Con lentitud, con frio, hambre y enfermedad la enorme serpiente humana que es la Cruzada avanza hacia el sur. Algunos dicen que las tierras de Schleswig son algo más cálidas y sus ciudades ricas en botín. Otros afirman que eso son estupideces, que el Rey Fathmu IX es un tirano que dobla a sus campesinos con tributos terribles para saciar un hambre infernal. Que los nobles barones de Schleswig son más violentos y estupidos que un jabalí en celo y que el hambre arrasa los caminos del Sur.
Tras los soldados una horda de carros, carromatos y miserables a pie les sigue. Son los vendedores de pan, armeros, prostitutas, lavanderas, huerfanos y viudas que siempre siguen a los ejércitos.
Sea lo que sea la verdad no os podeis ahora preocupar por ello. Marchais bajo la mirada, y las fustas, de los sargentos. Oyendo las prédicas de los capellanes que os hablan de lo glorioso de vuestro Dolor. De como cada uno de vosotros que cae muerto de hambre, infección o brutales palizas es un poema para el Basilísco Bicéfalo. Aunque es dificil pensar en el más allá cuando durante las noches hiela y cuando por la mañana muchos no abren sus ojos y sus endurecidos cadaveres son el banquete matutino de perros y cuervos.
Por el camino algunos pueblos os reciben enviandoos vivandas. Otros cierran sus puertas y son escarmentados. Se habla de que los barones de la marca de Shleswig se están preparando para pararos antes de que entreis en el reino. Los vientos traen susurros de próximas batallas y matanzas. ¿Llegareis a morir ahí? ¿O será vuestra indigna sepultura el margen del pisoteado camino?
Motivo: El tiempo
Tirada: 1d12
Resultado: 9 [9]
Motivo: Semanas de camino
Tirada: 1d6
Resultado: 4 [4]
Motivo: Tribulaciones de la hueste
Tirada: 1d20
Resultado: 3 [3]
Podeis postear Agnes, Mirtle, Phiel y Zenon vuestras fases de campamento. El resto no es necesario (llegais vivos al siguiente epígrafe).
Son cuatro semanas de raciones. Adicionalmente haced una tirada de Dureza DR 12 para no sufriir por el intenso frío.
Todo lo que el basilisco bicéfalo profetizó se ha cumplido. Todo aquello con lo que nos sentenció ha de pasar.
El Fin de los Días se acerca imparable. Las ESCRITURAS INNOMBRABLES son exactas hasta el último trazo. Este mundo decae y muere. Las palabras hace mucho susurradas son hoy verdad.
Salmo VI Versículo 63 Anthelia cumplirá su voluntad y todo el color se perderá del mundo
Salmo I Versículo 11 Y la Ciudad será vaciada. Y de aquellos que en el vacío moraban nada más se ha de saber.
Todo lo que el basilisco bicéfalo profetizó se ha cumplido. Todo aquello con lo que nos sentenció ha de pasar.
Motivo: Un desolador y próximo fin
Tirada: 28d20
Dificultad: 1=
Resultado: 19, 16, 20, 6, 16, 5, 17, 17, 6, 4, 12, 3, 4, 14, 16, 7, 19, 14, 12, 6, 15, 6, 1, 1, 16, 6, 16, 4 (Suma: 298)
Exitos: 2
Motivo: Primera Miseria
Tirada: 2d6
Resultado: 6, 3 (Suma: 9)
Motivo: Segunda Miseria
Tirada: 2d6
Resultado: 1, 1 (Suma: 2)
Una fría mañana cuando abriis los ojos sentiis una profunda tristeza. Mirais a vuestro alrededor y podeis ver como hoy los colores de todas las cosas parecen haberse atenuado. Los rojos son menos vivos, los amarillos menos alegres, los verdes menos esperanzadores.
Como una enfermedad un gris informe avanza desde el oeste. Poco a poco, día tras día, los colores se apagan hasta que ahora vuestro mundo es un retablo de MISERIA y desolación en apagados tonos grises y ocres. Hasta la vibrante sangre ha perdido su brillo y cuando mano lo hace con el color del agua sucia.
Os alejais más y más hacia el sur. Las llanuras de las tierras de la Iglesia dan poco a poco paso a las suaves colinas de Schleswig. Una mañana un rumor corre como un espasmo por toda la hueste. Dicen los mejor informados que a anoche un mensajero llegó. Agotado y moribundo dijo haber reventado trece caballos en otras tantas jornadas de galope desatado. Antes de morir murmuró que lo imposible ha pasado. La gran ciudad de Galgenbeck está ahora vacía. Sus catedrales, plazas, monasterios y abadías son ahora cavernas desoladas. Ni un paso, ni un aliento, ni una risa cruel ni un llanto desesperado rompen ahora el pesado silencio. No hay cuerpos, ni señales de violencia que expliquen su paradero. ¿Es eso cierto? ¿Que puede haber pasado?
