Partida Rol por web

Cuando quieras XD.

Susan abrió los ojos despacio, sentía los párpado pesados y la cabeza embotada, de buen gusto se habría rebujado en las sabanas y habría seguido durmiendo por horas, pero la oscuridad absoluta la hizo incorporarse de un salto. "donde estoy..." pensó; su cerebro adormilado tardo unos segundos en responder esa pregunta, pronto como una corriente que se desborda comenzaron a aparecer los recuerdos de la noche anterior: el vuelo en el Quinjet, el restaurante, aquel ser terrible llamado dientes de sable, Fred, Angela, Heller y los demás... una noche movida desde luego. Recordó el interruptor de la luz justo al lado de su cama. La habitación era pequeña pero funcional; a quien sabe cuantos metros bajo tierra, no tenia ventanas pero todo lucia bastante aséptico, incluso las sabanas y mantas que Susan encontró en un armario selladas al vacío en unas bolsas de plástico, parecían recién lavadas. Desde luego estaba todo muy bien preparado. Miró la ropa sobre una silla, la ropa que llevara la noche anterior, que le había quedado tan bien ahora sucia de polvo y con algunas roturas. Hizo una mueca, tendría que buscar algo mas que ponerse. Heller le había dicho que la llevaría de compras, pero ella recordó que antes tenia unas preguntas que hacerle.

Se puso de pie y se estiro, sentía dolores en todo el cuerpo. Se miro en el espejo de pie que había en la habitación. Como la ropa estaba sucia había dormido solo con las braguitas y por un segundo se pregunto si Heller no tendría cámaras en la habitación, miro a todos lados pero no parecía haber nada fuera de lo normal, y si había alguna cámara bueno "por lo menos se llevara un buen recuerdo". Se lavo en el baño anexo y se vistió, solo con la camiseta y los vaqueros, los complementos los dejo de lado.  Volvió a mirarse en el espejo y se recogió una coleta descuidada... sin maquillaje volvía a ser ella. Se sonrió a si misma y salio al pasillo. Se sintió un poco desorientada pero pronto encontró el camino a lo que parecía una sala común por la que había pasado el día anterior y de allí al taller, esperando encontrarse a Heller. En efecto ahí estaba.

El quinjet aparcado en medio del hangar-taller, unos cables gruesos lo conectaban a un gigantesco ordenador y Heller estaba allí trasteando con algún programa informático del que Susan no entendía, pero resultaba obvio que estaba revisando el sistema informático de la propia nave, quizás para comprender en totalidad su funcionamiento, quizás para mejorarlo. Parecía no haberse percatado de su presencia; Susan lo miro unos segundos. "una pena..." pensó, suspiro y entro de lleno en el taller.

-Buenos días. ¿Que haces?, parece divertido... - dijo acercándose a él.

Había decidido levantarse un par de horas más tarde ese día, intuía que con todo el ajetreo y con la reunión que debían tener después, no iba a tener tiempo para sus ejercicio de meditación, y sin ellos no podría reparar la falta de sueño, era importante tener la mente clara, y el cuerpo descansado. Se había deslizado sigilosamente de la cama, para no despertarla, a las 8 de la mañana .Se había puesto un sencillo pantalón de chándal y una camiseta, le gustaba ir descalzo. Había desayunado ligeramente,  inspeccionado las consolas de la estación de vigilancia, "sin novedad".Realizo sus ejercicios, y finalmente ya estaba listo para inspeccionar el Quin Jet. Desde que lo había descubierto semanas atrás había deseado echarle el guante. Una obra de ingeniería perfecta, realizada por Tony Stark, y los mejores científicos de Wakanda, podía tener más de una década, pero dudaba que hubiese muchos vehículos capaces de hacerle sombra al que tenía en el hangar.

Con los brazos cruzados observo durante unos minutos las líneas del jet, estudiando su elaborado diseño, y si el fuselaje había sufrido el más mínimo rasguño. Apenas encendió unas luces, no quería molestar a los demás, y enseguida se puso a trabajar sobre el terreno, tan emocionado como podía estarlo, tenía planes de la nave e instrucciones de su manejo, pero toda esa información provenía de estudios de campo hechos por Shield, basados en gran parte en las suposiciones de los mejores agentes de la organización, ahora por fin podía dejar de suponer y adentrarse en las tripas de aquella quimera que tenía entre manos.

