Partida Rol por web

Ligeramente nerviosa y preocupada por lo que ocurriría a continuación salvaste la distancia que te separaba de la Sala de Reuniones, fuertemente custiodada por dos marines armados con subfusiles. Ante tu explicación del por qué de tu presencia allí, el que parecía de menor rango se limitó a asentir en silencio antes de girarse y dar dos sonoros golpes sobre la superficie metálica de la puerta. Un voz apagada pareció contestar desde el interior y mientras se echaba a un lado para franquearte el paso su compañero hizo girar la escotilla abriendo la puerta. Ansiosos tus ojos recorrieron la sala, tomando buena nota de la presencia tanto del Comandante, como de la Presidenta Roslin, el coronel Tight, la teniente Thrace y el capitán Apolo. Los seis se hallaban sentados entorno a la mesa de reuniones en forma de L que ocupaba casi todo el espacio y por sus rostros serios y expresiones preocupadas sin ninguna duda habían estado hablando de temas sumamente serios antes de tu llegada.

Al verte, el Comandante hizo un gesto con la mano

- Ah, teniente....la estábamos esperando...por favor pase- dijo de manera cortés pero fría.

Entré en la sala con expresión nuetra, aunque mi mirada reflejaba algo de nerviosismo. Recorrí con la mirada las caras de los presentes y me quedé parada cerca de la entrada. Tras el saludo protocolario esperé quieta a que se me dieran órdenes o permiso para sentarme.

Starbuck miró a Boomer mientras entraba a la sala. No se le pasó por alto el nerviosismo que reflejaban sus ojos y, en el contexto de la situación, eran como un faro encendiéndose de forma intermitente en medio de la penumbra. Había mucho allí que estaba pendiente de lo que tuviera para decir, y que en realidad, dependía de cada una de sus palabras o de sus implicaciones. Posiblemente, eso explicaba el silencio que se había hecho, la falta de reacciones, más que ningún respeto protocolario o ninguna autoridad. Mucho pendía de un breve pedazo de información, o de acción, tanto que casi era violento.

Una sensación de impotencia comenzó a hervir en su sangre. La impaciencia la asaltó. ¿Qué estaban esperando?

Miró al Comandante Adama, esperando que moviese los engranajes de la máquina.

Adama permaneció unos segundos mirando pensativo a Boomer antes de hacer un gesto con la mano indicando con un gesto el estrado que había en el medio de la U formada por las mesas de color grisáceo. De madera y aspecto formal el estrado se hallaba flanqueado por las banderas de las nueve colonias y a su lado, colocado en lo que parecía un tablón o pizarra de plástico se hallaba un mapa de la nave, unos puntos en rojo señalaban dónde habían sido las explosiones.

Mientras lateniente Valerii caminaba por la sala en dirección al estrado Adama carraspeó ligeramente y miró sus papeles sin verlos realmente. Daba la sensación de que, por primera vez, no estaba seguro de controlar la situación. Finalmente cruzó las manos ante sí y alzó la mirada para enfocar a Sharon que aguardaba pacientemente.

- He hecho venir aquí a la Teniente Valerii porque poco después de que terminase el reconocimiento de los daños en el casco se presentó ante mí con una extraña...situación. Por favor, siéntanse libres de hacerle cualquier pregunta que consideren necesario- comenzó con voz firme mirando uno por uno a los presentes.- La teniente Valerii se hallaba en su camarote cambiándose para la ceremonia de bienvenida de la Presidenta cuando descubrió en su taquilla un detonador G4- hasta ahora Adama no había mirado a Boomer pero ahora lo hizo- teniente ¿puede confirmarme este hecho y explicarnos cómo lo encontró exactamente?

Gaius enarcó una ceja al escuchar las palabras del Comandante Adama.

Vaya, pues es una pena. La chica está realmente bien, con esos rasgos orientales...

Sin embargo, por una vez tuvo la cabeza de no hablar en voz alta, al menos hasta que la teniente Valerii se hubiera explicado.

Me dirigí hacia el estrado con gesto impasible, sintiendo las miradas de los demás sobre mi. Intenté permanecer tranquila, pero la evasiva mirada del Comandante me transmitió cierta intranquilidad. Cierta tensión parecía palparse en el ambiente.

