El Veritaserum es un potente suero de la verdad comúnmente utilizado en interrogatorios. La poción obliga al bebedor a responder con sinceridad a cualquier pregunta, aunque hay algunos complicados métodos de resistencia. El uso de la poción está estrictamente controlado por el Ministerio de Magia. 

Es incoloro e inodoro y apenas se puede diferenciar del agua. La poción debe de estar lista hacia la fase de luna llena, y es bastante difícil de producir. Se puede mezclar con cualquier bebida, y tres gotas son suficientes para hacer que el bebedor escupa todos sus secretos más ocultos y forzarle a que responda con la verdad a cualquier pregunta que se le haga.

Ingredientes

Un pelo de cola de Unicornio adulto macho. Pluma de Fénix. Medio litro de agua del Río Nilo. Un trozo de dedo de un Grindylow. Corazón de dragón. Acónito. Jarabe de elaboro.

Preparación

Preparar, antes de todo, un caldero de tamaño a elegir, poner agua helada sin encender fuego bajo el caldero. Primero, una vez conseguida la pluma de fénix echar al agua y remover muy, muy rápido hasta que el agua adquiera un tono naranja brillante. En segundo lugar cortar a tamaño milimétrico el trozo de dedo del Grindylow y seguidamente echar al agua. Sin más preámbulos, echar la cola del Unicornio adulto macho y después de pasar 5 minutos echamos toda el agua del Río Nilo, después de haber recogido el acónito durante la luna llena machacarlo y echarlo al caldero, luego hacer que el jarabe de elaboro se vuelva muy espeso y arrojarlo al caldero. Ahora, rápidamente encendemos el fuego del caldero y removemos lentamente y con cuidado hasta que el agua adquiera un tono azul claro.

Sabías que algún día te iba a ser útil, y por eso a escondidas te has esforzado por practicar hasta que lo has conseguido: la poción Veritaserum.

Los alumnos, nerviosos, se mueven por el salón levantándose de sus sillas para cambiar de posición con otros o para ir al baño. En un momento dado, Anne y Kerry quedan de forma que tienen cierta intimidad. Anne entonces coge una galleta y Kerry casi por instinto hace lo mismo.

Tras aquello, Kerry siente la necesidad de decir toda la verdad, al menos durante unos minutos.

Espero a que Kerry se coma la galleta. Al ver el cambio de expresión en su rostro, asumo que el veritaserum ha funcionado.

-Kerry -empiezo, directa al grano. Le miro directamente a los ojos. -Sin paños calientes, ¿vale? Hagámoslo fácil. ¿Eres un mortífago?

Estábamos en el comedor y los alumnos iban y venía, entonces Anne, la chica pelirroja, cogió una galleta de las que teníamos delante y me vinieron ganas de coger también una a mí. 

¿Qué me pasa?, ¿Esto es algún tipo de hechizo?. Me notaba raro como si alguna fuerza estuviera actuando dentro de mí, y entonces Anne se me acerco y me hizo un pequeño interrogatorio, creo que había comido el Veritaserum.

No, yo no soy uno de ellos, bueno ahora sabía quien no era tan poco un mortífago.  

Asiento despacio con la cabeza, pensativa. Vuelvo a preguntar. -¿De qué manera puedes ayudarnos a combatir a los mortífagos?

La chica pelirroja tenía la mira fija en mí, creo que ella sabía que yo era inocente, pero aun tenía que cerciorarse. 

Luego me pregunto sobre como podría combatir contra ellos, y la verdad era que no contaba con ninguna manera de combatirlos, Lo siento, pero no tengo ninguna manera que poder combatirlos, aunque si puedo defenderme contra ellos. Creo que ella estaría algo decepcionada con la respuesta.

-¿Puedes defenderte? Oh vaya, ¡eso es genial! -exclamo. Continúo pensativa. -Entonces supongo que el patronus era tuyo -concluyo. 

-Por último... asumiendo que no soy mortífaga, ¿tú y yo estamos del mismo bando?

Eso espero, le dije a Anne con una sonrisa bien grande por conocer a una amiga en quien confiar, supongo que esta conversación será confidencial, por cierto ten cuidado, conmigo has tenido suerte. Le dije guiñándole un ojo.

Sonrío de oreja a oreja, adelantando un paso hacia Kerry. -Entonces tenemos una alianza -afirmo, abrazándole con fuerza para sellar el trato. Estaba bien saber que podía confiar en alguien. 

El resto de alumnos vuelven a rodearos y no podéis seguir hablando.