llamo Mirumoto Daijiro, mi señor, soy un humilde samurai a las órdenes del sabio Mirumoto Masayuki-sama y creo que ambos mundos podrían ganar si pudiéramos conocernos mejor y aprendiéramos a respetarnos. Queramos o no, compartimos la tierra y, al igual que los lobos no son malos, tampoco lo somos los humanos… al menos no intencionadamente. Si me permitiera convivir con usted y su familia durante un año y un día podría enseñaros a conocer a los humanos y vos podría enseñarme a conocer el bosque y sus espíritus. Así, tal vez, podamos limar nuestros prejuicios y coloborar juntos para proteger el bosque y sus habitantes en el futuro…
En la mente de Daijiro era posible, no solo una tregua entre espíritus y hombres, sino una cooperación mutua. Si querían salvar la presa, a las gentes del pueblo y proteger el bosque esa era la mejor manera.
Motivo: Miedo
Dificultad: 12
Tirada (3): 2, 9, 2
Guardados (3): 9, 2, 2
Total: 13, Éxito
Mira a Daijiro con la cabeza ladeada, sorprendido por su propuesta - LA VIDA EN ESTOS BOSQUES NO ES FÁCIL NI CÓMODA. NADIE MÁS QUE TÚ MISMO SE OCUPARÁ DE TU SUPERVIVENCIA, Y TE REGIRÁS POR LAS LEYES DE LA NATURALEZA. SI SOBREVIVES TE CONVERTIRÁS EN MI MENSAJERO Y LE RECORDARÁS A LOS OTROS HUMANOS EL PACTO QUE HICE CON VUESTROS ANCESTROS PARA PERMITIROS VIVIR EN MIS TIERRAS. Y AHORA VÁMONOS. TENÉIS TRABAJO QUE HACER ANTES DE COBRAROS TODOS ESOS FAVORES. TODOS MENOS TÚ, OKI. VETE DE AQUÍ.
Los ojos de la chica se abren por la sorpresa y la indignación - ¡Eso no es justo, Gran Ouyama! Yo...
A un rugido del lobo varios lobos la rodean gruñendo y alejándola del grupo - VETE O TE MATARÉ.
Uno de los lobos intenta morderla pero ella se aparta de un salto. Mira a los samuráis con los ojos arrasados en lágrimas y después echa a correr seguida por dos lobos. Después de eso la manada conduce a los humanos hasta un claro donde yace el cadáver desollado de la compañera del Gran Ouyama. En vida debió ser un animal magnífico, casi tan grande como el propio Ouyama. Pero el asesino, seguramente tomándola por sorpresa, le abrió el cuello con un tajo magistral y después le atravesó el corazón con una única estocada que entró desde debajo del esternón. No son golpes que pudiera dar un novato. Quien hizo esto no sólo tenía fuerza sino también una gran habilidad. Pero un detalle más llama la atención de todos al mirar las heridas más de cerca: la herida del tronco tiene una extraña forma romboidal en vez de la triangular propia de las armas rokuganesas, de lo que se deduce que el asesino utilizó un arma gaijin...
Tirada oculta
Motivo: Noboatsu
Dificultad: 15
Tirada (6): 10, 1, 10, 6, 10, 4
Guardados (3): 10, 5, 10, 10, 6, 10, 9 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 60, Éxito
Tirada oculta
Motivo: Daijiro
Dificultad: 15
Tirada (6): 9, 6, 2, 5, 8, 9
Guardados (3): 9, 9, 8 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 26, Éxito
Tirada oculta
Motivo: Daiki
Dificultad: 15
Tirada (3): 7, 5, 10
Guardados (2): 10, 5, 7 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 22, Éxito
Tirada oculta
Motivo: Saiki
Dificultad: 15
Tirada (5): 6, 9, 6, 6, 6
Guardados (2): 9, 6 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 15, Éxito
Tirada oculta
Motivo: Ryu
Dificultad: 15
Tirada (5): 1, 5, 1, 1, 1
Guardados (3): 5, 1, 1 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 7, Fracaso
Tirada oculta
Motivo: Yuya
Dificultad: 15
Tirada (7): 10, 2, 9, 9, 4, 7, 4
Guardados (4): 10, 4, 9, 9, 7 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 39, Éxito
Todos habéis superado la tirada de Inteligencia + Medicina para daros cuenta del detalle. Si queréis iniciar el rastreo tirad Percepción/Cazar (especialidad Rastreo) a dificultad 25 (el rastro es antiguo)
Si hay algún momento para que Doheki aporte algo debería ser éste :)
Si tiene algo importante o interesante que decir voy a pedirle que aparezca para que nos ayude (que luego pida lo que quiera a cambio). Si ves que no hace falta o ves que no va a añadir nada más (o no quiere aparecer en esta zona por lo alterada que está) hago otras cosas, nos saltamos esto.
Motivo: Comunión (Tierra)
Dificultad: 0
Tirada (7): 2, 9, 8, 12 (10, 2), 7, 3, 8
Guardados (4): 12, 9, 8, 8
Total: 37, Éxito
Puede que Doheki no pero igual otro(s) kamis de tierra si. En el caso de que Doheki pida ayuda a algún otro, o que vengan varios, o lo que sea, hago una tirada para lanzar el hechizo de Comunión para tener una idea de lo predispuestos que están los kami de tierra en esta zona.
