Partida Rol por web

He creado una escena para cada uno para que podáis ir colgando las cosas que hacéis, consultándome cosas, poniendo vuestros pnjs, historia, lo que sea, así que adelante con ello^^ 

Nombre: Erik

Apellidos: Gallaway

Fecha de nacimiento: 1 de junio

Estatus de sangre: Muggle

Estatus social y económico: Clase media, en el estatus social muggle.

Nacionalidad: Tiene doble nacionalidad: americana e inglesa.

Residencia: Oxford.

Descripción física: Erik es un niño bajito, con el pelo oscuro cortado a lo cacerola, de modo que el flequillo le llega justo por encima de los ojos, aunque tiende a separarlo hacia los lados, lo que le concede un aspecto que en su anterior colegio calificaban de “pringao”. Las pocas horas de luz a las que se expone, le conceden un semblante algo pálido y, en general, su tono de piel es bastante claro, muy sensible a las quemaduras solares. Desde los ocho años le diagnosticaron miopía, por lo que es habitual verle con unas gafas de lentes ovaladas y marco azulado, que muchas veces le ganaron también el apodo de cuatro ojos.

Descripción psicológica: Inquieto por naturaleza, Erik siempre ha sido el típico niño que necesita saber el porqué de todas las cosas. Le apasionan especialmente los inventos de todo tipo y aspecto. Le encanta destrozar los aparatos electrónicos que tiene por casa (mandos, videoconsolas…), para descubrir sus entrañas y los mecanismos que garantizan su funcionamiento. Su afición por las preguntas y su conocimiento de datos tan extraños como el año en que se inventó la fregona o quién fue el inventor de la máquina de afeitar, le han llevado a adoptar el papel del pringado de la clase, pues muchas veces los demás niños no saben de lo que está hablando y le miran raro. Los más abusones han llegado a gastarle más de una jugarreta. Los desprecios de los últimos años le han hecho refugiarse un poco en sí mismo, adoptando a veces una actitud retraída que le hace de escudo ante los “maltratos” de los otros niños, pero que choca por completo con el entusiasmo que muestra para muchas otras cosas. Él es muy infantil y no concibe que pueda haber chicos y chicas tan crueles.

Curiosidades: Es un poco despistado. Su colmillo superior derecho está parcialmente roto ya que le dio un mordisco a lo que él creía que era un caramelo y resultó ser una piedra de uno de los colgantes de su abuela. Es esta misma la que siempre le repite que nació con dos pies izquierdos, porque no hay día que no se tropiece con algún bordillo o se trague alguna esquina.

Es ambidiestro. De pequeño se empeñó en que él quería aprender a escribir con la derecha, como todos los demás niños, y más tarde por fin asumió el hecho de que era zurdo en realidad. Aunque tiene mala letra con ambas manos, puede utilizar las dos para esta y otras tareas.

Secretos: Como no tiene muchos amigos, aparte de una niña (Fiona) a la que le hacía gracia que Erik supiese tantas cosas inútiles, tiene el hábito de hablar consigo mismo. En los dos últimos años, le ha dado un nombre a ese segundo yo (Cian; pronunciado Quían) y hay veces en las que, si está muy distraído o algo le ha afectado mucho, no se da cuenta de que esa persona con la que está hablando no existe.

Miedos: Le da miedo la oscuridad. A veces tiene pesadillas con asesinos y otros locos de los que aparecen en la televisión y, cuando se despierta ha mojado la cama. Ha intentado controlarlo por todos los medios, pero todavía hay veces en las que le pasa.

Pasatiempos y aficiones: Es adicto al canal de televisión muggle Discovery Channel. Todos los días antes de ir al colegio por las mañanas, lo enciende para ver el documental que estén echando en ese momento. Le apasionan especialmente aquellos que explican cómo se hacen las cosas.

Además, le encanta abrir aparatos para descubrir sus mecanismos y ver cómo funcionan. En ocasiones ha intentado hacer sus propios inventos, pero no ha tenido mucho éxito. La perspectiva de ir a aprender magia le entusiasma, porque es el elemento que le falta para hacerlos funcionar. 