-Eureka.- Dijo para si en la soledad del hangar, satisfecho por encontrar lo que suponía que estaría ahí, pero nadie sabía. Rápidamente conecto su equipo informático portátil, el que había bajado a la base semanas antes, y había comenzado con su análisis. Fue entonces cuando escucho unas pisadas aproximarse, eran delicadas y ligeras, lo que automáticamente descartaba a cualquier ajeno al lugar, al igual que a Fred y a Breiz, debía ser una de las chicas, probablemente Susan, conocía demasiado bien a Angela como para saber que hasta dentro de un par de horas no la vería despertarse.

-Buenos días Susan.- Dijo desenfadado, girándose hacia ella para saludarla con la mano.-¿Esto?, bueno estoy asegurándome de que tenemos aquí, un proceso muy interesante, aunque en esta fase, totalmente automatizado. Y si podríamos decir que es divertido.- Heller estaba disfrutando descubriendo uno a uno los secretos del ingenio, aunque divertido quizás fuese una palabra muy fuerte para él, con demasiada carga emocional.-Eres la primera que veo despertarse hoy.- Sonrió amable, siendo intencionadamente amable y cortes.- Por cierto, e de felicitarte por tu actuación de la pasada noche, eres impresionante, mucho.- La chica lo había impresionado realmente, por su sangre fría y por su perfecto control sobre sus habilidades, al menos por su manejo preciso de estas en la pasada situación de estrés.- ¿Te puedo ayudar en algo, o solo buscas algo de compañía?.- Dijo girándose a la pantalla al comenzar esta a emitir una enorme luminiscencia, mostrando esta unas extrañas graficas, que por un instante tomaron toda la atención de Heller, aun así , un instante breve.-Perdona.- Sonrió nuevamente.- Tienes toda mi atención.- Finalizó girándose nuevamente a la chica, y ofreciéndole un asiento.

- ¿Te puedo ayudar en algo, o solo buscas algo de compañía?- Dijo Heller y se giro de nuevo a la pantalla; Susan levanto una ceja, entre divertida y maliciosa, mientras se le ocurrian un par de respuestas ingeniosas que jamás se atreveria a darle. Cuando él volvió a mirarla su cara volvía a ser normal. Se sentó donde Heller le indico; girando un poco en el asiento miro unos segundos el quin jet.
-La verdad lo de ayer fue bastante impresionante... todo en general, tienes aquí reunidos a un puñado de gente increíble. De todas formas yo solo hice lo que habría hecho cualquiera en mis circunstancias... ayudar a la gente a salir de ese lugar. Pero por ejemplo nunca me había visto capaz de enfrentarme con Dientes de Sable.- Susan guardo silencio unos segundos y recordando la sensación que había tenido el día anterior cuando Heller comento algo sobre su madre se puso repentinamente seria- En realidad... te estaba buscando expresamente, quería hacerte una pregunta.- Aguardo en silencio unos segundos mientras Heller permanecia expectante- ¿Que es lo que sabes de mi?

Escuchaba con atención a Susan, intrigado por su motivo para buscarle a solas expresamente.-Si que tienes razón, sois increíbles.- Dijo con un perfecta sonrisa, que mantenía mientras la atractiva joven le hablaba en concreto del mutante al que habían enfrentado la noche anterior, en realidad, con la salvedad de él, ninguno podía acercarse a pensar cuan letal era ese sujeto, y la cantidad de barbaridades que había llevado a cabo.

"¿Que se de ti?", con qué frecuencia le preguntaban algo así y con qué poco tiento elegían sus palabras quienes lo hacían, al menos Susan si escogió bien las palabras que debía decir, o unas igualmente correctas.-¿Que se de ti?, realmente no mucho, todo lo que se, está basado en los informes preliminares de Shield a tu seguimiento, algo que por lo visto les resultó imposible. Lo que me lleva a pensar que debiste estar muy bien escondida todo este tiempo.- Heller la miro en silencio unos segundos, pensativo.-Como ves se realmente poco de ti, hasta que Ángela no te encontró, realmente no supe que eras una mujer, sobre el papel nunca se menciono tu sexo, supongo que los informes era anteriores a tu nacimiento.-Se recostó parsimoniosamente en su asiento y cruzo las manos.-¿Te suena el nombre de Wong?.- La pregunta solo era una manera sutil de averiguar las verdaderas intenciones de la mujer, así que paciente espero la respuesta, y aun mas importante la reacción.

