Partida Rol por web

El clima es agradable....o lo sería si hubiera algo de brisa y 15 grados menos.

Darn Tercius, planeta agrícola, el destinado para que varios regimientos de la guardia imperial, entre ellos El primero y único, descansen "cómodamente" durante 8 meses antes de embarcar a su siguiente destino.

El primero de Tanith ha sido ubicado en la ciudad de Magna planum, en una inmensa llanura en el cinturon ecuatorial del planeta, rodeada por kilometros y kilometros de cultivos.

En las afueras se han levantado montones de edificios, entre ellos, la cantina de Murr.

Hace calor.....

En el viaje de ida a Darn Tercius, un nuevo regimiento del RIP acabó su formación, así como se agregó al regimiento un nuevo comisario, un cadete-comisario en realidad. Aún no foman parte de ningún escuadrón.

Mucho calor....

Con la guerrera del uniforme colgada en la silla, disfruto de una... ruc... de una cerbeza, dejemoslo ahi, no muy fria, la verdad, porque al pedirla el tosco tabernero dijo: "Solo la tenemos del tiempo", no me habia imaginado que por, del tiempo se referia a 33 grados.... Pero bueno, siempre es un placer tomarte algo sin que te esten fustigando porque "Así no bebe un puñetero guardia imperial en condiciones".
Me siento como Dios, no podia estar mas orgulloso, habiendo superado el RIP y con mi emblema Tanith, esperando mi primera accion en combate, junto con mis camaradas, calar por primera vez mi "Plata Pura". En aquella tranquila taberme me dedico a ojear al personal, viendolo ir y venir, a la espera de encotrar una cara conocida. El dia pinta bien, sin muchas responsabilidades, escepto el mantener en todo momento bien lustrado el emblema. jajaja.

Darran entra la mierda de taberna y piensa para sí, otra mierda de taberna, serio y mas directo que un disparo de bolter así es este chico reservado y pragmático, oteando por entre la gente ve a su compañero escuadra Slege, sorteando ala concurrencia se dirige hacia él y cuando esta su lado le pregunta en apenas un susurro:

Puedo sentarme, y sin esprar a su contestación acerca la silla mas cercana vacía y se sienta junto a él .

Cansado, sin haber dormido apenas, pero con ganas de festejar el haber aprovado el RIP, Mktaggar entró en la cantina.
Había sido duro, más de lo que se había imaginado, y eso que se lo habían puesto mal. Pero el instructor era un pedazo de cabrón malnacido, el peor que había visto nunca. Y había tenido que soportar unos cuantos. Pero todo eso ya no importaba. Por fín era un soldado imperial. Por fin podría empezar a vengarse.

No obstante, se podía permitir un poco de celebración. Despues de todo nadie sabe cuando les enviarian al frente de batalla.

De un rápido vistazo vio como alguno de los otros miembros de RIP que también se habían graduado. Se dirigió a ellos.

Hola chicos. ¿Celebrando algo?

El estaba primero. Digo con un encogimiento de hombros y señalando a Grend.

Finalmente, y gracias al emperador, habían conseguido terminar el entrenamiento. Olan estaba literalmente hasta los huevos de instructores y demás capullos autoritarios que le decían qué hacer y cómo hacerlo, y le abroncaban si no les gustaba el resultado. Curiosamente se había dado cuenta de que la mayoría de ellos eran suboficiales, con los oficiales que había tenido trato no había existido tanto problema ya que la inmensa mayoría de ellos pasaban bastante de su trabajo.

Olan entró en el tugurio con un pitillo de iho en la boca y observó el panorama. Soldados de diversas unidades bebían y charlaban animadamente. Al cabo de unos segundos localizó a los suyos, compañeros que acababan de terminar el entrenamiento y según parecía estaban celebrándolo.

Se acercó a la barra y pidió un buen copazo de Amasec, necesitaría algo fuerte para resarcirse por tanta estupidez durante la instrucción. Cuando la recibió del camarero se acercó a sus colegas.

- ¿Que tal va eso camaradas? Ya veo que habéis empezado a privar sin mí.- dice mientras sonríe. Con el pie se acerca una silla cercana y se acomoda tranquilamente. Tras eso pega un buen lingotazo del licor.

Jodidamente bueno. Así me gusta, es justamente lo que necesitaba ahora mismo.

-¿ Alguien tiene alguna idea de dónde se puede conseguir material? - les susurra quedamente mientras le da una calada al pitillo. Una pequeña dosis de obscura tampoco le sentaría mal. Joder, sería prácticamente una fiesta después del infierno que les han echo pasar.

