El grupo había "vaciado" el Goblin Dorado de los esbirros de Saúl. Y registrando este encontraron, por una parte las escrituras del Goblin Dorado, cosa que les otorgaba la propiedad del local (a excepción de los posibles túneles bajo este; una cláusula muy común en Riddleport habida cuenta de la existencia informal de estos para el contrabando), y el libro de cuentas del negocio.
Ojeando este último se dieron cuenta de que la economía del Goblin Dorado no era la que aparentaba. Estaba más cerca de los números rojos que no gozar de una buena salud financiera. Todo por unas elevadas cantidades que se estaban dando a unas siglas: "D.A.".
Los siguientes registros del local revelaron también el anillo de Larur en una de las jaulas de las bestias. Claramente Saúl mandó matar al enano, porque debió descubrir esos extraños movimientos a "D.A.", engañando al grupo que había sido Lymas Smeed quién lo había matado.
Pero no fue hasta unos días después que el grupo supo la verdadera historia. Un extraño olor a troglodita estaba presente en la bodega. Siguieron el rastro hasta la arena, dónde la tierra movida dibujó el contorno de una trampilla. Al retirar la tierra de esta observaron una cerradura que no abría con ninguna llave del Goblin Dorado. Sólo quedaba una posibilidad: la llave-mano de Saúl. Entró a la perfección y se deslizaron a su interior ....
Descendieron por las húmedas y traicioneras escaleras hasta una caverna con una pequeña playa, dónde tuvieron que liquidar a dos barracudas del pantano. Una vez superado este peligro continuaron por la única salida que tenía la caverna, y en la primera bifurcación giraron a la izquierda, llegando a una pequeña caverna sin salida con una pequeña poza. El resplandor de lo que parecía un cofre, que según las aptitudes de Dredmor, desprendía magia. Quizá fue la avaricia, quizá el descuido, el hecho es que al intentar extraer el cofre un antiguo ser maligno anclado al tesoro emergió para barrarles el paso.
La primera experiencia del grupo con la no muerte fue intensa, pero su habilidad les hizo salir victoriosos sin que la negativa energía del ser les arrancara parte de su vida. El peligro valió la pena, ya que dentro del cofre había un gran tesoro.
De vuelta a la otra bifurcación de la caverna, fueron sorprendidos por dos centinelas oscuros (Dark Sentinel), y entre estos, un numeroso grupo de trogloditas y un rastreador de hongos (Fungal Crawler), tuvieron que bregar y esforzarse al máximo para salir victoriosos.
El grupo volvió a salir victorioso, aunque no carente de sufrimiento ante el titánico encuentro. Continuaron con la exploración de diversas cavernas que parecían el hogar de aquellos inmundos y pestilentes seres, hasta que llegaron a una especie de corredor cavernoso que parecía discurrir bajo el rio Velashu. Al traspasar este toparon con una amplia caverna con un nuevo estanque de agua salada dónde los recibieron dos gusanos de agua que presentaron un duro combate.
Con bastante esfuerzo y perseverancia consiguieron reducir a los gusanos y continuar con el periplo subterráneo ...
El grupo continuó su exploración de aquellos túneles. Tenían el presentimiento de que estaban llegando a su fín, para bien o para mal. Y como prueba de esto, entraron en otra caverna que terminó de confundir su razonamiento. Parecía como una alcoba, con un lecho y pertenencias de su ocupante. Dichas pertenencias parecían tener una extraña manufactura élfica, al ser delicadas y robustas a la vez. Pero lo más extraño del lugar es el extraño mineral presente en la caverna. Es como si emitiese una extraña luz apagada, y a la vez, absorviese otras formas de luz, como pudiesen ser la luz de un fuego o de un conjuro mágico.
Con los sentidos en modo alarma, continuaron por el pasillo que salía de esta caverna, en el modo más silencioso que pudieron. El final de ese pasillo parecía arrojar una ténue luz, reforzando las sospechas de que el habitante de la alcoba estuviese en otra especie de caverna. Pero antes de que pudiesen emboscar a este personaje, un par de demonios los sorprendieron justo a la entrada. Y el personaje se percató de su presencia.
El combate comenzó, y quizá la adrenalina de este hizo que no se quedaran congelados ante lo que iban a ver. El personaje parecía una mujer elfa, pero el hecho de tener la piel oscura y el pelo y los ojos níveos, fue lo que hizo que sus esquemas tuviesen por un momento un shock: ¡¡Los elfos drow no eran una leyenda, eran reales!!
