En el salón de tu mansión, sobre una mesa, descansa el libro que el Príncipe te entregó. Sus reflejos dorados y su antigua encuadernación desprenden un aroma extraño. Bajo, en la puerta, te espera Stanis Fots, vástago Tremere de la ciudad, y encargado de llevar el antiguo taller que se encuentra al sur de tu zona de influencia.
Flora se encuentra del todo maravillada con el extraño volumen, de origen Giovanni, de Su Familia.
Sonríe con orgullo y se dispone a abrirlo para echarle un vistazo cuando es interrumpida por uno de sus criados, Vincenzo.
Le mira severamente, realmente fastidiada ante tal interrupción.
El criado se encoge un poco al ver la expresión de su señora y mira al suelo.
-El Sr.Fots la está esperando abajo...
Flora se levanta del mullido sillón.
-Está bien, está bien... Guarda esto. Es una reliquia así que YA SABES cómo hacerlo- le tiende el libro, a sabiendas de que se encargará de situarlo en un reposalibros con vitrina en alguna de las salas del sótano, a las cuáles sólo se accede mediante mecanismos ocultos.
Alisa su ropa y su cabellera según desciende por la escalinata de mármol hasta que finalmente se encuentra con el susodicho Tremere. Le sonríe con cierta amabilidad, intentando imaginar que es de su Familia, pues así debería comportarse un Tremere con otro.
-Buenas noches tenga, Sr.Fots. ¿En qué puedo ayudarle?- pregunta educadamente, con tono suave y tranquilo.
Vincenzo ya se ha encargado de dejar pasar al Tremere al recibidor, en el cuál hay varios sillones realmente cómodos y, al parecer, de diseño.
*Taller de qué..?
El señor Fots es un viejo usurero, demasiado ocupado en llenar su bolsillo cómo para preocuparse de cosas triviales. Así que su visita es urgente. Y más aún si hacemos caso a su mirada.
-Mi señora, es terrible. Han asesinado a mis ghouls, a todos. Incluso a mi amada Prtha, es terrible. Y hay un mensaje, para el Príncipe...
Baja la cabeza, visiblemente aterrorizado.
Un Taller de compraventa de Mercancia. Todo tipo de trastos. Tambien es un usurero y un prestamista.
-Está bien, intente tranquilizarse, encontraremos a los culpables...- hace un ligero movimiento de cabeza mirando a Vincent, el cual sale de la mansión en busca de alguno de los vehículos.
-¿Tiene idea de quién podría haber hecho algo así? Quizá alguien al que no coincidió un préstamo, enemigos...- le observa inquisitivamente mientras te guía fuera del porche, bajando las escalinatas hasta el camino del jardín que une la salida con la propia mansión.
-De todos modos tendremos que comunicárselo al Príncipe. Sobretodo si dice que hay un mensaje para él...¿de qué se trata exactamente?- lo cierto es que siente bastante curiosidad por ese mensaje en concreto y no quiere perderse la oportunidad de saber cuál es.
El vehículo frena junto a ambos cainitas y Vincent les abre la puerta, para después volver al asiento de conductor y arrancar.
-Es un mensaje que no puedo leer, está... está escrito con sangre y no lo entiendo, ¡¡¡te juro que no lo entiendo!!!
Esta tremendamente asustado.
¿Escrito con sangre y un Tremere no podía entenderlo? Maldito estúpido... Disimula con extrema brillantez su disgusto por la respuesta y alisa su falda una vez sentados en el amplio coche.
-¿Por qué no me deja verlo? Tal vez consiga descifrarlo...- arquea ligeramente al ceja, pero enseguida vuelve a bajarla, brindándole una expresión apacible y tranquila.
El vehículo avanza con velocidad, Vincent es un experto conductor y de hecho ya están a escasos minutos de llegar de nuevo al Castillo. El Elíseo.
El tremere baja la mirada avergonzado. Estás a las puertas del Eliseo y a él no le está permitida la entrada.
-Espere aquí con Vincent, le protegerá bien, además este sitio es seguro... Intentaré no tardar demasiado. Si lo prefiere le llevará hasta su refugio- asiente más para sí misma que para él y sale del vehículo mientras el ghoul apaga el motor, observando con seriedad al Brujo que tiene sentado detrás a través del retrovisor central.
Cuando empieza a subir los escalones del castillo, Flora entorna los ojos y niega con la cabeza. El maldito Tremere estaba demostrando falta de respeto al no haberle enseñado el mensaje, y pretendía que el propio Príncipe se desplazara por él... Duraría poco si seguía con esa mentalidad.
