Partida Rol por web

Tras salir de la sala, Lord Eudaimon se le acercó y le susurró al oído justamente lo que estaba pensando Varion, lo tranquilizó en parte que comparta sus inquietudes, cuatro ojos ven mejor que dos...

-Podría decir que me has sacado las palabras de la boca, iré de inmediato a informarle la situación a mis guardias y esposa, yo tampoco confío en Lady Anais, al menos hasta que lo demuestre- tras decir esto escuchó la respuesta de Nikómedes y luego rió junto con él celebrando el comentario "gracioso'' que le había hecho.

Muy bien, comprendo vuestra preocupación por el bienestar de sus esposas, por lo que podrán disponer de sus hombres de la manera que crean adecuada. Son sus hombres después de todo, hagan lo que consideren pertinente.

Si no hay más que discutir, ya pueden emprender viaje, y que Dios los acompañe.

Muy bien, iré a mis tierras como se me fue ordenado. Nos reencontraremos en unos días en Pramia.

Suerte a todos.

Lacratos se retiraba tras hacer una reverencia a los presentes.

Digo lo mismo, me prepararé cuanto antes para la situación que se aproxima. Saludos mis señores.

Este se iba rápidamente tras haber oído sus órdenes. 

Muy bien, como no nos hemos instalado en la capital, ya estamos listos para partir en cualquier momento. Los estaré esperando - dijo observando a Varion y Nikomedes -.

Traten de no demorar.

Todos los nobles habían preparado a sus hombres, los pocos que quedaron con vida al menos, y sus demás familiares con los que hayan venido.

Estos estaban ansiosos de abandonar la capital del reino, ya que solo pasaron cosas malas desde que llegaron. No obstante, la guerra aguardaba a la vuelta de la esquina y sería sin dudas algo terrible para todos.

Pulkria está debilitada tras la guerra de más de 10 años con el reino de Roland, aunque están más curtidos en los asuntos bélicos y saben de lo que hablan. En cambio, Illiandor, ha prosperado económicamente tras tantos años de paz y tranquilidad, dejando un lado muy inexperto para los asuntos de la guerra.

Ninguno de ustedes ha visto la guerra de cerca, y solo pueden desear estar lo mejor preparado que pueda ser, con lo que hayan estudiado en vuestros caminos a dirigirse como nobles de sus casas.