Mhyrr monta y sigue a los compañeros. Cabalga erguido, algo alejado de ellos, distante, preocupado por lo que les aguarda más adelante, e incapaz de explicarse porqué continúa a pesar de que siente, con todo su ser, que van hacia algo oscuro y maligno.
Creo que poco más puedo aportar en esta fase. Esperando la siguiente.
Perdiz iba rehaciéndose pues sentía su cuerpo como un guante que se hubiera movido de su sitio. Lo que no desaparecía eran las sensaciones del demonio. El terror a los yagor, gélidos, enormes y alienígenas, capaces de devorar mundos en un bocado distraido y continuar su sueño de eones. Pero también la avidez, como un cazador que ve pasar a su lado a un dinosaurio, ya que si Tahkum lograba hacerse con ese alma sin duda lograría romper su pri...
Murah, sentada tras dunas lo miraba con preocupación y, advirtiendo que la había sorprendido observándolo, le sonrió con ternura. La boca de Perdiz, con un demonio sin control pero atento tras sus ojos, se llenó de saliva con un
¡Pasamos a vuestra primera fase de los Pícaros! Recordad los Motivos