Empieza a andar sin demasiada prisa por los largos pasillos del castillo, el sonido de sus zapatos retumba lo cuál provoca que alguno de los sirvientes del Elíseo se presente enseguida ante ella.
-Busco al Príncipe, es algo urgente... ¿Se encuentra aquí todavía?- pregunta mientras se cruza de brazos, mirando distraidamente un enorme mural medieval.
Te conduce de nuevo a la sala en la que viste al Príncipe. Está sentado, al parecer leyendo un libro.
-Dime querida, ¿qué te trae por el Eliseo? ¿Algún tema que tratar? ¿Puedo ofrecerte algo?
-Al parecer ha habido un...altercado -camina calmadamente hasta quedarse delante del escritorio y apoya una de sus manos en el respaldo de la silla en la que debería tomar asiento.
-Stanis Fots se ha presentado en mi casa bastante alterado. Al parecer han matado a todos sus ghouls y han dejado algún tipo de mensaje extraño para usted, pero no me ha facilitado más información...- dicho esto frunce ligeramente el ceño, claramente ofendida por ese detalle, pero cuando continua su rostro vuelve a estar sereno.
-Su intención es poder reunirse con usted personalmente. Si lo cree conveniente, por supuesto -mientras espera una respuesta, sus ojos se desvían con disimulo a la portada del libro que estaba leyendo el Príncipe hace un momento.
-Bueno, entonces que pase -el Príncipe pone una sonrisa e conformidad.- Necesitamos que los informes sean de primera mano, así nos es más fácil recibir las noticias con tiempo.
Espera a que conduzcan al ghoul.
EL texto del libro está en un idioma que desconoces. Aunque consigues leer "Sêck mit Derroënd"
Posteo lo siguiente en un rato, que he de irme al curro. No pongas nada.
Fots avanza a paso ligero y al llegar se postra a los pies del Príncipe.
-¡Mi señor, son ellos, han vuelto! ¡Die Zaster! ¡Mein gott, han dejado un mensaje para usted!
-Tranquilo mi buen Fots, ahora, tranquilamente y sin titubeos, dime que decía el mensaje.
Fots tiembla, buscando tu mirada, que denota enfado y frustación por su anterior exigencia.
-Decía "Te Deum miserate, segurate ínsula et portis et cum daimonion salvate voce. Intergo daimonion un laude Princeps Varyslav Dermanov"
El Príncipe hace un gesto y manda a un ghoul que se lleve a Fots. Mientras se gira hacia ti.
-Permanecerás aquí, al igual que todos los Primogénitos. No saldrás, no lucharás y sobre todo obedecerás mis órdenes -está visiblemente alterado y muy, muy enfadado, sus ojos son más rojos que de costumbre- y no se entablará combate hasta que yo lo ordene. ¿Queda claro, querida?
Vaya tela, mola eso de inventarse el latin xD
Flora ladea la cabeza, arrugando un poco la nariz cuando Fots empieza a hablar en nada más y anda menos que latín. Casi parece una de esas absurdas películas de profecías de la tele... y eso que tampoco ha visto muchas.
El Tremere se retira y ella se queda dubitativa pero el Príncipe sigue hablando así que se queda de pie cómo estaba.
Arquea mucho ambas cejas al notarlo tan enfadado, en realidad sin saber el motivo exacto para ello.
-Claro cómo el agua mi queridísimo Dermanov...- sonríe de forma casi misteriosa, cómo si esa situación, por algún motivo, le resultara interesante o divertida, quién sabe -Supongo que no me va a explicar de qué va todo esto... ¿sabbats?- pregunta mientras toma asiento en la silla, de lado. Apoyando su blanca y sedosa mano en el respaldo mientras no le quita los ojos de encima.
-Mi querida Flora, al parecer una manada Sabbat ha tenido el desliz de introducirse en mis dominios. Cómo comprenderás, es imprecindible actuar con toda la fuerza de la que dispongamos. Así que mejor aquí.
Su rostro ahora refleja una tranquilidad sólo rota por el brillo aterradoramente rojizo de sus ojos.
-Ahora, si eres tan amable, demos la bienvenida a los otros miembros de la Primogenitura, toma asiento por favor.
Sale de la sala, en busca de los demás.
-Una manada Sabbat, qué interesante...- se relame con una sonrisa maliciosa. Si se les va a permitir acabar con ellos pueden ser unos trofeos realmente interesantes con los que investigar nigromancia, con los vástagos suele resultar más difícil...
-Esperaré aquí pues- se gira hacia delante obedientemente, contemplando el enorme escritorio de roble mientras se limita a entrelazar las manos en el regazo con un aspecto de lo más recatado.
*Pues me espero... Master selecciona al PNJ! XDD