-¿Shield?... ¿que diablos es Shield?.- Informes preliminares... sobre ella?.... todo aquello le sonaba increíble.- Entonces me estaban vigilando desde hacia tiempo o algo así?- Susan se puso de pie y camino un poco en silencio, analizando cada palabra que le había dicho Heller. Se detuvo delante de la mesa de trabajo donde el día anterior le había quitado de la muñeca aquel brazalete explosivo. Recordó lo amable que había sido... quería confiar en él, en todos. Por fin alguien que entendía su situación, además de su madre; por fin personas que compartían su... condición. Nunca lo había dicho en voz alta pero desde que salio de su casa un año antes se sentía muy sola y despistada; y los había encontrado a ellos y esa sensación se había mitigado casi por completo. Volvió la vista para mirar a Heller que esperaba en silencio una respuesta, le sonreía de una manera encantadora. Susan decidió arriesgarse y confiar.

-Supongo que si sabían poco de mi es por que mi madre se ha dedicado a cuidarme todo este tiempo y a que... en realidad hasta hace 4 años era una persona completamente normal. No tenia poderes, ni tenia nada que ver con la magia... solo una chica de instituto normal, "la chica de la casa de al lado"... y no sabia tampoco nada sobre mi padre.- Susan suspiro recordando el tiempo en que la vida era mucho mas fácil... "pero también mas aburrida"- No es que sepa mucho de él ahora... Entonces, sabes quien soy?...- hizo la pregunta retorica-...que soy hija de Stephen Strange.- Por primera vez lo había dicho en voz alta y a otra persona y al hacerlo se sintió importante- y esta gente de ... ¿shield? ¿también lo sabia?...- Heller asintió. Susan guardo silencio una vez mas mientras se sentaba de nuevo el asiento que antes le ofreciera Heller. Se le ocurrieron un par de preguntas pero decidió esperar un poco para hacerlas.
-¿Te suena el nombre de Wong?.- pregunto Heller. A Susan le sorprendió un poco que le preguntara por él... "desde luego está muy bien informado". Pero como y por que había obtenido toda esta información era lo que a Susan le escamaba un poco.
-Wong.. era -"o es.." pensó- un amigo y ayudante de mi padre.-Guardo silencio mientras recordaba como varios días después de haber descubierto sus poderes había llegado a su casa un paquete misterioso con varios libros y tomos de magia y hechicería... no tenían remitente, solo lo habían dejado ahí delante de la puerta. Y como su madre le había comentado que posiblemente lo hubiera enviado Wong. Y recordó también como había buscado a ese hombre con todas sus ansias, durante todo este tiempo sin tener la mas mínima idea de donde podía estar. Acaso Heller sabia algo?, se sentía tan ansiosa que le costaba disimularlo, pero aun asi espero a ver que mas tenia que decirle.

"Notable", pensó Heller, mientras meditaba sobre el hecho de que a pesar de todos los avances científicos y todos los años pasados desde que el primer uso de magia se hizo público, el ejercito, así como todas sus mas sombrías agencias, o gente como Tony Stark, seguían sin poder superar la habilidad mágica, ni tan siquiera localizarla. Zemo era dueño de cada una de sus acciones en todo momento, al menos el 99% por ciento de ellos, de no ser así no hubiera podido reprimir una leve sonrisilla de triunfo, en verdad la chica no solo era voluntariosa, si no que sus habilidades le otorgaban poderes invaluables para sus mayores rivales.

"¿La chica de la casa de al lado?, sin duda es algún tipo de expresión hecha a juzgar por el tono que ha usado Susan", cavilo cuando la joven se expresó de esa forma. -Shield tenía conocimiento de que Stephen Strange iba a ser padre, y con quién lo iba a ser.- Hablaba de manera tranquila , dándose tiempo para examinar el lenguaje corporal de la joven, "está nerviosa, es normal".-EL ejercito en cambio, bueno parece que ellos te encontraron antes, por suerte te topaste con Angela, quien sabe, quizás fue magia.- Formo en sus labios una ligera sonrisa, le estaba cogiendo el truco a esto de las bromas, o eso creia él.

