Partida Rol por web

El cuaderno de Tiffany estaba lleno de bocetos. De árboles, de animales, de piedras... Había una sección particularmente interesante para Viviane. La mayor parte de los personajes los conocía. Ella los había creado. Eran parte de las historias que habían pensado en crear juntas, para los cómics y los relatos ilustrados. Parecía que había continuado con el trabajo pese a su ausencia.

En cuanto a su manada, Ismene parecía habérseles unido, o al menos eso vio ella desde la distancia.

 Hécate miró a Kate, nerviosa, esperando a que hablase. Inconscientemente bajó la cabeza, mostrando el cuello y evitar sostener la mirada de Ismene. Sabía que no era su lugar el contestar... al fin y al cabo ella era práticamente la omega de la manada.

Al ver acercarse a Ismene, Kate sonríe instintivamente. Es casi un acto reflejo ante su mentora, pues desde que la rescatara en cierta aciaga noche, había aprendido mucho de ella y sentía un profundo respeto y cariño por la Furia. Sin embargo agrió el gesto ante la pregunta, y señaló al suelo, a los cepos.

- Lo encontramos malherido en uno de esos cepos mientras volvíamos de cazar. El otro lo encontramos algo más allá, al rastrear la zona. Edgar lo curó y nos lo hemos traído, ya que parecía estar solo y abandonado. Viviane ha ido a avisar a los ancianos. - Resumió la joven, clara y concisa como acostumbraba. Miró a Ismene, como preguntándole qué opinaba ella al respecto.

Ismene gruñó perceptiblemente. No como un lobo, claro, pero imitando el mismo gesto y emoción.

-Hijos de la gran puta... Joder. ¿Por qué será que las mujeres nunca hacen esto? ¿Alguna vez habéis visto a una mujer cazando? No, ¿verdad? Son siempre los putos cazadores con gorros de franela y pinta de putos rednecks.

Se agachó para ver al lobezno, que gimió asustado por la oleada de Rabia que emanaba de la Furia Negra.

-Es un Pariente, seguro. Probablemente la cría de alguna de nosotras. Las manadas de la zona están todas emparentadas con Garou...

Viv frunció el ceño con disgusto al ver todo aquello. Notó la Rabia de forma similar a como lo había hecho su madre, aunque en menor medida. No es que Tiffany hubiese sido su amiga del alma, pero aquellos personajes eran más suyos que de ella, o así lo sentía, y no creía que tuviese derecho a seguir con aquel proyecto. ¿Qué les habrían contado en la escuela sobre su ausencia?

La Ragabash cerró el cuaderno de golpe, lo guardó en el bolsillo y se unió a sus compañeros sin pararse a pensar mucho en ello. En el fondo era una chiquillada y no tenía más importancia.

- Uy, pues lo siento pero no puedo darte la razón. - le dijo a Ismene, pero con la vista fija en el lobezno que llevaba en brazos, en parte pensando en qué habría visto la tuerta que le hiciese pensar que era un Pariente, y en parte para evitar cruzar la mirada con la Furia - Yo mismo, por ejemplo, me subí a la furgoneta de una mujer y...

El tono no era de reproche, pues sabía muy bien que no había mucho que reprochar porque recibió exactamente lo que había pedido, y no le guardaba rencor a la Furia Negra. Sólo estaba tratando de hacer un chiste... pero no sabía como andaban las reservas de sentido del humor de Ismene, así que desvió la conversación rápidamente por si acaso.

- El peque necesita ayuda y creo que con la mía no va a tener suficiente. Y que sea un "lobezno" no significa que pueda regenerarse, al parecer. Necesita un sanador de verdad. ¿Quién me curó a mi cuando... ehm... tras mi primer cambio? - se dio cuenta de que estaba volviendo a terreno resbaladizo, así que prefirió callarse y esperar a que la tuerta respondiese o alguien más tomase la palabra.

Mientras Ismene hablaba, vieron llegar a Viviane andando con tranquilidad.

-Fue Nikos, el Ragabash de los Sanadores -contestó Ismene, haciendo caso omiso de la pequeña puñalada de Edgar-. Pero supongo que cualquier Hijo de Gaia podrá hacer algo por él. Voy a buscar a su madre. No me hago responsable de lo que pueda pasar cuando lo sepa.

Giró sobre sus talones y se fue a buscar a la susodicha Lupus.

-Las Furias, siempre tan simpáticas -murmuró Ashley con media sonrisa mientras volvía a su forma Homínida-. No era una ironía. Deberías de haber visto a una de las primas de mi padre. A esta hora ya habría abierto en canal al cabrón del cazador.

Miró a derecha y a izquierda e hizo un mohín.

-¿Es que nadie va a ayudarme? Las presas no se arrastran solas, ¿sabéis? Y creo que todo lo que podemos hacer por el momento es preparar la carne para luego. Ya se ocupará mamá pato de hacer lo que tenga que hacer.

Kate atendió a la respuesta de Ash sobre las Furias, con sentimientos encontrados al respecto. ¿Realmente los Fenrir tendrían tanta mala leche como se contaba? Bueno, recordaba cómo se había comportado Ash según había vuelto al clan, y recordaba que todavía hoy tenía un carácter de aúpa... pero no estaba segura si eso podía igualar a Ismene y a las demás. Quiso pensar que no... pero no lo dijo.

Suspirando, se acercó a su compañera para echarle un mano, pese a que la cierva seguía recordándole, de súbito, al conejo, y a la situación. Pero hizo de tripas corazón y arrimó el hombro para ayudarla.

- Me pregunto qué pasará ahora.. - Murmuró, más para sí misma que para los demás.

Edgar asintió ante la respuesta de Ismene, y cuando ésta se fue se volvió hacia sus compañeros de manada.

- Pues voy a por Nikos, o cualquier otro Hijo de Gaia que pueda ocuparse del peque. No os vayáis muy lejos.

Vio que Viviane volvía y sentía curiosidad por lo que habrían dicho los ancianos sobre el tema... pero decidió preocuparse por eso luego. Por ahora debía encargarse de dejar al lobo herido en buenas manos.

 Hécate miró a Viviane y la miró, curiosa.

-¿qué ha ocurrido? ¿Qué te han dicho?

Sus ojos no paraban quietos entre la furia negra, sus compañeros y el cachorro. Estaba preocupada, ya que le resultaba muy raro que unos cazadores hubiesen llegado tan lejos en el bosque sin ser detectados, sobretodo portando unos cepos de ese tamaño. Y, sobretodo, le inquietaba que pretendían cazar con ellos.

Viviane observó cómo Ismene se iba sin comprender muy bien lo que estaba pasando. Miró a Ed marcharse y después se acercó a Kate con intención de preguntar sobre lo que habían hablado, hasta que Hécate intercedió.

-Sólo he avisado a Lysandra. No parecía muy contenta, desde luego, he iban a tomar medidas de inmediato. ¿Qué comentabais con Ismene?

Aunque estaba ayudando a Ash, Kate estaba casi más pendiente de Viviane y lo que el resto de sus compañeros comentaban.

- Según Ismene el lobezno es un pariente, y alguna de las furias del Clan es su madre...  Ni idea de cómo lo sabe, pero se ha ido a buscarla sea quién sea y al parecer se va a armar una buena...