El coche avanza a gran velocidad por algunas calles importantes de el sector VI, en algunas zonas se observan edificios vandalizados y algunas piras con restos de vehículos incendiados, algunas patrullas y una que otra ambulancia pasan al costado del Civic conducido por Aurora, sin inmutarse pisa el acelerador hasta encontrar la dirección proporcionada por el Abad Matías Langreo.
Una puerta automática a un costado de un alto edificio se abre en cuanto el personal de seguridad del inmueble recibe indicaciones por su radio auricular al reconocer al Lasombra permitiéndoles el paso, al ingresar por una rampa a un estacionamiento privado varios vehículos de lujo los reciben, Aurora encuentra el cajón de aparcadero destinado para el piso 46 en donde detiene el coche robado.
Los Hellblazers y el ghoul de Cutter descienden del coche para luego dirigirse hacia un elevador que los conducirá al piso seguro propiedad del Abad.
No tardan mucho en llegar al nivel 46.
Una vez en el interior del lujoso piso se dan cuenta de que los ghouls de Matías han preparado varias habitaciones para el descanso diurno de los cainitas con todas los ventanales cubiertos por gruesas cortinas corridas para impedir el paso de luz de día.
***
El día pasa tranquilo dentro del piso 46 no así en las calles de la ciudad de Regina las cuáles vuelven a estallar en conflicto por segundo día consecutivo con disturbios callejeros y protestas de turbas enajenadas que se diseminan por varios sectores de la ciudad y el incendio en Trinidad continúa también por segundo día consecutivo. Las duchas de aquel lujoso piso se encuentran listas mientras que varios cambios de ropa se encuentran a disposición de los Hellblazers en los clósets de cada habitación listos para usarse en caso de requerirlo.
Unos golpes en la puerta se escuchan para después abrir la puerta principal dejando pasar a la asistente de Matías Langreo, Anna Palacios quien se ha hecho cargo de todo lo necesario para la comodidad y descanso de la manada durante el día.
-Señor Langreo, el servicio de fotografía que solicitó.- Anna se dirige a Matías y extiende la mano para dejar pasar a varias modelos mujeres y hombres de cuerpos trabajados y bellas facciones los cuáles ingresan con una sonrisa amable al interior del piso 46.
-Al final decidí contratar a un fotógrafo profesional y evitar el concepto de las scorts para mayor discreción, señor Langreo.-
Un joven de barba y gafas portando una cámara Reflex profesional sonríe nervioso al no entender el último comentario de Anna Palacios.
Cada humano tiene 10 Puntos de Sangre. Un vampiro sólo puede tomar el 20% de la sangre de un recipiente (2 puntos de sangre en el caso de un humano normal) con una cierta seguridad de que no le va a pasar nada. Si se toma la mitad de su sangre, necesitará ser hospitalizado. Si se toma toda su sangre, morirá.
Veo entrar a Anna, la cual ha dispuesto todo lo necesrio en el piso para que pudiéramos descansar durante el dia sin ningún sobresalto. Entonces entran los modelos que ha contratado para nosotros.
-"Muchas gracias Anna, todo está a la perfección, como de costumbre. Ya conoces mis gustos"-Le digo a mi asistente con una leve sonrisa
Luego me dirijo al resto de la manada
-"Espero que todo haya sido de vuestro agrado y hayais podido descansar en condiciones. Ahora podeis pasar al salon, el desayuno está servido"
No durmió nada bien a pesar del sopor sobrenatural, en sueños ensayó todos los escenarios posibles de lo que estaba por pasar asi que no estaba del mejor humor precisamente y todas las comodidades que se brindaban en ese piso le disgustaban en parte por tener la creencia de que esas comodidades eran las que hicieron a los de la camarilla holgazanes y débiles.
Tuvo tiempo de realizar un ritual, que se notó al encontrar todas las silla del salón desaparecidas. asearse un poco, curarse los rasguños y retirarse esquirlas de cristal y hueso que pudiese tener por el cuerpo, Su gabardina marrón de kevlar se había llevado buena parte del daño salvándola de las explosiones pero a cambio estaba sucia, con rozaduras y quemaduras.
Para cuando llegaron los humanos ella estaba lista para salir por la puerta. Se quedó mirando al grupo y analizando el comentario de la criada o ghoul. -Escorts... Es el nombre que se usa hoy dia para referirse a las rameras ¿Cierto? -Pausa- Estoy bastante en contra de los servicios a domicilio, uno se acomoda rápidamente al lujo y se olvida de quien es y aparte dejan rastro. -Se me escapó un gruñido de incomodidad y miro mi reloj para calcular el tiempo que teníamos hasta las 11 pm. -Tomad lo justo, nada de dolores de cabeza.