Hizo una pausa leve , para ponerse algo más serio, no sabía si sus próximas palabras podrían disgustar mucho a la chica.-Yo seguí el rastro de Wong personalmente algún tiempo, por lo visto es un hechicero formidable.- "Aunque no lo suficiente".- Hasta donde sé , una unidad especial , seguramente dirigida por Sheppart, lo capturó y lo llevo a un complejo militar secreto, del cual sospecho que no está muy lejos, y que quizás pueda encontrar si todo sale bien. -Heller inspiró profundamente y apoyó su barbilla en sus palmas unidas, pensativo un instante.- Lamento si no puedo darte más información al respecto Susan, pero ten por seguro que está en mis planes sacar de ese sitio a Wong, y a toda la gente que está con él encerrado. Y quizás no sea el mejor momento para preguntártelo, pero necesito tener una idea aproximada de lo que puedes hacer con tus hechizos, es posible que tu magia sea el recurso más valioso que poseemos para salvar situaciones como en la que se encuentra Angela, me temo.- No quiso parecer alterado, aunque era consciente que por un instante se le podía haber escapado una mirada de preocupación, Angela tenía pocas opciones, y el por supuesto tenía un plan, pero la ayuda le vendría bastante bien.

-...por suerte te topaste con Angela, quien sabe, quizás fue magia- dijo Heller y sonrió.

"si, pero suerte para quien?" pensó Susan orgullosa.

-Entonces fue casualidad, no? con todo lo que me has contado había entendido que tu y Angela me habían estado buscando usando los informes de Shield. 

Cuando Heller a continuación se puso serio y le hablo de Wong, esta vez ella no pudo disimular su asombro. Heller sabia donde se encontraba. Después de tanto tiempo de búsqueda por fin había encontrado algo, una pista firme y clara... eso si Heller decía la verdad. No tenia motivos para mentirle... o si?, Susan quería desesperadamente creer que no.  Permaneció en silencio unos segundos; lo había escuchado muy interesada en todo momento, hasta se había echado hacia adelante en el asiento absorta en cada una de sus palabras; pero ahora tenia la mirada perdida analizando lo que todo esto significaba para ella. Si encontraba a Wong sabría donde está Stephen Strange, sabría donde está su padre. Ella esta segura de eso, sabe que el antiguo sirviente de su padre tendrá una idea clara de donde está. En su interior sabe que no esta muerto, que está en algún lugar atrapado, que intenta comunicarse con ella a través de sus sueños... aunque no sabe si es para pedirle ayuda o para advertirle de algo. Susan se ha autoimpuesto la misión de encontrarle; no sabe por que... no le conoció, no siente que le deba nada, ni si quiera se trata de cariño... ella se ha obsesionado con encontrarle.

-¿Susan?- le llamo Heller suavemente tras unos largos segundos, ella le miro y parpadeo varias veces.

-Quien es Sheppard?.- Fue la primer pregunta que surgió de sus labios.- ..la situación de Angela?, que le ocurre? acaso sus heridas eran mas graves de lo que parecía en un principio?, lo siento Heller pero me temo que en eso no podre ayudar a tu novia- se le escapo la palabra "Novia" sin darse cuenta- no poseo ninguna habilidad de curación.-se puso de pie y comenzó a caminar por el taller mientras hablaba- Lo que puedo hacer... bueno ya me has visto hacer algunas cosas, puedo teletransportarme, y crear cosas de la nada, puedo crear ilusiones y mover objetos no demasiado pesados con la mente, también dar descargas de energía- y diciendo esto juntos sus dedos índice y medio de su mano derecha como imitando una pistola e hizo el gesto de disparar al aire haciendo un sonidito con la boca- y en teoría algunas cosas mas que no he tenido necesidad de usar nunca en una situación de peligro por suerte. También puedo hacer que un objeto tenga determinadas cualidades a través de un ritual mágico... como los guantes que le haré a Breiz...- Guardo silencio unos segundos y se sento en el banco de trabajo donde se habia sentado la tarde anterior, vio como sus pies descalzos se balanceaban un poco al no tocar el suelo. Volvio a mirar a Heller con una mirada intensa y una voz teatral dijo - tambien puedo usar .... contol mental-  guardo silencio unos segundos y solto una carcajada relajando el gesto.- te haria una demostracion, pero me hace a mi que eres un tio con mucha fuerza de voluntad- "como si no, se conciguen esos abdominales", pensó recordando el torso desnudo de Heller cuando la noche anterior, en el avion, se habia puesto su disfraz de super heroe.

