Cormanzhor
La Maraña ( Villa pequeña de 1168 habitantes )
Cita :
En toda la zona de los Valles, la mayor parte de las tierras está cubierta de majestuosos bosques. El clima en esta región, como se ha dicho, es extremadamente benigno pese a su localización geográfica. El antiguo reino élfico de Cormanthyr se hallaba en estos bosques, y aún luego del Retiro de los Elfos, muchas comunidades élficas quedan en estos bosques sagrados.
La antigua capital del Reino, Cormanthor, fue el centro de una maravillosa civilización, y en el Año de la Estrellas Nacientes (261 DR), por decreto del Coronal Eltgargrim de Cormanthyr, la ciudad fue abierta a miembros de todas las razas, convirtiéndose en Myth Drannor. Mucho se ha dicho de esta fabulosa ciudad, y muchos han sido los nombres por las que se la llamaba. Myth Drannor estaba protegida por un poderoso escudo mágico, el Mythal, que permitía a sus habitantes realizar maravillosas hazañas, y protegía a la ciudad de incursiones externas. Durante más de cinco centurias, Myth Drannor fue el centro de la cultura, las artes, la magia y la investigación en Faerûn. La ciudad fue destruida y perdida oficialemente en el Año del Destino (761 DR). Sitiada por un enorme ejército de criaturas malvadas al mando de demonios de los Planos Inferiores, la ciudad fue evacuada, y sus últimos y más grandes defensores cubrieron la retirada de civiles, mujeres y niños con sus vidas cuando el Ejercito de la Oscuridad finalemente logró entrar en la Ciudad.
Los elfos consideran a Myth Drannor como suelo sagrado, y muchos han jurado proteger sus ruinas con sus vidas, impidiendo así el saqueo de la ciudad, aunque, mucho más importante, impidiendo también que los acutales habitantes de la misma escapen. Myth Drannor hoy se halla habitada por demonios en su mayor parte, y se cree que hay en ella varios portales abiertos a Baator y otros planos inferiores.
Aparte del antiguo sitio de Myth Drannor, hay varias comunidades de elfos en la región, particularmente en Elven Court, The Vale of the Lost Voices (el Valle de las Voces Perdidas), Semberholme y Tangled Trees. Pequeñas comunidades de elfos que se negaron a retirarse también pueden encontrarse a lo largo y a lo ancho de estos enormes bosques.
Era una noche oscura y sin luna, de esas que hacen estremecer el corazón de los hombres sacando a la superficie sus peores pesadillas amenazando estas con despertar de sus oscuros sueños, y arrastrarles con ellos hacia un lugar peor que la misma muerte.
Pero entre los enormes arces, los gigantescos sombraltos y descomunales robles, una solitaria figura descansaba tumbada sobre un pequeño claro del bosque, su melena rubioscura yacía y se entremezclaba con la hojarasca que formaba el tupido lecho del bosque sobre el que se había echado. Sus ojos verde esmeralda observaban el mar de estrellas que poblaban la noche sobre Cormazhor, su semblante serio no apagaba la extraña belleza de esa figura femenina de rasgos delicados y bien proporcionados. Para unos ojos normales la figura hubiese pasado inadvertida, confundida como una sombra mas del bosque, pero para los ojos elficos que la observaban a la luz de esa hermosa noche estrellada, era mas que suficiente para poder contemplar a Alessëa en toda su belleza. Shenasil observo los reflejos cobrizos que la luz de las estrellas lograban arrancar de sus cabellos.
Sabía que su amor era imposible, el mejor que nadie conocía el destino de ella, por un segundo se maldijo a si mismo y a los dioses por tan cruel destino. Su mano se aferro fuertemente al tubo cilindrico mientras sus dedos notaron el hermoso grabado representado a Selene que decoraba al mismo, inconscientemente dejo que sus dedos fueran pasando por las runas que recorrían la superficie del mismo a modo de protección.