Me gusta, directos y sin rodeos, pienso mientras veo acercarse a mis compañeros de escuadra. No destacamos mucho, me fijo mirando alrrededor, eso es bueno. Viendo como se acerca y se sienta mi compañero arqueo las cejas ante la pregunta y le contesto: Sobra tal pregunta camarada, faltaria mas.

Apuro mi pitillo y observo como se acerca nuestro otro compañero:

No lo se...¿Que por fin somos fantasmas oficialmente?

Me respaldo en la silla escuchando a nuestro compañero, presidiario y de mas, la crem de la crem del regimiento, fijo que si. Nunca biene mal tener a alguien asi para apoyar tu espalda que se dice...mmm... La sugerencia de este pieza me hace reflexionar... ¿Que podrian ofrecernos los lugares mas.... obsssscuros de este planeta? Mi propio juego de palabras me hace sonrreir ligeramente ante mis compañeros. Y mirandole y acercandome un poco mas a la mesa le planteo:

Hummmm, la verdad, si por material te refieres a Obscura (dicho muy bajito)... Seguro que donde lo vendan debe ser un lugar muy.... selecto digamos, y que tambien tambien puede que vendan una pistola laser o similar, cosa que no me desagradaria adquirir. Pero el material es caro compañero y no creo que conozcamos a las personas idoneas para trabajar en esos circulos, Ejemm...¿Tu conoces a alguien que nos pueda ayudar?

Pienso en lo poco que le podria beneficiar a este pieza chutarse un buen viaje, no molaria que estubiese con el mono a la hora de acertar con un rifle. Por un segundo se me pasa por la cabeza el pobre Costin, rehabilitado digamos pero a punto de recibir un 10/19 de Gaunt en aquel molino perdido en tierra de nadie de Aexe Cardinal, y que recientemente ha salido muy mal parado del ultimo combate de los fantasmas, Dorem no apostaba por que saliese adelante... La politica del regimiento ante tales excesos no parecia ser muy laxa.

Pero Olan es un miembro mas del grupo, y no pienso dejarle ir solo a tales lugares, en el regimiento cuidamos los unos de los otros, eso es algo que desde que entras aprendes. Primero y unico, para lo bueno y para lo malo.

Grend se sentó junto a los demás, mientras seguían llegando más compañeros de la instrucción.

Cita:

Creo que hasta que no tengamos nuestra primera batalla en firme no seremos fantasmas de verdad. O por lo menos será lo mínimo que piensen de nostros los veteranos.
Pero todo, se andará. Todo se andará.

Cuando Olan se acercó con su copa se dió cuenta de que en este tugurio nadie vendría a servirles, así que se levantó a por algo de beber.
Justo en ese momento, comentaba Olan lo de "pillar" algo. A Grend no le hizo ninguna gracia. Por lo que se rumoreaba del comisario de los fantasmas, este era muy intransigente con las faltas. No venía nada bien empezar con algo como eso. Además de que si se enganchaba, luego los que saldrían peor parados serían ellos si le daba el mono en medio de un combate.

Deberías dejar esa mierda. Sólo te traerá problemas.

Se acercó a la barra y pidió un licor no demasiado fuerte. Quería celebrarlo pero no pasarse.

El joven Ven había bajado de la nave de transporte antes siquiera de que esta hubiera aterrizado del todo.

Se levantó un poco la visera de su gorra de plato con su dedo índice, para mirar a su alrededor. Herodor. Menudo honor, entrar a servicio en el mundo en que la Santa se había encarnado, volver a estar entre Tanith, una especie, por desgracia, en extinción. Y sobretodo, entrar a formar bajo el mando del Lejendario Gaunt.

Todo un honor.

Se arrebujó un poco, subiéndose las solapas y el cuello de su abrigo de comisario para cubrirse un poco del frio que hacía y protegerse de la polvareda que levantaban las toberas de la nave de transporte.

Un soldado tantih esperaba cerca del espaciopuerto apollado en un vehículo de transporte ligero y hacia él se dirigió Ven.

- Saludos, soldado. Soy el cadete-comisario Ven Mkarron.¿Eres tu el que me va a llevar a ver al coronel-Comisario?

El soldado se cuadró y le saludó con una amplia sonrisa.

- Soy el soldado Soyun Mkarra, señor, encantado. Y sí, hoy seré su guía.