Tras este esporádico shock, el grupo presentó la batalla necesaria. La elfa drow no se lo pensó dos veces en sacar una pequeña ballesta con unos pequeños virotes que disparó todo el rato al grupo. Aquellos virotes parecían estar impregnados de un extraño narcótico, pero las pocas veces que los personajes del grupo tuvieron la mala suerte de catarlos, resistieron a su somnífero efecto.
El grupo eliminó a los dos demonios con un poco de dificultad y resistió los embites de la elfa drow. Cuando estuvieron solos ante esta, la elfa intentó huir, pero con una rápida sucesión de perfectos y precisos golpes, segaron la vida de aquel ser, se podría decir que hasta la fecha, mitológico.
Aquí hago hincapié en el tema de que los Elfos Drow, hasta este path, no aparecen en Pathfinder, y no son más que una leyenda para la mayoría de los pueblos. Con lo que ver a uno, no deja de tener ese gran impacto en los personajes (aunque los jugadores conozcan de sobra a los Drow).
Otro detalle: el mineral es la caforita (caphorite). Obviamente es la primera vez que lo ven vuestros personajes. Aunque ya os sonará, no os preocupéis. ;-)P
Una vez el combate había cesado, vieron los detalles de la escena. Una roca reconocible estaba al fondo de la caverna. Parecía una sección de la Cyphergate con sus contornos perennes en el paso del tiempo. Al lado había una mesa con varios instrumentos de análisis, pero que parecía no haber dejado mella, al menos aparente, en la sólida estructura atemporal. Pero quizá lo más importante era una libre, escrito en un idioma irreconocible para la mayoría, aunque en parte reconocible para Mordred, que seguro aportaría información valiosa de qué hacía aquella extraña y legendaria criatura (la drow) en aquel lugar.
Sin más dilación salieron de nuevo al exterior por una apertura en la misma caverna. Estaban al otro lado del río, en la zona cercana a la academia de los ciframagos. Era de día todavía, pero lo que más le llamó la atención, por los comentarios de la gente, es que la mancha del cielo, aquél cúmulo de nubes negras que desde hacía meses estaba en la ciudad, había desaparecido. Sin duda era el tema de los próximos días, pero algo más inminente estaba a punto de pasar, e iba a convertirse en la gran noticia.
A la noche, salieron del Goblin Dorado por la agitación extraña que había; y en seguida entendieron el por qué. Un gran estruendo comenzó a hacerse audible, y una luz en el cielo empezó a iluminar todo el cielo, como si un nuevo día quisiese aparecer antes de tiempo. Cuando miraron al cielo vieron como una estrella caía de este en dirección a la ciudad, como una terrorífica repetición de la conocida por todos, caída de la estrella tiempo atrás. Pero en el último momento pasó de largo dejando una cola de luz y un estruendo a su paso.
Finalmente, esta estrella pareció impactar en las inmediaciones de la isla cercana a Riddelport conocida como el "codo del diablo" (Devil's Elbow). Un gran fogonazo, seguido de un terremoto que sacudió la ciudad, fue la evidencia del impacto de la estrella. La luz y el terremoto cesaron, dejando la ciudad sumida en la oscuridad de la noche y la expectación silenciosa de todos los espectadores.
Un nuevo hecho puso en alerta el grupo. Una repentina bajada del mar, dejando algunos barcos bastante más bajos en los muelles, puso de nuevo en alerta al grupo. Seguidos por su instinto, se alejaron de los muelles, y quizá eso les salvó del tsunami que poco después golpeó con violencia el puerto de Riddleport, causando numerosos destrozos en los barcos amarrados y varias muertes por el consecuente arrastre posterior de gente al mar.
La noche terminó agitada, pero dentro de la vil ciudad, los señores del crimen se aunaron contra la catastrofe, rescatando a cuantos pudieron de las aguas, y exterminando a los barracudas del pantano y bunyips que habían sido arrastrados a las calles por el tsunami.
Y aquí se quedó el tema de las sesiones de Roll20. Lo retomamos en este punto.
Durmieron lo que pudieron aquella noche. El recuerdo del pequeño cataclismo todavía estaba muy presente en ellos. Al amanecer, Mordred empezó a estudiar el libro de la drow, y en este encontró parte de las sospechas del grupo, pero también algunos fragmentos inquietantes.
Por un lado, el libro es el diario de Dephora Azrinae, la drow que mataron ayer. Parte de este diario parece un libro de cuentas con todo el dinero que Saul le entregaba. En estos momentos toman sentido las siglas DA que se encuentran en el libro de cuentas del Goblin Dorado, y al comparar estos movimientos, coinciden los dos libros a la perfección. Adicionalmente, en el libro también se enumera en qué se gastaba este dinero. Principalmente en suministros alquímicos, componentes de hechizos y comida exótica que era enviada a la isla del Codo del Diablo (Devil's Elbow). Estos envíos parecían realizarse principalmente por la noche y a diferentes marineros, que intuis, que no tenían muy claro el por qué.
