Lily se queda con cara de -.- y murmura: pero si me lo has traído tu, bobo...
Quizá a ella también le había dado demasiado el sol... ¿o no?
Me quedaré aquí hasta que acaben las clases. Dice dándose la vuelta y volviendose a tumbar. ¿Irás a clase señor responsable?
Perdón! Es que.. es que... ¡es Arashi! >.< xDDD
Por más que quiera quedarme aquí y fumarme la clase, tengo que volver. El profesor me ha pedido que te vaya a buscar y si no regreso pronto, sabrá que me estoy escaqueando de la clase. Dice Mike mientras niega con la cabeza cuando te tumbas en el suelo. Mira, tu quédate si quieres, con ese refresco que dices que te he traido yo y tu locura, yo me regreso y digo que no te he encontrado o alguna cosa parecida. ¿Te parece?
Por lo menos ahora no parece querer chantajearte con tu escapada.
Pero lo que es más extraño es que siga con la bromita del refresco. Tu misma lo has visto irse a por uno, pero él sigue negándolo. Extraño.
Mike se despide de ti con un movimiento de su mano y comienza a bajar la escalera.
Seguía pensando en lo ocurrido, tumbada boca arriba, con las manos detrás de la cabeza.
Le oía y cuando se despide, ella también lo hace levantando la mano.
Vale, gracias. Dice sin mirarle y sin levantarse, aún con los ojos cerrados.
¿Había sido todo un malentendido? No imposible. Había estado claro como el agua. Ella le había ordenado en broma que le trajese un refresco y sin dudarlo lo había hecho. ¿Entonces por qué no se lo creía? Por un momento sonríe de lado, sería divertido tener ese don de manipular a la gente.
Y así pasa tu día, tumbada en la azotea del edificio hasta que comienzas a escuchar los gritos abajo, señal que las clases han acabado y que todos y cada uno se van a su casa de manera, como siempre, desordenada.
Mike aparece por las escaleras, seguido de Terry, que al parecer, lo siguió por su propia voluntad. Ves como el rubio intenta que se vaya de allí, pero él sigue subiendo, con la excusa de que quiere ir a ver la azotea cuando en realidad seguro que se imaginó de qué iba todo esto.
Cuando los dos suben hasta donde te encuentras, se colocan uno a cada lado de dónde estás y te sonríen.
Mike te guiña un ojo mientras te tiende la mano para que te levantes.
Lily se levanta solita de un salto, y se queda mirando a la compañía con una ceja levantada, pero rapidamente vuelve a sonreír.
¡Qué bien! ¡Cuantos más seamos más nos divertiremos! ¿Ha sido entretenida la clase? Les pregunta cogiendo su mochila del suelo y sacudiéndola.
En realidad, tenía pensado ir a pasar un rato con ellos y así poder "trabajar".
El día continuó de lo más monotono... como siempre. Hablas un rato más con ellos, hasta que te quitas de la cabeza que lo que acababa de suceder era algo que tu misma provocabas. Al fin y al cabo, el chico era lo bastante bromista para hacerte creer que le ordenabas y el obedecía.
Pero una vez se fueron a su casa, continuaste con tu vida normal. Estudiar, mirar un poco la televisión, leer, mirar el correo. Es la rutina de cada día.
Aunque hoy hubo algo que salió de la rutina, y eso, aunque al principio te ha asustado, te ha mantenido pensando durante un buen rato... bueno, a decir verdad durante más de una hora, pero eso ya se ha ido de tu cabeza hace un buen rato..
Pero al final te vas a dormir, como siempre, pero en tu cama hay un sobre, un sobre cerrado.
Lo coges y comienzas a leerlo lentamente...
"No me conoces, pero yo a ti sí. Haz lo que yo te diga y saldrás beneficiada. Reúnete conmigo en los columpios del parque ahora mismo, justo cuando apaguen las luces. Llevan varios meses vigilándote y pueden actuar en cualquier momento. Ten cuidado, podrían seguirte. No olvides que el destino sólo avisa una vez."
Lily, como pocas veces en su vida, se queda petrificada y sin ninguna expresión en su rostro. Con la carta en la mano, sale a toda velocidad de su pequeña tienda en el bosque. Si, no era muy difícil haber entrado y dejarle una carta, pero hasta ahora no había pasado. Mira alrededor:
¿Hay alguien ahí? Estaba oscuro y nadie respondía. Vuelve a entrar en la tienda y se asegura que no le falte nada, sobretodo el retrato de su madre. Suspira aliviada al ver que sigue ahí, sonriéndola como siempre. ¿Quién ha sido, mamá? Le pregunta algo preocupada. Luego mira la carta con la misma expresión.