Dicho eso me acerco al grupo y tomo de las muñecas a los dos que van de naranja y me los llevo a la habitación donde dormí, cierro la puerta para mayor intimidad, se escucha algo de música y salgo unos veinte minutos después con algo de mejor humor.
Dolor de cabeza, argot sabbat, matar.
¿Recuperamos algún punto de Fv por descanso?
En la intimidad de la habitación y con la cara seria me caracteriza puse algo de música desde mi teléfono. Tomé la sábana arrugada y deshecha para rasgarla y hacer largas y finas tiras. -Recuestate. -Ordené al hombre mientras terminaba mi trabajo. Con ayuda de la mujer le atamos de las cuatro extremidades a las cuatro patas de la cama con las tiras de tela, con lo que sobró les vendé los ojos a ambos solo que a la chica le indiqué que se sentase en una de las sillas o en la esquina de la cama, me era indistinto.
Con los ojos vendados pude llevar frente a ellos varias veces el ritual de foco de infusión de vitae quedándome aproximadamente a la mita de mi reserva y sintiendo una tímida Sed. Eso llevó unos minutos de silencio incómodo y ambos mortales parecían impacientarse por el suspense.
Comencé con la mujer: le tapé la boca para que no pidiese auxilio e incliné su cuello con violencia y de forma súbita, casi como un paso de tango. La besé apasionadamente y tras breve lucha de lengua y mordiscos en los labios, le mordí la lengua: Su reacción fue la mas común, un espasmo y empezar a protestar y forcejear pero la sangre que manda la lengua cortada lo hace con violencia y en cantidad casi siempre por lo que no tardó mucho en aflojar. Disfruté de que la sangré bombeada supiese neutra y luego el miedo tintase el sabor cuando no entendía que pasaba y notaba que las fuerzas se le iban.
Para cuando terminé la mujer estaba semi inconsciente y laxa. Le curé el mordisco y la dejé caer con total indiferencia mientras el hombre preguntaba que pasaba. -Estábamos precalentado, ya te toca.- Me puse sobre él a horcajadas, como si fuese a montarle y el pareció sonreír. Le acaricio el pecho lentamente y luego acerco mi rostro al suyo para olerle, le acaricio con la punta de la nariz su cuello, el contorno de la oreja y los labios. A esa distancia puedo puedo oír su respiración como quien aprecia una tormenta y el bombeo de su corazón como la marcha de los tambores de un ejercito que marchan a la guerra
-Es una lástima que no folle con la comida, estoy seguro de que tu no se la meterías a una hamburguesa. O si... si es tu trabajo.
Cuando el gesto de incomprensión se empieza a dibujar le ataco a la muñeca tomando un poco, luego la vena axilar y por último la vena safena magna. Cada uno de esos lugares tiene una presión arterial y un sabor distinto y lleva años aprender a apreciar esos matices. Tras terminar
3 y 3 puntos de sangre.
Una de las primeras cosas que aprendí era la necesidad de mi clan de estar cerca de su hogar al descansar, por suerte la vicisitud facilitaba llevar siempre un poco de tierra para ello, la extraje de mi interior y dormí abrazada a ese saco de tierra que me había a acompañado durante buena parte de mi no-vida. Aun así aquello no evitaba que me sintiera cómoda durmiendo en sitios desconocidos, el hogar era importante para los míos y hubiera preferido conocer con antelación aquel lugar.
Al no saber de cuanta intimidad dispondríamos en aquel lugar, lo primero que hice fue adoptar el aspecto de la rubia despampanante de la noche anterior, no me gustaba repetir modelito, pero no me levanté demasiado imaginativa. Al entrar en la habitación uno de los chicos de amarillo me echó una larga mirada de arriba abajo, al marcharse Aurora con la parejita le guiñe un ojo y con un gesto le indiqué que me siguiera, cosa que hizo con una mezcla de sorpresa y lascivia en su mirada.
Al rato Salí y me senté cruzada de piernas en el sofá mientras esperaba al resto, miré a la ayudante de Matias y como era de su propiedad no quería ordenarle nada directamente, así que me dirigí a nuestro abad.
—Matías ¿crees que tu ayudante podría conseguirme algo de ropa variada para mis cosas? Ya sabes, de hombre, de mujer, de distintos tamaños, la que suelo llevar encima se quedó ayer en la furgoneta.
Veo como Aurora y Cutter "toman" su desayuno y decido hacer lo mismo, ya que la noche anterior me dejó algo maltrecho, todo lo que pueda recuperarme hoy me irá bien, así que me acerco a la chica de rojo, las morenas siempre fueron mi debilidad, y cogiéndola de la mano la llevo hasta mi habitación. Pero antes de entrar en ella oigo a Cutter pedirme si Anna le puede conseguir algo de ropa.