Pero por otro lado, el libro parece ser una lista de todos los efectos climáticos extraños y exóticos y otros fenómenos inusuales que han ocurrido en Riddleport en los últimos meses. Todos estos, incluido la propia Mancha (Blot), se indican en el diario como "extraños y extravagantes efectos secundarios de la carga de los glifos en el Codo del Diablo", y que "Sería necesario refinar aún más los glifos para minimizar tales efectos descarados, para que el enemigo no reciba más advertencias sobre el inminente apocalipsis que deseamos revelar.". El libro continúa teorizando que tan pronto como se activen los "glifos y se arranque la estrella", los extraños efectos secundarios como la sombra (Blot) en el cielo desaparecerán inmediatamente.
La última entrada del diario indica que Dephora sospecha que este evento podría ocurrir tan pronto como esta noche (por la noche pasada).
Bueno, pues esto es lo que hemos comentado. Aunque también es verdad que me he parado y sólo he puesto lo del libro, dejando el tema de comentarlo con Kwava dónde realmente toca, el segundo libro.
Dejo la escena abierta por si queréis hacer alguna interpretación. Cuando finalicéis cierro partida y de mientras voy abriendo la otra.
Mordred leyó aquel diario con relativa soltura. Llevaba algunos meses repasando polvorientos manuales de gramática de infracomún en el faro de Gabeldiah, y todo apuntaba a que había dado resultados. Leyó en voz alta cada una de las anotaciones y el rostro se le torcía con cada paso que le evocaba la flagrante traición de Saúl.
Finalmente llegó al punto donde Daphora hablaba de cargar unos glifos para desencadenar un desastre... - Creo que esta parte es la que menos me gusta de todas...- dejó entrever el rojizo mestizo. -Quizás deberíamos comentar este detalle con los Magos Cifrados...
Dredmor escuchaba con atención a su hermano mientras danzaba de un lado para otro con la capa ondulando alrededor de su cuerpo. Durante la noche había soñado con Nethys, el dios de la magia, y parecía llamarle a su lado.... Y lo extraño es que él respondía a su llamada, él que hacía lo que le salía de sus huevos carmesís, él que no aceptaba que nadie le mangoneara.... Tendría que analizar qué suponía todo aquello...
Vayamos a ver a la pájara aquella que tuvimos trabajando en el Goblin Dorado... ¿Cómo se llamaba? ¿Marranita? O algo así....
Zendr durmió intranquilo esa noche. En apenas unas horas había presenciado cómo una criatura a la que sólo se la mencionaba en los cuentos de viejas, estaba tramando no sabía bien qué con el despreciable de Saúl.
Por si no fuera suficiente, había sido testigo de cómo el cielo nocturno se incendiaba con un fulgor terrible procedente de lo que, a todas luces, era una estrella que se había desprendido del firmamento. Demasiadas incógnitas en muy poco tiempo. Los presagios no eran buenos... Si su madre hubiese estado presente, sin duda habría asegurado que Desna trataba de castigarles debido a un terrible agravio.
No, Zendr no descansó esa noche.
Las primeras luces del amanecer acariciaron su rostro mientras, asomado a su ventana, contemplaba el cielo con una mezcla de recelo, miedo y asombro.
De pronto, su estómago rugió y buscó en su mesilla la jarra de vino y el mendrugo de pan que había dejado ahí, pero no lo encontró y supo que el día empezaba tan mal como había terminado la víspera.
Salió al pasillo y decidió ir a ver como habían amanecido los hermanos de piel roja. Era extraño, pero el rechazo -y algo de miedo, aunque jamás lo reconocería- había desaparecido, dejando tras de sí algo muy parecido a la camaradería. Le caía bien esa extraña pareja. A lo largo de su viaje, había tenido que decir adiós a decenas de amigos; no sabía cuánto iban a permanecer estos dos en su vida, pero desde luego, iba a merecer la pena comprobarlo.
Bajó y se reunió con el dúo que también discutían sobre lo ocurrido.
Rascándose el trasero y bostezando ruidosamente les saludó: - Me cago en la mierda, he dormido de pena. ¿Queda tocino?
Los integrantes del grupo habían descubierto los indicios de algo más preocupante. Entre el shock del terrible hecho acontecido la noche pasada, la existencia de una leyenda pasada y la posible conexión de ambos hechos, comenzaba un nuevo capítulo. ¿Tendría buen desenlace, o se torcería más el asunto?
Sin duda estaban en el camino de averiguarlo .....
Pues finalizamos aventura, y comenzamos la siguiente.