Partida Rol por web

Dio unos pasos por la sala, para tratar de calmarse, pues sentia como un sentimiento de rabia e ira comenzaba a adueñarse de si mismo,  puede que su mujer no tuviese la culpa de todo, pero eran las gotas que colmaban el vaso.

-¿Pero como pudiste pensar tal cosa? ¿Es que todos pensáis que tan solo soy un bárbaro sin sentimientos? Puede que halla matado a mucha gente, pero a nadie que no se lo mereciese. Y desde luego jamas os haría daño a ti o a Lucc...

Respiró profundamente, pues notaba como la respiración se le agitaba por momentos. Volvió a coger del suelo la espada de entrenamiento y la lanzo con furia contra una de las paredes.

-Toda mi vida luchando y esforzandome. ¿Y que es lo que tengo? Nada... -Dijo ahora con tono triste y la mirada perdida, nada habitual en el.- No tengo mujer, no tengo reino, voy a perder a mi padre... Y hasta a mi hijo me quieren arrebatar...

- Entonces no te conocia como ahora, Gurne... despues te veia tan encariñado con el pequeño que no tuve valor de decirtelo.- te explico casi llorando.- Yo tampoco tengo nada. Me arrancaron de mi casa para casarme con alguien que no conocia, voy a perder a mi hijo y tu no me amas.- dijo con sinceridad. Por primera vez en su vida viste que te hablaba con el corazon.- He tratado de ser lo mejor para ti pero siempre estabas fuera, luchando... nisiquiera sabia si cada vez que te marchabas volverias. Tu eres el gran heroe, el hijo de un rey... ¿Que soy yo Gurne? Soy solo la mujer que nunca amaste, de un matrimonio por agradar a tu padre...

Suspiró y la tomo por las manos para tranquilizarla un poco, ambos estaban nerviosos estaba claro, el destino había jugado con los dos de formas nada agradables.

-No me sirve de nada ser un héroe o el hijo de un rey, si no puedo ni mantener a mi familia a mi lado. Me duele lo que hiciste pero no puedo culparte, has cumplido con creces con tus deberes como esposa, es un bache complicado ante el que nos encontramos pero hay que seguir adelante...

Gurne no hablo en ningún momento de perdón, pues demasiados sentimientos había en su interior, la enfermedad de su padre y sus recelos frente al reinado de Albert, había dado por perdida a la reina y ahora las noticias sobre la verdadera paternidad de Lucc y sus "dones". Hasta que no pudiese oganizarse un poco por dentro no sabia como terminaría todo.

-...Pero ahora debemos cuidar por Lucc... ¿Que puedes decirme de Sarlot? Se que quiere llevárselo.

El dice que... Lucc tiene dones, que los siente... dice que cuando la adolescencia se acerca ese poder comienza a hacerse notar y puede estallar de cualquier manera. Puede lanzar una bola de fuego durmiendo, mientras tiene una pesadilla y quemar un cuarto o a si mismo.- dijo Antoniette como si tales cosas fueran lejanas e imposibles.

Sarlot no siempre fue asi. Hubo un tiempo en el que solo era Salomon, el chico de los establos. Siempre fue bueno y dulce, odiaba la guerra, era... diferente al resto de hombres que me rodeaban. Mas preocupados de su honor y orgullo que de otra cosa.

Yo tampoco quiero que se lleve a Lucc pero ¿y si tiene razon?

-No voy a dejar que se lleve a Lucc tan solo por un "¿Y si...?" Acabo de prometerle que no iba a estar con el y que no iba a permitir que nada malo le pasase, no puedo simplemente entregarle.

El príncipe quedo unos segundos pensativo, comenzaba a estar cansado de tanto mago y brujo, y lo peor es que le daba la sensación de que esto no había hecho mas que comenzar.

-Durante el viaje de vuelta, un anciano mago me advirtió de que alguien había puesto los ojos sobre Lucc, que querían arrebatárnoslo ¿Y si se refería a Sarlot?

- No lo se Gurne... Le dire que se marche.- dijo mirandote con preocupacion.- ¿Crees que podriamos... intentarlo de nuevo?.- pregunto acercandose a ti.- Ser una familia de verdad, no quiero mas farsas... si no vas a poder perdonarme..si no vas a poder quererme me ire... Lucc se quedara contigo si quieres pero permiteme verlo a menudo.

Miró a su mujer a los ojos como hacia mucho que no la miraba, y paso un par de dedos entre sus cabellos.

-No solo a Lucc le he cogido cariño con el paso de lo años, y yo mismo he estado cegado por imposibles... Siempre pensé que al haberte obligado a casarte conmigo jamás me amarías. -Dijo con sinceridad, y sonrió con felicidad.- Si realmente quieres intentarlo estoy seguro de que podemos ser una familia... Pero antes tengo que volver a hablar con Sarlot, se debe aclarar este tema cuanto antes.

-Puedo hablar yo con él, no es un mal hombre... la magia le a vuelto algo extraño en su caracter pero sigue siendo pacifico. Entendera nuestros motivos, puedo hacer que se marche.- dijo temiendo que de negarse tu le obligaras por la fuerza.

Gurne negó con la cabeza.

-No, yo hablare con el, si es pacifico como dices y no son malas sus intenciones no tiene por que haber problema, ademas ya nos hemos citado en la posada... Tu procura que Lucc este bien, ahora que ya vuelve a comportarse con normalidad.

La mujer abrio la boca, no obstante no queria enfadarte o decir algo que te pudiera molestar.- Esta bien Gurne... pero vuelve pronto a casa. Yo hablare con Lucc y despues... nosotros tendremos mucho que decirnos.- dijo la mujer saliendo para ir de nuevo al interior del castillo.

Gurne le dio un breve beso en los labios para despedirse, aunque antes de que se fuera algo llamo su atención.

-Espera Antoniette... ¿Dijiste que era mozo en los establos antes no? En ese caso alguien tiene que saber algo mas de el... De antes de que se hiciese mago o lo que quiera que sea.

- Si, supongo... pero eso fue hace mucho y el es huerfano, hablaba con pocas personas pero puedo averiguar mas si necesitas algo concreto... creo que yo fui la unica que llego a conocerle bien.- añadio con un susurro triste.

-Supongo que no tiene mayor importancia, pero ya me conoceis, me gusta tener las cosas bajo control y cuanto mas pueda saber mejor. Es obvio que el sabe mucho mas de mi que yo de el y eso en un enfrentamiento es una desventaja...  -Gurne paro un momento, siendo consciente de que sus palabras se podían malinterpretar.- No digo que vayamos a luchar, nada mas lejos de la realidad. Pero todo misterio que pueda apartar de el me ara estar mas tranquilo cara una conversación civilizada. Si es cierto lo que dice sobre ese "don" como el lo llama, el también tuvo que sufrir fenómenos extraños hasta que lo controlase e incluso me atrevería a decir que alguien debió a ayudarle a controlarlo al igual que pretende hacer el con Lucc... Debe tener un mentor... -No era difícil seguir el hilo de pensamiento pues el príncipe parecía pensar mejor en voz alta.- Tanto suceso extraño y el mago de palacio desaparecido ¿no es acaso demasiado oportuno?

Agitó las manos como si le restase importancia a lo que acababa de decir.

-No quiero entreteneros si no sabéis, id a atended a Lucc... Yo haré tiempo hasta el anochecer, aun debo hablar con Albert de algunos asuntos..