-"Cutter, en el armario tienes todo lo necesario, ya imaginé que me pedirias algo así"
Cutter, el master lo indicó en el primer post de la escena
Tras despertarme, no puedo evitar sentir algo de envidia por el lujo con el que vive Langreo, mientras yo me había visto forzado a dejar muchas cosas atrás debido a lo ocurrido con el infeliz de mi sire.
Muchas gracias por tu hospitalidad Matías. Creo que esta noche tu eres la afortunada. - digo mientras me acerco a la chica vestida de Rosa y la llevo a mi habitación.
Tras varios minutos a solas con la mujer en la habitación, salgo de la misma con una sonrisa bastante amplia, aquella mujer tardaría en recuperarse y dudaba mucho que logre olvidarme.
¿Y bien? ¿Cuál es el plan? Vamos a reunirnos con el infeliz de Trent y luego qué. No podemos hacer un movimiento o podríamos pasarla mal, el tipo es fuerte y astuto, sino ya le habría dejado un recuerdo inolvidable de nuestro encuentro. - dando a entender que me había quedado con ganas de meterle un buen plomazo en la cabeza.
Daba por hecho que esta vez Azrael tomaría precauciones extra contra mi rifle de franco, lo que podría causarme muchos problemas.
"La reunión es a las 11 pm en un local" No hay ninguna norma más, ni numero de gente que se pueda reunir ni "sin armas" ni nada por el estilo. El ha elegido el local y ha tenido todo el dia para prepararse por lo que juega dos veces en casa y nos toca pasar por el aro. Puede que cuando llegue allí hasta las mesas estén compinchadas con el. Tenemos que confiar en que su necesidad por la alianza sea mas fuerte que su odio hacia los no muertos.
En teoría solo tengo que hablar con el y dejará a Chad marchar "vivo" Pero por su puesto me huelo alguna jugada sucia o alguna verdad a medias.
He pedido ayuda a la manada de Lance ayer a ultima hora pero no me contesta... como refuerzos.
El plan es que entraré sola y vosotros os quedáis por la zona. Aunque si alguno de los dos lasombra domina el poder convertirse completamente en sombra se puede venir conmigo dentro de mi ropa, me sentiré mas segura. Si es entrar y salir solo hace falta uno, si es una trampa solo cogerán a uno, si me dejo.
Dejaré el manos libres puesto para que podaís oir toda la conversación, si se tuerce pues entráis matando, la palabra clave es Abel.
¿Alguna duda o sugerencia?
Aurora expuso el acuerdo al que había llegado con el cazador y él tenía toda la ventaja como era de esperar.
—Como no sabía las condiciones de la reunión le he estado dando vueltas a las distintas opciones, me esperaba algo más del tipo reunión en un almacén, pero bueno. No sé si hemos conservado alguno de los explosivos adheribles esos, pero podría hacer que lleves alguno encima sin que lo detecten y si no te gusta lo que proponen solo tendrías que pegarlo debajo de la mesa antes de salir. Te puedo hacer una especie de bolsillo interno para que no lo detecten si te cachean y si lo envolvemos en papel de aluminio tampoco lo detectarán con un detector, puedo sacar el bazo o el páncreas para hacerle hueco y que no se note, tampoco es los usemos mucho.
Por otro lado podría disfrazarme y mantenerme por los alrededores, incluso con auspex soy difícil de detectar, pero los cazadores tienen sus propios medios para reconocernos y no sé si a él lo podré engañar.
De repente me quede callada y me llevé la mano al mentón pensativa, una sonrisa macabra surgió en mis labios.
—¿Y unos maniquís explosivos? No sé si para esta situación concreta, pero podemos rellenar a los guaperas de antes con explosivos y mandarlos por delante, tendríamos muyahidines más guapos de la historia. ¿Qué tal se os da eso de dominar a los mortales?
Se los quedó Chad, que por cierto los reclamaré aunque a ver con que autoridad... En cualquier caso y no te lo tomes a mal pero la noche de mi abrazo fue la primera y última vez que un usan vicisitud conmigo. Estoy feliz con mi cuerpo, gracias.
No, no haremos nada que puedan interpretar como una trampa o una rotura de la tregua y ponga en peligro a Chad y eso va por todos. Pero tu idea no es mala del todo, igual si que me llevaré una granada por si tengo que negociar fuerte. ¿Alguien me deja la que tomó? La mia la gasté.
De hecho, la idea no me suena nada bien, si el explosivo detona antes que Aurora salga, podríamos perderla a ella también, sin embargo si usamos algo más sutil, algo que sólo afecte a los mortales.