HISTORIA:

Erik pasó su más tierna infancia en la gran ciudad de Nueva York. Apenas recuerda nada de esa época, pues a los tres años se mudaron a la tierra natal de su madre: Oxford. A pesar de encontrarse a pocos kilómetros de la capital del país, su familia vivía una vida tranquila, con las preocupaciones e inquietudes de cualquier familia normal, sin grandes sobresaltos.

Su padre trabajaba dando clases de ingeniería técnica en la universidad y su madre había montado, junto con su hermano mellizo, una pequeña farmacia, siguiendo la tradición que llevaba décadas en la familia. Erik iba al colegio, era miembro del club de ajedrez y, por insistencia de su madre que estaba obsesionada con la salud, iba a clases de multideporte una vez por semana. Cosa que detestaba. Por mucho que pudiera gustarle descubrir el funcionamiento de las cosas, nunca había conseguido hacerse con el control de su propio cuerpo. Como decía siempre su abuela, tenía dos piernas izquierdas. Vamos que era torpe, torpe. Aún así su madre siempre le defendía diciendo que eso era porque tenía una mente inquieta, por lo que no prestaba suficiente atención a las nimiedades de su entorno. Que se le pasaría cuando madurara. A lo que su padre respondía que ya era hora de que madurase.

Como todos los niños de clase media de su edad, Erik asistía a uno de los colegios de la ciudad en el que, por desgracia, se había ganado la etiqueta de “el rarito” o “el pringao”. Eso no conseguía matar la curiosidad ni las inquietudes de Erik, que seguía siendo un poco preguntón e interesándose por todo lo que le rodeaba. Especialmente las máquinas. De mayor quería trabajar en la universidad donde daba clase su padre, pues estaba plagada de ellas. Las burlas y las jugarretas contra él, habían empeorado desde que le pusieron las gafas y, por mucho que los primeros días se empeñó en no llevarlas, lo cierto era que no veía tres en un burro y tuvo que acabar cediendo y soportando que le llamasen cuatro ojos.

En el último año, la única amiga que tenía era Fiona: una chica muy tonta que no hacía más que decirle que estaba loco y reírse de él. Pero casi la única que iba a sus cumpleaños y jugaba con él, e incluso a veces quedaban en su casa para hacer los deberes. También a lo largo de estos últimos dos años, cada vez había más momentos en los que Erik se retraía en sí mismo. Seguía jugando con Fiona y con los chicos de su club de ajedrez, pero cuando estaba solo había adquirido una tendencia a hablar consigo mismo, lo que terminó por derivar en hablarle a un segundo yo llamado Cian (pronunciado Quían), del que a veces cuando estaba muy distraído o preocupado olvidaba que no era real.

En definitiva, la vida de Erik no tenía mucho que destacar. Hasta que un día llegó la carta y con ella la esperanza de hacer su vida mucho más interesante. Cuando la recibió, Erik tardó varios días en dársela a sus padres para que la vieran y tomasen las medidas pertinentes. Pensaba que era una broma de algún niño de su colegio. Pero era tanta la ilusión que le embargaba. Tantas las ganas que tenía de poder dar un toque mágico a sus experimentos para hacerles funcionar. Tanta la esperanza de poder hacer nuevos y mejores amigos…que no pudo resistirse y acabó por enseñársela. La reacción de su madre fue reírse, pero su padre permaneció serio y había un gesto extraño en su mirada*, que Erik no supo cómo interpretar. Pero no le importó, pues su padre terminó por hacerle ver a su madre que no pasaba nada por probar. Y Erik no salía en sí de contento. Iba a ser mago.

*relacionado con uno de los pnjs (en construcción)

Se me había olvidado añadir otro miedo y secreto ligado a él:

Erik tiene miedo a los animales. Había pensado que podía ser animago (no hace falta que se manifieste esto en 1er curso, puede ser en otro) y que cuando se convierta en el animal, dejé de ser consciente de su humanidad, como respuesta a un mecanismo de defensa. Si fuese consciente de que es un animal, se tendría miedo a sí mismo y eso le volvería un poco tarumba. Así que para evitarlo, su mente se desconecta completamente y es la mente del animal la que se apodera de él.

No he pensado qué animal en concreto podía ser. Quizás un perro o una ardilla. No sé. 

¿Me dejarías? ^^

Ambidiestro:

Prerrequisito: Destreza 8.

