Partida Rol por web

Tras que el cocinero terminara de hacer la comida y me diera un plato a mi, me quedé confundida, la ira había desaparecido para ver con ojitos vidriosos la comida - Guau, es... la primera vez que me hacen comida, y encima comida de verdad y bien cocinada - La huelo por encima - Y encima huele muy bien... Desde luego si fuera por la comida este tipo, Bee, no tiene ni un apice de pirata. - Gr-gracias - le agracecí al cocinero mientras empecé a tomar un poco - Delicioso - Por dentro ya me estaba deleitando por el sabor.

Pero cuando el luchador se presentó y dijo aquella afirmación de robar un barco, todo volvió a la realidad. Suspiré por la nariz pues por la boca estaba masticando otro trozo - Ese es el problema. - Empecé a comentar - ¿Te crees que no lo he intentado ya? Para una sola es facil, siendo chiquitaja como soy, y agil, puedo meterme en los recobecos más escondidos, y aunque sea fuerte, se que un enfrentamiento directo contra varios marines es peligroso. Y esa es la cosa, siempre que estaba a punto de conseguirlo, los marines empezaban a seguirme. Es un verdadero incordio. - Luego miro de repaso al resto parandome en Dante - Sin olvidar que en uno de esos intentos quien me jodió el robo de un barco fue alguien que se encargó de destruirlos. - Obviamente me refería a el - Aún así, aunque intentemos robarlo si no hay tenemos dos problemas, siendo tantos no podemos optar por el sigilo y escondernos, y aunque seamos tantos ellos son un ejercito, y su general... Bueno no sé donde estará, pero al tener un Akuma no mi con nosotros no creo que se quede de lado. - Afirmé ante la clara y filosa situación ante la cual estabamos si realmente las palabras del carpintero eran ciertas y Dante no tenía un barco

Me llega el delicioso olor a comida, asi que me acerco a ellos, me siento y cojo un plato, ¡está delicioso!

- ¡Gracias! Está riquisimo.

Mientras tanto no puedo dejar de pensar en las conversaciones que han tenido, empiezo a temer que el Capitán nos esté engañando y verdaderamente no tenga un barco, como piensan los demás. Si es así, va ser difícil salir de allí, como bien ha dicho Hitomi robar uno es complicado, los marines son fuertes y los tienen vigilados.

De paso me fijo un poco en los demás, vamos a ser un grupo peculiar, espero que al menos acabemos llevándonos bien y confiando unos en otros, si no no se como vamos a sobrevivir... Aunque las primeras impresiones no han sido muy buenas, se han peleado entre ellos casi todos. En fin, solo queda esperar y ver que ocurre.

-¿Acaso yo les mentiría?.- Respondió sonriente a las preguntas sobre si tenía barco o no.

Al recibir su plato de comida, le agradeció a Bee con una sonrisa.-Creo que mejor cocinero no pude encontrar.-Fue lo que dijo mientras miraba la comida. No necesitaba probarla para saber lo deliciosa que estaba, pero claramente lo hizo, tenia hambre.

Al darle el primer bocado, se quedo un par de segundos masticando para luego devorar el resto. Su plato quedo totalmente limpio en unos segundos.

Ha pesar de la desconfianza que aun le tenian algunos de sus tripulantes y de que había algo de preocupación por el barco, el capitán decidió ser directo.

-No estare todo el día hablando del barco, vamos de una vez...-

Luego de esperar que todos terminaran su comida,o que al menos, la mayoria lo hiciera, Dante los llevo a todos al muelle intentando mantenerlos en silenció. Por alguna extraña razon, todo el muelle andaba sin luz, tal vez una falla eléctrica.

El barco tenía un tamaño pequeño, pero no tanto. Algunos cañones y las velas en buen estado, o al menos así parecía. No estaba del todo limpio y tenia algunos daños, por lo cual no estaba nuevo, pero podía flotar sin problemas.

Dante se acerco con todos al barco y luego los miró para decirles el plan.

-Bien, aunque sea mi barco, es probable que los marines no nos quieran dejar salir así como así, por lo cual les pedire que hagan esto rápido.- Se tomo una pausa para luego seguir explicando.-Hitomi, tu ve al timón y saca el barco de aquí, cuando nos alejemos un poco podras colocar el rumbo con mas calma. Kaito y Kroo, a las velas. Denna, tu y yo nos encargaremos de las cuerdas. Bee... Tu ve a la cocina y prepara una cena con lo que tengas y lo que encuentres, algo grande para celebrar la salida de este lugar.- Tras decir eso, los mira a todos rapidamente.- ¿Entendido? ¿Si? Ok, vamos.- No dejo que nadie dijera absolutamente nada pues de una vez se subió al barco de un salto para luego tirar un resistente puente de madera para que suban con mas facilidad.- Rápido rápido rápido.- Repetía algo acelerado el capitán mientras corría a su lugar en las cuerdas, comenzando a atarlas esperando que Denna lo ayudara mientras confiaba en que el resto de la tripulación hicieran lo que les pidió.

