Resignándome a un no-saber qué ocurre, Kurt se dirige a la puerta de su habitación.
Veamos que me depara el destino.
Y sin más dilación abre la puerta.
¿Tú no habrás visto "Atrapado en el tiempo"?
Te dispones a abrir la puerta cuando un hombre que no has visto en tu vida casi te golpea la cara; parecía que iba a llamar justo en ese instante. Lo acompañan otros dos:
El primero es un hombre alto para la epoca, pero muy delgado, tiene las manos cuidadas pero que ya reflejan el paso del tiempo. Su rostro mantiene el atractivo de sus epocas mas jovenes, esta surcado por marcadas arrugas debidas al inexorable paso del tiempo. Muestra en bigote fino cuidado y blanco, que destaca sobre su tez morena debida al sol. Lleva su pelo blanco largo pero arreglado. No seria propiamente dicha una melena , pero si un pelo largo. Lleva unas gafas de montura plateada. Viste igual que tú, cosa que no te llama tanto la atención, ciertamente.
El segundo tendrá unos 30 años. Fornido, fibroso, alto (cerca del 1,90), pelirrojo, de piel clara y pecoso. Pelo recortado, y una pulcra perilla-bigote, rematada con ojos azul cobalto. Viste exactamente igual que tú, cosa que no te sorprende en absoluto.
El tercero tiene el ojo izquierdo completamente deformado: su ceja está caída, tiene poco vello, y el párpado carece completamente de pestañas. No puedes asegurarlo, pero parece una especie de herida. Aparte de eso, su aspecto parece el de una persona normal. Una que no reconoces, pero normal a fin de cuentas. Tiene la tez algo morena, y surcada de infinidad de pequeños lunares. Su pelo es abundante, pero algo fosco y fino. Su ojo sano parece muy negro, y su nariz es aguileña, dándole en conjunto un aspecto de ascendencia semítica. Aparte de unas largas y espesas patillas, no lleva vello facial: ni barba, ni bigote. Sin embargo, tiene aspecto de llevar un par de días o tres sin afeitarse. Sus dedos son largos y huesudos, y están cubiertos de vello.
Los tres visten como tú, pero eso no te sorprende en absoluto.
El pasillo resulta la confirmación de lo que ya viste en el sobre: el pasillo del colegio mayor masculino oeste de la universidad Miscatonik. 12 puertas con números pintados en purpurina flanquean un pasillo decorado en madera y tonos dorados, rematado en un baño adyacente a una escalera ascendente en uno de sus lados, y en una escalera descendente en el otro. El baño cuenta con cuatro departamentos con water, dos con duchas, y tres lavabos (todos los departamentos bien cuidados y provistos de puertas con pestillo). Tu habitación es la 17.
En realidad no; vi ground-dog day, que es como se llamaba en London, cuando fui al cine a verla. Pero podría no ser el caso... XDD.
A la escena 3A.
He visto que hay novedades en esta escena pero no he visto nada que me llame la atención. ¿Has editado algo?
El espíritu de la paradoja ha corregido una incongruencia histórica en la fecha del telegrama, pero nada relevante.
Desandas el camino recorrido, de vuelta a la universidad, con presteza, interesado en compartir lo descubierto con alguno de los otros lo antes posible. Imaginando que de haber alguien, será en la biblioteca, enfilas hacia aquella zona, tan rápido como te permite tu orondo cuerpo.
El gris edificio al que te diriges, en el centro-sur de la universidad, mantiene sus cristaleras bien limpias y sus puertas abiertas durante todo el día. Su cuardada forma da una profunda impresión de fuerza, totalmente a tono con su función de cofre de conocimiento. Una musa griega flanquea la entrada, dotada de una puerta giratoria.
En el interior, hilera tras hilera de libros nuevos y viejos se agolpan en librerias de cerca de los dos metros de altura. Varias mesas repartidas aqui y alla invitan al estudio, y una recepcin se ha improvisado para que los estudiantes becarios puedan atender a aquellos que usen la biblioteca (cuyos tiempos de trabajo están organizados a turnos, para no cerra en todo el día). Al fondo de la biblioteca unas vitrinas se han dispuesto para encerrar tres inmensas tablillas de arcilla egipcia garabateadas de jeroglíficos. La tablilla central tiene un impresionante grabado de casi 3 metros de alto, en torno al que se hacinan los jeroglíficos.
Un grupo de investigación parece haber montado un pequeño gabinete de estudio a su alrededor a decir por la apariencia del lugar. Los dos gemelos que visteis en el comedor zumban entre las mesas atestadas de libros y papeles que bordean las vitrinas, como zánganos hiperactivos, consultando una hoja aquí y un jeroglífico allá.
Junto a ellos Steve aparece con la camisa descubierta, sin pudor alguno, mientras Patricia examina con atención los trazos de su tatuaje y los compara con... ¿las tablillas?
A la escena 3A.
Lo primero de todo quiero ver si hay algún sitio desde que se vean las ventanas del edificio y que no se me vea demasiado. Lo segundo es no llamar demasiado la atención. Quiero mantener la vigilancia pero sin parecer demasiado sospechoso. Dime si hay algo que hacer sobre lo primero y de lo segundo ya improvisaremos algo.