Heller sonrió ante la carcajada de la chica, incluso allí bajo decenas de metros de tierra hormigón y acero, la joven conseguía mantener el animo, pese a todo lo sucedido, sin duda era algo admirable.-Fuerza de voluntad, me da a mi que es algo que no escasea en este grupo.- Dijo aun sonriente, tratando de corresponder el cumplido a la bella joven.- Tu capacidad para controlar las mentes y para imbuir de propiedades los objetos, es algo asombroso sin duda, al igual que el resto de tus poderes, aunque con solo estas dos primeras facultades se podría ayudar mucho a Angela a encubrir lo sucedido la noche anterior, o comenzar una nueva vida si es lo que ella desea.- Hablaba aun con media sonrisa, pero sin ningún tipo de todo en especial, ni melancolía ni enfado ni una alegría especial.- Por sus heridas no te preocupes, las células de Angela son muy especiales, de hecho una de sus inusuales propiedades es la regeneración. Mi "novia".- Repitio el tono de Susan.- Tiene la apreciada capacidad de recuperarse del daño ,que lisiaría a una persona de por vida, en minutos, ella tan solo necesitaba hablar , y claro esta que le extrajera los cristales y de mas cuerpos punzantes que tenía esparcidos por todo el cuerpo.

Sheppard es el hombre que trato de capturarte, así como el responsable del secuestro de centenares de meta humanos, en otras palabras, es el encargado del gobierno  estadounidense del proyecto de respuesta contra mutante y meta humana.-Ceso en seco sus palabras, en realidad había hablado mucho , y no quería parecer un charlatán, imaginaba que Susan aun estaría asimilando ciertas cosas.-¿Te enseño las instalaciones como es debido?- Se ofreció caballeroso Zemo con un inclinación muy cortes, casi cómica en aquella situación , y en espera de que la chica lo siguiera.- Poseo algunos libros de ocultismo que e estudiado, y aunque no me e atrevido nunca a manejar ninguno de los encantamientos descritos, creo que a alguien de tu habilidad, no le costaría nada dominar tales encantamientos.- Comento mientras caminaba por los pasillos junto a la joven.

"así que si son Novios", Susan obtuvo la confirmación directamente de Heller; sintió una punzada de decepción que apenas duro unos segundos, la verdad una vez superado el evidente atractivo físico Heller era un tipo simpático que le caía bien, quizás podria llegar a ser amigos.

-Ayudare a Ángela en lo que pueda.- se mantuvo en silencio unos segundos- no soy tonta sabes, se que se jugo mucho llevándome a sus oficinas... es cierto que yo le insisti en que no tenia por que ayudarme pero aun así puso en peligro su mundo por echarme una mano sin siquiera conocerme. No olvido ese tipo de cosas.- "aunque me parezca una niñita bien, le debo la vida" pensó.- Supongo que has pensado alguna cosa, así que ya me dirás en que te puedo ser útil. Sobre el tal Sheppard... bueno nunca le he visto en persona, pero no era el quien me embosco en aquel almacén del chinatown... fue una tal...- miro al vacio unos segundos y se paso una mano por los cabellos intentando recordar el nombre lo que hizo que algunos mechones se soltaran de su coleta y cayeran al rededor de su rostro, lo que le daba un aspecto descuidado bastante mono-Rogers... si, creo que ese fue el nombre que me dio. Aunque seguramente ya lo sabias. Por cierto esa mujer es evidentemente meta humana...- apretó un poco los labios enfadada recordando la superioridad con la que le había hablado esa mujer.

Cuando Heller la invito a recorrer las instalaciones, Susan se bajo de la mesa en un salto, he hizo una pequeña reverencia a juego con la pantomima de él, mientras le dedicaba una cálida sonrisa. Se metió las manos en los bolsillos y comenzó a andar a su lado. Le sorprendió que Heller tuviera libros de ocultismo;  no se lo había imaginado consultando tomos de hechicería... sabia que lo que para ella era perfectamente natural, un lenguaje que entendía por inercia sin la necesidad de que alguien se lo explicara, resultaba difícil de entender para alguien con una mente mas científica como le parecía que era aquel joven.