Al fin Dante se hacía voz indicando ir al barco. Era  si acaso la mejor noticia... segunda mejor noticia, la primera fue la comida, la cual una vez terminé acabé devolviendo el plato al cocinero. - Adelante enseñanos el barco - Dije esceptica, pero para mi contra si que parecía, al menos, tener un barco, o sino, saber cual robar. Por desgracia todavía quedaban cosas por atar - Humm... por mucho que sea un barco si lleva tiempo aquí seguramente le faltarán algunos detalles, como comida, utiles y puede que hasta... - Mis pensamientos se vieron cortados por la imperiosa necesidad de Dante de salir de aquí dandonos ordenes a cada uno.

Intenté poder intervenir en esta locura - Oye Dante espera un momento - Volví a ser interrumpida por la petición de agilidad del mismo al ponernos el tablon para subir - Está bien como quieras... - Dije subiendo poco a poco al tiempo que miraba el nombre del navio, obviamente todos lo llevaban sino en la parte trasera en la delantera y quería saber como se llamaba.

Una vez subida no podía creer que estuviera ahora más cerca de mi sueño aquel pisar de la madera me lo confirmaba, pero era increible, el barco era mejor subida en el. Entonces cuando todos estuvieran subidos dije aquellas palabras que deseaba decir por primera vez en mucho tiempo mientras me ponía a mandos del timón - DESPLEGAD VELAS, LEVEN ANCLAS. Vamonos de esta maldita isla - Me aferré entonces al timón para dirigirlo no estrictamente recto pero lo más lejos posible del puerto. - Lo siento Dante, te robé la frase - dije con un pequeño guiño picaro

-C*munch*laro que *munch* para u*munch*na pescadilla co*munch*mo tu es imposible *glup* ¡ahh! estaba bueno- mientras hablaba con la chica comía lo que Bee me había ofrecido.

-Pero con tanta gente podemos abrirnos paso a la fuerza...- pero no parecía que fuese a ser necesario, el capitán realmente tenía un barco.

Luego de caminar en relativo silencio durante un tiempo, llegamos al muelle -Bueno, es lo suficientemente grande para que quepamos todos-

No era un experto en navegación, pero tampoco lo necesitaba ¿no? solo había que tirar de las cuerdas hasta que las velas estuviesen izadas.

-A todo esto ¿adonde nos dirigimos?- había aceptado el mando de este capitán, ya me había montado al barco y estaba izando las velas, y no tenía idea de cual era nuestro destino, si es que lo había.

El plato no se lo devolví a Bee en aquel momento, sino que se lo estampé en la cara a Kroo. - Y ENCIMA ME LLAMA PESCADILLA, ME DA QUE ME CARGO A ESTE ANTES QUE A DANTE. - ¡SOY UNA DE LAS MEJORES LADRONAS DE LA ISLA GALLITO! - Quizas de tanto cabreo solté más información de la que debiera. Pero ahora sí ibamos hacia el barco

-¡Pirata seré! ¡JAR JAR JAR! ¡Pirata seré! ¡JAR JAR JAR!- El tragaldabas iba cantando una improvisada canción que constaba de una única frase, mientras se balanzaba de lado a lado al son de la música. Era claro que estaba alegre mientras caminaban rumbo al barco, pues ahora estaba más cerca de convertirse en un héroe pirata y vivir infinidad de aventuras, tal cual lo relataba la anciana Sho en su aldea.

El gran Bee aplaudió un par de veces cuando vió caer el tablón que le ayudaría a subir al barco y se apresuró a abordar. El tablón emitió un quejido lastimero debido al enorme peso del gordinflas. -
-¡A la órden capitán!- Exclamó emocionado llevándose la mano a la frente en un patético intento de hacer un saludo militar -¡JAR JAR JAR!... ¡JAR JAR JAR!- Seguía con la tonada mientras se dirigía a la cocina del barco y descargaba la enorme mochila que portaba. Ahora era momento de empezar a organizar su sitio de trabajo, ubicando parrillas, hornos y todos los implementos que estaban dentro de la mochila y los acomodaba junto a los instrumentos de la cocina. Ubicó el refrigerador, la despensa y todos los anaqueles que habían mientras iba familiarizándose poco a poco con lo que ahora iba a ser su nuevo hogar.