Cita:

Respondí a las palabras del Comandante mientras asentia con la cabeza -Sí Señor, confirmo sus palabras. -Hablé con tono neutral sin dejar de mirar al Comandante. - Estaba en el camarote cuando descubrí un detonador G4 al abrir mi bolsa, ignoro totálmente cómo había llegado allí. Me dirigí inmediatamente a colocarlo en su lugar, y ebtibces descubrí que faltaba más de uno. -

Me quedé callada de nuevo, esperando, casi temiendo más preguntas. Las angustias pasadas en las últimas horas parecían querer bardearme de nuevo desde el interior de mi cabeza, y tuve que poner todo mi empeño para permanecer firme, aparentemente impasible.

Observaba toda la escena en silencio. Esta situación se escapa de lo normal. La teniente Valerii encontró un detonador de explosivos justo cuando sin razón aparente, una rotura en el casco ha producido la fuga de gran parte de nuestras reservas de agua. No podía ser una coincidencia, debemos pensar en un sabotaje, que alguien ha jugado con explosivos. 

¿Pero quién? Miré a mi padre y vi que había duda en sus ojos. Las pruebas señalaban a Boomer, pero estaba seguro de que él quería negar con todas sus fuerzas que Sharon era la culpable. Que quizá fuera una especie de trampa contra ella. El Comandante la quería como una hija, y no la creería capaz de hacerlo. Y aún así, había algo de duda en sus ojos.

Decidí actuar y preguntar sobre el tema. Boomer llevaba algo de tiempo con nosotros, y aunque aún fuese un poco novata pilotando vipers, yo no dudaba de su inocencia. Ella no podía ser una traidora. Además, si lo fuera, no nos habría dicho que el detonador estaba en su bolsa.

- ¿No recuerda si dejó su bolsa al alcance de alguien? Creo que es importante que haga memoria, y recuerde si ha estado con alguien que haya podido  tenderle una trampa - Me giro hacia el Comandante, para seguir con el tema - Creo que debemos ver entre nuestro personal, quien tiene acceso al almacén de armamento. Debemos descartar a los que no podían tener acceso a los explosivos y así quizá acortemos las sospechas sobre quien está detrás de todo ésto. - Y para que no vieran que descartaba del todo las pruebas contra Boomer, volví a preguntarle - ¿Cuando fue la última vez que estuvo en el almacén de los explosivos antes de ver que faltaban? Quizás eso nos haga fijar un intervalo de tiempo y saber cuando fueron robados.

Hacía las preguntas mirándole sin expresar nada, algo frío... para ser más objetivo. 

Mientras esperaba las preguntas luchaba interiormente conmigo misma. - ¿Por qué no lo has dicho todo Boomer? ¿qué te ocurre? Sabes qué es lo que tienes que hacer, así que ¡hazlo! ¿Pero que es este sentimiento que te lo impide? ¿Miedo? No puedes permitirtelo, no abandonaste a tu compañero para salvar unas vidas que ahora puede que hayas puesto en juego - De pronto una sensación de tedio e infinito agotamiento me invadió. Era como si esta lucha la hubiera tenido antes, como si la tuviera constantemente en los últimos tiempos. Ya no podía más.

Me giré hacia Apolo al oirle hablar, saliendo repentinamente de la conversación interior que tenía en mi cabeza. Había tomado una decisión, y este era el momento de contarlo todo, pasara lo que pasara.

Cita:

Respiré hondamente antes de responder - Lo cierto señor, es que no recuerdo nada. Últimamente sufro desmayos, y despertando de uno de ellos me encontré allí, en el vestuario, empapada y con un detonador en la bolsa. La última vez que fui a la sala de explosivos había sido la semana anterior, para recoger el armamento para el Raptor. Ignoro completamente cómo llegó el G4 a mi bolsa, ignoro incluso cómo llegué yo misma allí. - Sentí cómo de pronto me vaciaba. Ya lo había dicho. Me giré hacia el comandante - Lo siento señor, creo que no puedo ser de mucha ayuda.

Clavé mi mirada en el comandante, esperando angustiada su reacción. No me importaba un castigo, que me encerraran, pero me dolería mucho la decepción del Comandante.