Norbert mira a su alrededor y advierte que la calle esta practicamente desierta ya a estas horas, por esta zona de la ciudad, aunque hay una buena cantidad de sombras.
Las ventanas de la planta baja del numero 6 son facilmente accesibles, y una de ellas incluso da al callejon colindante; pero todas ellas estan en penumbra, salvo el ventanuco luminoso y titilante del desvan.
La casa tiene dos alturas sobre la planta baja, recuerda: 1a planta y buhardilla.
¿Se puede apreciar si hay alguien en la zona del ventanuco iluminado? Por las sombras y demás.
Si, de vez en cuando una sombra pasa ante la luz (muy espaciadamente en el tiempo).
Norbert no tiene problemas en pasar la primera media hora esperando y vigilando a su objetivo. Sin embargo, a medida que pasa el tiempo, su concentración cede, busca sitios en los que sentarse y presta algo más de atención a lo que tiene a su alrededor que al ventanuco que hay arriba al que de cuando en cuando lanza miradas furtivas para ver si la luz y las sombras siguen en su sitio...
Para añadir más drama a su espera, el estómago le empieza a recordar que hace tiempo de su última comida.
Está claro que la fisionomía de Norbert no está hecha para la vigilancia ;-)
Norbert se centra en la ventana y vuelve a echar un vistazo. También echa un vistazo a los alrededores. Quizá hubiera alguien vigilando por aquí...
Ya he vuelto, por lo que aparece en la escena de mensajes de la partida asumo que no ha habido avances pero por si acaso...
La larga espera va poniéndote intranquilo y paranoico, mientras los minutos pasan lentos como las negras nubes que a tiempos irregulares cubren las pocas luces celestes. Sin embargo, tus miedos se ven injustificados: no parece haber un alma en las inmediaciones. Tras lo que parece una eternidad (a pesar de que el reloj apenas haya avanzado poco más de una hora desde que te dejaron), Heinrick aparece en lontananza, avanzando directo hacia tu posición. Cuando se te aproxima puedes ver con tanta consternación como alivio que porta un buen bol de gachas entre las manos.
A la escena 3B.
Norbert abandona la habitación y se dirige a la suya. Abre la puerta y se sienta pesadamente sobre la cama.
Ojala hubiéramos tenido razón. Nuevamente hemos perdido la pista al libro de las escamas y lo único que tenemos es un nuevo misterio...
Norbert mira la cama con desconfianza. Antes era un refugio seguro, ahora no es más que una fuente de incertidumbre.
¿Mañana seguiré estando aquí y ahora?
Resignado, se cambia de ropa, se tumba y trata de limpiar la mente de todo lo ocurrido en el día aunque sus pensamientos no dejan de ir a esa criatura serpentina...
La inquietante oscuridad de la noche y la densa inranquilidad de los sucesos de las últimas horas te acompañan de la mano a una interminable oscuridad vacua, que te result angustiosamente familiar. Un ruido lejano, más mecánico que estático, pero igualmente cíclico e histeriante, te escolta durante tu asfixiante deambular por la privación sensorial.
Las luces de la mañana más parecen un recuerdo de una vida mejor en el fondo de una mente atrapada, cuando la claridad comienza a rasgar el tupido velo de tu opaca aridez onírica cuando los rayos del sol acarician las contraventanas del cuarto en que te dormiste.
Al menos es de día de nuevo; las 8:00 de la mañana, a decir por el reloj.
¿Y bien?
Me levanto con calma para cerciorarme de que estoy en tierra firma, ni en un tren, ni en un barco ni nada por el estilo. Voy a la ventana y la abro para ver donde me encuentro y para tratar de intuir si estoy en abril o no...
Paranoia al poder.
El primer pensamiento de la mañana deja un lugar de honor a la angustia y la inquietud, mientras te diriges a la ventana del familiar cuarto universitario, para descubrir que todo sigue tal y como lo dejaste. La brisa porta un suave olor a hollín, que hace aún más patente la realidad, mientras te frotas nstintivamente las manos, allá donde anoche observaste las queñaduras de Heinrick. Tal vez hubiera sido mejor haber despertado en otro lugar; uno más amable... tal vez, pero no ha sido así. Tu vida, o al menos la de esePrice que dicen que eres, sigue como anoche: incierta y ominosa, en un lugar que no recuerda, pero que ya habúia visto antes, de un modo u otro...
Salgo de la habitación para asearme y miro a ver si alguno de mis compañeros se ha despertado. En caso contrario dirijo mis pasos al comedor.
¿Se recupera algo de vida al dormir? Conste que solo quiero saber que no controlo como funciona el tema en Cthulhu
Al salir de la habitación descubres a Heinrick de camino al baño, que observa con atención la puerta de Steve. El segundo parece observar por la rendijilla de la puerta.
Lo cierto es que en Cthulhu se recupera por semana (1d3). El doble con cuidados médicos...
Vamos que una ponzoña y tal.
A la escena 3B.