A pesar de intentar dejar que su mente se liberara de todo pensamiento, Alessëa, no pudo evitar que su mente volviera al encuentro que habían tenido lugar hacía a apenas unos dias en Myr Drannor , recordó como la enviaron junto a un pequeño grupo para que fueran a investigar entre las peligrosas ruinas, según les habían informado un peligroso hechicero drow había encontrado la forma de localizar el desaparecido libro de la verdad infinita, el famoso grimorio de Alundel, uno de los mas poderosos magos elfo, de cuando el antiguo reino elfo estaba en pleno esplendor, pero cuando fueron hacia alli se encontraron con un grupo de aventureros o mas bien con el único superviviente del mismo, su estado era lamentable y sus heridas no solo parecían haberle afectado a su cuerpo físico si no también a su espíritu. Bras, que es asi como se llamaba, era un clérigo de Lazhander. Según les relato la vieja colina de Myt Drannor , la que todos rehuían, había tomado nueva forma.
Al principio no sabían si hacerle mucho caso dado el estado mental en el que se encontraba. Habría vuelto a la vida el cadáver del dios muerto al que Alias había despertado y que finalmente con ayudad de sus compañeros habían conseguido derrotar ¿? Dejaron a Bras a buen recaudo y luego volvieron a explorar la zona, solo para saber que había pasado, y la sangre se helo en sus venas cuando vieron la escena de batalla que se había librado los cuerpos mutilados se extendían a todo lo largo y ancho del promontorio que era el cuerpo del dios, y lo que era peor, el mismo se había movido, ya no estaba en el mismo sitio.
Shenasil contemplo a Alessëa y dejo que su rabia interior se disipara a medida que la contemplaba, se imagino a si mismo acercándose a ella y revelándole lo que tantas veces en secreto había deseado hacer pero que nunca se había atrevido, se vio al lado de ella y diciéndole que la amaba, que no era solo amistad, compañerismo o camaradería, hacerle saber que desde hace tantos y largos años solo ella era la dueña de su corazón , y ahora ironías del destino, aquí estaba como portador de las peores nuevas, los dioses parecía que habían querido mofarse de el y le habían reservado el peor papel en esta función que habían montado, no solo les separaría si no que quizás no la volviera a ver nunca mas, ya que allí donde tendría que ir quizás no pudiera volver, pensó en la breve, intensa y acalorada discusión que había tenido con los del consejo, les había dicho que no le enviaran a el, que la dejaran a ella tranquila pero el consejo no se avino a razones, le dijeron que solo la portadora del Eáránë Amandil era la elegida para esta misión y que nadie podía ocupar su lugar. Con estos pensamientos abandono el consejo, aunque maldecía por dentro ante lo que le pareció una venganza del consejo al obligarle l a ser el que le diera el mensaje.
Shenasil avanzo hacia ella dejando que sus pasos sacaran un leve murmullo al suelo del bosque, para que de esta forma ella supiera que el estaba allí.
A Alessëa no se le escapaba detalle alguno de la sinfonía nocturna que cada noche se podía oir en Cormanzhor, eso no le impidió darse cuanta de la presencia de Shenasil, Oyó su característico y casi imperceptible caminar, se medio incorporo y le vió, iba con el traje que llevaba cuando asistía al consejo, no le fue difícil darse cuenta de que algo le sucedía, le observo y vio una sombra que para otro habría pasado inadvertido pero para ella que le conocía de tantos y tantos años, no pasaba desapercibida, en su rostro amable, alegre y sonriente ahora parecía teñido por una sombra de preocupación.
El viento susurraba entre las hojas, las hacía estremecerse sin herirlas, las acariciaba. Y las hojas respondían hablando entre ellas, cantando con melodías de viento canciones ancestrales. A Alessëa le parecía que murmuraban nombres en antigua lengua élfica, tan antigua que ni los propios dioses recordaban su significado.
