Tras el tenso momento entre Gerinn e Ixen, seguís avanzando por la galería subterránea. El rastro que había dejado el gusano se podía seguir sin ningún problema, pues había retazos de sangre y vísceras de su víctima por aquí y por allá.
Toda la galería tiembla un poco, tanto el suelo, como las paredes y el techo, y justo delante de vosotros hasta donde llega la luz de la antorcha podéis ver la cola del gusano. La criatura parece haberos sentido llegar y trata de dar media vuelta para encararos, pero la galería está echa a su medida y se queda atorado, debatiéndose salvajemente por salir de esa situación tan apretada.
Ixen se adelantó corriendo hacia donde se encontraba la bestia acercándose tanto como le fue posible y, sin pensarlo demasiado, abrió su boca y exhaló una oleada de fuego sulfuroso que iluminó la estancia con un trémulo color rojizo mientras quemaba todo lo que delante de él se extendía.
Motivo: Daño, por las dudas
Tirada: 2d6
Resultado: 5(+3)=8
Master, la pongo sólo para el director porque no sé si debo hacer tirada ni si me queda energía para usar el arma de aliento
Nota DM: Tienes suficiente energía. Dejo el mensaje público
Motivo: Ataque Poderoso
Tirada: 1d100
Dificultad: 87-
Resultado: 33(-10)=23 (Exito)
Motivo: Resultado ataque
Tirada: 2d8
Resultado: 4
La respuesta del dracónido resulta tan fría y cortante como podría esperarse tras los comentarios que realizó durante el trayecto en la caravana. Sin embargo, al menos la tensión entre este y el humano se reduce lo suficiente como para que podamos seguir avanzando por el túnel. El olor a sangre y los restos de las visceras provocan que el gruñido de Nindë nos acompañe durante todo el trayecto, como una amenaza velada.
Sin embargo, llega un punto en el que este aumenta de intensidad hasta que se convierte en un auténtico rugido, con el que carga hacia delante sin que logre hacer nada para detenerle. Mi mano se dirige al carcaj en un acto reflejo y tras tensar la flecha en el arco, avanzo unos pasos solo para encontrar el horrible cuerpo del gusano atrapado en la galería, revolviéndose repulsivamente.
Nindë se ha lanzado sobre la criatura con las garras por delante, buscando atravesar la armadura de escamas de la criatura. Mis dedos sueltan la flecha que viaja con rapidez en dirección al monstruo para socorrer a mi compañera, mientras pienso con horror en las propiedades venenosas de la sangre de la bestia.
Motivo: Desgarrar
Tirada: 1d100
Dificultad: 52-
Resultado: 73 (Fracaso)
Motivo: Desgarrar 2
Tirada: 1d100
Dificultad: 52-
Resultado: 21 (Exito)
Motivo: Daño Nindë
Tirada: 1d6
Resultado: 3(+3)=6
Motivo: Disparar
Tirada: 1d100
Dificultad: 62-
Resultado: 31 (Exito)
Motivo: Daño Elenamil
Tirada: 1d10
Resultado: 10(+3)=13
Os lanzáis todos contra el gusano aprovechando que está atrapado y es presa fácil. Ixen descarga su arma de aliento y las llamas prenden parte del cuerpo del gusano, que empieza a retorcerse de forma compulsiva.
Gerinn y la pantera Nindë laceran las duras escamas y desgarran la carne con sus afiladas armas, pero la sangre les salpica y sienten un dolor punzante allí donde les ha rozado.
Elnaemil por su parte afina su puntería y la flecha se clava entre escama y escama hasta la pluma. El gusano se sigue debatiendo por darse la vuelta, pero se le nota más torpe, o quizá más débil...
Gerinn y Nindë sufren 4 puntos de daño por la sangre ácida que les salpica
Gerinn, dejaste echa las tiradas pero se te olvidó postear (al menos un "me acerco y le meto con le hacha" XD)
Ánimo, otra ronda tan acertada como ésta y el bicho cae
Por fin algo había salido como quería, la llamarada dejó su boca y golpeó el cuerpo del gusano, no pudo evitar que una media sonrisa apareciese en su rostro. Hubiese intentado otro ataque ígneo, bien con magia, bien con su arma de aliento, pero se sentía algo fatigado como para hacerlo. Entonces tanteó el costado derecho de cinto y tomó de él la varita mágica que blandió sobre su enemigo.