-Me encantaría echarles un vistazo.- dijo interesada; justo en ese momento su estomago rugió; no había probado bocado desde el día anterior y aunque las emociones de las ultimas horas había hecho que se olvidara por completo de comer, ahora su estomago se había despertado y exigía atención. Se sonrojo un poco deseando con fuerzas que Heller no hubiera escuchado ese bochornoso ruido.- Ayer me meti en una de las habitaciones vacías que hay por ese pasillo...     no sabia si había algún problema-dio a su voz un tono de pregunta- pero.. aun no se donde podría buscar algo de comer- dijo soltando una risilla floja

Ante la sonora demanda del estomago de Susan, Heller no tubo mas remedio que arquear una ceja.- Sígueme, te enseñare donde esta la cocina.- Dijo en tono amable.- Con las prisas no e podido dejar indicaciones de a donde lleva cada pasillo,ni haceros una visita guiada a ti o a Breiz.-

La cocina era espaciosa, tanto como la de un gran restaurante, llena de estanterías cajones una gran mesa, los fogones, y una nevera que le hacia justicia, y para sorpresa, todo bastante lustroso.- La nevera esta repleta de comida, así como las estanterías y la alacena.- Señalo Heller con su pulgar en dirección a la puerta cerrada de la estancia.- Sientete libre para comer cuanto quieras, es importante alimentarse bien.- Aquello ultimo, fue más un recordatorio para si mismo que un consejo para la chica. Cuando estaba absorto en su trabajo podía pasar mucho sin probar bocado, o al menos eso era antes de que le instalase una alarma especial a su reloj para recordar le algo tan necesario.

-Por una vez creo que los libros pueden esperar.- Sonrió, esta vez sin tener que usar su gesto ensayado, aunque realmente nadie podía notar la diferencia.-Lo que Angela hizo por ti fue increíble, pero no menos que lo que tu hiciste la noche pasada, por ella y por la de mas gente, no le debes nada , al menos a mi entender.-Realizo una leve pausa mientras observaba atento como comía la chica, en realidad absorto en sus pensamientos, mirando más allá.- Tu conducta es de admirar, jamas había conocido a nadie con tu predisposición para darlo todo por los de mas después de un cambio tan radical en su vida.- La joven le había sorprendido muy gratamente.- Eres justo el tipo de heroína que necesita este mundo.- Dijo sonriendo nuevamente, aguardando a que la muchacha terminase su comida para seguir mostrando le las instalaciones.

Dentro de la nevera encontró una botella de leche y mantequilla, también había mermelada de frutas del bosque, su favorita. No pudo reprimir un "ñam!" que solía decir siempre que iba a comer algo que le gustaba mucho, lo dijo muy bajo apenas un murmullo. En una despensa había un paquete de tostadas; aunque lo que le apetecía de verdad eran tortitas, de esas que solía hacerle su madre los domingos por la mañana, pero le daba un poco de corte ponerse a cocinar en ese momento. Cogió también un plato, cubiertos y un vaso y se sentó a la mesa.

Susan escucho el cumplido de Heller, estuvo apunto de decir algo pero le vinieron a la mente las palabras de su mejor amigo Josh Harris: "acepta el cumplido Su, nunca aceptas un puñetero cumplido... así que sonríe y calla". Pensar en su amigo, al que hacia mas de un año que no veia y del que no se habia atrevido a despedirse, le resultaba doloroso . Susan sonrió un poco incomoda. Al final no pudo quedarse callada.

-Ya te lo he dicho antes, no siento que haya hecho nada especial. Pero bueno supongo que es la forma como me crío mi madre; ella es enfermera... muy dedicada en su trabajo y siempre dispuesta a ayudar a todo el mundo, en el hospital, en el vecindario... Tal como yo lo veo, tu me has traído aquí a este lugar para ayudarme, un lugar secreto donde se esconden personas perseguidos injustamente ... sin conocerme y has confiado en mi, eso para mi es un vinculo difícil de romper. ¿Por que no iba yo a ayudarte a ti o a Ángela o las personas que viven aquí?, ¿por que no iba yo a ayudar ayer a esos rehenes muertos de miedo? teniendo como tengo la posibilidad de salir de allí en cualquier momento, yo tengo una ventaja que ellos no tienen... ¿por que no usarla para ayudarlos?; y por Breiz- hizo un breve silencio mientras apuraba el vaso de leche- Se que no debe ser mucho mas joven que yo, pero con solo mirarle a los ojos puedo ver lo que ha sufrido... Nadie debería pasar por algo así. Le ayudare, por que no me cuesta nada. Por cierto ¿tendrás unos guantes negros de cuero para que pueda hacer el ritual?

