Partida Rol por web

-Perdón? Y yo qué he hecho como para ser así de perseguido?- No podía contener la risa, la situación le parecía algo cómica, más que tensa. -Debe haber algún malentendido.-

-¿Qué demonios?,¿que pintas tenían?,Celebnor si es verdad lo que dice debemos darles caza o habrá gente que te empezará a buscar.-Elerent aprieta la empuñadura de su espada con algo de ira y mira con decisión a su compañero,pero de repente se pone delante de Celebnor como si quisiera cubrirle.-Y vos guerrero,¿que le dijisteis?,¿aceptaste algún tipo de trato?,porque me sorprende vuestra amabilidad para decir tal información.-Elerent mira a los bárbaros esperando una respuesta,preparado por si había que luchar.

-Y sabes lo que responde un enano a eso  Ishkhaqwi ai durugnul!-Dijo Farin sujetando cada vez mas fuerte su hacha.
 

-Tienes razón.- Exclamó. Se lo veía un tanto preocupado por lo que dijo su compañero, no podría viajar tranquilo con gente tras su cabeza.

-Más vale que nos digan o habrá problemas.- Mostró los dientes con una sonrisa de oreja a oreja. -Y no lo digo por mí, aquí hay varios amigos con ganas ya de probar sus hachas nuevas.-

dudo que esten solos esos 3

-Delgaducho, No sabesmos  de tus asuntos, ni de esos tipos, la verdad es que no nos importa nada tus asuntos. Pero si quieres tener menos problemas yo me disfrazaria, para pasar desapercibido un poco. -Y se ponen a hablar en Haradaico. 

-Gracias por el consejo,pero ya sabemos como cuidarnos.-Dijo Farin al barbaro

-Volvamos con el grupo,estos me dan mala espina...-Dijo Farin a sus 2 compañeros
 

-Y tu que has hecho? que has ido contando?...porque te persiguen? quien eres en realidad? quien te persigue?-Dijo Farin intentando interrogar al elfo.
 

-Esto es de lo más raro, no hace un mes que salí de Ciudad Gris y ya me quieren muerto.- Dijo a Farin y Elerent. -Qué habré hecho?-

Y siguiendo a Farin volvió a reunirse con los demás.

-No tengo ni idea. Soy un simple conjurador de Ciudad Gris, nada más ni nada menos. Sé que he sido un poco travieso, pero no creo nunca haberme pasado tanto con alguna de mis bromas.- Dijo riendo. -Y no me gusta mentir ni ocultar nada, el único nombre por el que me conozco es Celebnor, el portador de la llama de plata.-

-En ese caso no se me ocurre nada...pero esos barbaros no me gustan ni un pelo,puede que haya sido una advertencia amistosa o esperan pillarnos en algun camino mas apartado y con el resto de su grupo...andate con ojo joven elfo y no te apartes de nosotros.-Dijo Farin.

Me quedé totalmente clisado mirando por la ventana y casi sin darme cuenta, pues estaba centrado en intentar ver algo sin ninguna fortuna, la puerta de la taberna se abrió y comenzó a entrar gente.

De primeras no me percaté de quienes eran, pero por el rabillo del ojo, vi entrar a Lycyn - ¡¡vaya!! el resto del grupo.... ala, ya estamos todos juntos y revueltos - Me agrada ver que llegáis todos a dos patas, para variar con la suerte de "La hermandad", habéis dejado atrás vuestras monturas ¿verdad? HE HE HE, lo mejor es caminar y depender de tus propias piernas, no es buena idea depender de patas ajenas - Tras eso, me quedé viendo como los demás entraban y se iban colocando donde buenamente podían.

De repente, uno de los recién llegados no se le ocurre otra cosa que ponerse a charlar con los tres más cazurros que hay en la taberna - ¡¿¡¿Sera insensato?!?! lo que hemos intentado evitar nosotros desde que estamos aquí, va este y la va a fastidiar - pensé con pesadumbre, intentando no pensar en lo que podría pasar con esos tres bestiajos.

