Partida Rol por web

...Por mi parte me marcho ya o mi mujer me matará...

Cuando Klemet se acercó a su compañero parecía que la conversación estaba terminando.

El  hombre del pelo grasiento se marcha de la taberna justo cuando el thurl se acerca al guerrero, quien apura su jarra de cerveza antes de hablar.- Hay algo en ese que no termina de gustarle a Thorgrim. Sabe demasiado de nosotros y nuestra misión aquí.- Le dice para comenzar arrugando el gesto.- Ha contado que retienen a alguien importante en una casa en el puerto. Habrá que contárselo a los demás.

Entre tanto gentío me cuesta un tiempo en llegar a la altura donde esta Thorgrim, para cuando llego el hombre con el que estaba hablando ya se dirige a la puerta mientras Thorgrim se gira hacia mi mientras termina de apurar su jarra de cerveza, ven, salgamos afuera junto al resto, nos hacemos a un lado de posibles oídos o miradas indiscretas mientras salimos fuera de la taberna, que es lo que te ha dicho ese hombre, y que es lo que sabe de nosotros?, quizás aun estemos a tiempo de volver a tener unas palabras con el...

El berserk salió de la taberna acompañado por Klemet, ojeó la calle en busca de sus compañeros y en cuanto los vio camino hacia ellos.- Tengo nuevas noticias.-Les dice a todos al llegar a su lado, intentando levantar la voz lo justo para que oídos indirectos pudieran oírle.- El hombre que nos miraba con tanto descaro en el bar parece sabe demasiado de nosotros. Le contó a Thorgrim que pensaba que estábamos aquí buscando a alguien. A alguien importante. Y que según ha escuchado por ahí retienen a alguien importante en una casa del puerto.

El guerrero deja unos segundos para que los demás asimilen sus palabras y luego negando con la cabeza continua hablando.- Y todo sin necesidad de sobornos ni tampoco de amenazas... El hombre parecía dispuesto a contarle absolutamente todo lo que sabía a Thorgrim sin tener casi que preguntarle. No me gusta.

-¿Por que lo has dejado marchar? Deberíamos haberlo matado-se quejó el juto.

- En efecto, digo, asintiendo a Thorgrim y al juto, aunque levanto una mano,  esto huele muy mal, y nos pone sobre aviso de que saben que estamos aquí, y para lo que estamos..., continúo, tratando de encontrar una parte buena en estas nuevas e inquietantes informaciones. Pero hay que ser listo, Juren, y aprovecharse de ello!! Si le matamos, perdemos conexión con nuestros enemigos...,  digo, despacio, para que cale incluso en alguien tan simple como el juto. Mirando a Thorgrim le digo: - Bien hecho, hijo de Thor!! El hombrecillo anda aún dentro de la Taberna?? Si es así, entrad de nuevo,  digo, mirando también al Scalda y sacando dos monedas, y dadle esto diciéndole que, si mañana por la tarde, trae más información sobre cómo entrar en esa casa, habrá más monedas. Necesitamos que se lo crea, Yngwe...,  acabo, guiñandoles un ojo.

Después, dirigiéndome a todos, continúo:

- Ahora, más que nunca, creo que debemos actuar con rapidez. Si he de fiarme de alguien, lo hago del viejo Guldeiff. Nadie da algo por nada, y menos en esta ciudad. Lo del calvo de ahí dentro, digo, señalando a la Taberna, huele a trampa, y podemos tratar de engañarles para que crean que caeremos en ella. Mientras, deberíamos seguir adelante con el plan original en la cabaña... Pero Thorgrim e Yngwe deberían actuar rápido, antes de que el hombrecillo desaparezca, y luego reunirse con nosotros en el callejón, cerca de la cabaña, confirmando que el hombre calvo no les sigue. Hemos de dar el golpe pronto, y tratar de salir de esta asquerosa ciudad está misma noche...

Y de nuevo, como me propuse hacer tras volver de la misión de búsqueda de la Bruja de la Escarcha, pido opinión a mis compañeros, buscando fortalecer el grupo:

- Bien, que opináis??, pregunto, mirando activamente a cada uno de ellos.

Escucho atentamente a Jorunn mientras no dejo de observar a través de la oscuridad de mi capucha que ningún ojo indiscreto nos este vigilando, hija de Hrold si algo esta claro es que Loki nos tiene en sus manos, y ni siquiera los Dioses saben que nos tendrá deparado en esta sucia ciudad...pero cuanto antes actuemos antes lo podremos descubrir, no creo que demorarnos mas nos pueda ayudar, como bien decís mi señora hay que actuar con premura...

La sugerencia del juto pareció tonta incluso a alguien tan acostumbrado a las reyertas como el berserk. ¿Cómo iba a empezar una pelea en un bar en mitad de una ciudad que no era la suya y con un hombre que ni siquiera le había levantado la voz? Lo único que habría conseguido de hacerlo habría sido acabar detenido o algo peor

El hombrecillo salió de la taberna segundos antes que Thorgrim.- Responde el guerrero a la hija del jarl cuando Klemet acaba de hablar.- Si no pasó por aquí debió marcharse calle abajo. Tal vez aún podamos darle alcance. ¿Yngwe?- Le preguntó al scalda dispuesto a partir corriendo en busca del hombre del pelo grasiento.

-Yo creo que deberíamos matarlo tras descubrir que sabe. Pone en peligro a la princesa-respondió tajante pero en voz baja.

Si lo que el hombre que había estado hablando con Thorgrim decía la verdad, entonces el plan de entrar en la cabaña era una pérdida de tiempo. Seguramente ahí solamente estarían otros esclavos o prisioneros normales y corrientes.