Coge el retrato una última vez y lo besa. Deséame suerte. Más valía que eso fuese una broma. Y si era así, se lo haría pagar al autor. Con la carta en el bolsillo se dirige a los columpios, vigilando continuamente por si alguien la seguía.
Vas caminando hacia los columpios, mirando hacia todos lados a ver si te siguen, pero al parecer, nadie intenta algo parecido. Al poco tiempo llegas al parque donde están los columpios, el cual está completamente vacío. Allí no hay nadie. Ni siquiera se escucha el sonido de los pajarillos. Sin embargo, hay algo que te llama la atención sobre uno de los columpios, y allí te acercas.
Cuando llegas hasta allí, ves una carpeta de cartón con la palabra HUMANS escrita en letra pequeña en la portada. Te agachas, sin dejar de mirar a ambos lados y la abres, para leer su contenido.
Te sorprende encontrar en el interior un informe detallado de tu vida, tus costumbes, amistades, todo lo que posees, lo que te gusta, además de fotos tomadas con cámara oculta en tu tienda, en el colegio y hasta en la azotea con el director. Al final de todo el informe, puedes ver unas palabras escritas a boli que rezan: "Capturar o Eliminar".
¿Pero quién...? Exclama ahorrandose pronunciar las palabrotas en voz alta, al ver que habían anotado completamente todo sobre su vida y eso, no le gustaba ni un pelo. Mira alrededor con más insistencia, pero sigue sin haber rastro de nadie. ¿De qué iba este juego? Interiormente estaba un poco asustada. A ella le gustaba pasar prácticamente inadvertida y ver que era el centro de atención de alguien y que claramente estaba en desventaja, la aterraba.
Se fija en las últimas notas. ¿Capturar o Eliminar? ¿Eso era que trataban de capturarla o eliminarla? Cualquiera de las dos cosas que intentaran, no les iba a resultar nada fácil. "Pelearía" con uñas y dientes si hacía falta.
Se queda unos minutos más ahí esperando al autor de semejante broma, y si no aparece nadie, volverá a la tienda.
Miras una y otra vez desde el lugar donde te encuentras y allí no hay nada ni nadie. El parque al completo está más desierto que el sahara. Mejor dicho, en el sahara hay más gente que en ese estadio.
Ahora no sabes que hacer. Correr a tu tienda, salir de allí de alguna manera...
En este momento te preguntas un par de cosas... ¿Quién puede ir a por ti? Hoy mismo te acabas de dar cuenta que no eres una persona normal, o no eres como creias que eras, y un grupo del que nunca has oído hablar intenta capturarte. ¿Quién ha hablado sobre ti? ¿El chico nuevo? ¿Alguna otra persona? ¿Algún rival?
Todo esto es realmente extraño...
No iba a ganar nada dándole tantas vueltas con tan pocas pistas. Coge el informe con fuerza y echa a correr hacia su tienda de nuevo, como si allí fuese a estar segura. Corre tan rápido como sus cortas piernas le permiten, sin mirar atrás y casi sin aliento llega a su tienda, temblando un poco se asegura de que no haya nada nuevo allí o de lo contrario iba a volverse loca.
Miras a todos lados y no hay nadie. El parque está completamente vacío. Era todo muy extraño, nadie te había seguido, no había nadie allí... por lo menos que tu puedas ver, pero la carpeta llego al columpio de alguna manera.
Sales de allí rápidamente pensando en qué podría estar pasando en tu vida, con tus amigos... era realmente increible como pueden haberte investigado completamente... ¿pero desde cuando te investigan? La primera foto es de hace más o menos seis meses... ¿es qué había alguien que sabía que iba a sucederte todo esto precisamente hoy? Todo esto es muy extraño...
Pero tan metida en los pensamientos ibas, que no te habías percatado de unos tres hombres que te seguían a lo lejos...
Uno de ellos comenzó a acelerar y en pocos segundos se había puesto a tu lado, cogiéndote con fuerza para meterte dentro de una especie de saco de tela gruesa. Lo último que sientes es una aguja que se clava debajo de tu oreja y todo se torna oscuro... muy oscuro...
Lo último que puedes ver antes de que se te cierren los ojos es el logotipo de HUMANS en una de las pecheras de los hombres que te han secuestrado.
Uno mas y cerramos prologo.
¿Qué? Se pregunta cuando notan que la cogen y se la llevan a la fuerza. Empieza a patalear, dar manotazos e incluso mordiscos.
Dejadme malditos idiotas, u os arrepentiréis.. dice cada vez con menos fuerza hasta que finalmente pierde el conocimiento y solo ve oscuridad. Sin embargo, no se le olvidará lo último que ve: el logotipo de HUMANS.