Partida Rol por web

Bim suspiró. Aunque ya lo había explicado a detalle, Niño Bola parecía decidido a pretender que no lo había hecho en absoluto.

—Para empezar, no recuerdo haber sugerido nunca de forma directa o indirecta que Oso Maloso se había equivocado —porque errar era humano, no oso—. En segundo lugar, ni siquiera me había planteado que mostrar la nota rompería las reglas por descuido más que otra cosa, con lo cual nunca pasó por mi mente que el oso me amenazaría y como puedes ver no hice ningún ligero cambio —pues la nota de Bim era prácticamente igual que la de Niño Bola—. Y ya he explicado también que no gocé de ninguna inm... —Bim suspiró otra vez. Aclarar lo mismo cuatro veces no era precisamente divertido.

—Si aún a pesar de todo esto alguien sigue creyendo que posiblemente soy un malvado oso que se ha arriesgado a mentir en una nota para dar información que posiblemente ni siquiera beneficie a su bando tanto como para compensar el riesgo, investíguenme —dijo abriendo los brazos. Le molestaba un poco ser siquiera considerado sospechoso de ser un asquer-oso, como los habría llamado Brave, pero después de todo lo cierto era que nadie podía fiarse de nadie y sospechar era el único arma que tenían él y el resto de esperanzas—. Supongo que alguien tendrá la monotool necesaria... —Aunque también era cierto que si alguien tenía una capaz de investigar el nivel de esperanza en el resto no lo revelaría al encontrar a un inocente, poniéndose en riesgo a sí mismo... Por otra parte, quizás si encontraste un oso sí lo haría—. Tsk —Incluso si alguien lo investigaba para así confirmar su inocencia que se lo dijese al resto era improbable... Aunque no imposible. Bim tenía esperanza.

Bim iba a explicar por tercera vez lo mismo pero decidió finalmente adoptar la estrategia Cuatro Ojos: permanecer en silencio. El "tú no y yo sí" era un "tú sí y yo también", y por mucho que Niño Bola hiciese oídos sordos a aquella parte eso no cambiaba el hecho de que así fuese. Si alguien seguía con dudas sobre su inocencia y esperanza él ya había dado la solución más rápida y simple para solventarlas.

Chiyoko soltó un suspiro y dejó caer el cuerpo con cansancio al escuchar la respuesta de Kukiko.

- Vaya, vaya... Creo que lo normal cuando alguien está tan obsesionado contigo es preguntar el por qué. Además, mi trabajo consiste en desvelar la verdad y hacer que la gente lo entienda. Enseñar que los fantasmas no existen y que las casas encantadas no lo son tanto. Y ahora mi trabajo consiste en saber por qué me tienes tanto odio. - se encogió de hombros, volviendo a levantar los brazos para estirarse - De todas formas ya lo he dicho. Lo de esta noche se volverá a repetir porque atacarme otra vez es lo más obvio. Así que tendrás que buscar alguna excusa para no creerte un segundo ataque.

Me limité a asentir con cada respuesta de Chiyoko sin interrumpirla para luego quedarme con los brazos cruzados mientras algunos de mis compañeros discutían. Levanté una ceja algo confusa, aquella discusión no ayudaba a nadie así que decidí permanecer en silencio. Entrar en ella antes de que al menos tuviéramos algo más sólido no tenía sentido.

Tras la grabación, puse una mano en mi mentón y asentí de nuevo pensativa. 

- Bien, creo que quedó bastante claro que Chiyoko ha sido atacada por lo que, aunque no podemos garantizar al cien por cien, es bastante evidente que es inocente - dije haciendo eco de las opiniones de los demás.

Mientras estábamos en ello, me llamaron la atención las palabras de Kibou hacia Sato. Curiosa de a qué venía aquella pregunta presté atención a la conversión de ambos, tomando buena nota.

A parte de todo lo que se había dicho, no encontré ningún tema en el que pudiera colaborar por lo que decidí permanecer en silencio a la espera de alguna información más fiable.

