Partida Rol por web

 Walter se removía en su silla ante la taza de café caliente; no podía evitar mostrar su incomodidad ante la idea de acudir a un local de indudable mala reputación. Le había costado mucho subir peldaño a peldaño por la escalera social de aquella ciudad algo "cursi", y la idea de arriesgarlo todo en una visita a un local donde sucedían al menos media docena de actos ilegales no le hacía la menor gracia.

Además, tampoco iba vestido para la ocasión. Probablemente, vamos. Tampoco es que tuviera mucha idea de la pinta que debían tener los clientes habituales de los prostíbulos.

Por otro lado, años de experiencia profesional y algo de talento innato le habían enseñado a distinguir la verdad con solo mirar a los ojos de su interlocutor, y también se le daba bien escuchar; probablemente podría ser de ayuda en aquella situación... 

Y tampoco le hacía ninguna gracia dejar que Lowdump se encargara de aquello; le parecía un hombre un poquitín demasiado directo.

Yo, si quieren, podría acompañarles... siempre y cuando alguien fuera tan amable de explicarme cuál es el protocolo a seguir cuando uno entra en uno de estos locales, claro está. Me temo que en este terreno soy un completo pie tierno, como solíamos decir en el ejército.

Pero si les parece que no es conveniente que vayamos tantos, podría tratar de acercarme a la morgue con nuestro buen compañero el Señor Cooper y tratar de investigar con profundidad los otros cadáveres del asesino; quizás descubramos algo en cuanto a su método, o bueno... algo, no sé. 

 Bernard pareció debatirse con él mismo.

- Sin duda ir todos al 'local' no es una buena idea. Yo puedo ir.. conozco a un amigo que ha ido alguna vez a ese sitio. Quizá sea mas útil ahí intentando averiguar algo, pues al parecer el doctor Cooper tiene controlado el tema de los cadáveres. - comentó algo nervioso.

- Estaría bien encontrarnos en otro momento, y ... mantener este asunto entre nosotros, caballeros. - dijo paseando la mirada por todo el grupo.

Steve sonrió levemente ante la mención del amigo de Stoker. Luego se ofreció a acompañarle.

- Si le parece bien, iré con usted, dos pares de ojos pueden ser útiles en un sitio como ese.

Con un movimiento rapido recojo mi libreta de la mesa y empiezo a pasar paginas mientras releo entre mis anotaciones.

-El ca..ca..cadaver tardara un tiempo en llegar a la mor..mor..morgue-digo mientras me toco el menton con gesto pensativo.

-¿Que le pa..pa..parece detective Lowdump,si mientras usted y yo nos acercamos a hablar con las pros..pros..prostitutas de la zona donde trabajaba Rose?,quiza po..po..podamos descubrir algo-añado sin ser consciente que mi semblante muestra una sonrisa lasciva.

Llegado este punto,lo sensato es intercambiarse los telefonos y direcciones para poder mantenernos en contacto.Asi pues,entrego una tarjeta de contacto a cada uno para despues pedir amablemente las suyas.

¡Hecho, entonces! Si ustedes dos van a hablar con, ehm... las compañeras de profesión de la señorita asesinada, nosotros tres iremos al Lester's, el bar donde solía trabajar, a ver qué descubrimos.

Todo aquel asunto incomodaba a Walter, que creía haber dejado atrás hacía muchos años el rondar por según qué ambientes... pero todo fuera por ayudar a un buen amigo, qué narices.

Dejando una moneda sobre la mesa, Walter se levantó y se puso el sombrero.

Cuando quieran, caballeros.