Cita:
El público parece exigente pero cuando te colocas delante del atril es como si toda esa gente desapareciera. Sin prisas abres tu carpeta y empiezas tu discurso que llevas tanto tiempo preparándote que casi te lo sabes de memoria. Hablas y hablas sin parar sobre las motivaciones de la gente, el miedo al fracaso, las distintas formas de ver la vida y antes de que te des cuenta has terminado el discurso. La gente te aplaude y cuando sales del escenario te encuentras con una mujer mayor que se lanza a tus brazos, sabes que la quieres y que es tu esposa. Te miras las manos con arrugas mientras la abrazas con ternura pero justo en ese momento…
Un ruido molesto seguido de un fogonazo de luz que te golpea en la cara te despierta de súbito. Sorprendido intentas taparte la cara con las manos pero descubres que tienes las manos atadas y que llevas un mono sucio y raído de color marrón. Te han afeitado la cabeza y llevas unos zapatos baratos que te quedan grandes en los pies. Sorprendido y temeroso observas lo que ocurre a tu alrededor. Estas sentado en un viejo sofá y hay más gente a tu alrededor. Todos visten la misma ropa y parecen estar asustados como tú. Intentas recordar que ha pasado para haber llegado a esta situación pero no consigues recordar nada y además te resulta muy molesto. ¡No recuerdas nada sobre tu mismo!
Sorprendido por este acontecimiento te reclinas en el sofá intentando hacer balance de la situación. Eres consciente de que trabajas como psicólogo o de trabajador social ya que estas acostumbrado a tratar con la gente y hacer análisis sobre ellos. Pero no recuerdas ni tu nombre, ni de donde eres, ni nada de eso. Solo tienes pequeños retazos de conocimiento que no llevan a ninguna parte.
La discusión que ha provocado el señor martin (55) intentando dejar entrar a una de esas "cosas" dentro de la sala te ha servido de algo. Parece que tu mente consigue vencer a las telarañas de tu cabeza y traer un recuerdo a tu cabeza.
Cita:
Afuera hay una discusión. Varias personas estas discutiendo alzando mucho la voz. Hay un gran descontrol y observas a un mujer joven que parece ser la secretaria del lugar que intenta calmar a las personas involucradas. Te acercas a los dos hombres que están discutiendo. Uno parece ser el típico pandillero latino con cadenas, pantalones anchos y camiseta blanca. El otro es un hombre mayor vestido de traje y con el pelo cortado a cepillo.
Lamentablemente el recuerdo termina aquí pero te alegra saber que empiezas a recordar. Eso debe ser bueno porque tal vez consigas recordar más cosas.
La situación en la antesala del laboratorio con el ruido de antes, la puerta de cristal y el resto de gente a la espera de lo que vaya a ocurrir te trae a la cabeza el recuerdo de una mujer que debe ser muy querida por ti. Tienes la sensación de que tienes algo por lo que seguir viviendo
Ese tipo no parece ser nada bueno para el grupo. ¿Esta enfermo? ¿Porque se mueve así como si estuviera tiritando cuando no hace frío? Seguro que acabará empeorando todo por su culpa...
Me refiero a 58
La presencia de mesas y sillas te recuerda tu época de estudiante en la facultad. Algo viene a tu cabeza, rumiando y luchando por salir de tu subconsciente...
Cita:
Entraste en la facultad por el motivo equivocado. No quería ayudar a la gente, sino conocerte a ti mismo. Pronto sufriste la típica hipocondría de todas las profesiones sanitarias, temiendo constantemente estar empezando a sufrir cualquiera de las enfermedades mentales que estudiabas. En un momento dado se produjo un punto de inflexión en el cual o encontrabas una salida o probablemente tendría que dejar la carrera lleno de pequeñas manías.
Tu método de defensa contra la locura fue la evitación. Evitando los peligros, las situaciones tensas, los traumas, evitando acabar sufriendo cualquiera de esas enfermedades mentales. Pero la gente es inconsciente, las personas parecen estar totalmente carentes de sentido común o haber caído ya en estos traumas que tu temes sufrir si te expones a los peligros. Por eso tiendes a juzgar rápidamente y analizar a la gente, en busca de sus defectos, defectos que puedan acabar poniéndote a ti en situaciones peligrosas y dolorosas.
