Partida Rol por web

Parece que se resiste, me gusta, pero aun asi, podria ser absolutamente descarada y llevarle con un beso a mi lecho, seguro que Jaime entraria en cuanto oyera el primer suspiro y gemido que salga de mis labios.

Cierto, deberias, pero aun asi no deberias hacer que tu reina....me muerdo el labio inferior antes de mirar a la puerta que tocan. Adelante
Al abrirse una joven que no conoces. De largo pelo negro y ropas comodas y nobles

Elia, ¿que te han dicho los criados?

Vuelves dentro de la fortaleza y caminas hasta donde estaba la reina.
Te cruzas en el camino con Ser Jaime que no te hace mucho caso y que camina con otro de sus compañeros capa blancas camino de no sbes donde. Llamas a la puerta y al otro lado la voz de la reina responde

Adelante. Al abrir ves que esta con un hombre que no conoces, bastante juntos.- Un hombre de pelo negro yropas del mismo color

Elia, ¿que te han dicho los criados?
 

Al abrir la puerta, la joven, viendo que la reina estaba reunida con un desconocido, se sintió como una intrusa. Un suave rubor asomó a sus delicadas mejillas, mientras hacía una reverencia.

¿Majestad? me han informado que el equipaje estará listo a la hora de partir. Su voz sonó delicada y algo tímida. Levantó la mirada, cruzando sus grandes ojos azules por un breve instante con el joven que acompañaba a la reina.

Lady Elia siempre había temido la ira de su majestad, y su comportamiento, normalmente tímido, se acentuaba en presencia de ésta. La joven era delicada como los pétalos de una rosa, y había presenciado muchas veces los enfados de la reina. Una dulce sonrisa asomó a sus labios, iluminando su hermosa mirada...

Tyrek contemplá a la recién llegada con curiosidad. Debía tratarse de una de las criadas de Cersei, seguramente la hija de alguna casa deseosa de complacer a la Reina.

Sin embargo, era hermosa. Muy hermosa. Lo cual podría resultarle peligroso a la pobre desdichada si en algún momento Cersei sentía celos de ella.

El joven noble recorrió sin disimulo el cuero y la tez de la joven Elia con su mirar, para después volverse hacia Cersei.

Querida prima, exclamó sonriente si todas vuestras acompañantes son tan bellas, creo que ya comienzo a alegrarme de viajar con vuestro séquito.

Aunque estaba seguro de que Cersei se consideraba la más hermosa entre las mujeres, Tyrek quería observar su reacción, saber si su ego era frágil o si su voluntad se había endurecido con los años. Por otro lado, no estaría de más conocer cómo se desenvolvería la recién llegada...

Tyrek se acercó hasta Elia y le tomó la mano para besársela en medio de una cortés reverencia.

Mi señora se presentó Tyrek Lannister a vuestros pies...

Es la niñera de mis hijos, de los principes. Pasareis mucho tiempo juntos durante el viaje y mientras les enseñas

Sonrio mientras les observo, me pareceria tan...si es perfecto si fuera posible y no le gustaran otro tipo de divertimentos. Siemrpe le puedo poner una barba a Elia y metarla en su cama, seguro que no notaria mucho la diferencia a menos que la tocara los pechos...

Tyrek es mi primo acaba de regresar de Dorne y se ocupara de la educacion militar de los principes, espero que os lleveis bien

Elia se sonrojó ante el cumplido del primo de la reina. Bajó delicadamente sus largas pestañas e inclinando levemente la cabeza una sonrisa asomó en su delicado rostro. Pero antes de llegar a presentarse, la reina hizo los honores. La joven tragó saliva al escuchar las palabras de su majestad, sabía que estaban teñidas de veneno, y su única intención había sido ponerla en ridículo. Era típico de ella mostrar la ocupación de las personas, mostrar que ella estaba por encima de todo eso, y no tenía ni por qué presentarlas debidamente.

La sonrisa se había quedado congelada, su rostro había palidecido ligeramente, pero sus ojos todavía mostraban la luz que los iluminaba. Bajó la cabeza respetuosamente, a modo de saludo y nuevamente alzó el rostro.

