Partida Rol por web

Espadas sin amo

Fase de los Pícaros: tras la fortaleza

Cargando editor
07/04/2020, 10:51
Director

El sudor rezumaba del lomo de los caballos y dejaba un reguero de pequeños círculos de humedad a sus paso. Las bestias hacía tiempo que no mostraban curiosidad ni atención por nada que no fuese el trote mientras el calor de la mañana comenzaba a deformar la vista sobre la arena. Dunas rompía a menudo la formación y se adelantaba a galpe o se perdía a los lados y volvía por detrás.

- ¡Nadie, maldición!¡No hay nadie! ¿Cómo pueden avanzar sin dejar rastro!
- Mókaro tiene sus maneras-, dijo Murah con voz amarga-. Así hemos permanecido a salvo: hechicerías de madre a hija pagadas en sangre, o al menos eso es lo que proclamaba ebría en nuestros banquetes antes de llamar a algún guerrero a su cámara... Todo para ella, siempre.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Durante la fase de los pícaros nos centramos en los personajes. Somos fans y queremos verlos hacer lo que hacen mejor, así como queremos saber de su pasado, sus personalidad, sus opiniones y, por qué no, sus heroicos y excesivos defectos.

Yo voy a hacer una demanda a un jugador, es decir, una pregunta que siempre empieza por "Muéstranos como [tu personaje]..." y le voy a pasar los dados. Después él lanza los dados, mira el resultado (normal, bloqueo, misterio o lección) y responde como quiera. Finalmente él pasa los dados a otro jugador o al DJ haciendo su propia demanda, a los jugadores sobre sus personajes ("muestranos como te introduces sigilosamente en el campamento") y al DJ sobre cualquier cosa ("muéstranos cómo recibe el caudillo su merecido"/"...cómo cae la tormenta de cristal sobre la ciudad").

Recordad que un bloqueo o misterio darán la vuelta a la demanda si es posible: "muéstranos cómo NO te introduces sigilosamente en el campamento")

Así que ahí va mi demanda: Vognar, muéstranos cómo usa Darkiir las semillas de plantagrís para encontrar la fortaleza

Como inspiración, os recuerdo lo que dicen las reglas:

El público quiere
· Ser testigo de cómo los pícaros hacen lo que mejor se les da.
- Conocer más a fondo a los pícaros y a los demás personajes.

Es deber del jugador
· Poner de relieve aquello que te encanta de los personajes de los demás jugadores con sus demandas.

Oportunidades del jugador
· Recorrer el mundo.
· Poner a los pícaros en situaciones intrigantes.
· Poner en juego los defectos de los personajes.

Es deber del director
· Presentar un mundo lleno de peligros y maravillas.

Cargando editor
08/04/2020, 11:18
Darkiir

Miro el vacío del horizonte a nuestro alrededor mientras saco una de las semillas que escondo colgadas de mi cuello. La mastico esperando que me permita escuchar los murmullos de la mente de los que habitan la fortaleza rodante. La esencia de la semilla es un poderoso ingrediente capaz de potenciar las capacidades psíquicas de los dotados.

Llevo las manos a mis sienes soltando las riendas y lanzando un grito desgarrado rompo el silencio. OOOURG!. Un hilo de sangre aparece bajo ni nariz. Mi mirada está desencajada. No he escuchado murmullos... sólo gritos, jadeos y lamentos... digo entrecortadamente. Respiro hondo, no es "hombre"lo que buscamos, mi don es inútil. AAARG! vuelvo a gritar con frustación y el caballo se agita temeroso.

- Tiradas (1)

Notas de juego

le paso los dados a Mhyrr, muéstranos cómo consigues que Murah te desee y decida revelarte cómo encontrar a terkurovo para robarle su tesoro para vosotros.