Motivo: Usar objeto mágico
Tirada: 1d100
Dificultad: 56-
Resultado: 38 (Exito)
Motivo: daño
Tirada: 1d6
Resultado: 5(+2)=7
La pantera ruge al entrar en contacto con la sangre de la criatura, pero eso no la detiene a la hora de seguir tratando de penetrar con sus garras la carne del gusano. Casi podría decir que siento el dolor de mi compañera en mi propio cuerpo, y cuando vuelvo a lanzar otra flecha, lo hago con la esperanza de evitarle más daños a Nindë, más que por el deseo de asesinar al monstruo.
Motivo: Desgarrar (Nindë)
Tirada: 1d100
Resultado: 44(+52)=96
Motivo: Desgarrar (Nindë)
Tirada: 1d100
Dificultad: 52-
Resultado: 99 (Fracaso)
Motivo: Desgarrar (Nindë) 2
Tirada: 1d100
Dificultad: 52-
Resultado: 25 (Exito)
Motivo: Daño Nindë
Tirada: 1d6
Resultado: 5(+3)=8
Motivo: Disparar
Tirada: 1d100
Dificultad: 62-
Resultado: 33 (Exito)
Motivo: Daño Elneamil
Tirada: 1d10
Resultado: 2(+3)=5
Aviso de que la primera tirada es un error, cuentan a partir de la segunda.
Gerinn no puede evitar una sacudida de su cuerpo por el dolor que siente, y retrocede por instinto de su presa. Pero todavía es capaz de mantener su hacha bien agarrada.
La amenza que tenía delante seguía retorciéndose, a pesar de los ataques continuados de sus dos compañeros. Esta vez se dispuso a lanzar otro tajo, pero con algo más de cuidado que la vez anterior.
Motivo: Hachazo
Tirada: 1d100
Dificultad: 87-
Resultado: 88 (Fracaso)
¿Me percato de que ese ácido corroe también el metal?
La descarga mágica de Ixen, si bien no resulta muy potente, traspasa las quitinosas escamas del gusano. Elnaemil vuelve a acertar con una flecha y su leal pantera vuelve a lacerar al monstruo, desgarrando buena parte de su caparazón y esparciendo sangre ácida y carne por el suelo.
Las heridas que ha sufrido el gusano, junto a las que arrastraba de la batalla en la superficie, dejan a la criatura sin aliento y se desploma en el suelo, todavía encallado en la estrechez del túnel, retorcido en una mole sanguinolenta. En un último esfuerzo, o más bien una convulsión final, la cabeza del gusano escupe lo que parece ser parte del cadáver del guardia de la caravana que se había comido.
El ácido que ha saltado tanto a Nindë como a Gerinn, si bien resulta doloroso al contacto con la piel, no parece que sea corrosivo con el metal ni que se extienda por el pelaje de la pantera.
Nindë sufre otros 4 puntos de daño
La bestia había muerto e Ixen se encontraba, si cabía, más confundido que antes. Todavía deseaba apagar su dolor con el olvido o la muerte, pero aquella batalla había reavivado algo en su interior. Cerró los ojos, respiró profundo relajándose y luego se giró para volver a la superficie y continuar su camino tan lleno de amargura como había estado desde aquel fatídico día.
Miró a Valygar e incapaz de sostener su mirada se alejó
Motivo: Saber Popular
Tirada: 1d100
Dificultad: 56-
Resultado: 86 (Fracaso)
-Qué asquerosa bestia... -fue incapaz de contener Gerinn en voz alta. A continuación se examinó, con una mueca de desagrado, las quemaduras que le provocó el ácido al alcanzarle. Por suerte parecían heridas más superficiales que incapacitantes, así que lo primero que se le pasó por la cabeza, después de envainar su hacha, fue buscar algo de agua con el que limpiarlas mínimamente.
Por otra parte, habían logrado aniquilar a la amenaza entre todos, pero eso no significaba para él que fuesen a llevarse bien. Tendría que cuidar sus espaldas por si acaso alguno de los presentes venía con intenciones ocultas.
-Bien, ¿y ahora alguien sabe por dónde continuar? -preguntó en un tono más normalizado.
Tiro buscar para encontrar un charco de agua no estanca... o la cantimplora misma si me vale. Aunque no tengo nada en la habilidad de buscar.
Motivo: Buscar
Tirada: 1d100
Resultado: 89
Aunque me parece que no voy a encontrar nada... XD
No puedo evitar sentir un cierto alivio cuando el horrible gusano cae finalmente derrotado. Soy consciente de que realmente hemos tenido mucha suerte de que el ser se quedara atrapado entre la piedra, puesto que de cualquier otra forma habríamos tenido realmente pocas oportunidades. Afortunadamente, nadie ha resultado herido.
