Valerii aceptó estoicamente la reprimenda del CAG, manteniéndose firme mientras prestaba atención a sus palabras y a lo que de verdad quería escuchar. Todos ellos merecían una respuesta a esa pregunta, y al contrario de lo que Lee pensaba, Bommer estaba convencida de que ahora habría más esperanza, al menos para ella la había... sin embargo abandonó la sala antes de que ella pudiera dar una respuesta a su discurso.
-Supongo que el capitán está demasiado tenso a pesar de que quiera disimularlo, es humano como todos nosotros... Pero pensad bien en lo que ha dicho, si todavía no han encontrado la fuente que informa a los cylons de nuestra posición significa que ésta situación acabará tarde o temprano, cuando la encontremos. Debemos seguir luchando como hasta ahora, no debemos desanimarnos, es lo único que puede hacernos perder esta guerra- miró alrededor, más decidida que hace unos segundos a subirse a su Raptor y darlo todo por el Galáctica a pesar del agotamiento mental que había ido acumulando.
-Por Galáctica... ¡y por los humanos!- exclamó sonoramente, alzando uno de sus brazos antes de abandonar la sala de reuniones rápidamente para no llegar demasiado tarde al hangar.
Apolo dame un dia para que te abra paso a la escena del hangar ok?? estoy hasta arriba con el curro. Cuando veas que ya hay post en ella para ti es que puedes postear :)
Sin problemas, veamos como responden mis rebeldes pilotos... :)
Starbuck presenció la explosión de ideales y emociones con un estoicismo que no le correspondía. No interrumpió a Apolo de ninguna manera, ni siquiera con gestos, y cuando Boomer habló, tampoco hizo nada. Empezó a mirar a su alrededor, la ebullición, los rostros, las preguntas sin respuestas. Las muertes, las pérdidas, el cansancio acumulado, la adrenalina y la incertidumbre. Una vez que ambos expositores se hubieron marchado, y la hubieron dejado al lado a una puerta de distancia de una nueva batalla, decidió que algo tenía que hacer por la situación más que poner su vida para pelear por ella. Se enfrentó al conjunto de pilotos revolucionados, firme y con los ojos fijos.
- Nuestra misión no es sólo poner nuestra vida por los nuestros, si no buscar lo mejor para el Galáctica y para los que quedamos ahora mismo. Tenemos derecho a preguntar y a pensar, y a que nos responadn. Pero en este momento, justo en este segundo, no importa si hay o no un Cylon de apariencia humana. Si lo hay, ya los trajo hasta aquí, y nos toca primero enfrentar eso y buscar lo otro después. ¡Vamos! - la voz de Starbuck se volvió agresiva, alta y llena de aliento; a pesar de eso, no sonaba como un líder en la retaguardia arengando a sus seguidores, si no como un compañero a su misma altura animando a sus pares para ir a dar su vida todos juntos al frente - ¡Afuera los esperaremos, y volveremos a destruirlos, por el Galáctica, por nosotros, y por los que queden y nos estén esperando! ¡Por la victoria! - acabó exclamando, con una sonrisa inmensa de confianza y esperanza.
Dicho esto, dio la vuelta y salió en dirección al hangar.
Con la mirada baja y expresiones un tanto avergonzadas los pilotos escucharon el discurso de Apolo. Cuando el capitán había comenzado a hablar el zumbido que había llenado la sala se había acallado poco a poco y cuando la figura del CAG desapareció en el pasillo en dirección al hangar, un silencio incómodo y tenso llenó la sala roto periódicamente por el tic tac del reloj. Sin embargo, con la esperanza renovada en su interior Boomer se apresuró a dar un paso al frente y sus palabras llenas de confianza hizo que todos alzaran los ojos y asintieran animosos.
-¡POR GALACTICA!-rugieron todos en respuesta al grito de la teniente.
-¡POR LA VICTORIA!-gritaron cuando Starbuck les arengó recordándoles lo importante de su misión. Con el orgullo destilando por todos los poros de su piel, los ojos brillantes y despiertos, aquellos que ya habían recibido sus dosis de estimulantes salieron apresuradamente de la sala no sin antes rozar con sus dedos la imagen del soldado caído que pendía al lado de la puerta.
-Nunca olvides...suerte...victoria...hasta la vuelta...unidos...por siempre..firmeza...volveremos...-fueron murmurando a su paso.
Mientras tanto, los que aún no habían tomado las pastillas se pusieron de nuevo a la cola y la enfermera Ishay, recuperada, volvió a coger el boli y reanudó su tarea apresuradamente. Apenas se entretenía en hacer un breve examen consciente de que, ahora más que nunca, el tiempo apremiaba.