Partida Rol por web

La valiosa información que proporcionaba Maren hizo meditar al chico. Por lo que contaba de sus amigas las petrificadas, era posible que uno de los mortifagos estuviera actuando por su cuenta. Lo peor de aquella información era, que todavía quedaban muchos peligros, y no sabían a ciencia cierta si los que estaban siendo culpados a través de las votaciones en el cáliz del fuego eran inocentes o culpables. Tyler suspiró echándose hacia atrás el cabello. Daban palos de ciegos y así iban a continuar hasta el final.

-Yo no pedí tu ayuda, cuatro ojos. Fuiste arrastrado a mi casa en contra de tu voluntad, no me vengas ahora de caballero andante, serpiente.- Dijo con el mismo tono que había usado el chico, aunque en el fondo Tyler se sentía culpable de no haber participado más aquel día, podría haber evitado la votación de la chica.

Y por primera vez estuvo de acuerdo con las palabras del chico. –Y estoy de acuerdo con él en eso, Aslan tiene muchas papeletas para tener mi voto.- dijo señalando al chico pero evitando mirarlo de nuevo.

La señora Sprout interrumpió las disputas para avisar a los chicos que Kiwi y Jamie seguían perdidos. El americano se puso de pie de un salto. – Buscaré en la séptima planta, de nuevo.-

Regreso al Salón con Willy después de nuestra busqueda, no se como dexplicar lo que hemos encontrado a los que estan allí así que simplemente me acerco y digo.

-Malas noticias. Kiwi y Jamie estan muertos, sin marcas. Otra vez, puede haber sido una maldición imperdonable.-

Dos muertos más, cada vez que estaba más seguro de que había un tercer grupo que se ocupaba de esto, la cosa es quienes.

Al volver al salón sin haber encontrado a mi compañero ni a Kiwi, me suponía lo peor, Al llegar Marcus afirmo mis sospechas.

No puede ser, si seguimos así dentro de poco estaremos todos muertos o petrificados. Alguien esta usando un conjuro muy poderoso para acabar con nosotros. ¿Crees que vieron a su asesino? Cuando encontré a Malcom parecía que se intentaba defender de algo.

Cuando Tim volvió sin encontrar a sus compañeros ya se esperaba lo peor. De nuevo había habido una muerto... No, dos... Le parecía algo inconcebible.

- De-debemos encontrar a quien ha he-hecho esto.- dijo con los ojos enrojecidos. La pesadilla se estaba volviendo cada vez peor. Tres personas habían muerto y más habían sido petrificadas.

- ¿A quién se vo-votará está noche?- preguntó cansado mientras miraba a sus compañeros.

Volvía al salón con Marcus con la cabeza gacha un tanto triste, ya me esperaba ese final para los desaparecidos, pero encontrarlos personalmente era algo con lo que es difícil de tratar.

-No tenían marcas de lucha, no creo ni que hayan tenido oportunidad de luchar por... -Trague saliva- Sus vidas.

-Creo que la gente dice de Aslan, Tim. Pero él aun no ha dicho nada al respecto. Esto empieza a complicarse mucho. -Me rasque la nuca un tanto confundido.

Al regresar con Adrien, descubro que nuestros compañeros estaban muertos. Exactamente lo mismo que sucedió con Malcom, esta vez habían sido dos y la noticia me cayó como un balde de agua fría. 

Tomo asiento y bebo un poco de zumo, la situación me preocupaba demasiado y se reflejaba en mi rostro. Las conversaciones que se gestaban a mi alrededor escapaban de mi atención, puesto que analizaba los hechos e intentaba relacionarlos con alguien. 

Cierto era que me costaba creer sobre la hipótesis de que mis compañeros sean capaces siquiera de asesinar a alguien, ya petrificar me resultaba horrendo. Lo otro era mucho peor. Así que agobiada por la noticia permanezco en silencio.

Cae la noche, y las mujeres os acompañan a vuestros dormitorios.

FIN DEL DÍA 4