Partida Rol por web

Una risa siniestra recorre tus oídos cuando el niño ve a su padre. Sin mirarte, se dirige hacia él y el padre le coge en brazos. Pero hay algo raro, la ilusión no te obedece como debiera. No se lleva al niño a la cama, si no que se queda allí plantado. Por primera vez, el niño se te mira y ves, muy sorprendido, que no tiene rostro

El nombre me habéis arrebatado, mi vida has arrancado

Al mismo tiempo, tras los dos, empiezas a aparecer gente. Muchos de ellos son del pueblo, pero otros son almas en pena, almas que deberían estar descansando en paz. Todas recitan lo mismo

El nombre me habéis arrebatado, mi vida has arrancado

De pronto, la noche se oscurece con unas nubes muy siniestras. Anuncian una catástrofe, una guerra, un fin.

¿Pero que extraño poder está actuando aquí? Mis poderes o no funcionan como debieran o este niño no es de este mundo... ¿Porque aparece la gente del pueblo? Acabo de dormirlos a todos...

Algo extraño sucede en este pueblo....

Niño... yo no te he quitado nada... mi única intención es velar tus sueños y acunarte cada noche.

¿Que mensaje cifrado quereís ofrecerme humanos, estaís disconforme con el trato que os ofrecen los Dioses?

Hypnos no sabía que sucedía y lo peor de todo, no sabía como actuar ante tan insólito suceso...

El niño se llevó las manos a la cabeza. De su interior, surgió un grito de dolor, desesperación, de terror. Es tan profundo que consigue que te atraviese el corazón, hace que ese dolor sea tuyo.

El padre da un paso atrás, alejándose de ti

¿Nos vas a abandonar? retumban en tus oídos miles de voces de seres humanos.

Antes de poder responder, un rayo atraviesa el cielo e impacta directamente sobre el padre y el niño. No caen ni son mutilados, pero rápidamente un fuego comienza a consumirles.

Tras ello, las figura de los humanos arden en un mar de llamas, consumidos por el dolor

¡Ayúdanos!

¿Y como puedo ayudaros? ¿Que os sucede?

Esto debe ser una ilusión, un juego maligno de algún Dios....

El grito del niño vuelve a penetrar en tus oídos cuando te quieres marchar de allí. Las voces al unísono empiezan a hablar de nuevo.

Castigo divino.

El fuego robaron y nos ofrecieron.

Ahora, todos moriremos.

Todas las llamas se funden en una sola. Los humanos desaparecen entre ellas, pero sus gritos de dolor siguen resonando en tus oídos.

Pero, de pronto, el fuego desaparece. Ya no hay nada, ni una huella de las llamas.

Con un poderoso trueno, la oscuridad se hace total a tu alrededor. No ves nada, sólo a ti mismo

Y, en el lugar donde estaba el niño, aparece alguien. Le reconoces perfectamente. Es la diosa Atenea.

ATENEA, ¿que haces aquí? ¿es esta tu versión de una broma divina?

Había dormido a todo el pueblo menos a un niño y de repente están todos aquí, despiertos, maldiciendo a los Dioses o solicitando nuestra ayuda.... ¿puedes explicarme esto?

La mirada de hypnos es dura, mientras pronuncia estas palabras, con los brazos cruzados en su pecho, en señal defensiva.

La diosa Atenea se acerca hasta ti y posa una mano en tu hombro. Con una sonrisa cálida te mira y hace que camines a su lado

No es ninguna broma. Esto no es real. Pero puede serlo.

Su rostro cambió a la preocupación. Una vena cruzó su frente y su mirada se entristeció

Tengo que luchar por la humanidad, y tu debes ayudarme. Mira allí

En la dirección  que te indica, ves el Partenon, tan espléndido como siempre… Pero un rayo parte el cielo y el fuego consume el templo poco a poco

Ven a buscarme a mi templo de la Isla de Naxos. Si así lo deseas, podremos hablar…

Poco a poco, su cuerpo se va convirtiendo en humo. Lo último que puedes ver son sus ojos llenos de ternura, contemplándote.

Algo sucede en el Partenon... eso está claro....

Si he tenido esta premonición no es por casualidad, ha sido algo demasiado vivido como para considerarlo irrelevante...

Hypnos se levanta y sale de su palacio (cueva) mirando rápidamente en dirección al Partenon para verificar si está o no ardiendo. Sabe que no debería arder pero esa premonición ha sido tan vivida que....

¿¿¿Isla de Naxos?? Donde está esa isla y porqué me ha citado Atenea allí??? Si ese es el deseo de Atenea quien soy yo para negarme al deseo de una Diosa...

Estás en un bosque, con el arco preparado para la caza.

Te escondes tras un árbol, buscando su protección para buscar a tu víctima al mismo tiempo. Corres, saltas, te vuelves a esconder.

