Partida Rol por web

LOS MACHETES DEL CHOLO

¿Por qué siempre me pasan a mí estas cosas?

En eso pensaba Doug justo después de haberse dejado liar por El Cholo para llevar adelante la última excentricidad del mexicano. Parece ser que tras una salida en busca de provisiones, durante su huida de un edificio, se vio obligado a dejar tras de sí sus formidables machetes. ¡Y cuánto los echa de menos, el pobre!

Arrastrado por la locura de su compañero, el chupatintas se ve obligado a hacer horas extras en una tarea desagradable bajo la supervisión de un déspota. Las cosas, para él, volvían a ser igual que antes del comienzo del la pesadilla zombie...

Después de unos primeros compases ligeros y veloces, El Cholo y Doug se encuentran a una puerta de distancia del primero de los machetes. La gran precisión de ambos en el cuerpo a cuerpo, junto con la suerte de encontrar un rifle, les permitió llegar como una exhalación hasta la zona Norte del edificio. Pero ahora tienen a un nutrido grupo de zombies que se aproximan lentos pero seguros desde el Sureste, y a otros cuantos caminantes que los esperan salibando.

A punto de obtener la suficiente experiencia como para mejorar sus habilidades, se encuentra ya a tiro del primero de los corredores que han acudido a la zona. ¿Seguirán teniendo la misma suerte?

Doug se mueve al Oeste y sale a la calle. Esboza una sonrisa al ver al caminante, y antes de borrarla de su rostro alza el Winchester y apunta... 
-¡Ya puedes decir adiós, criatura inmunda!
Con el caminante abatido, asiente y sigue avanzando mientras le grita al Cholo que el camino está libre.

El Cholo, antes de salir en pos de Doug, dedica unos segundo a rebuscar en la habitación. Con su nuevo botín a buen recaudo, escucha el grito de Doug, y lejos de salir detrás de él le replica que no, que no es por allí. Y por ello, se mueve al Sur.

T8: Mira que tener que venir a por dos puñeteros machetes con la de armas que tenemos en el campamento - pensaba DOug mientras le volaba la cabeza a otro zombie. Se quedó mirando la zona por la que había salido el engendro pero si quería llegar hasta el arma y salir de allí lo antes posible tendría que confiar en que no le vieran pasar.

T8: Puto gringo, va a joderme todo el rato...no se quejó cuando le salvé su pinche pellejo - va escupiendo mientras le da una paratada a los servicios. Chíngale que voy a aprovechar esto - tira las linterna si pilas minetras recoge del suelo un rifle con unas cuantas balas. A continuación destroza la puerta con el martillo y dispara su nuevo rifle pero falla el disparo

Mientras un trío de zombies se abalanza sobre El Cholo tras haber abierto éste la puerta que los mantenía encerrados, un gordo aparece, junto a su tenebroso séquito, cortándole el paso a Doug.

T9 Cholo: La puta que los parió, dice mientras lanza martillazos a diestro y siniestro para quietarse de encima a los tres zombies. Ya más tranquilo vuelve a utilizar su escopeta eliminando al que amenaza desde la habitación contigua.

T9 Doug: Viendo la que se le avecina desde el otro lado de la calle, Doug echa a correr de nuevo hacia el edificio con la corbata ondeando justo delante de su cara. Llega a tiempo para escuchar el último machetazo de El Cholo, a consecuencia de lo cual deduce que la zona se encuentra ya asegurada.

El trío de caminantes que se aproximaba desde el Sur está ya a punto de entrar en el edificio, igual que Doug. Dentro, otra pareja ocupa ambos accesos a la habitación en la que se encuentra el primer machete de El Cholo.

T10 Doug:

Consciente de que no tiene munición para su Winchester, lanza una retadora mirada al trío de zombies que se acercan por la calle, y en finalmente se decanta por girar a su izquierda, colándose en el interior del edificio.

- Cholo, necesito munición! - exige, en cuanto su mirada localiza al melenas, dirigiéndose a paso vivo hacia su compañero, junto al que se detiene con la mano extendida con la palma hacia arriba.

- Bien, bien. - Doug recibe las nuevas balas, y más seguro, recarga su arma mientras lanza una mirada a su espalda, consciente de que los zombies no tardarán en llegar.

T10 El Cholo:

Tras cederle algunas balas a su compañero, no sin dedicarle una intensa mirada, - Maldito gringo derrochador! - el Cholo alza su rifle y efectúa un disparo al zombie que hay dos habitaciones abajo. Cuando la aberración cae, asiente y sonríe mostrando los dientes a Doug en otra muestra de lo bueno que es.

- Vamos! - exclama, avanzando mientras recarga el rifle. Con un nuevo objetivo, el Cholo repite los mismos pasos, alzar el arma, apuntar y... sonreír. - Otro al hoyo. Ahora a por mi machetes!

Mientra un nuevo zombie se une al grupo que progresa desde el Norte, otro caminante sale de debajo de la cama en la habitación contigua a donde se encuentra El Cholo. El grupo que había venido desde el Sur, contra todo pronóstico, consigue seguir a Doug hasta el interior del edificio. ¿Lo hubieran hecho igualmente de saber que ahora el Winchester sí se encuentra operativo?

T11 Cholo: Armado con la katana se lanza hacia el zombie y los decabeza. Entonces ve uno de su machetes tirado en la habitación de al lado y va a por él.

T11 Doug: El burócrata despacha a los zombies que le siguen y se interna en la casa tras el Cholo.

Los problemas sólo acaban de empezar para la extraña pareja, que ve asombrada como los zombies salen, incluso, y casi literalmente, de debajo de las piedras. Más vale que utilicen sabiamente esa bala que a cada uno le queda en el cargador...