El mundo como tal lo conocísteis terminó hace unos seis meses cuando toda esta pesadilla comenzó.
Lo poco que sabéis es que lo causó un virus que evolucionaba bastante rápido, y no dió tiempo a encontrar una cura antes de que el sistema se destruyera.
Primero se alzaron los muertos, luego un mordisco de los muertos vivientes bastaba para transformarte, más tarde algunos comenzaron a correr, otros parecía que os observaban, analizando vuestros comportamientos.
Hace un tiempo que no salís al exterior, los muros de Garo os han protegido durante bastante tiempo. Los exploradores decían que había comenzado a mutar a algunos animales. Pero hay uno que escucháis a veces a lo lejos, con un grito, un desgarro que parte la noche en dos. Vuestros exploradores sabían que algo así había en el exterior, pero nunca han podido localizar nada que funcionase como tal.
Algunos de los seres que conocéis de este mundo son los siguientes:
Cada uno lo llama de una manera distinta, pero fueron los primeros en mutar, los que se despertaron de lo que supuestamente iba a ser un sueño eterno. Hay que tener cuidado, ya que un simple mordisco suyo te acabaría transformando en cuestión de días o horas, dependiendo de tu salud.
A medida que la enfermedad se iba extendiendo algunos de estos zombies comenzaron a ir más rápido, y al igual que sus hermanos, son capaces de transformarte de una sola mordida; solamente que estos lo harán mucho más rápido.
Nunca habéis podido vislumbrar a ninguno, pero si que los habéis escuchado gritar. Con esos potentes gritos, capaces de escucharse en la lejanía probablemente será capaces de atraer y mover hordas hacia ellos.
Se supone que hay animales que se están viendo afectados por el virus, y habéis escuchado de boca de muchos que han tenido que matar e diversos perros que intentaban atacarlos. Y esos perros no parecían perros del todo naturales