"Si alguien te pregunta, estos hombres no han estado aquí, ¿de acuerdo? No quiero que se piense que rufianes de este tipo rondan mi casa o a mi hija."
Antes de esperar una respuesta, el Reverendo se levanta de su sillón, y da un soplido de cansancio tras un duro día de trabajo
"Bueno, hora de ir a dormir. Mañana nos espera otro día duro."
Esta bien padre... Hilda asiente con la cabeza y sonrie a su padre.
Buenas noches padre descanse. Mañana sera un nuevo dia. Hilda se aproxima a su padre y le da un beso, despues se marcha en dirección a su habitación.Al entrar en su habitación la chica se prepara para irse a la cama, pero anto de acostarse reza durante unos minutos. Acto seguido se mete en la cama.
Avisais vosotros del nuevo dia¿?
A la mañana siguiente, te despiertas con el cantar de un gallo lejano, como es costumbre. En la entrada de la habitación hay una nota, con una letra pésima y numerosas faltas de ortografía.
"Señora, no la e querío despertar y el señor me a mandado de compras, aller su padre estubo hablando con esos hombres para que le dieran su merecío a alguien, pero no pude averiguar a quien."
En el salón de la casa se oye cómo el pesado pomo llama a la puerta. La anciana criada abre al sheriff y a su ayudante, que son conducidos al salón, donde espera el viejo reverendo, impaciente en su sillón.
Con el vozarrón del reverendo puedes oír toda la conversación desde el piso de arriba, y bajar si te apetece :)
"Buenos días, caballeros" - El reverendo es brusco y su voz, dura - "En qué puedo ayudarles?"
Me quite el sombrero nada mas entre por el salón del reverendo que estaba sentado con su figura imponente en su majestuoso sillón.
- Buen día reverendo, ¿Como van las cosas por aquí? ¿Todo va bien?.
Pregunte con cortesía al reverendo al entrar en su casa.
"A días, sheriff, a días. ¿Qué le trae por aquí? ¿Quiere sentarse?"
El Reverendo contesta impasible, y más que amable parece cansado.
Claro, acepte sentarme con una sonrisa mientras me acomode en el asiento le mire fijamente a los ojos.
- Cuénteme reverendo ¿ha tenido problemas estos días con algunos extranjeros?, estoy aquí para ayudarle.
Espere paciente a que me contara lo ocurrido.
"¿Problemas con extranjeros? ¿A qué se refiere?" - El Reverendo te mira, desconfiado - "Ayer vinieron a hablarme unos jóvenes nuevos en el pueblo, buscando algo de información, direcciones, ya sabe, pero no dieron ningún problema."
Wooops, perdón por el retraso, se me olvidó desmarcar esta escena y pensé que había sido yo el último en postear >.<
[B]- Mmm información, muy bien reverendo pues ese era el motivo de la visita saber si todo estaba bien. Al fin y al cabo esa es mi misión preservar el orden del pueblo y todos los ciudadanos[/B.
Estaba comenzando a levantarme sin más temas que tratar por el momento, mirando de soslayo a mi ayudante por si quería aportar algo para aportar y defender su teoría.
"Bueno, gracias por la visita, sheriff, pero, seguro que como usted, tengo mucho que hacer. Si no le importa"
El Reverendo se levanta, invitándoos amablemente a salir.
Con un gesto del sombrero me despedi del reverendo...
Señorita... termine otra reverencia para despedirme de la dama y sali por la puerta de nuevo en direccion a mi oficina.
Si sorry no vi la respuesta