Partida Rol por web

Al abrir la puerta de la posada ambos sentidos, los del oído como los del olfato se saturan con el bullicioso interior. El primero por la concurrida algarabía de un local público a esas horas, con innumerables conversaciones e incluso alguna espontánea tonada desafinada y fuera de lugar, proviniente del contenido de las jarras de cerveza. Además, el olfato se carga con los olores propios del alcohol y las fuertes comidas, mezclado con el tufo de los pelajes cubiertos con el sudor de toda una jornada de trabajo.

Con aire tímido, Tanya se acerca a la barra. - ¿No tendríais una habitación libre para unos miembros de la guardia? - pregunta ligeramente avergonzada, intentando que no se note cómo le llena el pecho de orgullo el referirse a si misma como un miembro de la guardia.

Al momento de pronunciar la palabra "Guardia", una estentórea voz se alza a vuestras espaldas. El tono, emitido por una garganta cascada por el paso del tiempo y a saber qué penurias y maltratos a la misma, te resulta tremendamente familiar.

-¿Guardia? ¿Juraría que cualquier mequetrefilla puede hacerse pasar por guardia?

Tus temores se corroboran al ver detrás vuestro y flanqueado por varios ratones de dudoso pelaje a un ligeramente encorvado ratón con múltiples cicatrices (una de ellas que le cruza un parcheado ojo) y cubierto con una desgastada capa verde de la Guardia.

El instructor Thom te muestra sus quebrados dientes con una sardónica sonrisa...

A Tanya se le eriza el pelo al oír el tono de esa cascada voz. Se gira encogida para encontrarse con el instructor.
- ¡Somos miembros de la guardia! - exclama indignada, aunque no tan fuerte como para sonar amenazadora... o plenamente convincente.

-Hum...veamos...-carraspea mientras hace el gesto de mirar a ambos lados de tí-. Oh, sí, bonita capa de la guardia. De qué color es...¿transparente?

Y estalla en risas acompañadas a coro por las de sus compañeros de mesa.

-Por lo que veo el viejo Dain aún no ha podido hacer gran cosa de este "diamante en bruto"...Jojojo.

Y dirigiéndose al posadero, añade:

-Sé que es lo bastante listo como para dejarse engañar por algo tan evidente, pero ni se le ocurra de darles cobijo en nombre de la Guardia...

El posadero os mira con una mezcla de suspicacia, recelo y una pizca de lástima.

Cuando Thom se ha apartado de la barra, os susurra con desgana:

-Nada de habitación si no podéis pagarla. Deberéis conformaros con dormir en el rincón cuando se hayan ido los parroquianos.

Ruborizada y con los bigotes encrespados, Tanya aguanta la humillación preguntándose qué haría Dain en esa situación.

No, no tengo capa, aun. Pero mis compañeros sí. Y hemos estado ocupados luchando contra comadrejas allá en Walnutpeck. - dice antes de darse cuenta de que le ha traicionado el orgullo.

Estupendo, pues vamos para allá.

PD: ahora que edito la ficha... dormir en un rinconcito de la posada quita la condición de cansada? :3

Eso no es manera de descansar. Como al final no he explotado mucho a Thom, te dejo la condición por el fallo.

Qué duro es ser ratón...