Consejos de interpretación: Juzga los defectos de los demás y asegúrate de que no te afecten y de que sus defectos no te hagan caer en peligros y situaciones traumáticas innecesarias que te podrían llevar por el camino de la locura. La gente es estúpida y se mete en esas situaciones con facilidad. Analiza su comportamiento y detecta a los que antes pueden hacerte caer en el abismo de la locura con ellos. Adviérteselo a los demás que aún estén sanos. Es tu responsabilidad, después de todo eres psicólogo... y recuerda que eres el doctor, ¿no? (tú pj es al que todo plan le parece malo)
Aquí debería ir el MP que te he enviado pero que he olvido copiar :(
Asustado y temeroso observas lo que ocurre, o al menos lo intentas ya que no hay mucha luz en la sala. La situación no pinta muy bien, va a ser dificil salir de esta pero por lo visto hasta ahora ya vas viendo en quien puedes confiar.
52 se ha cargado al bicho ese él solo con el baté y eso que es un chaval
53 (jeanette) parece tener cojones pese a ser una mujer
55 (martin) esta loco pero tiene un arma
57 también los tiene bien puestos
El resto no son mucho de fiar
¿Frank Hills? Pues si, ese es tu nombre. Parece que empiezas a recordar...
"Empieza" a recordar... algo más? :) Por ejemplo, que sabe artes marciales y técnicas de inmovilización? O trucos de invisibilidad?
No recuerda el pobre Frank nada más? Va a quedar, realmente, como el senil del grupo sino...
Tal vez... ;)
Si te cargas a Terrac-A en la partida de Dalavor te subo de nivel en esta, ja ja
Sobre el resto de personajes:
52 parece ser un muchacho muy activo pero sin las ideas claras, da la impresión de ser una persona que reacciona y no toma decisiones. O tal vez será porque es todavía bastante joven.
53 es bastante extraña. Tiene mucho carácter y un cuerpo esbelto de atleta. Te parece una persona capaz de hacer cualquier cosa por conseguir lo que quiere
54 esta muerto pero esta claro que os ocultaba algo
55 es un tipo que parece querer tener el control de la situación. Le gusta mandar y cuando se le discute algo no se lo toma nada bien
56 es una chica asustadiza y temerosa. Sin duda algo anterior a estos sucesos debió marcarle
57 es un tipo que va de tipo duro pero que en el fondo no es mala persona. Se muestra dispuesto a colaborar y escucha lo que los demás tienen que decirle
58 es un tipo complejo. Seguramente su vida no ha sido fácil ya que muestra los síntomas de la persona que no confía en nadie pero que no quiere estar solo.
Bueno, algo es algo
Bueno, los flashbacks se me terminaron pero si se te ocurre algo interesante que añadirle no te cortes. A estas alturas de partida deberías hacerte una idea bastante clara de como es tu PJ
Esta claro que del tipo este no vais a conseguir nada a corto plazo. Haría falta tiempo y esfuerzo y es algo de lo que no disponéis en este momento.
Mi personaje fue retomado a mitad de la partida, pero aun así, y quitándole lo del acento argentino (que, a mi modo de ver, no le pegaba nada), creo que me he hecho con él pronto. Le quise dar en todo momento una mente fría, y un espíritu totalmente racional. Lo único que lamento es haber estado ausente estos días, en la recta final.
Pero aun así, tengo varias preguntas que hacerte:
-Quién era el chico que estaba encerrado con el cadáver? Y quién era el cadáver?
-Los zombies estaban ahí por que sí?
-Por qué diablos Jeanette no dijo que 58 era un puto zombie? De qué hablaron cuando salieron, y por qué daban ese aire de guardar un secreto? Si al final casi la come a ñiscos!
Me has gustado dirigiendo, en general. En algunos puntos, me hubiera gustado tener más referencia o información, pero supongo que era lo que pedía la escena en ese momento: desinformación, caos y la imaginación poniéndose en lo peor.
Gracias por acogerme en tu seno, y hasta la próxima ;)
Lo del psicólogo argentino es un cliché, lo cierto es que al personaje le faltaba gancho y le metimos eso porque el jugador que lo iba a llevar en mesa acostumbra a hablar así. Lo dicho, en mesa tenía su gracia porque el tipo que lo llevaba le aportó el carisma que le faltaba.
En un survival horror acaba siendo un personaje prescindible porque no aporta apenas nada salvo el poder recuperar puntos de cordura que según las reglas de Cthulhu necesita de varias horas y tal así que tampoco es que fuera muy útil.