Claramente el Fin de los Días se acerca.
Mirtle odiaba las marchas. Toda su vida andando de un sitio para otro no la habían acostumbrado a caminar durante días en condiciones tan pésimas. Encima cada vez llevaba peor el frío.
En este tiempo, lo poco que habían saqueado le servía para comer y poco más. No paraba de preguntarse cuándo llegarían, y sobre todo si esta vez se podrían quedar. Anhelaba el calor de un hogar... y de una familia. En estos últimos meses su lo más parecido a una familia era la Cruzada, pero sólo era dolor y oscuridad. Al menos había cogido algo de confianza con Agnes, Phiel y Zenon.
Aunque Todavía recordaba con sentimientos enfrentados el reparto que hicieron del botín. Nunca llueve a gusto de todos, acabó diciendo, y notó algunas miradas hostiles. Rememoró ese momento:
—Bueno, ya que Agnes ha huído, tenemos más que repartirnos. Su plata para nosotros.—dijo mientras repartía el dinero— Además, hemos cogido una daga y una botella. Está claro que yo debo quedarme con la daga, pues soy una doncella y es un arma claramente femenina.—mientras esperaba su reacción, Mirtle sacó de su zurrón una botella con un líquido anaranjado y lo puso delante de ella— Os ofrezco en compensación esta botella de espirituosa bebida.
Motivo: Frío
Tirada: 1d20
Dificultad: 12+
Resultado: 9 (Fracaso) [9]
Motivo: Saber qué hay en la botella
Tirada: 1d20
Resultado: 6 [6]
Asco, mucho asco y frío, mucho frío. Phil estaba convencido de que se le habían caído un par de dedos de los pies en aquella larga y helada marcha.
Había sobrellevado el tiempo como podía. Casi siempre cazando su propia comida, que por suerte para él, siempre acompañaba a la compañía. Correteando entre inmundicias y mordisqueandolo todo. Pero cada vez las alimañas escaseaban más, y estaba seguro que era por aquel maldito frío.
- No quiero la daga, te la puedes quedar. Los tres supervivientes del asalto estaban sentados junto a algo que parecía una hoguera, repartiéndose el botín que habían saqueado no hacía tanto.
- Que contiene la botella? Preguntó mientras la cogía y observaba el líquido de su interior - Es para beber? Porque a mí me recuerdan a meados de burro... No saben del todo mal... Pero poco provecho le sacas.
Motivo: Frio
Tirada: 1d20
Dificultad: 12+
Resultado: 8(+1)=9 (Fracaso) [8]
Mirtle se embolsó la daga. Era un arma realmente excepcional, había algo en ella que no era de este mundo. El metal parecía pulsar con una energía propia. Por un momento se planteó ¿sería mágica? Sabía que existían armas con propiedades mísitcas. Armas sagradas o profanas con capacidades que desafíaban la imaginación. Y peligros para el alma inmortal.
Por lo demás Mirtle logró vender parte de lo que había rapiñado en Nifhel y pudo volver a llenar su bolsa. Además hizo algo que algunos idiotas dicen que tiene más valor que la plata: un amigo. Se trataba de Calzón, un pequeño pillastre de ocho años. Hijo de una prostituta fallecida al poco de nacer él se vanagloriaba de ser el chulo más joven de la cruzada. Su higiene física y moral era dudosa pero era un tipejo con recursos. De vez en cuando rapiñaba de sus clientes cosas de interés que regalaba a Mirtle. La última semana le había traido un paquete de manteca, el juraba que de cerdo, era algo asqueroso pero nutritivo.
Por su parte Phil también colaboró con viudas y huerfanos. Concretamente a la viuda y los tres huerfanos de Jorund el Tuerto, un viejo mercenario con el que se reencontró después de años y que en el pasado le había ayudado. Así pues cuando Jorund falleció de una horrible infección Phil hizo lo esperable. Dió una paliza a su hijo mayor y junto a otros carroñeros saqueó su carromato. Se hizo con una buena maza con la que abrir craneos.
Zenón por su parte logró no meterse en problemas. Lo que ya era mucho. Pero en los últimos días terribles pesadillas atenazaban sus sueños. Veía una llama que ardía negra, una llama malvada y artera. La clase de llama que presagia la muerte.
Motivo: Daño frio
Tirada: 1d2
Resultado: 2 [2]
Motivo: ¿Que ha robado Calzón?
Tirada: 1d12
Resultado: 11 [11]
Motivo: ¿Que se embolsó Phil?
Tirada: 1d8
Resultado: 8 [8]
Todas las fichas actualizadas.
Fin del Interludio.