Se levanto de la mesa y comenzó a guardar todas las cosas y a lavar los platos en donde había comido. Descubrió divertida que le hacia ilusión lavar los platos, después de un año comiendo en restaurantes de carretera y Mc Mcdonalds, echaba de menos hacerlo. Guardo silencio unos segundos pensando como hacer la siguiente pregunta, odiaba parecer una entrometida pero tenia verdadera curiosidad. "que diablos... este tío parece saber todo de todo el mundo, es justo que yo le pregunte". Volvió a la mesa y se sentó.

-Bien... y tu Heller? de donde has salido? como es que estas aquí reuniendo meta humanos?... tienes algún poder también? estas huyendo?, tengo verdadera curiosidad por saber como y por que sabes esas cosas sobre mi, por que tenias esos informes de Shield... cuentame un poco de tu vida.- Lo dijo todo muy tranquila, sin asomo de ningún sentimiento, aunque en el fondo le había molestado que el supiera cosas de ella y ella no tuviese ni la mas minima idea sobre él.

Heller aguardo unos instantes, pensativo, sorprendido, en parte, por la cantidad de repentinas preguntas. Susan parecía ser una mujer de complejo carácter. Hacia solo un instante estaba dando rienda suelta a su apetito, y ahora se mostraba inquisitiva, aunque esforzándose por aparentar calma. Le caía bien la chica, así que tomo un poco de aire y se dispuso a hablar tratando de sintetizar ciertos sucesos y conceptos.

-Mi nombre es Heller Zemo, no tengo segundo apellido pues jamas conocí a mi madre y mi padre oculto su identidad. Soy de origen alemán, de una larga y rica estirpe de Barones. Reúno meta humanos para crear un grupo de respuesta rápida contra problemas de todo tipo. Mi objetivo es devolver la fe de la gente en los meta humanos, pues el mundo ha empeorado bastante desde que se persigue a mutantes y meta humanos, y aunque eso solo ha sucedido en estados unidos aun, es ingenuo pensar que pronto no se extenderá a todo el mundo.

No tengo ningún poder, pero he sido entrenado desde que tengo uso de razón para ser un perfecto sucesor de la baronía familiar, y lo creas o no eso exige mucho.

Hace 7 años escape de Alemania con información y recurso de valor y con la única idea en mente de dar comienzo a esta iniciativa, y desde entonces e estado rastreando a gente como tu Susan. Como e podido hacerlo ha sido gracias a que mi padre trabaja estrechamente para el gobierno de los estados unidos, de hecho es el responsable de mas de la mitad de protocolos existentes para la detención de meta humanos, así como del diseño de gran numero de armas e incluso prisiones. El fue en primer lugar quien se apodero de los archivos de SHIELD, y yo quien se los robo después.-
Hizo una leve pausa y apoyo su espalda contra la pared al tiempo que se cruzaba de brazos.- Si deseas que me extienda más en mi respuesta solo has de pedírmelo, o concretar que deseas que te explique con detalle, mi intención no es guardaros ningún secreto, ni a ti ni a ninguno de los que están bajo este techo.- Dijo con total seriedad, aguardando a las preguntas de la joven, si es que tenia más.