Naciste con el don de poder usar indistintamente la mano derecha, como la izquierda. Además, no tendrás muchos menos problemas en usar dos objetos a la par.

PNJS

Familia:

Patrick Gallaway (padre)

Muggle. Profesor de ingeniería técnica en la Universidad de Oxford.

Helen Gallaway (Helen Jones; madre)

Muggle; Farmaceútica.

Erika Gallaway (hermana melliza)

Muggle

Maureen Jones (Maureen O’Neil; abuela materna)

Muggle. Farmaceútica prejubilada.

Jeremy Jones (tío por parte de madre)

Muggle. Farmaceútico. 

Richard Gallaway (tío por parte de padre)

Muggle. Periodista.

Rachel Gallaway (Rachel Granados; tía)

Sangre limpia. Trabajadora del Departamento de Accidentes y Catástrofes Mágicas, como miembro del Comité de Disculpas a los Muggles.

Maika Gallaway (prima)

Sangre mestiza. Estudiante de 2º curso en Hogwarts. Hufflepuff.

Vale, leído :D

De momento todo genial, como apunte no veo a Richard Gallaway.

Sobre lo que has preguntado:

No he pensado qué animal en concreto podía ser. Quizás un perro o una ardilla. No sé. 

¿Me dejarías? ^^

Ttema animagia es algo que tú trabajas mucho para llegar a ser, no te viene de forma innata así que no parece demasiado coherente que Erik con miedo a los animales pretenda convertirse en animago. De todos modos como es algo que hasta mínimo quinto imposible si en ese momento Erik sigue interesado podemos hablarlo cuando llegue el momento ^^

Vale, pues entonces dejamos lo del animago. Si tiene que prepararse para llegar a ello, no tiene mucho sentido que lo sea ^^

Te vuelvo a poner a los pnjs, junto con sus descripciones, ¿ok?

Familia:

Patrick Gallaway (padre)

Muggle. Profesor de ingeniería técnica en la Universidad de Oxford.

Patrick es un hombre alegre, pero muy responsable y trabajador. De no ser así, no habría llegado a ser profesor en una de las universidades más prestigiosas del Reino Unido. Cuanto algo le molesta o le parece que va en contra de sus principios, puede llegar a tener muy mal genio. Tiene un problema para aceptar las dificultades sociales que a veces pasa su hijo debido a sus inusuales intereses, por lo que sus comentarios respecto a ello pueden resultar a veces algo duros. Sin embargo, no es más que un deseo de evitar que su hijo pase por lo mismo que pasó él, pues no tuvieron una infancia tan distinta.

Helen Gallaway (Helen Jones; madre)

Muggle; Farmaceútica.

Helen es una persona aparentemente seria, que a veces puede sorprender con un peculiar sentido del humor, pareciendo que se toma las cosas de la vida, y sobre todo los problemas, un poco a broma. Es extremadamente inteligente y siempre tiene el consejo perfecto para cada uno de los clientes que pasa por su farmacia. Adora a sus hijos y nunca duda en defender a Erik frente a las puyas de la abuela y de su padre. Es su ojito derecho. 

Erika Gallaway (hermana melliza)

Muggle

Erika es la hermana melliza de Erik.  Al contrario que su hermano, Erika tiene una vida social bastante llena. Varias veces ha intentado llevar a Erik con su grupo de amigas pero la cosa nunca ha terminado de cuajar. En más de una ocasión, le ha pillado hablando consigo mismo, pero cuando le menciona el hecho a su hermano él se hace el loco. A Erika le parece algo dulce que su hermano tenga un amigo invisible, pero a la vez le entristece. Se pregunta por qué la conexión y complicidad que tenían se ha perdido en los últimos años. Ahora son más frecuentes las ocasiones en las que discuten que en las que se cuentan sus confidencias. Si a todo eso se le suma la reciente envidia de Erika hacia el hecho de que su hermano vaya a acudir a una escuela de magia (ella no ha manifestado este don), se podría decir que la relación entre ellos dos en la actualidad no es demasiado buena. 

Maureen Jones (Maureen O’Neil; abuela materna)

Muggle. Farmaceútica prejubilada.