Puedes hacer un tiro de suerte para encontrar ingredientes o otras cosas por la cocina.

Tirarias el dado en Solo para Director y yo te diría el resultado, sencillo.

Dante tardó varios tirones y enredos para lograr atar como se debe sus sogas. Las otras sogas seguían sin atar.

El timón se puso duro, pero al final, Hitomi pudo colocarlo parcialmente recto.

Kroo no tuvo que esforzarse mucho para abrir las velas secundarias. La principal(la mas grande) seguía cerrada.

Seguí a todos en silencio, y al poco llegamos al puerto, al final parecía que no nos había mentido, tenía un barco o sabía cuál debíamos robar. Lo importante es que íbamos  salir de allí.

Por fin el Capitán parecía comportarse como tal y tras escucharle dar órdenes y ver como todos le hacían caso, me puse manos a la obra también, en mi caso con las cuerdas, no parecía muy difícil eso de atarlas.

Mientras lo hacía solo podía pensar en todo aquello que el mar nos ofrecía, las aventuras que teníamos por delante y todos los sitios que visitaríamos, estaba emocionada y deseosa de partir.

El carpintero se mantuvo alejado del grupo mientras esperaba que se dirigieran al muelle, lugar donde tuvo que reunirse de nuevo con ellos para poder escuchar el plan.

La manera en la que actuaba Dante le causaba mas desconfianza de la que ya tenía. Si, podrían verlos los marine, ¿pero porqué tan nervioso para subir a su barco?. Ademas, el simple hecho de que el capitán tuviera un barco le causaba cierta rabia pues eso significaba que estaba equivocado. Definitivamente: El capitán siempre se las arreglaba para caerle mal.

No pudo quejarse de la orden del capitán, pues enseguida este se subio y comenzó a atar las cuerdas.

-...- Estaba a punto de resaltar el hecho de que si el capitán había sido abandonado por sus tripulantes, ¿como rayos tenía un barco?. No pudo hacerlo, así que esperaría hasta estar en el mar o hasta que la duda se respondiera sola.

Subió a la vela principal y tras un pequeño intento, esta se abrió y comenzó a atrapar el viento que soplaba en la noche, haciendo que el barco se moviera a una buena velocidad para salir.

Tras varios jalones y nudos, Denna pudo atar sus cuerdas.

La vela principal se abrió sin problemas gracias a Kaito.

El barco se movía sin problemas, alejandose de la isla poco a poco. La aventura estaba a punto de comenzar, algunos estaban un paso mas cerca de sus sueños, mientras otros estaban un paso mas cerca de matar a la tripulación o escapar en una barca, lo que pasara primero.

La sorpresa fue cuando el faro de la isla giro su luz hasta el barco, iluminandolo, permitiendo que todos con buen ojo en el muelle pudieran ver el barco y a los tripulantes que afuera se encontraban. Pero lo que mas resalto, fue la pintura y el simbolo que tenía el barco en la vela principal. Era-Un-Barco-Marine.

Los marines del muelle no tardaron en subir a sus barcos para abrir sus velas e intentar salir, pero misteriosamente, las velas del resto de barcos estaban agujereadas, por lo cual no saldrían del muelle.

-¡Vaaaaaaaamonos!.- Dijo alegre el capitán mientras levantaba los brazos, observando a los marines quejarse en el muelle por no poder salir.

El barco no tardo en alejarse de la isla. Ya estaban seguros y no había nada interesante para ver alrededor ademas de agua y las estrellas.

El capitán fue hacia el timón y miro a la navegante.

-No es mal momento para cambiar el curso, ¿no crees?.- Pregunto sacando de su capa un Log Pose el cual ofreció a Hitomi.

Ya estaba mas calmado. Ya había salido de la isla y no tenia de que preocuparse, pero sabía que alguno de sus tripulantes lo bañaría en preguntas tarde o temprano.

La cocina estaba en buen estado. Habían varios gabinetes con algunos ingredientes, y el refrigerador tenía varias botellas de sake.

El horno no parecía nuevo, pero al menos estaba limpio. Igualmente, un pequeño instinto de cocinero te hacía desconfiar de las salidas de gas, pues algunas se veían agrietadas. Era una muy buena idea abrirlos todos de uno en uno para ir probando que ninguno tenga una fuga, pues de ser así, alguien podría salir lastimado.

El aire era limpio, y habían varios barriles en la esquina, probablemente con mas sake. El color de las paredes y el simbolo que decoraba la puerta te permitieron saber que era un barco marine, aunque no se le debería dar mucha importancia, pues por la celebración que se escuchó del capitán, era muy probable que ya se hubieran alejado de la isla sin problemas.