Al principio Susan pensó que Heller le estaba vacilando con todo eso de ser un Barón y demás, pero según el joven hablaba se dio cuenta de que le decía la verdad (*). Se mantuvo en silencio observando atenta cada gesto de Heller; esa forma de hablar tan educada y seria, cada gesto cuidado y firme. Por su porte y aspecto había deducido que el chico era un "millonetis" pero nunca se imagino que seria un noble, ni siquiera imagino que fuera alemán. Tuvo que admitirlo este chico era una caja de sorpresas. Observo como el joven respondía cada una de sus preguntas, sin expresar ninguna emoción, y casi de manera automática; se pregunto si siempre seria así y por un segundo se lo imagino viendo un partido de béisbol, riendo y divirtiéndose, tomando unas cervezas... "no, imposible". La imagen en su mente cambio y se lo imagino con Ángela, los vio vestidos de gala sentados a la mesa de un lujoso restaurante, comiendo caviar y bebiendo champán. "si, esto es lo suyo". Susan era una chica muy imaginativa y solía perderse en sus pensamientos a la vez que escuchaba a alguien. Cuando el joven termino ella guardo silencio unos segundos. No sabia muy bien por que pero había imaginado que Heller le daría largas o le hablaría de forma críptica; en cambio el joven se había sincerado... a su manera.

-Vaya...- dijo arqueando un poco las cejas.- así que un noble.- guardo silencio nuevamente mientras golpeaba la mesa ritmicamente con los dedos.- No tengo mas preguntas que hacerte. La verdad... tengo la sensación de que te he estado interrogando de manera... un poco brusca, lo siento.  Si quieres seguimos haciendo el tour.-Dijo poniéndose de pie. No sabia la razón pero ahora se sentía un poco incomoda, quizás fuera por que de pronto se le antojo un joven muy solitario y muy distinto a ella, de un mundo completamente diferente. "Venga ya, supéralo, pareces una colegiala" se dijo a si misma.

Heller negó con la cabeza mientras sonreía ligeramente.- Pierde cuidado Susan, se la sensación que causa que un desconocido indague en tu vida, entiendo que es una violación a la intimidad del individuo, pero me temo que en este caso era necesario, al igual que en todos los de más, al fin y al cabo, no fui yo quien realizo los informes.- Hizo una leve pausa y miro fijamente a la chica.- Claro que tampoco es excusa, y por ello soy yo quien te pide perdón.-Espero un segundo la reacción de la joven.- Si te parece bien permite me que me resarza, en parte, mostrándote el complejo en su totalidad, o haciendo el tour como dices.- Acabo sonriente.-Me alegro de que sepas francés, por fin podre practicar el mio, últimamente estoy perdiendo algo de pronunciación. Ici s'il vous plaît.- Dijo invitando a la chica a que lo siguiera con un cortes gesto de la mano, y con una teatral reverencia, tratando de bromear, aunque no tuviese practica.

-El complejo es enorme, tiene tres plantas,  varias salidas secretas y prácticamente cualquier cosa que puedas imaginarte en un sitio de estos.¿ Deseas que te lleve a la librería, o te apetece visitar otra estancia antes?- Dejo que la chica respondiera tranquilamente a la pregunta mientras aguardaban en una intersección.

Heller le parecía sincero; acepto sus disculpas y se sintió mas confiada.

-Francés?- dijo Susan y soltó una alegre carcajada.- Que va... he dicho lo de Tour por que... bueno es de esas palabras que te hacen parecer mas lista de los que eres- siguió riendo un poco entre divertida y avergonzada.- ¿O te estabas quedando conmigo?- levanto una ceja e intento ponerse seria, pero no le duro mucho tiempo, pronto la sonrisa volvia a aflorar a sus labios.- Aunque ahora que lo dices...técnicamente sé hablar Mandarín- dijo poniéndose una mano en el pecho, dándose pompa y pareciendo muy orgullosa- digo técnicamente por que solo he probado a Leerlo... verás, se trata de un hechizo que aprendí que me permitió aprenderlo practicamente al instante, pero no he tenido tiempo de hablarlo con nadie; quizas pueda estrenarlo con Wong. Ahora me sorprenderás diciéndome que el Mandarín es tu segunda lengua- dijo haciendo un fingido gesto de cansancio y se rió de su propia broma.

Siguió a Heller por el pasillo y a la pregunta de este respondió.

-Oh si, la librería... me encantaría verla... ¿tienes también por aquí una sala tranquila, aislada?, necesito meditar todos los días. Un gimnasio me serviría, suelo despertarme muy temprano así que me vendría bien si no pasa nadie por allí. También quería consultarte algo a ver que opinas. Tendría que sacar dinero del banco pero no se si podrían rastrearlo o algo. Necesito comprar ropa y reponer lo que perdí en el hotel.