-¿Veis? Ya os lo decía yo--se jacta el maestro abjurador al comprobar que no ocurre nada más anormal que la mera presencia del variopinto grupo de aventureros en la taberna--Tanta correría os está trastornando. Sigamos fumando y bebiendo ahí dentro, venga.
Preguntemos a los lugareños si esto es de siempre o solo hace un tiempo que ocurre ... podia ser algo novedoso que anticipase algo peor o solamente es algo que ocurre de siempre en esta region . Dice el clerigo volviendo a la taberna para buscar al lugareño que parezca mas despierto .
- Puede ser - se escucha la voz del pixi, aún invisible, surgiendo desde algún lado - pero sigo pensando que esa niebla no es normal - agrega tratando de evitar la preocupación en su voz
- Averigua lo que puedas - le propone al clérigo - pero mientras tanto yo prefiero estar atento. Siempre podemos volver a beber... después - agrega sin dejar de mirar a su alrededor
Sigo volando, invisible y sin aura en el exterior de la taberna
Torneth regresa a la taberna y busca al lugareño que parece mas despierto de ellos , al cual se encamina y le pregunta . Estimado señor como puede observar somos de otros lugares y esta niebla nos parece extraña ¿ es algo habitual en estos lares? .O por el contrario ¿es un fenomeno de reciente aparición? . El clerigo se queda algo pensativo y retoma la conversación .Cuando menos es curiosa no recuerdo algo así , merece atención sin duda , podria ser que algunos viejos amigos estudiosos del tiempo y sus manifestaciones estuviesen mas que interesados en saber de ella .
Preguntaremos educadamente .
Yo sí soy de la zona y ya comenté que me parecía normal... ;D
Los lugareños de Kalstrad parecían ser bastante malhumorados, hasta el punto de parecer rudos y maleducado cuando se dignaban a abrir la boca para hablar.
El hombre al que Torneth interceptó parecía ser algo más abierto, pero nada más lejos de la realidad. El lugareño alzó la vista hacia el exterior y gruñó - ¿Qué? - tras percatarse de que sólo se trataba de la niebla, se encogió de hombros y volvió a sumergirse en sus pensamientos, sin hacer ningún caso al clérigo.
Tras aproximadamente media hora, una total oscuridad se cierne sobre la ciudad. La niebla persiste pero nadie parece prestarle demasiada atención.
El pixi continuó revoloteando, invisible, mientras observaba como la oscuridad ganaba las calles. Si bien los locales no parecían estar demasiado preocupados para él "algo" estaba pasando. Solo que no era capaz de darse cuenta de que se trataba.
Más allá de la "oscuridad"... por la hora, se supone que es de día, no?
Oscuridad mágica o común (por lo menos Trix ve en la oscuridad común, así que debería darse cuenta de la diferencia)
La oscuridad no es mágica y la niebla es tan densa que no ves nada a través de ella.
Vente al bar a seguir charlando, ya se pasará... o llegará lo que tenga que llegar. ^^
Torneth desiste de seguir indagando , sea lo que sea esa niebla y esa oscuridad no parece preocupar a nadie en el bar ...
Bueno si no les preocupa a ellos que lo sufren no sera interesante , murmura mientras busca un lugar donde sentarse y seguir observsando el exterior .
Pues si a los lugarenos se la trae al pairo ... dejemos de seguir incordiando .
- Sigue sin gustarme, me pone los pelos de punta...
Dándose cuenta que su preocupación parece ser inútil, el pixi revolotea hasta acercarse a sus compañeros, se vuelve a hacer visible y comenta - A mi tampoco me gusta, pero tampoco tiene sentido estar preocupados solo por una sensación. Continuemos con lo nuestro. Supongo que podemos estar atentos mientras seguemos conversando -
Tras pasar unos minutos, veis un tipo corpulento con ropas de trabajador de los muelles que se dirige a la puerta del bar para salir. Más allá de la puerta se extiende una densa capa de niebla, casi como si estuviera formando una barrera sólida. El hombre musita un breve adiós al camarero y se sumerge en la brumosa noche. Su forma es visible tenuemente sólo durante unos pocos segundos, justo al cruzar la puerta, mientras se encuentra iluminado por la luz de la taberna. De repente, parece recibir un tirón desde fuera por una fuerza invisible y desaparece instantáneamente de vuestra vista. Lo que sólo puede ser su voz grita "!Qué demon... por los dioses de la Luz¡ !No, alejaos de mí! No, no, noooooooo..." Su último grito desgarrador parece cortar como un cuchillo, y deja a la taberna sumida en un profundo silencio.
Nada más escuchar aquel grito lastimero, Númer se puso en pie y, aferrando el bastón como si fuera a luchar con él, masculló de mala gana:
-Al final va a resultar que estabais en lo cierto. Ahí fuera hay algo...
Me pongo el bono del bastón a la CA.
- Sabía que había algo - murmura el trixi, volviéndose invisible a la vez que activa su aura de santidad. La luminosidad brota de su cuerpo, aunque la amplitud del circulo de luz impide descubrir exactamente en que sitio se encuentra el pequeño ser
El pequeño hado se eleva y se dirige a la ventana, tratando de descubrir que es lo que puede haber generado el pánico que se escuchaba en la voz del trabajador
Invisible y con aura protectora activada
Flip es consciente del puesto que ocupa en el grupo, és es la carne de cañón, o al menos la quitina de cañón.
- El muerto ha invocado a los dioses de la luz, supongo que el enemigo serán seres de la oscuridad, quizás muertos vivientes... Seguidme de cerca, esa aura vuestra va a ser necesaria.
Mientras hablaba caminó a buen paso hacia donde el hombre había desaparecido, aunque era consciente de que en los pocos segundos que tardaría en llegar lo más probable era que ya hubiese muerto. Sabía además que hacer eso era mala idea, una celada aprovechando la niebla que para eso había sido invocada, pero no podía ignorar la pequeña posibilidad de rescatarlo que podía haber.
Sus seis espadas mágicas se alinearon con el bien siguiendo su voluntad, y aunque no tenía pelos que tener de punta ni testítuculos que tener por corbata, ni rostro que poner tenso (su quitina siempre estaba tensa, eso sí) ni venas en la cara que apretar hasta ponerse pálido... tenía miedo, un poder capaz de tapar el sol era un poder que no se podía ignorar. Tan solo esperaba que alguno de sus compañeros santos le obedeciese y le acompañase aunque fuese a una cierta distancia, Flip temía a los no-muertos, casi más que a cualquier otra cosa, especialmente a todos aquellos que podían controlar su mente o drenar su energía vital. Ya había pasado por esas experiencias en el pasado y prefería recibir un espadazo.
- Que? Que? - el pixi no tenía muy claro de que estaba hablando su compañero, pero descendió y se colocó sobre él, iluminándolo con su aura tal como le había pedido.
Si salís de la taberna ponedme por favor el orden de marcha.
xx (Flip y Trix)
xx (Númer y Torneth)