Hechas las presentaciones, Ven echó su petate a la parte trasera del vehículo y se sentó en el asiento del copiloto. Soyun corrió a sentarse en el del piloto y arrancó el vehículo, enfilándolo hacia el centro de mando donde estaban Gaunt y la Santa.

-Es un placer oir un acento de tanith nuevo, señor

Dijo Soyun con una sonrisa en los labios arriesgándose a comerse algún insecto por la velocidad del vehículo.

- Pero he de advertirle de que no llega en un momento óptimo. Acabamos de perder al Coronel, Colm Corbec y el Coronel-comisario está de un humor bastante oscuro. Al menos tiene a la santa con él que le reconforta y le apolla, pero Herodor ha sido una dra prueba para todos.

-El Emperador protege, Soyun, el Emperador protege. Por cierto,¿Qué hay del comisario Viktor Hark? me digeron que preguntara también por él.

-Fue herido, señor. Pero Dorden dice que se recuperará.

-Bien. Gracias.

El resto del camino Ven fue en silencio rumiando la información que Soyun le iba dando. Las múltiples campañas de los Tanith. La promesa de un mundo nuevo. La aparición de la santa. Las personas más relevantes del primero y único. La inclusión de verghastitas...

Cuando llegarón por fin al centro de Mando, su cabeza estaba a punto de estallar de tanta información que le había dado Soyun, era muy charlatán y alegre.

Ven se bajó del coche y se arregló como buenamente pudo su abrigo y uniforme, se caló la gorra de plato de comisario bien calada y entro por la puerta con paso firme. Se había preparado para encontrarse con Gaunt. Hasta sus oidos habían llegado descripciones del comisario, pero nunca se lo había imaginado así. Más alto que él y fibroso más que delgado. Con una cara fina y aguilina y unos ojos frios como el acero que le miraron calculadores.

-Se presenta el cadete-comisario Ven Mkarron, señor.

La cara de Gaunt se tornó en sorpresa al escuchar el acento y el apellido del nuevo cadete.

-¿Mkarron? ¿Eres de Tanith?

- Sí, señor, de los pocos que quedamos y según creo ya nos conoce a todos.

-Eso creía yo hasta ahora, pero veo que el Emperador aún guarda sorpresas bajo su dorado trono...Bueno Ven, como verás acabamos de terminar aquí en Herodor con un fuerte ataque del archienemigo. La Santa nos acompaña y parece que la moral está alta, pero hemos perdido a soldados muy importantes para nosotros, Colm Corbec, Agun Soric...Quizá halla soldados que tengan baja la moral. Y por supuesto están los nuevos reclutas, jóvenes tanith y verghastitas que han pasado el RIP. Creo que lo mejor es que te vayas a la cantina y veas y conozcas a la gente con la que vas a luchar a partir de ahora.

-Si, señor. Será un placer.

-El Emperador protege, Ven.

-El Emperador protege, señor.

Dicho esto se retiró hacia la cantina que le había comentado Gaunt, deseoso de retomar contacto con su gente, con gente como él. Hijos de un planeta que ya no existe, legado de una raza en extinción.

Entró por la puerta de la cantina, seguro y confiado. Pidió un vaso de amasec y se retiró a una esquina discreta del local para ver a sus nuevos camaradas de armas.

Viendo entrar al comisario por la puerta, por un momento creo que aqui tienen microfonos o algo parecido, mirando fijamente a Olan, le hago un gesto, casi inperceptible, de que corte el royo. Sin cambiar de postura para no parecer sorprendido por la entrada de un comisario en el local, con gestos normales y pareciendo que tenemos una combersacion de lo mas normal digo a mis compañeros:

No mireis chicos, pero acaba de entrar por la puerta lo que si no me engañan mis ojos es un comisario imperial.

Observandolo con disimulo, como quien busca a alguien entre la multitud, escudriño al recien llegado. Parece que esta relajandose: una copa de amasec, una esquina tranquila del local, y eso es lo que mas me preocupa, cuando se comportan tan normal. Todo escrito, de manual vamos.., con paciencia y buena letra, en "El instrumento de orden".

Vaya vaya vaya.... Cosa curiosa chicos, el señor comisario tiene un elegante tatuaje de la casa... Media luna bajo el ojo ¿Em...? ¿Que opinais tios?

Con disimulo ajusto los correajes del equipo y miro si algo está fuera de lugar, y con gran alivio, descubro que todo está en orden.

Pasa de él y tal vez él pase de nosotros.