Recostada en la mullida capa de musgo que tapizaba el sotobosque, miraba las estrellas, y escuchaba. No sólo a las hojas, y al viento entre ellas. Podía oír también las pequeñas patitas de una minúscula ardilla trepar por un roble, al otro lado del claro, seguramente ávido el animalito de encontrar alguna bellota que llevarse a su despensa. Oía el sonido cristalino del agua del arrollo, lejos, entonando sinfonías a su paso entre las piedras, montaña abajo. Oía el picoteo de un pájaro que debía estar partiendo una nuez, en algún punto encima de su cabeza, cerca de esas estrellas rutilantes allá en lo alto.
Y oía... pasos. Detenerse. Una respiración pausada... conocida. Aspiró profundamente, sin moverse. Le llegó claro, tan claro como el sonido de su movimiento callado, el aroma de Shenasil. Sin moverse, sonrió. Para sí misma, sonrió. Él era un rayo de luz en el caos de oscuridad en el que vivían... pero, desgraciadamente, ella no estaba destinada a la luz. Estaba destinada a la Lucha, al Sacrificio. Era la portadora del Eáránë Amandil, legendario y simbólico a un tiempo. Era Causa de Destino de otros, no era dueña de sí misma, de sus sentimientos. Y menos de sus decisiones.
Algo ocurría. Por el rabillo del ojo, pues no se había movido, vio que el elfo Lunar vestía los Ropajes de Magistrado. Su visita, entonces, era oficial. La sonrisa se heló en sus labios. Hasta ahora había vivido en paz. Había participado en luchas, había sido entrenada, y enviada en Misión muchas veces. Pero cuando partía sabía que volvería a Cormanthor, a su hogar. Un poco más fuerte, y un poco más lejana al mismo tiempo, ciertamente, pero seguía siendo ella. Ahora... un presentimiento hizo que le diera un vuelco el corazón.
Se incorporó, su largo cabello cobrizo se separó del tapiz de hojarasca, quedando prendida alguna hoja en él, haciéndola aún más salvaje, y, si era posible, aún más bella. Le miró. Su semblante serio se suavizó sin embargo al ver el aguamarina de sus ojos. Y, en ellos, el lago profundo de un amor inconfesado, pero presente. Siempre allí, conocido, aceptado.
-Andas con la suavidad y la elegancia del gamo, Shenasil. Tu cuerpo se mueve como lo haría el humo, y tus ojos en mis ojos velan mi espíritu como si fueran aliento de Primavera. Pero lo que hay en ellos, en tu mirada, me turba. Vienes a darme malas noticias, ¿no es cierto...?
Perdón, no creí que fuera un post diario estricto. Lo tendré en cuenta!
:)
Mientras has estado fuera ha llegado un mediano, y es portador de malas noticias. –Se acerco a ella con el rostro turbado, y le cogió las manos entre las suyas con mas candor del necesario. Mientras las mantenía entre las suyas, los pulgares de el acariciaban dulcemente las manos de ella y sus ojos parecían perderse en los suyos.
El mediano se llama Yalashad, y nos ha informado de la perdida de Eanor. Se han ordenado dos dias de luto por su perdida, aunque nadie se ha atrevido a decírselo a tu hermana, me..menos después de lo ocurrido. Desde que volvió no es la misma y..y no me refiero a su aspecto, si no a su carácter. Dioses, parece que una sombra se extiende por el mundo y nos ha atenazado con fuerza y su abrazo amenaza con acabar con toda cosa conocida. Una lagrima se deslizo temerosa de sus hermosos ojos.
Shenasil se acerco un poco mas, si ella no le conociera tanto no se habría dado cuenta de la lucha que tenía lugar en su interior. Shenasil suspiró… Pero eso no es todo, nos ha traído noticias de una profecía
Cuando el señor bajo la montaña pierda su reino
y el dragón de escamas púrpuras yazca en el frio suelo
Myr Drannor vera alzarse al dios muerto y
Los doce dejarán de bailar, el mundo les vera de nuevo
entonces aquel cuyo nombre teme ser nombrado
saldrá de la Guardia oscura y su reino
durara hasta el fin de los tiempos
hasta los mismos dioses le temerán
su poder no conocerá límites y
no habrá lugar donde puedas guarecerte
El consejo se ha mostrado preocupado al saber que parte de la profecía se ha cumplido.
