La doctora inició el intento de comunicación, seguido de Adrien y luego se fueron uniendo el resto. La situación era desesperada por lo que apelar a los ruegos no era mala opción, pero la duda más grande era… ¿Lo entenderían aquellos seres? Al igual que otras cosas que se os pasaron por la cabeza como … ¿Estará en manos de ellos?
La pelirroja se unió a las súplicas, la desesperación la hizo llorar como una magdalena. Pero no era para menos. El técnico también lo pidió, el joven doctor y Rachel, la amiga silenciosa que parecía rezar en silencio.
Aquellos seres os siguieron observando, la situación había llegado al límite. Sentisteis las fuerzas desfallecer, el pueblo entero se estaba muriendo en estos momentos. Quizá esto sí era como un hormiguero, y aquellos seres no más que unos niños, pero… ¿Qué ocurre cuando ya todas las hormigas se han muerto? Se acaba la diversión.
Estísteis que la mano se os caía, posiblemente os estabáis desmayando. Pero..
Pero no exactamente, las manos no se caían, la piedra había empezado a elevarse. Se os escapó de las manos y dejasteis de ver aquellos seres, volvisteis a ver el bosque, el humo, la polución. Al poco se os taponaron los oídos y pasó algo muy extraño. Desde el horizonte comenzó a entrar una luz muy potente. Intensa. Ya casi sin fuerzas pudisteis ver como el humo se iba para arriba. El humo y… si, la cúpula. Un frío intenso barrió todo, un frío limpio, lleno de olores y matices, fue como respirar por primera vez. Visteis aquello que os había estado rodeando, ahora no transparente sino de un gris sucio y oscuro. Como su alguien hubiese levantado la tapa de cristal que cubre un postre, aquella maldita barrera se alejó hacia el espacio cada vez más rápido.
Vuestros pulmones se sintieron más que aliviados, la gente, vuestros amigos comenzaron a llorar, pero esta vez de alegría. Por fin, la libertad.
Se acabó. jajaja Quien lo desee puede poner un post final. Tiene hasta el lunes, que pondré el epílogo común a todos con una especie de pequeño resumen :)
No podía creerlo. ¿Lo habíamos conseguido? No sabía si habíamos tenido algo que ver, pero parecía que aquéllos seres se habían apiadado, o cansado de jugar con nuestras vidas. Dudaba mucho de poder olvidar esas miradas frías... ¡¡¡¡Pero estábamos vivos!!!! Y algo igual de importante, ¡¡¡éramos libres!!!! Me abracé a Ben llorando de alegría, poco a poco fuimos felicitándonos unos a otros. Lo siguiente era ver si el agente de policía estaba bien, y volver al pueblo rápidamente. Necesitaba saber que mis padres estaban bien.
Frustración, desesperación, impotencia...un cúmulo de sensaciones se arremolinaron para darme una bofetada en toda la cara, o mejor dicho, un puñetazo en el estómago. Solamente en pensar de que no funcionase nuestras súplicas me hicieron temerme lo peor, el fin. Vi mi vida pasar a toda velocidad en mi mente, la voz me fallaba....nunca creí en extraterrestres y sin embargo los tenía delante mía, nunca creí en Dios, y sin duda ya rezaba, me daba igual como se llamase, con que nos escuchase ya me bastaba.
Otra oportunidad, si tuviese una más no cometería los mismos errores. Vi a Rose llorar, la risueña camarera que alegraba a todos con su sonrisa derramando lágrimas, eso me rompió algo por dentro, y como pude la abracé con las pocas fuerzas que me quedaban. Quisiera decirle algo bonito, pero no, ya no no pude. Esperé, esperé al resultado, no sabría si sería bueno o malo pero ya poco podía hacer sobre eso, ya hice todo lo que estuvo en mi mano, si eso fue suficiente ya sería otra historia.
De repente, todo pasó deprisa, muy deprisa, no sabía qué estaba sucediendo y solamente pude observar como la maldita barrera que nos tenía como prisioneras se marchó hacía arriba, hacia el cielo a toda velocidad. ¿Éramos...libres? ¿Era de verdad?
Como si me hubiese liberado de una gran carga que ya casi no podía con ella mis piernas se aflojaron y caí de rodillas al suelo. Respiré como si fuese la primera vez y mi duro caparazón se fue por el desagüe, si los demás lloraban, yo también. Creí esperanzado que todo había acabado para bien, ya me preocuparía después de buscar a mi padre, solamente quería sentirme libre, pensar que lo era, al fin.