Es la madre de Helen y, aunque está prejubilada, se le puede ver a todas horas en la farmacia de sus hijos o en la casa de la familia Gallaway. Se siente joven y odia sentir que no sirve para nada, por lo que no es capaz de parar quieta. Además, le encanta tomar el pelo a sus nietos, en especial a Erik. Los niños aborrecen esta faceta de su abuela, pero a ella le resulta la mar de divertida. 

Jeremy Jones (tío por parte de madre)

Muggle. Farmaceútico. 

Hermano pequeño de Helen. Comparte el negocio familiar con ella. Ella es la cara al público y él, bastante más tímido, es quien se encarga de los temas de laboratorio y de la administración del negocio. Es difícil sacarle una sonrisa pero es un buenazo y no suele desearle el mal a nadie. No tiende a compartir sus sentimientos con su familia y no se le conoce novia alguna. Su madre y su hermana sospechan que es gay y no hacen más que lanzarle indirectas (especialmente Maureen) para que se decida a dar el paso y salir del armario. 

Richard Gallaway (tío por parte de padre)

Muggle. Periodista.

Hermano mayor de Patrick. Curioso, inquieto, sagaz y fanático del deporte. Gracias a su trabajo como periodista, la vida de Richard ha dado más de uno o dos vuelcos. Ha recorrido prácticamente el globo entero hasta una fecha bastante reciente, en la que decidió asentarse en Londres con su familia. Esto se debe a que su hija Maika fue convocada para asistir a Hogwarts (ahora la chica está en segundo) y eso es algo que no podía dejar de ocurrir. A pesar de ser muggle, a Richard le fascina la magia y no puede dejar de mirar embelesado a su mujer cada vez que esta hace uso de ella.

Richard conoció a Rachel cuando todavía no había salido de Estados Unidos, pues ella tenía un trabajo que hacer ahí. Se la presentó a su hermano y, cuando este se enteró del secreto de Rachel (la mujer les salvó de un accidente de coche empleando la magia), aconsejó a Richard que marcharan de allí, que su familia no lograría aceptarlos. Desde entonces ambos hermanos mantienen correspondencia, pero el resto de la familia piensa que Rachel no es más que otra periodista tan loca como su hijo y que, aunque no la conozcan, probablemente sean la pareja perfecta. Erik nunca ha visto ni conocido a su tío, tía ni prima. 

Rachel Gallaway (Rachel Granados; tía)

Sangre limpia. Trabajadora del Departamento de Accidentes y Catástrofes Mágicas, como miembro del Comité de Disculpas a los Muggles.

Es la mujer de Richard. Amante de la aventura y de los riesgos, pero también del mundo muggle. Ella nació y creció entre magos, pero en el momento en que tuvo el primer contacto con la otra realidad del mundo, se enamoró de él. Poco más tarde, cuando debía mediar en una catástrofe mágica en EE UU, conoció a Richard que estaba de reportero ahí, sin tener ni idea que aquel desastre había sido cosa de magia. Cuando este descubrió que Rachel era maga, no le importó. Le fascinaba que pudiera existir gente así. Desde entonces, han recorrido el mundo juntos, hasta asentarse en Londres dos años atrás, cuando su hija fue llamada a Hogwarts. 

Maika Gallaway (prima)

Sangre mestiza. Estudiante de 2º curso en Hogwarts. Hufflepuff.

Hija de Richard y Rachel. Es una chica muy amable, que vive por y para ayudar a la gente. Acostumbrada a viajar, debido al trabajo de sus padres, Maika nunca ha tenido amistades muy duraderas, pues cuando empezaba a conocer bien a las personas, tenía que abandonar el lugar. Este ir y venir le ha convertido en una chica dura, en el sentido de que no se deja amedrentar con facilidad ni se ve afectada en demasía por eventos que a otros harían llorar. Desde que fue aceptada en Hogwarts, no le ha resultado difícil integrarse y formar un numeroso grupo de amigos. Aún así,  ella es independiente y suele solucionarse los problemas ella sola, tratando de solucionárselos también al resto. Hace poco descubrió que su primo, que hasta ahora no sabía que existía, va a ingresar en Hogwarts. La perspectiva le emociona y ya está haciendo planes sobre todo lo que le quiere enseñar y todas las maravillas que le quiere contar. 

Cierto, si me la leí, me he liado al hacer mi super tabla. Todo en orden :P Puedes proceder xDDDDDD