La cosa se ha complicado un poco cuando Yalashad ha dicho conocer al traidor, imagina, la disputa que se ha ocasionado en el consejo. Dice que conoce a Zizel, el hombre que atrapasteis en Myr Drannor, el que despertó a Moander, el consejo esta dividido y te ha pedido que tu intervengas
Máster, no lo entiendo, necesito que me aclares la situación.
El hombre que encontramos saliendo de Myth Drannor era Bras, el Clérigo de Lazhander, o Zizel?
Mi hermana no se ha vuelto así porque fue en pos de Eanor? Ella ya sabe que ha muerto, según su historia, no? Cuando encontró el lugar donde él había muerto, el nigromante la capturó y la transformó. no?
Y, quién es Moander, el que dices que fue despertado por Zizel?
No entiendo la trama, lo siento.
:(
Puedes explicarmelo mejor?
Tu Hermana lo sabe, ya que dejo una carta dirigida a ti informandote de ello. Pero solo lo sabíais vosotras dos, de hecho hasta que Shenasil no te lo ha dicho de forma oficial, no te lo habías acabado de creer, en el fondo esperabas que fuera una neura de tu hermana. Por eso Shenasil te ha dicho que Eanor ha muerto, por que para el era una primicia como.
Si no has entendido lo de Bras es por que no te lo he acabado de contar todo, y eso es culpa mia, esperaba mantener el misterio hasta un pelin mas adelante. a ver. De hecho encontrasteis a dos personas vivas, una es Bras, un clerigo de lazhander al que encontrasteis y os contó la historia de Moander ( la que ahora te relatare yo) y de lo que alli había ocurrido, de como el había combatido contra un tal Zizel, un ser malvado que había despertado a ese monstruoso ser. Cuando llegasteis os encontrasteis a Zizel a su lado ( al de Moander ) tenía el Libro negro, un libro de magia negra y se parecía a la descripcion que había dado Bras de el, le cogisteis como prisionero y le interrogasteis, el tal zizel no paraba de decir tonterias, como que no había ningún Bras, si no una Cleriga de lathander una tal Cazha, y que le había contratado para encontrar la Sangre de lathander. Una vez encontrada habían venido a destruir a Moander. La historia no os cuadro asi que le encerrasteis para averiguar la verdad
si aun no te queda claro, dímelo y te lo aclaro mejor. Si aún no te había dicho nada del post, es por que cada uno de vosotros estáis en lineas temporales diferentes, y he ido manteniendo la coherencia de las acciones y manteniendo el misterio de la trama.
Moander
Moander era un antiguo dios de la podredumbre, la corrupción y la degeneración que se había desvanecido de los Reinos en más de una ocasión. Aunque el numero de sus filas nunca fue muy grande, Moander había sido adorado por una serie de cultos desde antes del ascenso de Netheril. Representado en textos antiguos de forma alternativa como masculino, femenino o neutro, el Oscurantista es un ejemplo perfecto de como hasta los dioses muertos y olvidados pueden tener el sueño ligero.
El Oscurantista era un cruel y miserable tirano que disfrutaba atormentando a seres inferiores y haciéndoles destruir aquello que les era más querido. Moander mentía a menudo, especialmente cuando tales mentiras causarían un gran impacto emocional en sus victimas. El Oscurantista buscaba controlar todos los aspectos de la vida de sus adoradores, viéndoles como meras marionetas. Buscaba corromper y destruir a todo aquel que no le rindiera pleitesía.
Historia
Durante la época de Myth Drannor, el único templo mayor del Oscurantista que quedaba en los Reinos era un enorme complejo situado en la ubicación de la actual Yulash, y sus residentes eran una continua amenaza para el pueblo de los bosques.
Se sabe que en el 75 CV Moander estuvo tras la destrucción de la ciudad elfa de Tsornyl, en la que fue atrapado para contener el avance de la podredumbre por parte de un grupo de magos elfos que se sacrificaron para lograr contenerlo dentro.