Veneno o ántrax, entonces podríams cargarnos a todos en el lugar y nuestra ductus podría salir por la puerta principal sin ninguna clase de dificultad mientras Azrael y sus amigos mueren asfixiados. - comento evaluando las opciones.
Miro mi reloj. -No es una mala idea. -Dije algo sarcastica. -¿De donde sacamos veneno con el tiempo que nos queda? miro de reojo a nuestro abad que era el encargado procurar ese tipo de recursos
A Zack le gustaba aquel lugar, ya con las tiempo tendría que conseguir algo parecido, quizás con algo menos de lujo pero con más seguridad.
Al parecer a ninguno allí le agradaban las rubias de rosado, esa sería la cena de Zack. No tomo mucho tiempo para alimentarse, hace mucho que ya no era humano y alimentarse era importante para el, ya no importaba mucho elegir de que recipiente fuese.
Tras alimentarse escucho los planes de la Ductus, pensaba entrar sola y no podía hacer nada para acompañarla (negó con la cabeza cuando aurora pregunto si podían convertirse completamente en sombras).
- Dependiendo del lugar y de si puedo ver al interior desde donde esté, puedo ayudarte con una posible retirada. Cuando llegues al lugar y te sientes a negociar, observa bien y memoriza el camino a la salida. Si necesitas escapar, puedo hacer un sudario en el interior del sitio, vas a estar ciega, pero los mortales de adentro van a necesitar respirar y tu no, eso ya es mucha ventaja... Aparte de que ellos temen al abismo y eso los hace acojonarse.
era una opción rápida, aunque lo mejor sería si no lo llegaban a necesitar
Asiento con una escueta sonrisa a Zack. -Y Hacen bien en temer. Aunque tengo cierta... Estoy familiarizada con vuestros poderes estará bien recordarlo.
Creo que deberíamos poneros en marcha. Hay que recoger a un chiflado y hablar con un imbécil.
Podemos consegui cloro y amoniaco en el supermercado, cuando esas cosas se mezclan crean una niebla tóxica que literalmente corroe lo pulmones de quien la respire, la reacción es rápida y el efecto mortal a menos que se consiga ayuda a tiempo. - respondo dando una idea de como solventar el prblema del veneno de forma rápida y económica.
Esos bastardos literalmente estarán respirando ácido y creo que eso no es bueno para la salud de los mortales, pero como nosotros no respiramos, pues creo que no representará un problema para usted mi ductus.
Matías Langreo habla con su ghoul Anna Palacios y después de un breve intercambio de palabras esta realiza una llamada por teléfono móvil para dar unas cuantas indicaciones, el abad agradece brevemente a su ghoul y luego de despedirse de su asistente les indica la salida a sus hermanos para conducirlos al elevador del aparcadero donde en el primer nivel una Land Rover negra los espera para llevarlos a su cita con el cazador, antes de ingresar al elevador la manada se encuentra de frente con dos hombres y dos mujeres con pinta de personal de limpieza empujando un carrito con enseres de limpieza, restos de comida y varias botellas de vino, al ingresar al piso del Abad se diseminan por todo el lugar y desde el carrito de servicios comienzan a dejar restos de la comida, varias botellas de alcohol a medio vaciar, rompen algunos vasos y copas mientras que en algunos rincones comienzan a derramar vino, después uno a uno van sacando a los modelos humanos debilitados y a algunos los desnudan para acomodarlos en diferentes lugares abrazados entre sí sin importar su género, a otros les colocan una botella de vino a medio terminar entre sus manos o a un costado de su cabeza mientras que a todos los bañan con alcohol, de pronto de un certero golpe derriban al fotógrafo el cuál cae noqueado y lo comienzan a desnudar para colocarlo encima de una de las jóvenes la cuál yace también sin nada de ropa. A todo le toman fotos con la cámara reflex sacando la memory card con suficiente evidencia comprometedora, luego se marchan cerrando el lugar cuidadosamente por fuera sin dejar rastro de su trabajo.
Afuera las manifestaciones violentas comienzan a ceder sin embargo aún hay suficientes como para mantener a la policía ocupada en varios sectores de la ciudad de Regina, la Land Rover se dirige a la dirección dada por Azrael Trent
Le indico a Biff que pase por el supermercado antes de ir al punto de encuentro , una vez allí compro unas 20 galoneras de cloro grandes junto con otras 20 de amoniaco las cuales guardo en el maletero del auto, listas para ser mezcladas y usadas contra los mortales en caso de ser necesario, pues si bien es cierto las sustancia no eran explosivas, la reacción química entre ambos compuestos podía causar severas bajas entre nuestros enemigos mientras que a nosotros esos vapores nos resultaban absolutamente inocuos.