Partida Rol por web

Llegas paseando al trote a lo que parece una pequeña balsa de agua empantanada. Parece algo hecho por el hombre para almacenar agua de lluvia y destinarla al regadío. El lugar esta sumamente tranquilo y la luz del crepúsculo baña de naranja, de rojo y de rosa las oscuras aguas. Te llama la atención un pequeño charco, del tamaño tal vez de un tazón de cerámica, justo en el perímetro del estanque. Allí sobrevuelan el agua 4 mariposas de gran belleza, atraidas por el agua estancada. Te aproximas para verlas, bajándote del caballo y te acercas sigilosamente para poder echarles un vistazo mejor. Te pones en cuclillas, atraida por la particular belleza de una que mezcla tonos verdes y rojizos y alargas dos dedos por si la mariposa quiere posarse sobre ellos para descansar de su incesante aleteo.

Ella parece responder a tu invitacion y comienza una aproximacion hacia tu mano cuando, de repente, la lengua de un horrible sapo sale de debajo del pequeño charco atrapándola en pleno vuelo y llevándosela a la boca con un chasquido húmedo. La superficie del agua se agita brevemente pero en seguida las ondas desaparecen como si no hubiera pasado nada.

La escena te deja una sensacion incomoda, un cosquilleo en la nuca.

-La naturaleza actuando con su sabio salvajismo habitual -te dices a ti misma.

Pero en lo profundo de tu mente te preguntas si no habra sido algo mas que eso, si no habra sido alguna especie de premonicion...

Nada más llegar a las escaleras, noto las miradas fijas en mí, y sin poderlo evitar, mis mejillas se sonrojan haciendo juego con el vestido. Un tanto aletargada, bajo las escaleras, con cuidado de no tropezar, ayudada en los últimos pasos por el capitán, quien consigue sonrojarme aún más con sus palabras.

Abro la boca para responderle, pero no se me ocurre qué decir, así que permanezco callada con la mirada baja. Me gustaría saber qué estarán pensando los demás, aunque no estoy segura de que me agradase.

Después de unos segundos, suelto unas balbuceantes palabras para excusarme por mi silencio.

-Eh.. Mucho me temo que no hay lugar en mi equipaje para vestidos como éste. He tenido que aprovecharme de la gentileza de Amara y Sintara, tendré que agradecérselo en cuanto se me presente la ocasión.

Archen asiente como si solo hubieras confirmado su suposicion.

-Lo había supuesto. Yo vivo aqui y esto es lo mas elegante que tengo.

El capitán se refiere a su armadura, recientemente lavada y pulida, y a una chaqueta azul oscuro de botones cobrizos que viste por debajo.

-Si Amara me lo permite, dejaré mi armadura aqui, en La sirena. Creo que hoy no la necesitaré -dice sonriendo y sin quitar los ojos de Polgara.

Tras desprenderse de su coraza todos podeis verq ue lleva una armadura de corte marinero, que recuerda a la de los viejos capitanes , con grandes solapas y botones amarillentos. El capitán ofrece su brazo a su invitada.

-Cuando quieras, hemos quedado con unos calamares.

Al ver bajar a Polgara, al clérigo por poco se le cae la jarra de cerveza por la sospresa al ver bajar a semejante belleza por las escaleras de la posada. Transcurridos unos segundos, Arielus apura su bebida y se hace a un lado para ver como el capitán receibe con un halago a la hechicera, y al poco decide dejarles solos.

-Sin duda que sois un hombre afortunado Capitán, disfrutad de tan grata compañía, que mañana partimos de viaje.- Comenta sonriente mientras se dirige a la puerta.

- Voy a ver a Violant, a ver si conseguimos sacarla ese mal humor!!- Dice mientras sale de la posada.

Cuando llegas a los establos te encuntras con que falta el caballo y la mula de Violant. Aparentemente ha salido a dar una vuelta con ellos a pesar de que falta muy poco para que oscurezca.

Al llegar a los establos y ver que falta Violant, el clérigo se preocupa por ella, asi que sale del establo y comienza a preguntar a la gente de los alrededores por la pequeña y sus monturas, no ha podido ir muy lejos por el poco tiempo que ha pasado.

Lamentablemente la Sirena esta alejada de la ciudad, en el camino que lleva a ella desde el sur, junto a unos acantilados tremendos. No hay nadie por alli que la haya podido ver partir. Me temo que no podrás encontrarla.

Arielus sale de la posada y vuelve a entrar al cabo de unos minutos, con cara de frustracion. Justo cuando entra Polgara y Archen se preparan para irse.

- Violant se ha ido- Comenta nada mas entrar al resto de los presentes -Su caballo y su mula no están, cuando he llegado parecía contrariada ¿Sabéis que ha podido pasar?- El clérigo estaba preocupado por Violant, además estaba a punto de anochecer y la zona podía ser peligrosa para moverse por la noche.

Nok estaba a lo suyo hasta que un gran silencio se hizo en la sala y era su voz lo único que se escuchaba... miré a todos lo lados y divisé la causa de tal silencio, todos en el lugar miraban hacia las escaleras... pero porqué? quien era ella? No la había visto antes... hasta que ... aiba!!! Polgara?? no podía ser... alguien la había embrujado...fijo!! ahora la tenía bajo un encantamiento, la habían desnudado y le había dejado cuatro trapos... aunque cuatro trapos elegantes...con qué fin?? querian que se congelase? pero Polgara, eres tu? me recuerdas..? Soy Nok... me recuerdas? Quien te ha quitado tu ropa y te ha dejado asi?... quieren matarte de frio!

-Has sido tu? le pregunto al joven de la armadura. Qué quieres hacer con ella? Qué hechizo le has lanzado? Soy su protector, hincho pecho..asi que responde! afirmo valientemente.

 JAJAJA! ciertamente Nok es un digno protector... quizás debiera de acompañar a Polgara y al Capitán jejeje! por protección... no te parece Nok? - Zelmar bromea con la conducta de Nok, justo antes de que Aurelius entre de nuevo, preocupado por la reacción Violant...

Arielus mira poco convencido a Zelmar.

- A fin de cuentas vosotros la conoceís mas que yo, pero eso no quita que esté preocupado por ella, parecía un poco alterada, espero que no la pase nada.- termina mientras se gira sobre sus pasos y se queda en una de las ventanas mirando al exterior.

- Zelmar sacude la cabeza y se incorpora - de acuerdooo! - dice levantando los brazos vencido - si antes del alba, no aparece Violant, yo mismo ire en su busca...

- mira a los presentes con un gesto de picardía en su cara medio cubierta por la capucha - si, si, vosotros también iréis en su busca, cuento con ello... pero por el momento lo mejor que podemos hacer por Violant, es irnos a la cama y descansar, pues mañana sera un día muy largo y aburrido

- el elfo recoge su copa de vino y mientras da las dos zancadas que le separan de la barra, se termina el contenido del preciado elixir, acto seguido se dirige a las escaleras que le conducirían a su dormitorio... -buenas noches tengáis...

Después de lo de la mariposa me quedo quieta mientras las monturas y la Llobeta tienen la ocasión de beber un trago de agua.

Por bella y pacifica que sea una criatura no es ninguna garantía de su inmunidad.

El suceso se repite a intervalos pero ahora ha perdido su significado, es solo una rana comiendo moscas y mariposas.