Partida Rol por web

- Tranquila...sus hombres estaban en el meollo del tiroteo...y encima el almacén estaba a su nombre...en nada lo relacionarán con la venta de armas...y si encima algunos archivos aparecen en el disco duro de su portátil incriminándolo...más en su contra... - dice tranquilamente Josh - ...no os preocupéis de él...ya está jodido...si no lo matan antes los hombres que sobrevivieron de Scott

Shayid observa la situación relajándose por fin, estoy harta de estos tejemanejes, mañana cojo mi moto y me largo de aquí. Pasa los segundos siguientes con la mirada perdida, después vuelve de nuevo en sí.No me van nada estas historias, prefiero la brisa nocturna en mi rostro mientras conduzco mi harley por carreteras de poco tránsito.

-Ha sido un placer- exclama Jeremy con su voz suave, correcta e infantil. -Debo marchar, aún me quedan asuntos que atender en esta ciudad, puede que lo de esta noche solo sea un juego de niños comparado con lo que me espera- Tras unos instantes pensativo, el pequeño mete sus delgadas manos en los bolsillos de su chaqueta antes de digirse haci la salida -Hasta pronto...-

-Lástima no haber podido perder más tiempo con ese inútil de Scott... Pero el juego todavía no ha acabado...- Piensa el pequeño mientras recuerda su conversación con el demonio...-El tiempo se acaba y todavía hay muchos demonios por destruir, pero ahora sólo uno espera...- Las palabras fluyen por la mente del crío mientras se para en el umbral de la puerta para abrochar su abrigo hasta el cuello, sabe que es inútil, que no va a resfriarse, pero de vez en cuando le apetece ser un niño...

Su silueta se difumina en la oscuridad de las últimas horas nocturnas mientras los pasos se apagan en la lejanía...

Aún siento el agradable pasar de los proyectiles junto a nosotros, la imagen de desesperación y suficiencia de los que se encontraban en el muelle, la luz de la luna abrazándonos, los gritos, mi ego.

¿Quién hubiese esperado una conclusión así? En un instante me encontraba luchando ante una simple elección fílmica, al instante leyendo sobre un sospechoso atentado, seguidamente actuando como detective y juez, luego como explorador, de nuevo juez y también asesino.

No había sido la noche más normal ni la más extraña de todas. Siendo un vampiro, puedo asegurar que fue otra noche. Otra más en la que tengo bastantes probabilidades de irme a dormir y volver a alzarme a la siguiente.

"- Está bien... no viene mal un trago- contesto a Josh".

Qué hubiera hecho Stan en mi situación, es un misterio. Como todo lo relacionado a él. Tal vez hubiese corrido calle abajo al saborear el peligro y luego vuelto perseguido por lupinos o trayendo alguna bomba. Siempre sonriente, mofándose de su suerte, de la de los demás, de sí mismo.

"...- guardo un simple silencio ante la pregunta de Daniella y acompaño el mutismo con una mirada fija en la bebida".

El color carmesí en el recipiente me recuerda al sórdido gorgoteo que emanaba del machete. Y los ojos trémulos de Berenice llegan a mi mente. "¿Habrás visto lo sucedido? Cada gota que cae me recuerda a la esperanza de que el pequeño lago bajo tus pies volviese al lugar de donde venía". Sonrío y me mantengo absorto un instante en mis cavilaciones.

Muevo mi cabeza para saludar al pequeño ni bien vuelvo en mí. Interesante demostración la del niño... un agradable compañero. A él le quedaría bien la frase que solíamos repetir: "Mientras exista un niño, el circo será eterno". Hoy ha sido un buen espectáculo.

Me levanto. Con ambas manos corro mi cabello hacia atrás, tratando de peinarlo.

"- El público se retira... la noche ha dado sus frutos y los actos han gustado... el show terminó- le digo a los presentes y saludo como si lo hiciese a una tribuna-. Tal vez nos veamos, tal vez no... las noches pueden ser raras a veces- expreso antes de cerrar la puerta y salir".

Camino lo necesario para arrastrar mi pellejo sin vida a la calle. "En momentos como este me vendría bien un cigarrillo... he tenido una agradable sesión de sexo", pienso y sonrío.

Sigo el sendero que obligatoriamente trazan las aceras hasta encontrar un oscuro callejón. Exploro su pequeña inmensidad mientras las luces de las lámparas que iluminan la noche van dejando de dibujar mi figura. Ya no me encuentro. Mañana será una nueva noche.

Daniella observa ausente la partida de los que han sido sus compañeros durante las últimas noches.

Si fuera posible, se podría decir que Daniella siente incluso agradecimiento hacia ellos.

Unos minutos después, Daniella se dirige con voz cansada hacia Josh.

Josh, creo que me vendría bien descansar aquí hoy. Mañana mismo me iré. Espero que no te importe...

- Ok...podéis descansar los días que necesitéis aquí...y si salís de la ciudad os ayudaré en la medida de mis posibilidades... - dice Josh a modo de despedida.

Luego desaparece y quedáis solos en la sala. Vuestros caminos se separarán sin duda a partir de esta noche, algunos continuaréis en la ciudad otros os iréis lo más lejos posible. ¿Qué será de vuestro futuro? Muy pronto lo sabréis....