No creo que vaya a pasar de ésta y como no puedo protegerme a mí mismo (deberías haber dejado que pudiera protegerme aunque fuera una sola noche xD) protejo, obviamente, a Jesucristo... y a ver si el malo que queda (o eso espero) no es un lince y le ataca a él.
Estas muerto, los juguetes malvados han ido a por ti.
Oh, menuda sorpresa, no me lo esperaba ^^