Me situé en un lado de la taberna midiendo las distancias, para poder reaccionar rápido si la cosa se ponía fea, que por la forma en la que llevaba Celebnor la conversación, seguramente se pondría fea no, lo siguiente - No quiero ni acercarme, pues como esos tres empiecen a tener la sensación de que están rodeados........ - y observé atentamente todo lo que iba sucediendo.

Tras hablar, el elfo se detiene, como si recordara algo que había olvidado. Luego se quedó pensativo por unos instantes y finalmente decidió no prestarle más atención al caso. No quería preocupar a sus compañeros con sus problemas.

Ves que Eleren y Farin se acercan estan hablando un par de asaltos y terminan los tres Barbaros por ignorarlos y hablando entre ellos en otro idioma.

Farin parece que se retira un poco y le da unos consejos a Celebnor. Elerent esta de acuerdo.

Elerent posa la mano en el hombro de Celebnor-No se lo que ocurre pero,pase lo que pase estamos contigo amigo, si tienes que contarnos algo puedes confiar en nosotros,no hay nada que un viejo y buen enano y un noble con ganas de batallar no puedan hacer.- El joven sonríe a su amigo elfo para intentar animarle.

Al ver la cara de preocupación de Malleus, Celebnor le pone una taza de cerveza de malta en frente y le habla en su tono jovial habitual. -Vamos amigo, ni que hubieras visto a un muerto.- Miro de reojo a los bárbaros. -Esos tipos de ahí no van a pelear, al menos no ahora.- Dijo un poco más serio. Luego miró a Elerent a los ojos, esta vez sí enfocándose en ellos. -Les agradezco. De necesitar vuestra ayuda no dudaré en pedirla, pero no deseo preocuparlos con mis problemas.-
Fue y se sentó en la mesa para continuar con la comida.

Intenté interesarme por lo del hijo de la posadera, no te has dado cuenta que escribi eso o es que no ha querido la pnj decir nada?.

Farin se quedo pensativo y penso que asi animaria un poco a los demas y calmaria un poco los nervios de todos.

-Alguna vez os han contado la historia de la llegada de Smaug?, os contare lo que me conto mi padre hace muchos años....

Farin se puso de pie para que todos sus compañeros le escucharan .

-Cuando llego Smaug lo primero que oyeron fue un ruido como de un huracán que venía del norte, los pinos en la Montaña crujían y rechinaban con el viento seco y calido,era un dragon escupefuego del norte, habia llegado Smaug el terrible .Ese día ocurrió una masacre despiadada porque la ciudad de Valle no valía nada para smaug pero la destuyo de todos modos... su ojo estaba fijo en otro trofeo ...Erebor.Smaug entro en Erebor y aniquilo a los enanos ,en esa epoca los enanos no tenian la fuerza ni estaban preparados para una amenaza tan temible,no pudimos hacer nada Smaug entro en la ciudad destruyendo todo y matando a cualquier enano, cuando acabo se aposento en lo mas profundo de la montaña donde todos los tesoros de los enanos estaban guardados,los dragones codician el oro, con un deseo siniestro y feroz. Erebor había caído ya que el dragón resguardo su botín por toda la vida,los enanos se vieron forzados a vivir una vida  triste,vagaron por los caminos sin ningun hogar, un pueblo poderoso caido en desgracia por la codicia de un dragon...pero nadie olvida  el humo de la montaña a través de la luna y los arboles como antorchas brillantes.-Dijo Farin para al rato encender su pipa y ponerse a fumar

El lugar se estaba quedando chico, le alegró ver que unos de los nuevos que entraba era su sobrino.

- Parece que al otro grupo  le ha costado poco tiempo  completar su trabajo. -Dijo a su  compañeros de mesa.

Conversó un rato con Celebnor, pero su distraído sobrino no tardó  mucho en levantarse de la mesa  y comenzar a husmear el lugar.

Nomdil continuó bebiendo de su hidromiel y mirando todo lo que pasaba, pero se preocupó al ver como Celebnor  entablaba un peligrosa conversación con unos de los clientes.

Caminó hasta  él y  apoyó   su mano en el hombro.

-Creo que estas personas no  son de hacer muchos amigos, vamos sobrino dejemos a los caballeros en paz.

Miró a Malleus que estaba cerca, esperando que se hubiera percatado de lo mismo.