Partida Rol por web

Las flechas negras le recordaron imágenes del pasado que Ingolt creía haber olvidado, los trasgos eran los reyes de las montañas y estaban muy cerca de ellas en aquel preciso momento, el enano tenía razón...debían moverse rápido.

Mientras hablaban se acercó otro hombre, pobremente vestido, acompañado de un perro. El bárdido se llevó la mano al pomo de la espada, más por la sorpresa que por intención de atacarle.

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Se parece a aquellos que servían al mago Radagast el Pardo en el valle del Anduin.- pensó Ingolt mientras recordaba las palabras de su padre.

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De seguro, que ``el Pequeño´´, cómo se hacía llamar, pertenecía a ese pueblo. Ingolt, le ofreció la mano a modo de presentación, con miedo a que su perro se la arrancara, pero a este no pareció importarle.

Buenos días, yo soy Ingolt del reino de Bardo el Arquero. Tranquilo...este niñ...digo hobbit nos salvó- recordó que equivocado estaba con aquel hobbit,girándose y observando a Saradoc Tuk.

Orejas puntiagudas, cabello rizado, ni rastro de barba, pelos en los pies. Es como decían los que vieron a Bilbo Bolsón en la batalla de los cinco ejércitos.- pensó dándose cuenta de su error al confundirlo en un niño.

Mil perdones maese Saradoc, sóis el primer hobbit que he visto en mi vida
- tomó un respiro para justificarse- muy parecido a los niños de Ciudad del Lago.- dijo inclinando la cabeza, como lamentando el haberse equivocado.

Sus nuevos compañeros empezaron a debatir sobre el qué hacer, Ingolt solo quería recuperar el cargamento robado y dar su merecido a Balgor y a sus hijos.
Pero ¿a quién iba a engañar?, el solo no podía contra ellos. Además, de seguro que volverían algún día a ciudad del Lago. Allí les daría su merecido.

Therri, el enano, propuso ir a ciudad del Lago. Pero aunque Ingolt quería ir a ver cómo se encontraba su padre, la ciudad no iba a irse a ningún lado.
Ir a ciudad del Lago significaba adentrarse en el Bosque Negro, otra vez, y aquello no le apetecía lo más mínimo, sin comida ni bebida. Su padre podría esperar un poco más a que volviera.

Investigar las flechas, les llevaría varias horas y tal vez, al caer la noche, podrían ser sorprendidos por los trasgos que bajarían por las laderas de la montaña.

Según Saradoc, un grupo de elfos se encontraba en problemas. Aquello despertaba la curiosidad del hijo de Ingelt, ¿de qué huirían unos elfos? ¿por qué?

¿Y Balgor?- pensó el bárdido. Ahi se pudra con todo el dinero que robó. Más pronto que tarde lo encontraré y le daré su merecido. Que se crea que ha ganado.

Vayamos en ayuda de los elfos.- dijo Ingolt afirmando con la cabeza- Tal vez, seamos su última esperanza. Y bien, ¿hacía dónde fueron?- preguntó al mediano.

—Therri— dijo presentandose al tal "Pequeño". Puede que aquel hombre hiciese honor a su nombre, pero le parecía raro que le hubiesen llamado así. Claro, que en su caso sus padres también habían "sido graciosos" con los nombres. Sin embargo, no había tiempo para mucho más, si los elfos necesitaban su ayuda no debían quedarse allí charlando. La mujer no pudo evitar mirar al perro con curiosidad, no parecía agresivo como los lobos, pero si lo suficientemente fuerte como para enfrentarse a ellos. No había duda de que le habría sido de gran ayuda en el pasado. —Movámonos. Habrá tiempo luego para presentaciones.

Saradoc quedo asustado despues de la entrada de "El pequeño", aunque era mas alto que el hobbit, pero pronto se le paso. Despues de la entrada en escena de El pequeño dijo ante todos - "¿Entonces venis conmigo a ver que ha pasado con los elfos?" - Saradoc quedo emocionado ante la respuesta de ir a ayudarle.

"No recuerdo exactamente donde estaban, puesto que al encontrarmelos justo me atacaron los lobos y tuve que salir corriendo" - Dijo golpeandose la cabeza para intentar recordar donde los vio.

Saradoc empezo a balbucear - "Fue al este... no fue cerca la roca que vi con forma extraña... no, a ver a ver tengo que acordarme si si si."

De repente - "Ya esta ya me acuerdo, iba hacia el este cuando me los encontre y entonces sali en esa direccion para huir hacia una torre pero no llegue. Por lo tanto deben de estar al oeste de aqui. No corri mucho, debido a mi estatura no soy muy rapido, asi que deben de estar cerca de aqui seguidme os puedo llevar." - Salio corriendo el hobbit con determinacion.

El grupo comienza a moverse...