—Creo que estaría bien que alguien pudiera dar alcance a ese hombre y ver donde se dirige y con quien habla. Si es una trampa, por lo menos estaremos preparados. Pero matarlo me parece una estupidez, sobre todo si nos descubren.

La völva se giró hacia Jorunn, no sin cierta extrañeza al ver su cambio de actitud, eso era bueno, que contara con el resto de sus hombres. Aunque al final fuera ella la que tuviera la última palabra, escuchar a los demás siempre podía dar otro punto de vista que quizás ella no había visto.

—Hagamos lo que hagamos, creo que debemos hacerlo ya. Estamos perdiendo demasiado tiempo y, si seguimos aquí reunidos, podemos llamar demasiado la atención. Por mi parte lo único que quiero es poder salir de esta asquerosa isla cuanto antes.

A Yngwe le bastó con oír su nombre de la voz de Thorgrimm para salir a la caza, tirando del guerrero que en dos zancadas ya le había adelantado. - Si no sigue en la taberna, en alguna habitación, tal vez ande en los callejones alrededor. Busquémosle bien

Yngwe deshechó los caminos frontales de la taberna y le dió la vuelta buscando otra puerta de ésta, una vez encontrada recorrería calles y callejuelas que salieran desde ésta.

El grupo estaba de acuerdo con que a favor o en contra encontrar a ese tipo era necesario antes de continuar con su plan. Por suerte acababa de salir de la taberna poco antes que Thorgimm y Klemet y aunque ninguno se fijó en el no tardó Yngwe en señalarlo. Caminaba calle abajo, arropado por una sucia capa de piel.

Esto será pan comido.- Thorgrim coge las monedas y con grandes y poderosas zancadas comienza a perseguir calle abajo al tipo del pelo grasiento,  recortando el espacio que hay entre ellos en segundos.

Cuando lo tiene al alcance de su brazo dice.- Eh.- y posa su enorme mano derecha sobre el hombro izquierdo del hombre, deteniendo su avance. Cuando se gira le estrecha la mano igual que harían un par de amigos que se saluda.- Una casa en el puerto es poca información.-En ningún momento alza la voz más de lo necesario tratando de evitar oídos indiscretos, pero cuando cesa el saludo las monedas que de Jorunn han cambiado de manos.- Cuál casa es y una forma para entrar en ella sería más provechoso. Mañana por la tarde estaré en la misma mesa. Tendrás más de estas si lo averiguas.

Saluda a tu esposa.- Le dice cuando se despide por segunda vez en un par de minutos del tipo de pelo grasiento en un tono de voz perfectamente audible nuevamente.

Con gran atención, voy escuchando las palabras que cada uno tiene que decir: - Es bueno ver que todos nos implicamos, eso fortalece el grupo, y sin duda, abarca mas posibilidades de las que una sola mente puede localizar..., pienso, orgullosa de compartir mi vida con estos hombres (y mujer). Me ha costado, lo se, pero por fin veo claro el por qué mi padre, antes de sentenciar algo, primero escucha las opiniones de sus hombres confianza. - Si no tuviera esta sangre caliente que tengo, que me hace saltar, las mas de las veces, sin pensar las cosas lo suficiente!!, pienso con amargura, aunque, por suerte, mis compañeros..., no, corrijo, mis amigos, me han dado siempre una oportunidad tras otra..., acabo mi autoanalisis, fortalecida en el alma.

Thorgrimm ha cogido las dos monedas, y, junto a Yngwe, se dispone a salir tras el hombrecillo, que ha salido apenas antes de ellos de la taberna. Klemet y Hild están de acuerdo en actuar lo antes posible, y la völva expone la posibilidad de que el hombrecillo tenga razón, y la cabaña no sea mas que un jirón de niebla, que se deshaga en un grupo de esclavos distintos a los que buscamos: - Que los Æsir estén de nuestro lado, y esa posibilidad no sea la cierta, Hild, pues, como dices, necesitamos salir de esta isla lo antes posible..., y, mirando a un lado y otro, para confirmar que no hay oidos indiscretos, ... con aquellos a los que hemos venido a buscar...

Juren, el juto, vuelve con sus ideas terminales, y sus salidas de tono: - Odin, dame paciencica con él!!!, suspiro, sabiendo que, cualquier confrontacion con él, lo unico que va a traer son atenciones no deseadas sobre nosotros. Mirando a Ligurd, su compañero, le imploro que le controle.

- Bien, pues estamos de acuerdo en actuar ya, pero, estais de acuerdo en seguir adelante con el plan que hemos comentado?? Sigurd, aun no has hablado: cual es la opinión del Ulfhednar??, digo, mirandole a la cara. Hagamos lo que hagamos, hay que avisar a Osvif, para que prepare la nave para irnos esta noche. El hecho de que haya aparecido el de pelo grasiento dando a entender que sabe a qué venimos, aun mete mas urgencia a este hecho, pues, como nos delate alguien, estamos perdidos!!

Thorgrim e Yngwe se van calle abajo a buscar al hombrecillo. Cuando vuelvan, hemos de movernos rápido.

El hombre se giró sorprendido cuando Thorgrímm lo paró.

-Es la casa que hay junto a la choza del Grünir, el que hace aperos de pesca-explicó rápidamente dando algunas indicaciones más para que supieran encontrarla- no se si encontraréis ahí lo que buscais, pero olvidad que me habeis visto. No me gustaría verme en problemas-dijo nervioso para acto seguido taparse con una capucha y emprender la caminata calle abajo alejándose del grupo.