Majestad, si me disculpais iré a llevar mi equipaje para que lo carguen también. Dijo casi en un susurro la joven, miró nuevamente a Tyrek, recordando la conversación mantenida hacía tan solo unos instantes con Meñique... ¿Será éste el hombre al que se refería? La joven no recordaba haberle visto nunca por el castillo, así que finalmente supuso que debía estar equivocado, o incluso que había intentado burlarse de ella. Una tímida sonrisa asomó nuevamente en sus tiernos labios. Sir... Dijo a modo de despedida y se mantuvo un momento a la espectativa, esperando a que la reina le diera su permiso.

Casi en segundo plano, pero...niña muy mal tienes que aprender otras cosas y esa no es la manera sonrio mientras pongo mi mano dulcemente sobre mi regazo enlazandola con la otra.

Ve Elia y prepara tu equipaje como el de la princesa. Primo por que no vas a acompañarla, seguro que puede llevarte con mis hijos, yo debo ir a hablar con mi amado esposo.

Camino a la puerta y les miro de reojo lo dicho, espero que la sonrisa se ensancha mientras salgo cerrando la puerta a mis espaldas.

Tyrek escuchó las órdenes de la Reina y se giró al punto, abriendo la puerta galantemente para que la joven doncella pasara primero. Luego, se giró hacia Cersei y con una fugaz reverencia en forma de cabeceo, se despidió de ella.

Hasta la vista querida prima exclamó sonriente Ha sido un placer verte, como siempre.

Tyrek agardó a que Elia saliese primero, tras darle permiso su majestad para ello, y contempló no sin cierta lascivia cómo se contoneaba el cuerpo de la mujer.

¿Y debo comportarme como un caballero todo el viaje? Esto va a ser una pesadilla, al menos espero que Jaime no venga...

Después de las últimas palabras de la reina, cuando ya parecía que podía irse y apartarse de su mirada escrutadora, Elia hizo nuevamente una leve reverencia y salió de la estancia. Al pasar junto a Tyrek le echó una fugaz mirada y una nerviosa sonrisa asomó a sus labios.

La joven se sentía nerviosa ante la presencia del hombre. Se había dado cuenta de como la había mirado al llegar ella y, aunque no era la primera vez que un hombre la mirara así, éste, quizás por ser el primo de Jaime, le hacía sentir esos nervios.

Si me acompaña. Dijo tímidamente al encontrarse solos en el pasillo, y empezó a caminar en dirección a los dormitorios de los pequeños príncipes.

Caminais por los pasilos  con paso tranquilo hacia las habitaciones de los principes.
Ambos estan leyendo junto al fuego un libro uno y el otro no sabeis bien pero tiene una sonrisa en el rostro.
Al oir la puerta levanta la mirada y os mira inquisitivamente.

Elia

Elia fue caminando junto al caballero en silencio. Sus pasos, al principio tímidos, fueron ganando seguridad a medida que recorrían los pasillos tan conocidos.

Al entrar en la habitación, se encuentraron a los dos príncipes leyendo junto al fuego. Elia sonrió, en el poco tiempo que llevaba trabajando en el castillo le había cogido mucho cariño tanto al pequeño Tommen, como a Mircella. Solo esperaba que siguieran siendo tan inocentes como lo eran ahora.

Su mirada terminó cruzándose con la de Joffrey, haciendo una suave reverencia contestó intentando mostrar seguridad ante el príncipe.

Alteza, he acompañado a lord Tyrek Lannister, por orden de vuestra madre. La voz de la joven sonó suave, conocía los arrebatos de rabia del joven Joffrey, y lo único que esperaba es que hoy se encontrara de buen humor. Se apartó levemente dejando pasar a Tyrek.

Si me perdonan, iré a los aposentos de Mircella. Dijo haciendo una nueva reverencia, su mirada se cruzó por unos instantes con la del caballero, y una sonrisa asomó nuevamente a sus labios.

Tyrek observó con qué diferencia trataba la joven a los hermanos. El Lannister ya había escuchado historias sobre el carácter caprichoso del prínipe Joffrey, aunque esperaba que fueran exageraciones. Sin embargo, el tratro de Elia le puso en guardia casi de inmediato, de modo que procuró no estropear la primera impresión.