Finalmente, en el año 171 CV, los elfos hicieron arder el templo hasta sus cimientos, mataron a todos sus adoradores, hicieron desvanecerse al Dios de las Fauces de los Reinos y aprisionaron a su avatar en el templo en ruinas, donde solo podría ser liberado por un niño nonato. Esperaban que se redujera a la nada, falto de adoración, pero muchos de sus adoradores sobrevivieron y emigraron al sur, donde restablecieron el sacerdocio. Durante el siguiente milenio, grupos de cultistas intentarían liberar periódicamente a la Abominación de Moander... sin éxito. Piedras con sus símbolos grabados pueden ser halladas todavía con cierta frecuencia en la ciudad en ruinas de Yulash.
Sin embargo, esta acción no impediría al Oscurantista actuar, siendo el que permitió a Lord Illitran Starym, en el año 523 CV, tomar el control de la Hoja Lunar sin sufrir daño por medio de un pacto entre ambos.
Otra de las actuaciones más importantes de Moander fue la corrupción de Tyche, sus acciones provocaron que la deidad desapareciera, dividiéndose en dos nuevas deidades: Tymora y Beshaba.
El Dios Pútrido, reducido ahora al status de semipotencia, volvió de nuevo a los Reinos con la ayuda de una tribu de sauriales que había esclavizado, pero fue expulsado y finalmente destruido por una unión de valientes guerreros, exiliados de otro mundo, y los Arpistas. Moander fue entonces destruido en su plano nativo en el Abismo por un poderoso bardo humano, Hallador Puadeldraco, que se hizo entonces con su poder divino. los sabios especulan que el Bardo Innominado fue ayudado por su deidad patrona la Dama de la Fortuna (por lo que se explica, en su opinión, como un mortal pudo matar permanentemente a una potencia divina). Finder se ha convertido desde entonces en una deidad por derecho propio, representando, entre otras cosas, la necesidad forzosa de cambiar para evitar la corrupción que ocurre cuando no se evoluciona.
si necesitas saber algo mas tu personaje tendra que averiguarlo de alguna otra fuente
Alessëa miraba con ojos velados por la aceptación del Destino al elfo, quizá más allá de sus pupilas de cielo, quizá mucho más allá. Dejó que tomara sus manos, y sonrió con un punto de tristeza en su gesto.
-Sabía, aunque esperaba que no fuera cierto, de la muerte de Eanor. Drysiel me ha contado... un relámpago de dolor cruzó su rostro, contrayendo el ceño, oscureciendo su expresión... -...lo que me ha contado, Shenasil, es terrible. Terrible. Pero ya la has visto... no es necesario que ahonde ahora en el sufrimiento que me consume al verla así. Yo le hablaré a ella de las noticias que porta ese mediano. Pero dime... ¿ha dicho ese tal Yalashad de qué conoce al traidor, a Zizel?
Se levantó mientras hablaba. ¡Una profecía! Y una profecía... que empezaba a cumplirse. Se estremeció, y secó con delicadeza la lágrima que se deslizaba por la suave mejilla de su compañero. Entendía su trastorno. Cuando algo así sucedía, quizá quisiera decir que el resto de lo que se decía en ella estaba desencadenándose también. Y en ese caso... la amenaza era evidente. El maligno mismo... el mismo Moander volvía a ser llamado. Y, si no atajaban la rueda que se había iniciado, el cumplimiento de una tal profecía significaba el fin de los Reinos como los conocían, el fin de la luz, de la bondad, de la vida.
Sacudió su cabellera dorada, cobriza. Miles de destellos fulguraron a la luz de las estrellas, y algunas hojas se desprendieron, en una lluvia de otoño. Pero mostraba su decisión, su fuerza: Vería a Yalashad. Y a Zizel. Si había algo que se pudiera hacer... se haría.
-Vamos allá... el Consejo nos espera.
En ese justo momento Alessea le pareció que había alguien mas ahi, junto al camino que llevaba al claro....
Cierro la escena, pasa a esta escena Drysiel y Alessea
Si en algún momento tienes alguna duda, no tengas ningún reparo en comentarmela y te prometo que la resolveremos.