Pero... ¿qué estás persiguiendo? Al quedarte quieta ante esa pregunta, la naturaleza a tu alrededor comienza a morir. Pájaros de todos los árboles caen muertos, al igual que conejos que te encuentras por el camino.

De pronto, un grito parece romper ese aura mortal.

Corres hacia el lugar procedente del grito. Al llegar, ves a una de tus musas a orillas de un río peinándose sus cabellos.

¿Quién es? ¿Por qué ha gritado?

Un zorro aparece cerca de tí. Da pasos muy lentamente, parece que cada uno de ellos le hace sufrir. Al llegar a tus pies, cae muerto.

Con lagrimas en los ojos por ver como se destruye lo que mas aprecio me agacho junto al zorro y lo acaricio con dulzura. Luego centro mi atención en la musa que se encuentra en la orilla -"¿Tu has gritado?, ¿Sabes que esta ocurriendo aquí?"-.

La musa sigue cepillándose el pelo. Notas cómo su cuerpo se pone en tensión.

Notas cómo levanta su brazo lentamente y con temblores y te señala en una dirección. Acto seguido, se mete en el agua, con la que se funde.

En el lugar donde te señala, hay un niño pequeño humano sentado en el suelo. De cabellos castaños y túnica blanca, alza su cara para mirarte... O, al menos, eso piensas, ya que no tiene rostro.

De su interior sale el grito que antes has oído. El niño se cubre la cabeza con sus manos y señala al cielo. Nubes oscuras lo cubren, nubes que presagian muertes, catástrofes, guerras...

Miro al niño algo confusa y luego a las nubes sin entender mucho aún lo que ocurría. Me volteo para mirar nuevamente al niño y agarrándolo por los hombros le digo-"¿Hacia donde debo ir pequeño?"-. Estaba desesperada no se que debía cazar ni que estaba ocurriendo pero si sabía que debía hacer algo...que era mi deber.

Las nubes empiezan a brillar por los relámpagos de la tormenta. El niño se levanta y da un paso atrás

¿Tú también nos vas a abandonar? retumban en tus oídos miles de voces de seres humanos.

Antes de poder responder, un rayo atraviesa el cielo e impacta directamente sobre el niño. No cae ni es mutilado, pero rápidamente un fuego comienza a consumirle.

Tras él, aparece la figura de cientos de humanos en un mar de llamas, consumidos por el dolor

¡Ayúdanos!

Asustada y en estado de shock por las imagenes comienzo a retroceder hacia el lago -"No puedo, lo siento pero no se como"-. Me arrodillo junto al lago y desesperada me agarro la cabeza bajando la mirada y tratando de taparme los oídos para no escucharlos.

La cuenca vacía de los ojos del niño parecen mirarte.

El fuego robaron y nos ofrecieron.

Ahora, todos moriremos

Todas las llamas se funden en una sola. Los humanos desaparecen entre ellas, pero sus gritos de dolor siguen resonando en tus oídos.

Pero, de pronto, el fuego desaparece. Ya no hay nada, ni una huella de las llamas.

Con un poderoso trueno, la oscuridad se hace total a vuestro alrededor. No ves nada, sólo a ti misma

Y, en el lugar donde estaba el niño, aparece alguien. Le reconoces perfectamente. Es la diosa Atenea.

Abro bien grande los ojos al ver ala hermosa Diosa Atenea enfrente mio. Hago una reverencia como símbolo de cortesía hacía la Diosa y digo -"Buen día....¿Que le trae por aquí Atenea?"-.

La diosa Atenea se acerca hasta ti y posa una mano en tu hombro. Con una sonrisa cálida te mira y hace que camines a su lado

Esto no es real. Pero puede serlo.

Su rostro cambió a la preocupación. Una vena cruzó su frente y su mirada se entristeció

Tengo luchar por la humanidad, y tu debes ayudarme. Mira allí

En la dirección  que te indica, ves el Partenon, tan espléndido como siempre… Pero un rayo parte el cielo y el fuego consume el templo poco a poco

Ven a buscarme a mi templo de la Isla de Naxos. Si así lo deseas, podremos hablar…

Poco a poco, su cuerpo se va convirtiendo en humo. Lo último que puedes ver son sus ojos llenos de ternura, contemplándote.

Me despierto sobresaltada-"Noooo..... no te vayas Atenea"- grite muy fuerte, luego recupere la compostura y me levante. Es obvio que no fue un sueño fue demasiado real, eso fue una premonición y debo ir urgente a la Isla de Naxos, así deba dar la vida no dejare que eso le ocurra a lo que mas amo en este mundo. Me cambio y agarro todo lo que pueda llevar para un largo viaje, luego parto hacía la isla.