Nindë se mantiene al lado del cadáver, volviendo la cabeza con un sonido lastimero, mientras trata de lamerse la sangre del pelaje, tratando de limpiarse las heridas. Me acerco al animal, pasándole una mano por la cabeza para agradecerle la compañía que me lleva prestando desde hace tanto tiempo.
Solo después de asegurarme de que ella se encuentra bien, vuelvo a prestar atención a mis compañeros de batalla. -Me temo que no sabría señalar ningún camino. Estoy acostumbrado a caminar sobre la tierra, no bajo ella. Aun así aconsejaría no separarnos- añado mirando con una pizca de lástima al desesperado dracónido, que ya comienza a alejarse de donde nos encontramos -ya que no sabemos si pueden surgir más enemigos.
Aprovecho los segundos de descanso para concentrar mi energía, y aunque me resulta algo más complicado en esta zona muerta que en los bosques a los que estoy acostumbrado, pronto logro que en mi mano se materialicen cuatro pequeñas bayas de color rojizo. -Tomad- digo ofreciéndoselas a los presentes, guardándome únicamente una de ellas para la pantera, que pone mala cara pero se la termina tomando -Estos frutos sanarán vuestras heridas.
Motivo: Conjurar
Tirada: 1d100
Dificultad: 52-
Resultado: 19 (Exito)
Motivo: Número bayas
Tirada: 1d4
Resultado: 2(+2)=4
Con la amenaza desaparecida y el camino bloqueado por el enorme cadáver del gusano, no os queda más remedio que volver por donde habéis llegado.
Valygar no había entrado en combate, pero seguía sosteniendo la antorcha que alumbraba vuestro camino y, al llegar al agujero que se metía tierra adentro, os ayuda para que podáis salir de allí sin problemas, volviendo a estar nuevamente al aire libre.
- Mira Basilio! - oís que grita una voz chillona. Se trata de Puck Manosverdes, el mediano que iba en la caravana - ¿Ves como tenía yo razón? Al final han conseguido salir con vida de ese agujero. - el mediano mira al líder de la caravana con expresión triunfal. A pesar de las últimas insistencias de Basilio por salir de allí corriendo, parece que os han esperado.
- Bah! Maldito mediano. Esta vez has tenido suerte... - le responde Basilio y luego se dirige a vosotros - Venga que no tenemos todo el día. Cuanto antes lleguemos a Thamasa, antes podré entregar mi mercancía y pagaros por haber salvado mi caravana. Que no se diga que Basilio Thann no paga sus deudas!
-Eso suena bien. -afirmó tranquilo el humano al tiempo que se llevaba su hacha al hombro. No se fiaba de que todos los percances hubiesen acabado con el gusano gigante, y sería más correcto envainar cuando todo estuviese verdaderamente seguro. -Tengo ganas de dejar bien atrás tanto túnel.
Sin mucho más que añadir, os ponéis en marcha con Basilio y su caravana en dirección a Thamasa.
Garret sonríe al ver cómo Gerinn había logrado volver - Eres un tipo duro, compañero. Estoy deseando volver a casa y echarle el guante a esas zorras traicioneras que nos hicieron esta jugarreta - Garret no parecía haberse olvidado de su venganza personal y la sonrisa se había tornado en una mueca de odio al recordar todo lo vivido en las últimas semanas - Pero ahora lo único que deseo es descansar y poder recuperar las fuerzas... - comenta con palabras amargas y se recuesta como puede entre la mercancía de una de las carretas para descansar en el trayecto hasta Thamasa.
- Yo también tengo trabajo que hacer en cuanto llegue a la ciudad - comenta Valygar, el guardabosques de piel oscura - He visto suficiente en esta zona como para pensar que algo extraño le está sucediendo a los animales y a las bestias del lugar. Algo maligno. Debo investigar...
Vamos a ir finalizando ya esta escena. Si queréis añadir algo a tiempo estáis :P
Gerinn ansiaba también un descanso, mientras suponía que las quemaduras aún le escocerían por bastante tiempo. Examinó las bayas que le entregó poco antes Elnaemil, y decidió guardárselas para más adelante.
Un repunte que mezclaba ira, odio y ansias de venganza, brotó desde su consciencia cuando escuchó a su compañero Garret mencionar la tragedia por la que ambos pasaron. Los rostros de las personas, quizá las únicas que le habían brindado su amistad y confianza, se aparecieron en su mente como fantasmas acusantes de su desgracia. Apretó con fuerza los puños y miró fijamente a Garret.
-Cuando nos encontremos de nuevo con esa escoria, yo mismo me encargaré de meterles la cabeza por el culo. -dijo en un tono sombrío y cargado de rencor. -Te dejo que las desolles primero, si no tienes alguna idea más.