Cargando editor
08/04/2020, 13:22
Director

- No sé en que andas, Darkiir-, dijo Dunas acercándose a caballo con un paño tendido para que se enjugase la sangre-, pero no deberías mezclarte con ensalmos y brujerías. Con cada paso que das fuera de la hoguera de la diosa te dejas más a merced de las bestias que habitan en la oscurida. Muchas son hombres, pero otras-, hizo un gesto hacia Perdiz-, otras son cosas peores.
En sus ojos había firmeza y también preocupación.

Cargando editor
09/04/2020, 23:48
Mhyrr

El grupo cabalgaba en silencio, presa de un profundo desasosiego. El estallido de Darkiir les había afectado más de lo que  querían reconocer, cuando vieron que el gigantón se encontraba bien esbozaron bromas que sonaron huecas y pronto volvieron a centrarse en el camino, hacia adelante, siempre hacia delante, espoleados por Murah. 

Al atardecer llegaron a una quebrada en la que, a través de una grieta, rezumaba un agua salobre pero que bastaría para apagar su sed y la de las monturas. Mhyrr y Murah se encontraron mientras abrevaban sus animales. El sudor empapaba el cuerpo de la mujer, pegando sus ropas, revelando sus generosas formas y una incipiente barriga, ella siguió la mirada del hombre y se llevó la mano al vientre. Sus ojos hechiceros se alzaron mostrando una impúdica modestia, sus pestañas estaban perladas de gotas de sudor, sus labios húmedos del agua.

-Terkurovo...-susurra en un hilo de voz Mhyrr.

- -responde Murah a la muda pregunta-. Realmente es el padre, aquí habita la semilla de su poder, su propia esencia -la voz de la mujer se vuelve ronca, febril, un escalofrío la recorre, se abraza en un gesto protector y excitante al mismo tiempo-. Cuando su piel tocaba la mía, era como si despertara mil sentidos en mi cuerpo, sensaciones indescriptibles recorrían mis entrañas, todo mi ser explotaba, mi mente viajaba más allá de este mundo...

-...Atravesabas inmensidades de tiempo y espacio, te sumergías en el éter, pavor y placer te envolvían, veías constelaciones, mundos más allá de tu imaginación, una gran luna verde sobre un planeta rojo, como el ojo de una gran bestia...

Murah abre los ojos ¿cómo lo sabes? preguntan mudos. Mhyrr retrocede, sudoroso, sorprendido de tener a la mujer entre sus brazos. Traga saliva despacio y la aparta con suavidad.

-Yagor -la palabra sale arrastras de su garganta. Con brusquedad se gira y se aleja.

Perdiz permanece apoyado en la boca de la quebrada observando en silencio el encuentro entre Murah y Mhyrr, su mandíbula se crispa y cierra el puño.

 

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Bueno, pues tenemos otro bloqueo, damas y caballeros.

Le paso los dados a Dunas para que nos muestre cómo es capaz de hallar un rastro imposible que nos conduzca en la buena dirección. 

Zeke andaba un poco en la inopia, disculpad.

Le paso los dados a Perdiz con la siguiente demanda: muestra cómo Perdiz supera los celos que le produce ver a Murah y a Mhyrr juntos (aunque no haya pasado nada) y conecta con su demonio interior para hallar una pista.

Con vuestro permiso voy a añadir un motivo: la magia conduce siempre a la corrupción.

Cargando editor
10/04/2020, 21:40
Director

Notas de juego

¡Aleluya, un motivo! :P

De todos modos también puedes preguntar por Dunas o por lo que quieras: en ese caso los dados pasarían a mí

Cargando editor
12/04/2020, 10:08
Mhyrr

Notas de juego

A lo mejor me he despistado pero ¿no le puedo pasar los dados a Perdiz? Había corregido el texto.

Cargando editor
12/04/2020, 18:02
Director

Notas de juego

Claro, claro: han pasado a manos de Perdiz

Cargando editor
14/04/2020, 20:35
Perdiz

Al amanecer del siguiente día decidieron seguir el cause de la quebrada al vislumbrar en la lejanía unos escarpados picos sobre las dunas, aquella formación montañosa en medio del desierto bien podría ocultar una enorme fortaleza.

