Hace quinientos años San Anuk Schleger un monje de la Orden de Creton descendió a las catacumbas de la Catedral de la Iluminación y ahí encontró al Basilísco Bicéfalo.
VERHU, sea suyo el Castigo y la Glória, la cabeza de la profecía reveló las ESCRITURAS INNOMBRABLES a San Anuk. En sus escrituras todo lo que ha de suceder es revelado con detalle y certeza. Aterrado por la inefable revelación San Anuk Schleger se emparedó en las catacumbas donde sucumbió a la locura y al hambre que lo llevó a roer sus propias y sagradas manos.
Hace trescientos años las ESCRITURAS INNOMBRABLES fueron encontradas y los susurros del Basilísco Bicéfalo oidos de nuevo. Todo lo que en ellas se predijo ha pasado, todo aquello a lo que nos sentencian ha de pasar. Esa es la Primera Exhalación del Credo. Recordad el Credo ahora y en la hora de vuestra Muerte.
El fin del mundo esta cerca. La misma tierra rezuma la podedumbre del cadaver. Nadie ha visto el Sol en décadas. Las noches se llenan de criaturas sin nombre. Los hombres son tentados a la Santidad y la Locura por voces que hablan de otros tiempos y lugares.
Todo habrá de ahogarse al Final de los Días en un bienvenido Silencio. Hasta entonces vivimos atrapados y corrompidos en una FORTALEZA DE DESOLACIÓN.
La Iglesia del Basilísco ha levantado la majestuosa ciudad de Galgenbeck con sus mil catedrales en la tierra. Y en el alma de todos los hombres y mujeres ha edificado el maravilloso palacio de la Verdad que es EL CREDO. Que los tormentos y dolores de la Inquisición caigan sobre aquellos que lo ignoren o mancillen.
Recitad EL CREDO cada mañana y cada noche. Fortaleced vuestra alma y mortificad vuestra carne.
Todo se ha cumplido, todo ha de pasar.
Cuando el número de miserables que malviven en los callejones al pie de las catedrales y en las chabolas que se arremolinan en los niveles más bajos de Galgenbeck se hacen insoportables los Cardenales y Arzobispos decretan una Cruzada Irredenta. Estas expediciones militares comandadas por los más santos de los prelados buscan llevar las ESCRITURAS INNOMBRABLES a los paganos de Schleswig, Kergüs, Alian y los otros confines de la tierra.
Ahora bajo el mando del Cardenal Arzobispo Su Santisima Eminencia Felban Goberiol de la Orden de la Sangre Derramada una nueva cruzada se pone en marcha. Una larga serpiente de despojos humanos serprentea alejandose de Galgenbeck, hambrientos, sucios y henchidos de fervor o desesperación llevan SU PALBRA a los confines de la tierra.
Esclavistas, nobles rebeldes, pálidos horrores de la noche y bestias rabiosas acechan a la Cruzada. Sus miembros mueren a cientos en ataques suicidas y caen como moscas ante el hambre y la enfermedad.
¡Quan gozosa es su aflicción! ¡Quan maravilloso el dolor que inflingen en los herejes!
Atended almas descarriadas. Aguzad el oido a las nuevas que llegan de la XXIII Cruzada Irredenta. Que vuestros corazones se llenen de gozoso terror y desgarradora alegría ante las ofrendas de sangre vertidas en SU nombre.
Sabed que la ciudad de Nifhel fue devuelta en una noche de purificador fuego al abrazo de la Amantisima Madre Iglesia. De los gritos de cinco mil herejes crucificados nace un salmo de honra al Basílisco Bicefalo. De las cenizas de miles de niños abrazados al pecho de sus madres infieles brota una cosecha de Dolor.
Sabed también que dos SUS SIETE SEÑALES ya se han revelado ante nuestros indignos ojos. Recorad la PRIMERA EXHALACIÓN de nuestro Credo: todo lo que el Basilisco Bicéfalo profetizó se ha cumplido. Todo aquello con lo que nos sentenció ha de pasar.
La primera de SUS SIETE SEÑALES ha sido la destrucción de ese engaño, de esa obtusa ilusión que es el color de todas las cosas. Ahora nuestros ojos gozosos solo contemplan los grises, ocres y negros que son la mortaja de este mundo que ya solo aguarda que el FIN DE LOS DÍAS.
También para gozo de su misterio ha acaecido la segunda de SUS SIETE SEÑALES y la muy piadosa, santa y sagradisima ciudad de Galgenbeck ha sido vaciada de esa ofensa que es la vida. Todos sus habitantes han desaparecido sin que quede de sus tristes vidas rastro alguno que perturbe la santidad de ese mausoleo y templo a SU gloria. Incluso hay rumores de que en sus vacias calles y entre las altas torres de sus silenciosas catedrales otros perturbadores milagros están ahora mismo sucediendo. ¡Glorificaos en la ignorancia! ¡Querer descrubrir tales misterios sería pecaminosa herejía!
Mientras en el sur la XXIII Cruzada Irredenta asola el reino del pecaminoso Fathmu IX con el hambre que roe el alma y el hierro que marca y hiere. ¡Que gozosos regalos que nuestra Amantisima Madre Iglesia reparte por el mundo! Si la masacre de Nifhel fue gloriosa esperad las bienaventuradas nuevas de los tormentos y ejecuciones que se producirán cuando caiga la ciudad de Jotna. Los devotos hijos de la Amantisima Madre Iglesia no pueden esperar el momento para morir asaltando los muros de Jotna o excavando profundas minas para derribar sus muros.
¡Gloria! ¡Gloria y Dolor!