Sonrío ante el comentario de los pseudónimos. Obviamente, Katia no es mi verdadero nombre, aunque es cierto que lo utilizo en suficientes ambientes como para que lo puedan relacionar conmigo. Asiento con la cabeza, concediendo que es una buena idea, aunque sin decir nada al respecto.
En cambio, cuando habla de un reconocimiento médico, levanto una ceja suspicaz. No es una idea que me haga demasiada gracia. Además, varias de las agencias para las que trabajo me piden un certificado médico de forma regular, así que probablemente ni siquiera sea una opción.
- No me parece mal que busques registros médicos - le contesto finalmente. - Cuanta más información tengamos, mejor. Sin embargo, es probable que ambas mafias cuenten con sus propios doctores y no tengo muy claro cómo de disponibles estarán esos datos. Tal vez necesites ayuda de Tecnovirus para acceder a ellos - sugiero. La verdad es que el pirata informático se ha convertido en un activo indispensable para el grupo.
- De todas formas, cualquier cosa que hagamos contra los rusos tendrá que esperar. Aunque se pueda retrasar como una bomba de relojería - esta vez el símil va más dirigido a Lázaro que al informático - no tenemos tiempo para colocarla como es debido...
- Si te sirvo de algo, los rusos no tenían información sobre ti - le digo. - A pesar de que conocían a Jota, no parece que los datos de tu taller transcendiesen. Sin embargo, el probable que Ivan investigue las últimas acciones de su hija, así que antes o después acabarán encontrándote. Te recomiendo tratar de pasar desapercibido estos días también y, si te encuentras con ellos cara a cara, mantén la sangre fría y contesta las preguntas que te hagan como si te estuviesen fastidiando, pero sin enfrentarte a ellos.
- Descuida, no soy tan fácil de convencer para decir lo que no quiero. Igualmente ante la sugerencia de Francisco con respecto a su nave he comenzado a pensar de que debería vender mi taller y abrir uno nuevo, haciéndolo una empresa fantasma, tal como dice Ángel, con un seudónimo y yo estar en la planilla de empleados, de esa forma tiraría por la borda cualquier sospecha que pudiese recaer sobre mí. De esa forma mi casa queda segura y yo puedo moverme tranquilo. ¿Qué te parece Francisco? - no se porque, pero la aprobación o no del viejo me importaba más que las del resto del grupo.
- Así mismo. ¿no convendría tirar un par de pistas falsas del Talión que los guíe a los chinos o los rumanos? De esa forma podemos enfocarnos en rescatar a los inmigrantes en otro lado que no sea el puerto y que ellos se acribillen sin sospechar de que les estamos tomando el pelo.
Me encojo de hombros ante la respuesta de Marc. Él sabrá lo que hace, después de todo. No dudo de su capacidad para mantenerse callado en una conversación normal, pero no tengo tan claro cómo puede llegar a reaccionar bajo presión y los rusos no son gente con quien se pueda jugar a la ligera. Si comete un error, tendrá suerte si se lo cargan allí mismo como a la chica que estuvo conmigo en la reunión; aunque lo más probable es que le capturasen con vida para hacerle hablar. Y nadie puede resistir indefinidamente sin decir nada, y mucho menos una persona con familia.
Pero bueno, es de esperar que todo vaya bien y, si las cosas se tuercen, ya pensaremos algo para arreglarlo sin que nos ponga en peligro a todos.
- Creo que eso sería contraproducente - comento en relación a la sugerencia de dejar pistas falsas sobre Talión. - Parte de la idea original del grupo es que su mismo nombre llegue a poner nerviosos a los criminales. Si lo relacionamos con una de las mafias no representaría nada más que otro grupo rival.