- Arigato, Yoru-kun. - agradeció la joven Shiina con una sonrisa sincera, cuando el muchacho le dio toda clase de bricks de batidos de leche de diferentes sabores. La distraída rubia elegió el sabor a plátano e introdujo la pajita en el brick para dar un largo trago, a lo que susurró con afecto tras aquello. Muy rica. ¿Quieres un dibujo? ¿De qué color eres?

Mashiro no se percató de que estaba medio desnuda hasta el preciso instante en que Kukiko le tendió una chaqueta por encima y la cubrió, mencionando algo que la sorprendió. ¿Ella enamorada de Yoru? ¿Qué era el amor? Aún con todo, agradeció el gesto de que le prestase su chaqueta, y al entender que estaba vestida de forma inapropiada, se disculpó de forma inocente.

- Gracias Kukiko, prometo devolverte la chaqueta después. Sorata y Ayami siempre me han ayudado a elegir mi ropa y vestirme, pero hoy no sabía a quién pedirle ayuda... Lo siento... - mencionó a modo de disculpa, tratando de explicar la razón por la que estaba con esos atuendos, y de inmediato habló en voz baja - ¿Qué es estar enamorada? 

Fue entonces que Chiyoko depositó la sábana por encima de su cabeza y la instó a atacar. Mashiro no entendía el propósito de aquello, pero entendiendo que era un juego o similar, corrió dando vueltas asustando de forma absurda a los presentes...

- Uuhhh~ Uuhh~

Sin embargo, aunque inocente y distraída, no le pasó desapercibido que rápidamente todo empezó a volverse tenso en cuanto el chico bajito y regordete trajo una nueva nota. Las acusaciones volaron y poco a poco fue entendiendo que entre ellos había dos grupos, el de los osos mal-osos y el de los alumnos de la esperanza. ¿Cómo podía ser de ayuda para el equipo al que pertenecía, el de los alumnos de la esperanza? Ya encontraría la forma a través de su monotool.

A la hora de ver el video, me tumbé cómodamente en el suelo y lo observé atentamente. La grabación nos mostró el auténtico desastre en que se había convertido la habitación de Chiyoko. Había cortes en la cama, y sangre por todas partes. Quien hubiera preparado eso, se había pasado un poco.

—A ver si lo he entendido bien: Te han atacado, pero no estás eliminada gracias a tu habilidad, ¿no? Aún así, han ambientado tu habitación igualmente. Menuda gracia. Espero que te la limpien.

No entendí nada de la posterior explicación de Chiyoko. ¿Se había visto morir? ¿Ehh?

¿Y si dejamos a Chiyoko y tratamos de buscar a los osos? Por lo que entendi es inocente. Nos estamos despistando de lo importante. ¿Quienes son los que quieren matarnos? ¿Y como acabamos con ellos?

Había estado medio dormido en la sala durante casi toda la noche, pero prestando atención a los comentarios del resto. – Buenas... noches a todos – La sala seguía casi igual que el día anterior excepto que había leche esparcida por el suelo, además de una alumna envuelta por una manta de lo que parecía ser sangre rosa. – A parte de... Bueno de lo que haya ocurrido no parece haber muerto nadie, Chiyoko ha sido atacada, aunque hay dudas sobre eso, de momento tenemos eso... que es más de lo que teníamos el día anterior, asi que después de todo la idea de Kazuki ha funcionado – Casi todos en la sala hablaban de la veracidad del ataque a Chiyoko y de las notas, pero no parecían llegar a ningún lugar – Kumiko tiene razón, sería mejor si ampliarnos nuestra vista, fijarnos en más detalles, sin olvidar los principales, aunque yo no tengo  mucha información – Dijo mientras miraba a Ayaki en modo de ayuda.

Los monitores de la Academia se activan.

- ¡Din, don, dín! - dice Monokuma, cuya imagen aparece en los monitores. - Ha llegado la hora límite, mis queridos alumnos. A partir de este momento cada uno debe volver a su propia habitación... Que tengáis buenas noches.

Una vez más, a dormir...