Partida Rol por web

Cuando abrís los ojos, os encontráis dentro de una bonita casa de madera decorada con muebles artesanales, todo muy idílico. Se respira paz en el ambiente.

Sayron se encuentra sentado en una silla de madera, mientras que Aelia se encuentra tumbada en la cama.

Un niño de complexión fuerte entra corriendo en la casa:

¡Mama! ¡Papa! ¡Venir afuera, mirar lo que he hecho!

El niño parece realmente emocionado.

- ¿Ma... PA...? - Sayron se levantó de la silla y se giró hacia Aelia sin tener ningún tipo de explicación a lo que estaba pasando. ¿Y este niño?

Por un momento pensó que era algún tipo de truco, se palpó la cara, se pellizcó el brazo... ¿Estaba acaso soñando?

No, aquello no era un sueño... ¿No era un sueño? Tenía que serlo... ¿Algún truco de Orión quizás? Seguramente fuese eso, si. Pero todo era muy incomprensible. Si alguien era capaz de hacer algo así, de sumirlos en semejante ilusión, si alguien tenía tanto poder ¿Por qué no los había matado ya?

¿Que estaba pasando?

Aelia parecía tan desconcertada como Sayron. La sacerdotisa no dijo ni una sola palabra.

¿Papa? ¿Mama? - preguntó el niño, desconcertado - ¿Pero que os pasa? ¡Venid! - y acto seguido salió por la puerta.

- ¡Quédate aqui, Aelia! - Si aquello era una trampa de Orión, al menos era mejor que no les pillaran juntos. Sayron se levantó de ¿su butaca? y se dirigió detrás del niño. Tendría que averiguar qué estaba pasando alli.

Sayron salió afuera.

Cuando sales afuera, te encuentras en una tierra devastada. Bosques quemados, cadáveres cubren el suelo...

Al fondo puedes contemplar una enorme torre, rodeada de llamas. Y el niño que parecía ser tu hijo, emitiendo un gruñido grotesco, comienza a convertirse en una especie de rata humanoide.

Una voz resuena en tu cabeza:

¿Te gusta el mundo que he creado especialmente para ti, querido amigo? ¿Por qué no vienes a visitarme a la Gran Torre? Así podremos charlar tranquilamente...

Sayron miró a un lado y a otro. No podía creer todo lo que estaba viendo a su alrededor. Trató de decirse a sí mismo que aquello no era real, pero entonces el niño que antes había sido su "hijo" se transformó en rata y se lanzó a por él, mordiéndole la pierna antes de que el herrero pudiera reaccionar.

El niño-rata se lanza contra Sayron, que intenta concentrarse por romper la ilusión. Solo hay que concentrarse, no es mas que una mera ilusión...

Entonces siente un mordisco en el brazo. El niño-rata le había atacado y parecía dispuesto a hacerlo de nuevo. Aquello era mas real de lo que parecía en un principio...

Sayron recibió el impacto de los dientes. Auch! Eso parecía bastante real.

Pero no podía ser. ¿Qué estaba pasando en aquel lugar?

Sayron lo intentaba... Cada vez se acercaba mas...

Pero nuevamente, el niño-rata volvió a atacar.