Amanece un nuevo día en la caja de juguetes y os sorprendéis ya que nadie ha muerto esta noche. ¿Que habrá pasado?
Por otro lado hacéis un nuevo descubrimiento, aunque a muchos no os sorprende, y es que Adam es el tonto.
Grupo B: Adam príncipe de Gayskull, DD, El Malvadisimo Emperador Zurg, Gizmo, Hamm, Jenny, Jessie, Jesucristo, Lotso, Perry figura de inacción, Sargento, Señora cara de papa, Skeletor, Slinki, Tronco, Wall-E.
Después del linchamiento Jessie parece recuperar su acostumbrada sonrisa, aunque a veces parece que sea forzada pues el momento no es momento de mofas.
Se mantiene sentada observando a sus juguetes y preguntándose cómo han podido llegar a esa situación. Luego pasea su mirada por la sala pensando quién puede ser el culpable.
-Que tonto es Adam.-comenta simplemente Zurg, sin dejar de mirar su espejo.-Ahora lo entiendo todo.-asiente varias veces, y se sigue contemplando en su reflejo, al que manda ahora algunos besos mas que antes.
El juguete del que desconfiaban resultó ser inocente. La suerte que tuvieron es que se dieron cuenta antes de acabar con él y el trolazo aún siga con ellos.
-Vaya, así que solo eras tonto- dijo acercándose a él pero procurando que su trasero esté en el lado contrario del muñeco afeminado- te parecerá raro esto de mí, pero, creo que podríamos ser aliados. Si te parece bien claro. Y cuando digo aliado no quiero decir nada que se pueda malinterpretar como algo de eso "rarito" que a ti te gusta.
Otra cosa agradable era que no habían habido víctimas nocturnas, señal de que el dios juguetil les sonreía. Debían hallar a los culpables pronto, y no podían seguir fallando.
Mmmm yo no se, esto me parece muy sospechoso, creo que alguien aqui es culpable.... Jesucristo, tu cargas con todas nuestras culpas, ¿eres tu culpable? digo señalandolo.
Habia caido el tonto del pueblo y cada vez eramos menos, empezaba a sentir que a este paso me quedaria poco y mi bateria seria arrancada por uno de los asesinos de esta sala, y todo por ir con Andy.
Comence analizar a cada uno de los presentes intentando aclarar mi cabeza.
Miro a Skeletor con algo de lascividad, pero niego rápidamente con la cabeza. ¡No! ¡Aquellos que me habéis votado sois los asesinos! ¡Y empezaremos por ti, Skeletor! No me importa que mi voto ya no tenga validez porque pensáis que soy un tonto. ¡Me da igual! Voy a descubrir quién de vosotros es el asesino de juguetes.
Me alejo de Skeletor, no sin antes tirarle un beso y guiñarle brevemente el ojo izquierdo. Muack. ¡Tú! Señalo al muñeco de huesos con músculos. ¡Eres el juguete malvado! ¡Siempre has sido mi enemigo, por eso querías acabar conmigo!
Adam estaba cambiando su argumento por algún motivo. ¿No debería estar acusando a Zurg?
"Ya empezamos" piensa Jessi cuando ve la situación entre Skeletor y Adam.
Se mantiene separada del grupo, observándolos y analizando sus comportameintos, pues sabe que entre ellos hay un asesino de juguetes.
Slinki resopla, y se sonríe. La verdad que no esperaba esto, pero sí sospecha que hay un asesino, lo cual le hace sospechar.
-Eh, que yo te voté porque andabas detrás mío para hacer cosas impuras y decías que sospechabas de mí cuando luego votabas a otros. Como comprenderás no sabía que eras el tonto... aunque la verdad es que era para sospecharlo por el coeficiente de inteligencia. Aunque te votamos 5 juguetes, y no creo que haya tantos malos, pero bueno, eres libre de sospechar como yo hice contigo.
Skeletor supuso que su enemigo natural nunca sería su aliado aunque compartieran objetivos. Matel los enemistó desde que fundió el plástico que luego serían sus cuerpos, y nada podría evitar ese hecho.
-Aunque no fui yo quien empezó a señalarte- dijo hablando para sí mismo.
Al viejo muñeco se le acababan las fuerzas, ya estaba cansado había vivido prácticamente toda su vida entre hostilidades, había dirigido una dictadura en una guardería y su característico olor a fresa se estaba agotando…Pero lo que estaba pasando entre sus compañeros era demasiado para él, había intentado razonar pero no lo conseguía.
Se limito a sentarse ayudándose con su cayado y reflexionar para encontrar una pronta solución a todo esto…
- Y si ni tú ni Zurg lo sois... ¿quién es? Pregunto Adam más preocupado. Había burlado a la muerte una vez, pero temía que por la noche acabasen con él como con el resto de los juguetes.
- Maldita sea, que dé la cara el maldito juegue asesino!! Adam lanzaba miradas acusativas a todo el mundo, Slinki, Lotso, Jessie, Wall-e, ninguno se salvaba de las miradas acusadoras de Adam que estaba totalmente perdido. Estáis cabreando a un trolaso... Adam frunció el ceño con rabia y nadie cabrea a Adam... Esta noche voy a averiguar quién es el juguete malvado quedándome despierto. Y le pillaré con las manos en la masa.
-Bueno, yo por Zurg no puedo hablar, pero desde luego yo soy inocente.
Skeletor mira al resto de juguetes. Se nota que no son juguetes caros, porque apenas hablan ni hacen nada. ¿Como iban a encontrar a los malvados si todos hacían lo mismo? Y el hecho de que de los pocos juguetes que se fiaba uno era su enemigo natural no faciitaba las cosas.
Si Adam no era, ¿En quién podrían confiar? quien más acusaba era el tonto. ¿Excluía entonces a los demás? ¿eran absolutamente libres? ¿Se escondía el asesino entre Skeletor y Zurg? quizás era alguno de los que participaba menos y veía como la acción se desarrollaba.
Demasiadas dudas, no sabía a quien votaría esta vez. ¿Debería votar a quienes votaron a Adam? ¿Debería votar a quienes votaron a Skeletor? ¿A quienes votaron hacia otra dirección como si no les interesara?
Todo esto y más en la mente de Perry, la figura de inacción, a la que nadie prestaba atención.
La opinión de la mayoría ha hablado y perry figura de inacción ha sido escogido como el rival más débil y por lo tanto sacrificado. Ahora tiene la oportunidad de decir unas últimas palabras antes de palmarla.
Además resulta que slinki se ha enrollado a si mismo demasiadas veces quedando también eliminado.
¡Turno nocturno!
La noche llega y Jessie sabe que esa noche alguno más morirá pues el asesino aún no ha sido descubierto. Desde su posición solitaria observa como los juguetes se acusan entre ellos y como Adam cada vez parece más cabreado y fuera de sus casillas, acusando a diestro y siniestro.
"Espero que la noche pase pronto" piensa mientras coge sus rodillas y trata de no cerrar los ojos.
La señora cara de papa se va a dormir abrazada por la comida para monos... como extrañaba a su maridito. Una lagrima de plastilina se desliza por su mejilla.