El avanzar inexorable de los aventureros parecía no recortar distancia alguna con su objetivo. Y así un día más pasó. El joven marinero no dejaba de observar con suspicacias a Myhrr. ¿Acaso quería arrebatarle la mujer que deseaba? Aunque pensandolo bien, ¿Era a Murah a la que deseaba o aquello que germinaba en su vientre?

-​​​​​​--¿Vas a dejar que nos la arrebate?... Vamos muchacho, clava el Estoque en su corazón, déjame fundirme con sus latidos- La insidosa voz removía su mente con pensamientos oscuros. Con su frente perlada de sudor intentaba luchar contra sus deseos agitando la cabeza. Abrió los ojos sobresaltado y se encontró Estoque en mano frente a un dormido Myhrr. Miró a su alrededor, todos dormían. -​​​​​​-No dejaré que los lastimes...- Susurró a la voz en su interior mientras levantaba el velo de la tienda donde dormía Murah. -Si lo que quieres es lo que crece en su vientre, jamás lo tendrás- Murah abrió los ojos espantada al sentir la estocada en su vientre, un grito despertó a todo el campamento que vio como Perdiz mantenía el Estoque clavado en la tripa de la enigmática mujer. Entonces un rugido ensordecedor provocó que todos se giren hacia la montaña. Era el grito de dolor de un padre llorando la muerte de su hijo no nacido.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Creo que me excedí. ¿Debo pasar los dados a alguien? Si es así los paso al DJ

Cargando editor
19/04/2020, 10:07
Mhyrr

Mhyrr dormía agitado, inquieto, sumido en un sueño de pesadilla, sintiendo la presencia de los Yagor muy cercana, la corrupción envolviéndolos...entonces un grito que reverberó en la oquedad en la que habían acampado. Bañado en sudor se despertó buscando su espada... 

Entonces sintió unas manos suaves pero firmes apoyadas en sus hombros, el murmullo tranquilizador de Lirana. Mhyrr parpadeó varias veces hasta tomar conciencia de dónde se hallaba. Era la habitación que alquilaba siempre que regresaba a Zamora, el sol entraba tímido por las contraventanas entreabiertas. Deglutió con dificultad y miró con ojos extrañados a la menuda muchacha que le acariciaba los hombros en silencio y rozaba su mejilla contra la de él, en un intento de tranquilizarlo.

-¡Ah! Estás aquí, pequeña Lirana, mi atenta y silenciosa Lirana -la muchacha se llevó la mano a la garganta, donde una fea cicatriz violácea resaltaba sobre su piel morena.

-No, no pasa nada -el tono de Mhyrr era dulce, una vez completamente despierto-. Un baño, querría un baño, y vuelco a necesitar tabárska: los sueños han vuelto, ¿puedes encargarte? -agregó con pesar. La muchacha se levantó de la cama y se envolvió rápidamente en una bata, mientras se recogía los cabellos interrogó con ojos cándidos al hombre.

-No. No iré a ninguna parte -respondió Mhyrr- Consigue la tabárska, que llenen de agua muy caliente la bañera, la grande la de cobre... para los dos -sonrió- y encarga luego una buena comida, que lo suban todo aquí -Mhyrr se desperezó y volvió a tumbarse en la cama.

-Vamos, preciosa.

Una sonrisa iluminó el rostro de Lirana, haciéndola bella, lo que ciertamente no era, pero esa mañana parecía radiante, plena, y Mhyrr sintió una punzada de deseo al pensar en el baño.

-No tardes mucho, Lirana -añadió.

La muchacha se apresuró a salir de la habitación, se apoyó un momento contra la puerta cerrada y acarició su vientre ligeramente hinchado con expresión amorosa. Era feliz e iba a serlo mucho más.

Notas de juego

Aunque hemos dado por cerrada la partida, me apetecía hacer un cierre, ciertamente, clásico.