La joven le sonrió una vez más al salir de la estancia, y Tyrek le devolvió una cálida sonrisa que prometía más encuentros futuros.

El Lannister, a continuación, se acercó hasta una distancia prudencial y realizó una respetuosa reverencia, tan sólo un poco menor que la que se haría a un rey, en términos de protocolo.

Príncipe Joffrey, Príncipe Tommen  saludó formalmente  Es un honor conoceros. Hace mucho tiempo que estoy ausente de la Corte, y no había tenido ocasión de mostraros mis respetos.

Joffrey, se levanta y mira a Elia con un leve arqueamiento de ceja antes de hacer un gesto para que se marche, mientras su hermano la mira con una sonrisa y se despide con su manita.

Asi vos sois el primo de nuestra madre ese que se marcho a Dorne y que nuestro abuelo le hizo volver. te mira de arriba a abajo un par de veces

espero que seais lo suficientemente adecuado para el trabajo que os han conferido, al menos que me dureis mas que el anterior

Tyrek sonrió ante las palabras del joven príncipe, si bien en su fuero intern ya se lamentaba de las historias sobre el carácter pomposo y maleducado de aquel criajo resultasen a todas luces ciertas.

En efecto, mi Príncipe.  contestó cauto El abuelo de su Alteza tuvo a bien traerme de regreso a la Corte, cupongo que tenía en mente alguna tarea para mí. Quizá en un principio no fuera la de serviros como maestro, aunque os prometo que pondré todo mi empeño en ello, palabra de Lannister.

¿Qué le ocurriría al anterior maestro?  se preguntaba Tyrek algo atemorizado, aunque curioso al mismo tiempo Será mejor que se lo pregunte a la hermosa Elia

Y bien, Alteza, ¿cuales son los campos de educación que más os interesan?

Le miro y sonrio para mi mientras sigo sopesando lo voy a decir, miro a mi hermanito

La verdad es que cualquier cosa que pueda aprender siempre sera bien recibida.
Ahora la pregunta es ¿que creeis que corresponde a una persona de mi estatus que deberia aprender? si es con doble trampa, no necesito aprender mucho, todos esos estupidos solo me enseñan lo que ellor quieren

Ademas me imagino que vendreis al norte acompañandonos, eso si como deberia llamaros.

Tyrek escuchó la respuesta de su joven sobrino segundo, aunque jamás se atrevería a llamarlo así en voz alta. Tras unos instantes de meditación le sugirió su opinión

Bien, majestad. comenzó Es evidente que un futuro Rey debe saber de Geografía, para conocer los lejanos límites de su reino. También debeis intentar aprender, en la medida que vuestro tiempo lo permita, algunos idiomas adicionales, para no estar jamás en una situación de desconocimiento con un visitante o un invitado.

Tyrek comenzó a pasear por la salita mientras continuaba hablando

Las ciencias como las Matemáticas o la Herboristería no son prioritarias salvo que os interesen en verdad. Para eso están los maestres. Sin embargo, aún estando en tiempos de paz, no deberíamos descuidar las lecciones militares, de táctica, estrategia y por supuesto, uso de las armas.

Oh añadió y si os complace, puedo enseñaros, si no sabeis ya, por supuesto, el noble y estimulante deporte de la cetrería...

Ante la decisión de que les acompañara al Norte, el joven noble suspiró imperceptiblemente. Eso ya estaba decidido, fuera de toda duda.

Si es vuestro deseo, iré con sumo gusto, Alteza.  respondió solícito. Podeis llamarme Tyrek, mi Señor, al fin y al cabo somos parientes.

Bostezo llevandome la mano a los labios y niego

aburrido Tyrek digo con algo de retintin el nombre mientras sonrio preferiria conocer otras cosas, seguro que en Dorne las aprenderias vuelvo abostezar

Como tambien me interesa saber si realmetne  lo uqe comentan de ti es cierto primo esa parte si que me ha gustado como ha sonado, no soy lo suficientemente joven para saber todo o nada.