Hay que añadir el aumento gratuito que da Kami Amistoso, se puede usar para aumentar la tirada o igual es necesario gastarlo para otras cosas (como por ejemplo calmar un poco a los kami presentes aquí, que igual están un poco revueltos)
Con los brazos cruzados, golpeó suavemente su labio inferior en actitud pensativa
El hecho de que la herida fuera hecha con un arma gaijin podía tener muchas implicaciones. La idea de un asesino extranjero contratado en exclusiva para matar a la loba no era descabellada, sin embargo también era cierto que era relativamente habitual, sobre todo entre ciertos clanes, utilizar armas occidentales. En cualquier caso era un dato útil que no había que descartar, pues por suerte reducía su búsqueda: el uso de un arma de esa clase se contaba en minoría
Descruzó los brazos, avanzó hacia la dantesca escena y de nuevo el 'viejo' Tonbo hizo su aparición -purgado ya de su cascarón de inhumana gravedad-. Se agachó y paseó los dedos con gracilidad por las huellas y surcos que, escondidos en un tiempo pasado, delineaban los pasos del asesino. Sin parar de mascullas cosas ininteligibles, recordó las miles de veces que había observado la deflagración de su arte (y sus consecuencias) y pulía el rastro del curso de acción. Por si no bastara, era un avezado cazador, pues nadie sobreviviría a las inclemencias de las tierras Dragón sin un somero conocimiento de tan insigne materia
Cuando creyó encontrar lo que buscaba, se levantó de súbito. Caminó varios pasos hacia atrás, con los ojos clavados sobre el suelo y desviándolos fugazmente hacia hojas o ramas bajas, como si dibujara un rompecabezas imaginario que se resolvía en su sencillez tirando de un único hilo. Al encontrarlo, una sonrisa iluminó su rostro bonachón
Palmeó tratando de contener su alegría y giró sobre sus talones, inmerso en la ruta que con algo de suerte los haría rastrear al asesino y encauzar así su misión
Motivo: Cazar + Percepción (+1 Vacío)
Dificultad: 25
Tirada (7): 3, 9, 9, 6, 3, 3, 5
Guardados (4): 9, 9, 6, 5 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 29, Éxito
En esta ocasión el espíritu opta por permanecer invisible, pero Saiki puede sentir su presencia y escuchar claramente su voz en su cabeza.
Esto está mal, muy mal. Ese okami (1) ha conseguido contagiar su furia a los kami elementales. Incluso a los de Tierra. Deberías irte de aquí, Saiki. Si esos espíritus furiosos deciden actuar habrá terremotos y cambios radicales en el terreno ¿Crees que será consciente de lo que está haciendo? A mí me parece que está muy furioso, pero sobre todo triste. Esa compañera debía ser muy importante para él ¿Crees que te dejaría coger esa piedra blanca de ahí? Es muy bonita y su kami aún está dormido. Hay demasiada furia aquí. Deberías irte antes de que la Tierra te devore...
(1) espíritu-lobo
Saiki responde en su cabeza, aunque la inquietud de Doheki, normalmente tranquilo, le hace sentir bastante preocupación y teme que no pueda ocultarlo al resto de sus compañeros.
No, creo que no es consciente de lo que está haciendo, sólo siente dolor y ese dolor no le deja ver más alla. Mantente alejado de aquí si lo ves necesario, viejo amigo. No deseo que te ocurra nada malo. Si logramos que el bosque y Ouyama se calmen le pediré alguna de estas piedras, no te preocupes por eso, dice en un tono lo más tranquilizador posible. Pero tienes razón, cuanto antes salgamos de aquí mejor para todos.
Motivo: Percepción + cazar
Dificultad: 25
Tirada (2): 7, 9
Guardados (2): 9, 7 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 16, Fracaso
La tirada de percepción la hago aquí, no me esperaba que fuese exitosa así que da un poco igual.
Miro de reojo cómo todos mis compañeros se afanan en encontrar alguna pista que nos lleve al asesino. Soy consciente de cuanto nos ha costado conseguir acceder al cuerpo de la reina, y cuanto nos jugamos, especialmente yo, en conseguir encontrar al asesino y la piel robada. No me preocupo especialmente por mi vida. Sé que he cumplido con mis obligaciones para con mi clan, y que mi sacrificio puede ser incluso beneficioso si con ello consigo mantener abiertas las sendas a otros reinos espirituales para los míos. Por ello, y de forma decidida, con la tranquilidad de quién ha vivido y trabajado en los bosques tanto tiempo, me dispongo a observar las pistas dejadas en el lugar del crimen por el atacante. Múltiples imágenes se adentran en mi mente, que trata de poner orden en ellas para encontrar la pista que necesitamos...
- Ahí está - digo con resolución, más para mí que para ser oído por los demás, que sin embargo pueden oirme...
Motivo: Rastreo (PER+CAZ)
Dificultad: 25
Tirada (7): 9, 6, 5, 2, 6, 10, 1
Guardados (3): 10, 5, 9, 6 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)
Total: 30, Éxito